158 resultados para fobia de vômito
Resumo:
INTRODUÇÃO: A emetofobia ou fobia de vômitos - que inclui o medo excessivo de vomitar ou de ver outras pessoas vomitando e pode ser desencadeado por estímulos internos e externos - é um transtorno mental complexo e pouco conhecido. OBJETIVO: Este estudo teve como objetivo levantar os conhecimentos disponíveis sobre diversos aspectos do quadro. MÉTODO: Revisão convencional da literatura dos últimos 30 anos utilizando como estratégia de busca as seguintes palavras-chave: emetofobia, emetofóbico, medo de vomitar, fobia de vomitar efobia de vômito. Foram incluídos artigos sobre epidemiologia, fenomenologia, diagnóstico diferencial e tratamento da emetofobia, assim como artigos referidos nestes. RESULTADOS: Não há dados de prevalência na população geral e pouco se sabe sobre a etiologia da emetofobia. A maioria dos estudos aponta predominância no sexo feminino, início precoce e curso crônico. Os comportamentos de esquiva podem impactar negativamente a vida ocupacional, social e familiar. Os principais diagnósticos diferenciais são: transtorno de pânico com agorafobia, fobia social, anorexia nervosa e transtorno obsessivo-compulsivo. Estudos de tratamento se resumem a relatos de casos e não há ensaios clínicos controlados, mas intervenções cognitivo-comportamentais parecem ser promissoras. CONCLUSÃO: Mais estudos são necessários para melhor compreensão sobre a epidemiologia, o quadro clínico, a etiologia, a classificação e o tratamento da emetofobia.
Resumo:
La fobia social es una enfermedad psiquiátrica que causa costes socioeconómicos significativos y que presenta una alta comorbilidad. Las terapias cognitivo-conductuales (TCC) pueden ser una alternativa de tratamiento efectiva, ya que buscan el cambio de pensamientos y comportamientos adquiridos en una enfermedad con un alto componente de aprendizaje. Objetivo: Verificar la efectividad de las terapias cognitivo-conductuales (TCC) con respecto a otros tratamientos empleados en la fobia social, en adultos (farmacoterapia y otras técnicas de psicoterapia). Metodología: Revisión bibliográfica de estudios de los últimos 10 años, en bases de datos (Pumed etc...). Se seleccionan 12 artículos, 10 ensayos clínicos y 2 meta-análisis. Resultados: Los estudios muestran una respuesta positiva de los pacientes (en términos de reducción de síntomas según escalas de medida estandarizadas para la fobia social) al tratamiento con terapias cognitivo-conductuales (TCC), en sus distintas modalidades de aplicación (individual, grupal y por internet). Estos ratios de respuesta son similares a los que se obtienen en otros tratamientos (farmacoterapia y terapia psicodinámica). Las TCC presentan como ventaja la ausencia de efectos secundarios; como desventaja, su efecto se produce a más largo plazo Conclusiones: No hay resultados concluyentes en relación al beneficio de estas terapias respecto de otras; los factores que determinan fundamentalmente el éxito de las mismas son la situación y la predisposición individual de cada paciente. Dadas las implicaciones de esta patología en la sociedad actual, sería conveniente invertir más medios en el desarrollo de nuevas técnicas.
Resumo:
Resumen tomado de la publicaci??n
Resumo:
Resumen tomado parcialmente de la publicaci??n
Resumo:
Se pretende validar un programa de intervención de desensibilización sistemática en una fobia específica que tradicionalmente ha sido poco estudiada en el mundo de los tratamientos psicológicos, concretamente la fobia a viajar en avión. La muestra global de personas fóbicas seleccionadas estuvo compuesta por 73 personas, de las cuales 27 eran varones y 46 mujeres. Las edades oscilaban entre los 16 y los 59 años. En cuanto al nivel académico ninguna de estas personas poseían estudios inferiores a EGB. La muestra no fóbica estuvo compuesta por 46 personas de las cuales 20 eran varones y 26 mujeres, con edades comprendidas entre los 18 y los 63 años. Se utilizó en un primer momento un diseño experimental de medidas repetidas, aunque no todas las variables evaluadas en primer lugar pasaron un postest de evaluación. Concretamente las variables consideradas en el postratamiento fueron las derivadas de la intrumentación específica sobre el miedo a volar (IDG, FV, EMV, EPAVA, EPAVB, AS y registros psicofisiológicos) con la intención de evaluar los efectos directos del programa de tratamiento y los cuestionarios CAP-REL, IM, PSI-2 y ESEFAC con la intención de evaluar los efectos de generalización. Posteriormente se comparó la evolución acaecida en los grupos experimentales con un grupo no fóbico extremo. 1. Entrevista de información diagnóstica general para la fobia a volar (IDG-FV); 2. Instrumentos específicos sobre el miedo a volar: Escala de miedo a volar (EMV), Escala de Expectativas de Peligro y Ansiedad para el miedo a volar (EPAV-A y EPAV-B), Test de evaluación del miedo a volar a través de una situación análoga a un viaje en avión; 3. Instrumentos de evaluación psicopatológica: Inventario de síntomas psicopatológicos (PSI-2) y el Inventario de Miedos (IM); 4. Instrumentos de funcionamiento personal (nivel específico): Cuestionario de capacidad de relajación (CAP-REL); 5. Instrumentos de funcionamiento personal (nivel intermedio): Locus de control (LUCAM) y el cuestionario de Motivación y Ansiedad de Ejecución (MAE); 6. Instrumentos de funcionamiento personal (nivel básico): Cuestionario de Extroversión y Neuroticismo (E-N) y Cuestionario de Rigidez (R3); 7. Instrumentos de personalidad y expectativas de éxito terapéutico: ESEFAC y EVEX-MV. 1. Parece no existir entre las variables consideradas en este estudio alguna variable que por sí sola sea capaz de explicar con un amplio margen de posibilidades los resultados terapéuticos de este programa. Se impone, pues, en principio, una explicación de multideterminación predictiva del éxito terapéutico. 2. De los análisis correlacionales destacaron, por su relación con la variable éxito, la facilidad para relajarse, la tensión muscular durante el vuelo en la prueba análoga y la sintomatología hipocondriaca. 3. Todas las áreas analizadas contribuyeron en mayor o menor medida (en cuanto al número de factores implicados) a la predicción de los resultados terapéuticos. En este sentido destacan tres áreas por el número de contribuciones: los miedos (con cuatro factores implicados), y la sintomatología psiquiátrica y las estrategias de afrontamiento (ambas con tres factores implicados). 4. Al considerar una posible optimización multivariada del fenómeno predictivo, varios caminos se han abierto para futuras investigaciones. El programa de tratamiento parece haber logrado demostrar su eficacia para producir una modificación positiva y perdurable de este fenómeno fóbico. Los distintos análisis efectuados demuestran la utilidad del procedimiento para modificar un amplio repertorio de manifestaciones ansiosas, cognitivas y análogo-objetivas relacionadas íntimamente con este problema. También produce claros efectos de generalización sobre otras variables relacionadas con la capacidad de relajación en la vida cotidiana de personas tratadas, determinados miedos más o menos cercanos al trastorno en cuestión, y sobre ciertas estrategias pesimistas y de atribución externa en el afrontamiento del problema.
Resumo:
Diseñar un programa de entrenamiento en biofeedback, con el fin de eliminar o reducir el miedo a viajar en avión. Se utilizó una muestra de 56 personas fóbicas divididas en rupo de control de espera y de tratamiento, y un grupo de 46 personas no fóbicas. Se utilizó un diseño experimental de medidas repetidas de todas las variables a estudiar en tres momentos: pretratamiento, post-tratamiento y seguimiento. Se comparó también la evolución de los grupos experimentales frente al grupo de personas no fóbicas. Concretamente, las variables consideradas fueron las derivadas de la instrumentalización específica sobre el miedo a volar (IDG-FV, EMV, EPAV-A, EPAV-B, AS y registros psicofisiológicos), con la intención de evaluar los efectos directos del programa de tratamiento. Además se emplearon los cuestionarios CAP-REL, IM, PSI-2 y ESAFAC con el objetivo de valorar los posibles efectos de generalización. El tratamiento constaba de las siguientes fases: Primera Fase: pretratamiento: dos sesiones: presentación y toma de contacto con el programa, registro de respuestas psicofisiológicas y de estímulos visuales ansiógenos; Segunda Fase: Biofeedback, cinco sesiones: entrenamiento en auto-control de respuestas psicofisiológicas; Tercera Fase: cinco sesiones: exposición en imágenes ante estímulos ansiógenos con feedback por parte del terapeuta. 1. Entrevista de información diagnóstica general para la fobia a volar (IDG-FV); 2. Escala de miedo a volar (ENV); 3. Escala de expectativas de peligro y ansiedad para el miedo a volar; 4. Video-tape como situación análoga de un viaje en avión; 5. Cuestionario de ansiedad situacional (AS); 6. Cardioback; 7. Mioback; 8. Thermoback; 9. Inventario de Miedos (IM); 10. Inventario de saíntomas psicopatológicos (PSI-2); 11. Cuestionario de capacidad de relajación (CAP-REL); 12. Cuestionario sobre estrategias de afrontamiento (ESAFAC); 13. Cuestionario de expectativas de éxito terapéutico; 14. Paquete de 20 diapositivas relacionadas con distintos momentos de un vuelo en avión. Como conclusiones generales, y considerando lo que se desprende de los datos, podemos afirmar que el tratamiento-entrenamiento en biofeedback reduce no sólo de forma importante los niveles de miedo subjetivos, sino que en alguna ocasión los elimina totalmente. También incide en la reducción de sintomatología psicopatológica relacionada principalmente con el componente de ansiedad, y ha incidido de forma favorable en que las personas se perciban más autocontroladas, y se infravaloren y autocritiquen negativamente en menor medida. Sin embargo, tenemos que resaltar que hay un porcentaje de personas que no consiguen superar el problema, y también debemos contemplar el hecho de que tanto los registros psicofisiológicos como la ansiedad situacional, salvando el seguimiento, no establecen diferencias entre antes y después del tratamiento, así como tampoco en su comparación con el grupo control. Este tipo de tratamiento puede ser utilizado en aquellas personas cuyos niveles de miedo sean moderados y que exhiban una menor temperatura en la línea base, y en aquellas que posean un mayor nivel educativo que les permita 'comprender' mejor la terapia.
Resumo:
Contiene tablas. Resumen tomado de la revista
Resumo:
Resumen tomado de la revista
Resumo:
Resumen tomado de la publicación
Resumo:
Resumen tomado de la publicación
Resumo:
Resumen tomado de la publicación
Resumo:
Resumen de la revista
Resumo:
Resumen de la revista
Resumo:
Resumen tomado de la revista
Resumo:
Resumen tomado de la revista