987 resultados para Movimiento Moderno,
Resumo:
La búsqueda de nuevas formas de modernidad se convirtió en la cuestión principal de la obras desarrolladas por Leslie Martin, Colin St. John Wilson y James Stirling entre los años 1955 y 1970. Enmarcadas dentro de la sensibilidad surgida en la posguerra británica, su profundo sentido crítico supone una renovada interpretación de alguno fundamentos del Movimiento Moderno así como la reflexión sobre la modificación y el uso de formas que tienen sus raíces en la tradición cultural. Esta investigación se estructura en cuatro temas ampliamente debatidos y que han articulado parte de la revisión moderna a lo largo de la segunda mitad del siglo XX: » la abstracción y el realismo » la revisión de la idea funcionalista » la reconsideración de los arquetipos formales » la relación entre forma y contexto urbano se muestran como base crítica para las obras seleccionadas. La tendencia hacia el realismo surgió como respuesta a la voluntad de universalidad (y objetividad) que representó el lenguaje abstracto, del mismo modo que la revisión de la idea funcionalista pretendió superar la consideración de la obra arquitectónica como producto racional de su función y tecnología. La reconsideración de los arquetipos de la tradición, a su vez, muestra una preocupación por el significado de las formas culturales del pasado, una cuestión igualmente decisiva en la renovada atención a la estructura de la ciudad histórica. Estos temas evidencian un interés por ampliar la arquitectura moderna sin que el reconocimiento de las formas del pasado suponga un distanciamiento respecto al futuro. La idea de revisión, asimismo, se convierte en estrategia a la hora de encontrar nuevas respuestas. Si algunos de los principios del Movimiento Moderno surgen como reacción al clasicismo Beaux Arts que le precedió, las propuestas analizadas muestran la validez operativa de este enfoque para crear obras de una intensa modernidad. Su interés, por lo tanto, no solo radica en su consideración como objetos de estudio que amplían nuestro conocimiento de un período determinado, sino como tradición reciente que sirve de base crítica para la práctica actual. ABSTRACT The search of new forms of modernity became the main theme of the works developed by Leslie Martin, Colin St. John Wilson and James Stirling between 1955 and 1970. Belonging to the sensitivity emerged in postwar Britain, their deep critical sense encourages a renewed interpretation of some principles of Modern Movement and a reflection about the modification or the use of forms that are rooted in cultural tradition. This research is divided into four themes widely discussed and which has articulated part of modern review along the second half of the twentieth century: » Abstraction and realism » Review of Functionalism » The reconsideration of the formal archetypes » The relationship between form and urban context are shown as critical base for the selected works. The trend toward realism arose in response to the will of universality (and objectivity) that represented the abstract language, just as the review of Functionalism aimed to overcome the consideration of architecture's work as rational product of its function and technology. The reconsideration of traditional archetypes, in turn, shows a concern for the meaning of the cultural forms, a matter equally decisive in the renewed attention to the structure of the historical city. These themes evidence an interest to extend modern architecture, without thereby the recognition of the past forms imply a distancing regarding the future. The idea of review also becomes strategy in finding new answers. If some principles of the Modern Movement arose in reaction to Beaux-Arts classicism which preceded it, the analyzed proposals show the operational validity of this approach to create works of a strong modernity. Their interest, therefore, lies not only in its consideration as study cases that broaden our knowledge of a certain period, but as a recent tradition which serves as a critic basis for the current practice.
Resumo:
La obra de Emilio Pérez Piñero que se desarrolla entre los años 1961 y 1972 año en el que muere en un accidente de tráfico volviendo de Figueras, se centra principalmente en artefactos desplegables y desmontables, ejecutando prototipos que en el presente trabajo se han dividido en dos grupos; la cúpula reticular y la infraestructura. No pudo por tanto acudir al Congreso de 1972 de la UIA a recoger el premio Auguste Perret a la innovación tecnológica, que en años anteriores habían recibido Félix Candela, Jean Prouvé, Hans Scharoun o Frei Otto, y que en aquella ocasión tuvo que recoger su viuda. Parámetros como el de la movilidad, indeterminación, intercambiabilidad, obsolescencia y otros que se analizan en el presente trabajo, aparecen a lo largo de toda su obra ya que muchos de sus artefactos están ubicados en no-lugares y tienen un carácter itinerante y por tanto se hace indispensable su rápido montaje y desmontaje, que unas veces se resuelve mediante la desmontabilidad y otras con la plegabilidad de éstos. Aunque pueda parecer Piñero una figura autárquica, lo cierto es que durante la década donde concentra su trabajo se produce una explosión en torno a al arquetipo que será denominado de forma genérica `artefacto´, ligado conceptualmente a los parámetros que aquí se definen. Entendemos artefacto como objeto material realizado por una o varias personas para cumplir una función, es sinónimo de máquina y aparato y deriva de las palabras latinas ars o artis (técnica) y facto (hecho), para designar a los objetos cuya fabricación requiere alguna destreza. El término latino `ars´ engloba a las técnicas y a las artes, lo que no ocurre con el término castellano arte que deriva de él. Los movimientos utópicos que comparte la década con Piñero, utilizan el arquetipo infraestructural, ligero y high tech, para a través de una arquitectura más ligada a la ciencia ficción, realizar una crítica al Movimiento Moderno institucionalizado, todos ellos comparten cierta obsesión por la movilidad, ligada ésta a la idea de espacio flexible, dinámico, nómada. Este concepto de neo-nomadismo, que representa un habitar dinámico, aglutina las nuevas formas de vivir donde la movilidad social y geográfica son habituales. El nomadismo, por otra parte se entiende como sinónimo de democracia y libertad. La arquitectura pasa de ser pesada, estática, permanente a ser un elemento dinámico en continuo movimiento. A veces con connotaciones biológicas se asimilan los artefactos a organismos vivos y les confieren dichas propiedades de crecimiento y autonomía energética, acumulándose en torno a megaestructuras, donde quedan `enchufados´. En este intento de dotar movilidad a lo inmueble, se buscan estructuras vivas y modificables que crecen en una asimilación de las leyes naturales utilizando los parámetros de metamorfosis, simbiosis y cambio. Estos movimientos de vanguardia tienen también ciertas connotaciones políticas y sociales basadas en la libertad y la movilidad y reniegan del consumismo institucionalizado, de la arquitectura como instrumento de consumo, como objeto de usar en la cultura de masas. El carácter político de la autogestión, de la customización como parámetro proyectual, de la autosuficiencia energética, que anticipa la llegada de la crisis energética del año 1973. Objeto de este trabajo será relacionar los conceptos que aparecen fuertemente en el entorno de la década de los años sesenta del siglo XX, en el trabajo de Emilio Pérez Piñero. Parámetros encontrados como conceptos en los grupos de vanguardia y utopía a su vez fuertemente influenciados por las figuras del ingeniero Richard Buckminster Fuller y del arquitecto Konrad Wachsmann. Se analizará que posible influencia tiene la obra de Fuller, principalmente el prototipo denominado cúpula reticular, en la obra de Pérez Piñero y sus coetáneos analizando sus pensamientos teóricos en torno a parámetros como la energía, principalmente en las teorías relativas a Synergetics. El término inventado por Richard B. Fuller es una contracción de otro más largo que en inglés agrupa tres palabras; synergetic-energetic geometry. La definición de sinergia es la cooperación, es decir es el resultado de la acción conjunta de dos o más causas, pero con un efecto superior a la suma de estas causas. El segundo término, energetics geometry, que traducido sería geometría energética hace referencia en primer lugar a la geometría; ya que desarrolla el sistema de referencia que utiliza la naturaleza para construir sus sistemas y en segundo lugar a la energía; ya que además debe ser el sistema que establezca las relaciones más económicas utilizando el mínimo de energía. Por otro lado se analiza la repercusión del prototipo denominado Infraestructura, término acuñado por Yona Friedman y basado estructuralmente y conceptualmente en los desarrollos sobre grandes estructuras de Konrad Wachsmann. El arquitecto alemán divulga su conocimiento en seminarios impartidos por todo el mundo como el que imparte en Tokio y se denomina Wachsmann´s Seminar donde participan algunos de los componentes del grupo Metabolista que sorprenderán al mundo con sus realizaciones en la exposición de Osaka de 1970. El intervalo temporal entre 1961 hasta 1972 hace referencia a la horquilla donde Pérez Piñero realiza su obra arquitectónica, que comienza en 1961 cuando gana el concurso convocado en Londres por la UIA (Unión Internacional de Arquitectos) con el proyecto conocido como Teatro Ambulante, hasta 1972 que es cuando fallece volviendo de Figueras donde está realizando dos encargos de Salvador Dalí; la cubrición del escenario del futuro Teatro-Museo Salvador Dalí y la Vidriera Hipercúbica que debía cerrar la boca de tal escenario. Bajo el título de `Artefactos energéticos. De Fuller a Piñero (1961-1972)´, se presenta esta Tesis doctoral, que tiene la intención de vincular la obra de Emilio Pérez Piñero con la de las neo vanguardias producidas por una serie de arquitectos que operan en el ámbito internacional. Estas vinculaciones se producen de una forma general, donde a través de una serie de estrategias según la metodología que posteriormente se describe se buscan relaciones de la obra del autor español con algunos de los movimientos más significativos que aparecen en dicha década y de manera específica estableciendo relaciones con las obras y pensamientos de los autores que pertenecen a estos movimientos y donde estas relaciones se hacen más evidentes. El objeto del presente trabajo es analizar y explicar la obra del arquitecto Emilio Pérez Piñero, que espacialmente se localiza en el territorio español, desde el punto de vista de estos movimientos para posteriormente poder determinar si existen puntos en común y si el arquitecto español no solo comparte la década temporalmente sino también conceptualmente y por tanto utiliza el ideario que utilizan sus coetáneos que forman parte de las neovanguardias de los años sesenta de siglo XX. ABSTRACT ABSTRACT The Work of Emilio Perez Piñero was developed between the years 1961 and 1972 when he died in a car accident coming back from Figueres, where he was building a geodesic dome to close the building that enclose the Dali’s museum. All his Work is mainly centered in artifact that could be collapsible and removable, taking the two prototypes that are described in this work as a recurrent element in all his creation. These are the reticular dome and the infrastructure that are very influenced by the work from Richard B. Fuller and Konrad Wachsmann. Emilio Pérez Piñero could not receive the Auguste Perret Prize in 1972 awarded by the UIA that years before have received architects as Felix Candela, Jean Prouvé, Hans Scharoun or Frei Otto, and this time Pérez Piñero´s wife will accept it because of his death. Parameters like mobility, changeability, expendability, indetermination and others appear currently in his Work. All the inventions that Piñero had been patented and all of the artifacts that he created are usually located in no-places, because they do have a shifting identity. This kind of building has to be quickly set on site, and this problem has to be solved in term of foldability or demounting. In the decade where his work focuses, an explosion has occurred around this archetype to be generally called artifact that is usually linked to mobility. We understand artifact as a material object made by one or more people to work in a particular way. It is sometimes equated with the terms machinery and apparatus and it is derived from the Latin word `ars´ or `artis´, what means techniques and `facto´ (fact). And we use this term to refer to objects whose manufacture requires the same skill, in fact the Latin word `ars´ covers the techniques and arts, which does not occur with the Castillan term `arte´ that derives from it and means only art. The term neo-nomadic is a relatively new name used for a dynamic life, commonly referred to new forms of life where social and geographical mobility are common. On the other hand nomadic could be understood as a synonymous for democracy and freedom. The architecture is not going to be hard and static anymore but a dynamic element in the move. The Neo-avant-garde movement that shares the decade with Piñero uses this infrastructural archetype, which is light and high-tech, to criticize the institutionalized Modern Movement through architecture linked to science fiction. They all share an obsession with mobility, a concept that is connected to the terms `dynamic´, `nomadic´, `flexibile´, etc. Sometimes, with biological connotations, the utopian assimilate the artifacts to living organisms and give them these properties of growth and energy autonomy, and they apparently grow around megastructures where they are plugged. In this attempt to provide mobility to the inertness, living structures and possibility of change are sought in order to make them grow like a living organism and to assimilate the natural laws of growth. According to a definition from architecture provided by Fernández- Galiano who calls it `exosomatic artifact´, he understand architecture as artifact of the human environment that regulates natural energy flows and channels the energy stored in fuels for the benefit of living beings that inhabit. It is also true that during the sixties a new environmental awareness in public opinion is formed and that is due to the exploitation and disproportionate use of energy resources, acceleration of technological processes and mass consumption. Consequently a new concept is born: energy autonomy, it is very close to rational use of natural energy. Such a concept will be culturally assimilated with the requirement of independence not only in the management but also in the building construction until we arrive at energy autonomy. The individuals become energy consumer, which in turn can enter the energy produced in the system to `life in an eco-mode way´. The objectives of this research are analyzing all of these parameters and concepts that are coming into view in the surrounding of the decade and relate them with the Work of Pérez Piñero. Terms strongly present in the avant-garde movements around the decade, a young architect’s generation strongly influenced by Richard B. Fuller and Konrad Wachsmann. However, it will be analyzed how important the influence of Buckminster Fuller's Work was and his theoretical text about energy on the Work of Pérez Piñero and his fellows of the decade. The term Synergetic was invented by Fuller and came from the words synergy and energetic geometry. Synergy is the cooperation or interaction of two or more agents to produce a greater effect than the sum of their separate effects. Energetic geometry is related to the geometries that the Nature is using to build their construction but always using low energy consumption. On the other hand, the influences from Wachsmann around the prototype called Infrastructure have been analyzed. The German architect has developed knowledge around huge structures that he has spread all around the world through seminars that he has been conducted. One of these was the Wachsmann´s seminar in Tokyo, where same of the members of the Metabolist group were taking part of. Later these young architects will surprise the world with his artifacts at the World Exposition in Osaka in 1970. Between 1961 and 1972 Pérez Piñero produced his architectural work. It began in 1961 when he received the first prize with his project Mobile Theatre in the competition organized by the UIA in London. In 1972 the Auguste Perret Prize was granted by the UIA too. He could not accept it because he died before in a car accident when he was coming from Figueres, when he was designing two projects for Dali. With the title `Energetic Artifacts. From Fuller to Piñero (1961- 1972)´, this thesis relates the Work of Emilio Pérez Piñero with the neo avant-garde made by a young architects’ generation who is sharing the time with him. Several strategies have been used to formed relationships between them. They are described in the present work to set up a method that allows us to relate the work and ideas of the architects of the neo avant-garde with the ones from Piñero. This work is intended to analyze and explained the work of Pérez Piñero from the point of view of the international architects’ generation who is operating at the same time and finally to determinate if Piñero is not sharing the time with them but the concepts, ideas and architectural parameters.
Resumo:
Las casas del siglo XX construidas al borde del mar –escenario único y origen de su expresión- siguen la topografía del suelo que habitan en su descenso al agua, y organizan espacios que obtienen miradas al horizonte marino. El horizonte nos confronta a lo desconocido. La vista del mar incita al deseo de recorrerlo, al deseo de viajar. Con origen en el otium romano, la presencia del agua define un modo de vida apacible –epicúreo- que los viajeros de la arquitectura -que nos acompañan en la tesis- traducen en sus refugios más íntimos. Experimentan con los cambios en los conceptos y en las técnicas, que se trasladan fácilmente a la arquitectura de la casa al borde del agua desde los inicios del Movimiento Moderno. Sus espacios del habitar frente al mar nos permiten descubrir estrategias comunes en sus respuestas más modernas. El arquitecto ante el proyecto frente al mar llega a la ubicación elegida, mira hacia el horizonte, y desplazándose ladera arriba se coloca en un punto estratégico que elige; después, delante de su tablero, recorre el camino inverso, coloca el lugar y sobre él dibuja los elementos que configurarán los espacios de la casa buscando esa mirada al mar. Las situaciones y ubicaciones posibles son infinitas; se definen algunas consonancias espaciales comunes en los suelos que se ocupan debidas a la presencia del mar que asociamos entre sí. De la comparación entre todas las casas -emblemas del XX-, surgen múltiples variantes de la mirada y de espacios al abierto, y modos de fabricar entornos con criterios comunes para dominar la visión del mar. Interiores que se abren al panorama, espacios cuyas ventanas buscan su mirada en la extensión del horizonte, rescisiones y aperturas. Reconocemos condicionantes en el territorio a los que las villas responden, categorías arquitectónicas que dan respuesta frente al mar en la búsqueda del moderno, la topografía, la mirada y el espacio al abierto. Las casas comparten la idea del dominio del paisaje desde el punto más alto, y en algunos suelos se invierte la tipología por la topografía, confirmando así un criterio común basado en la lectura del suelo como consecuencia de la búsqueda del espacio de la mirada. Los espacios al abierto se significan en todas ellas, son espacios al -aire libre- abiertos, unos envueltos, otros porticados, puertas del horizonte que se abren al exterior, en el techo de la casa, otros cubiertos y abiertos, espacios entre interior y exterior, en plataformas con bancales o patios envolventes, recintos o habitaciones abiertas. Descubrimos un logro del XX en los espacios positivos o negativos que traducen o juegan con el entorno, que ocupan o sustraen de los contornos construidos y que obtienen espacios intermedios en la búsqueda de la relación con el mar. Las herramientas que se utilizan son los dibujos de los autores, de las casas visitadas, el elenco de viajeros y sus viajes, el conocimiento desde el estudio de los proyectos. A través de la comparación por aproximaciones parciales, los dibujos nos definen la mirada al mar, el modo de ocupación y la forma de relación con el paisaje. La arquitectura del habitar frente al mar en el XX, hecha para y por arquitectos, topografía el suelo y construye la mirada, fabricando espacios al abierto en la relación entre la casa y el entorno marítimo. ABSTRACT Houses of the 20th century built by the sea – a unique setting which gives rise to their expression – follow the topography of the land they occupy in its descent towards the sea, and they organize spaces which give views of the maritime horizon. The horizon brings us face to face with the unknown. The sea view provokes a desire to cross it, to travel. The presence of the sea defines a peaceful, epicurean way of life, with origins in the Roman otium, which architectural travellers – who accompany us through the thesis – translate into their most intimate retreats. They experiment with changes in concepts and techniques, which are easily transferred to the architecture of the seaside house since the beginnings of the Modern Movement. Their living spaces allow us to discover common strategies in the most modern responses. The architect with a seaside project arrives at the site, looks towards the horizon, then walks uphill and chooses a strategic point; then with his drawing board he retraces his steps, he sets the position and then draws in the elements that make up the house that seeks a sea view. The number of potential situations and locations is infinite; certain common spatial accordances are defined in land which is occupied due to the presence of the sea. Comparison of all the houses – 20th century emblems – throws up multiple variations of view and open spaces, and ways of creating settings with common criteria so as to command the vision of the sea. Interiors which open up to the panorama, spaces whose windows seek their view in the expanse of the horizon, openings and closures. We recognise determinant factors in the territory to which the villas respond, architectural categories which give a seaside solution to the search for the modern, the topography, the view, and the open space. The houses share the idea of dominating the landscape from the highest point, and in some areas typology and topography are inverted, thus confirming a common criteria based on the reading of the ground as a conse quence of the search for the view space. Open spaces stand out in all the villas – spaces open to the outdoor air - some are wrapped, some arcaded, doors to the horizon which open up to the exterior, on the roof of the house. There are open and covered spaces, spaces between the exterior and interior, on platforms with banks and surrounding patios, enclosures and open rooms. We discover an achievement of the 20th century in the positive and negative spaces which translate and play with the setting, which occupy or are extracted from built contours and which obtain intermediate spaces in the search for the relationship with the sea. The tools used are the author’s drawings of the houses visited, the cast of travelling companions and their travels, the knowledge gained from study of the projects. Through comparison by means of partial approaches, the drawings define the view of the sea, the occupation mode and the way of relating to the landscape. Architecture for living by the sea in the 20th century, carried out both by and for the architects, shapes the land and constructs the view, creating open spaces in the relationship between the house and the sea surroundings.
Resumo:
El siglo XIX fue un siglo dedicado a los grandes edificios públicos. Los teatros, las academias, los museos. Sin embargo la arquitectura durante el siglo XX se dedicará al estudio de la casa. Todos los usos y tipologías se verán fuertemente revisados pero el núcleo de todos los esfuerzos y verdadero inicio de la arquitectura moderna será la vivienda. A partir de ella todos los preceptos modernos se irán aplicando a los distintos programas. Nikolaus Pevsner señala a William Morris como el primer arquitecto moderno porque precisamente entendió que un arte verdaderamente social, en consonancia con su tiempo y la sociedad a la que sirve, ha de ocuparse de aquello que preocupe a la gente. Con la nueva situación de la vivienda en el centro de las motivaciones disciplinares el mueble adopta un nuevo protagonismo. En un momento avanzado de su carrera Marcel Breuer observa entre curioso e irónico cómo el mueble moderno había sido promocionado paradójicamente no por los diseñadores de muebles sino por los arquitectos1. La respuesta la da Le Corbusier en una de sus conferencias de 1931 recogida en Precisiones 2 cuando señala la reformulación del mobiliario como el "nudo gordiano" de cuya resolución pendía la renovación de la planta moderna. El Movimiento Moderno se había visto obligado a atacar este tema para poder avanzar en sus propuestas domésticas. El Movimiento Moderno se propuso solucionar los problemas de la vivienda y de una Europa en reconstrucción pero se exigía además ser capaz de aportar una visión propositiva de la vida moderna. No se trataba únicamente de resolver los problemas ya existentes sino que además había la necesidad autoimpuesta de anticipar la domesticidad del futuro. Para ello sus viviendas al completo, mueble e inmueble, debían de presentarse bajo esa nueva imagen. El manifiesto fundacional de la Deustcher Werkbund extendía el radio de acción del nuevo arquitecto desde la construcción de las ciudades a los cojines del sofá. Este mobiliario tenía la compleja misión de condensar sintéticamente todos esos ideales que la modernidad había traído consigo: abstracción, higiene, fascinación maquínica, confianza positivista en la ciencia o la expresión material optimizada. Objetos de la vida moderna, en palabras de Le Corbusier, susceptibles de suscitar un estado de vida moderno. Pocas sillas en la historia del diseño habrán acarreado tanta polémica y tanta disputa por su autoría como la sillas voladas de tubo de acero en sus diferentes versiones. Para entenderlo situémonos en el año 1927 a las puertas de la exposición "Die Wohnung" ("La vivienda") organizada por los maestros de la Bauhaus y dirigida por Mies van der Rohe en la ladera Weissenhof de Stuttgart. Muchos nombres célebres de la arquitectura mostraron en esa ocasión su personal propuesta para la vivienda moderna y los objetos que la habitan. Entre ellos los muebles con tubo de acero fueron una presencia constante en la exposición pero hubo una pieza que destacó sobre todas las demás por su novedad y audacia. La pieza en cuestión era el modelo de silla volada, esto es, sin apoyos posteriores y cuya rigidez estaba conferida al esfuerzo solidario de la estructura continua de tubo de acero y que terminaría por convertirse en el cruce de caminos de tres figuras de la disciplina arquitectónica: Marcel Breuer, Mies van der Rohe y Mart Stam. Cada uno de ellos desarrolló su propio modelo de silla volada en sus versiones MR por parte de Mies, L&C Arnold de Stam y el posterior modelo BR 33 de Marcel Breuer. Los tres, en algún momento de su vida reclamaron de uno u otro modo su autoría como objetos que les pertenecían intelectualmente. Estas sillas se convirtieron en la expresión máxima de uno de los ansiados anhelos de la modernidad, la propia materialidad del acero, en su versión optimizada, era la que había derivado en una forma completamente nueva de un objeto cotidiano y cuyo tipo estaba ya totalmente asumido. Los nuevos materiales y las nuevas formas de hacer habían irrumpido hasta en los utensilios domésticos, y habían sido capaces de reformularlos. El punto de partida para esta investigación es precisamente esa coincidencia de tres figuras de la arquitectura moderna, los tres de formación artesanal, en un mismo modelo de silla y en una misma fecha. Tres arquitectos que se habían encargado de asegurar que el movimiento moderno no reconocía problemas formales sino solamente de construcción, iban a coincidir en el mismo tiempo y lugar, precisamente en una misma forma, como si tal coincidencia hubiera sido producto de una voluntad de época. Sin embargo el interés de este estudio no radica en una indagación sobre la autoría sino sobre cómo un mismo objeto resulta ser propositivo e interesante en campos muy diversos y la forma en que cada uno lo hace suyo incorporándolo a su propia investigación proyectual. La silla, más allá de ser un objeto de diseño exclusivamente, trasciende su propia escala para situarse inmersa en un proceso de búsqueda y exploración a nivel conceptual, formal, constructivo y estructural en la arquitectura cada uno de ellos. En un momento en que el oficio del arquitecto está siendo intensamente redefinido considero especialmente pertinente esta investigación, que en definitiva versa sobre la forma distintiva en que el pensamiento arquitectónico es capaz de proyectarse sobre cualquier disciplina para reformularla. ABSTRACT The nineteenth century was a century dedicated to the great public buildings; theaters, schools or museums. However the architecture in the twentieth century was devoted to the study of housing. All uses and typologies were heavily revised but the focus of all efforts and true beginning of modern architecture was housing. From these beginnings all modern precepts were applied to the various programs. Nikolaus Pevsner points to William Morris as the first modern architect precisely because he understood that a truly social art in line with its time and the society it serves must deal with social concerns at that time. With the new housing situation at the center of disciplinary concerns furniture took on a new prominence. At an advanced stage of his career Marcel Breuer observed partly with curiosity, partly with irony how modern furniture had been promoted not by furniture designers but by architects. The answer is given by Le Corbusier in one of his lectures of 1931 collected in Precisions when he pointed the reformulation of furniture as the "Gordian knot" for the renewal of modern plan resolution. Modernism had been forced to confront this issue in order to advance their domestic approaches. Modernism not only put forward a solution to the problems of housing and a Europe under reconstruction but is also needed to be able to contribute to an exciting vision of modern life. Not only did solve existing problems but also it had the self-imposed necessity of anticipating future domesticity and to do their houses full, movable and immovable, they should be submitted under this new image. The founding manifesto of the Deutsche Werkbund extended the scope of the new architect from building cities to the couch cushions. This furniture had the complex mission of synthetically condensing all the ideals of modernity had brought with it: abstraction, hygiene, mechanization, positivist confidence in science or material expression. Objects of modern life, in words of Le Corbusier, were likely to give rise a state of modern life. Few chairs in design history have resulted in so much controversy and so much dispute over their invention as the various versions of cantilevered tubular steel chairs. To understand this let us place ourselves in 1927 at the gates of the exhibition "Die Wohnung" ("Housing") organized by the teachers of the Bauhaus and directed by Mies van der Rohe in Stuttgart Weissenhoflung. Many famous names in architecture at that time showed their personal proposals for modern housing and the objects that inhabit them. Amongst these objects, the steel tube furniture was a constant presence at the exhibition but there was a piece so audacious that it stood out from all the others. This piece in question was the cantilever model chair, that is, which had no further rear support and whose rigidity was attributed to the solidity of its continues structure of steel tube. This piece would eventually become the crossroads of three very different personalities: Mart Stam, Marcel Breuer and Mies van der Rohe. Each of them developed their own model of cantilevered chair in different versions; The MR model developed by Mies van der Rohe, the L&C by Arnold Stam and a later model BR 33 by Marcel Breuer, and the three, at some point in their lives demanded the authorship of its invention as objects that belonged to them intellectually. These chairs epitomized one of the coveted objects of modernity, steel material in its optimized version, was what had led to a completely new form of an everyday object whose this type was fully adopted on board in design. New materials and production methods had burst into world of household objects, and had been able to reformulate their design. The bold design then became a dark object of controversy. The starting point for this doctoral thesis is the concurrent invention of the same model of chair by three different figures of modern architecture. These three architects, who were responsible for ensuring that the modern movement considered construction rather than form as the main design consideration, were working in the same place and at the same point in time. It was almost as if these three architects were shaped by the culture of the time (Zeitgeist). However the focus of this study lies not in an investigation of responsibility of ownership but in the investigation fo how the same object can turn out to be purposeful and interesting in many different fields and the way in which each researcher makes it his own by developing his own project research. 1927, the year of their meeting, was a initiatory year in the career of our players. The chair, beyond being only a design object transcended its own scale and became immersed in a process of research and development on a conceptual, formal, structural and constructive level in the architectural approach of each of the architects. At a time when the role of the architect is being redefined intensely I consider this research, which ultimately concerns the distinctive way the architectural thought can be projected onto and reformulate any discipline, to be particularly relevant.
Resumo:
La presente investigación propone que la construcción del paisaje -la invención del mismo- es el elemento esencial para la comprensión global de la obra de Miguel Fisac. Se rebela así ante el desprecio "por el paisaje social, humano y físico" que le atribuye a los representantes del Movimiento Moderno. A través de tres ejes, Memoria, Aprendizaje y Experimento, se hilvana un viaje autobiográfico, con salida y regreso a La Mancha. Memoria, que recorre sus vivencias infantiles en intenso contacto con la naturaleza; así como su embelesamiento por la esencia de la arquitectura popular, esa "que hacen el pueblo y el tiempo". Aprendizaje, como un proceso de búsqueda con capacidad para mover los ejes referenciales en relación a su concepción de la arquitectura y a como ésta ha de dialogar con el paisaje: viajes alrededor del mundo, encuentros intelectuales con maestros indiscutibles de la modernidad, y el descubrimiento de otras culturas, materializado a través de la casa tradicional japonesa y de La Alhambra. Y Experimento, donde se concretan los conceptos anteriores a través de una suerte de gramática que el arquitecto utiliza para activar el paisaje, modificarlo, o reinterpretarlo. Todo ello se contrasta en ejemplos paradigmáticos de su arquitectura: el Instituto Laboral de Daimiel (1950-1953), el Centro de Formación del Profesorado de la Ciudad Universitaria de Madrid (1952-1957); y en el tránsito producido entre los conjuntos dominicos del Colegio Apostólico de Arcas Reales de Valladolid y el Teologado de Alcobendas (1951-1955). Arquitecturas en las que los citados aprendizajes tamizados en la memoria propicia que el paisaje resuene en ellas, transformando en cuerpo nuevo el alma del pasado. Ejemplos que sustancian un mapa mediante el cual se posibilita, desde el paisaje como herramienta de análisis, una relectura transversal de la obra del maestro daimieleño y que presiente su trayectoria como un proyecto único. ABSTRACT The current research proposes that the landscape construction -its invention- is the essential element for the overall understanding of Miguel Fisac's work. So, he rebels against the thought -attributed to the Modern Movement representatives-, who despise the "social, human, and physical" landscape He uses three aspects to develop his own life journey, which leaves and returns to La Mancha: Memory, Learning and Experimentation. The Memory is a journey inside his childhood, when he was very much in contact with nature; and later, his captivation by the essence of the popular architecture, that one which is "made by people, and by time". The Learning is the process which it has the capacity to move his referential axis relating his own conception of architecture and how it must dialogue with the landscape: journeys around the world, intellectual meetings with the best masters in Modernity and the discovery of other cultures, becoming real in the traditional Japanese house and La Alhambra. And the Experimentation, where these mentioned concepts are concreted through a kind of grammar, with which the architect is able to activate the landscape, modify, or reinterpret it. All of this is reaffirmed in some paradigmatic examples of his best architecture: the Occupational Institute of Daimiel (1950-1953), the Teacher Training Center of the Madrid's University City (1952-1957); and the way between the "Arcas Reales" Apostolic College in Valladolid and the Dominican Theologate in Alcobendas (1951-1955). Architectures that show how the Learning, screened through Memory, promotes that the landscape resonate in them, becoming new body the soul of the past. These examples substantiate a map which allows, from the landscape as a tool of analysis, a cross-reading of the work of this master-architect from Daimiel , and we can sense his career as a unique project.
Resumo:
Si el método científico de la Era Moderna respaldó en gran medida las intervenciones del Movimiento Moderno, el papel de la continuidad histórica fue reivindicado en la segunda mitad del s. XX cuando algunos arquitectos apelaron al valor de la tipología como instrumento de proyecto. En el proyecto para el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida (1981-1985), Rafael Moneo adoptó un marco intelectual en línea con el concepto filosófico de razón vital. Esto representa una significativa reflexión en torno a lo que el valor tiempo supone como fundamento de la arquitectura así como operativa de proyecto. A este respecto las aún vigentes intuiciones contenidas en el proyecto no son ajenas a la actual tarea de la filosofía en el sentido de repensar los postulados temporales heredados desde la Antigüedad; ello nos permite abordar la reflexión acerca de algunos retos a los que hoy se enfrenta la disciplina.
Resumo:
Algunas obras ejemplares del Movimiento Moderno, como son: el Sanatorio en Hilversum, la Escuela de la Bauhaus, la Villa Savoye o el Pabellón de Alemania, etc., han sido intervenidas. ¿Qué criterios se han seguido? ¿Han sido los mismos? ¿Cuáles han sido los prioritarios? Sea mediante restauraciones o reconstrucciones parciales o totales, los criterios que más han prevalecido devuelven las obras al origen, por lo menos en la forma. Resulta significativo que lo que más ha motivado estas intervenciones sea el avanzado deterioro debido, en muchos casos, a la debilidad de las soluciones constructivas empleadas que no han superado el medio siglo. ¿Es el movimiento moderno patrimonio? ¿Qué diferencia hay entre esta arquitectura moderna y la histórica que la precedió? Si se considera que ambas son portadoras de los valores culturales de su época, ¿por qué se aplican criterios distintos en cada caso? ¿Por qué sobre el patrimonio histórico prima el diferenciar el tiempo de la actuación mientras que sobre el patrimonio moderno se tiende a borrar las huellas del tiempo mediante la restauración arqueológica? ¿Cuánto no hay de contradictorio con los fundamentos del Movimiento Moderno en esta fosilización?.
Resumo:
Interpretar el concepto de ‘turismo’ como la colonización de un espacio nos ayuda a entender el fenómeno del hábitat turístico, así como la relación que guardan los turistas y veraneantes con el nuevo territorio conquistado. Desde esa óptica resulta oportuno estudiar estas transformaciones del paisaje a partir de las tipologías residenciales más habituales que las produjeron, especialmente en la segunda mitad del siglo XX. Para ello se analizarán dos modelos de arquitectura turística: los bloques aislados de apartamentos, vinculados directamente con la reinterpretación del movimiento moderno (1945-1975), y los conjuntos de viviendas unifamiliares adosadas, más relacionados con las derivas de la condición posmoderna (1975-2005). Y proponemos ilustrar ambos casos en la costa sur valenciana (desde Alicante hasta Torrevieja) atendiendo a la producción de un arquitecto que dedicó tiempo y esfuerzos a mejorar soluciones y alternativas: se trata de Antonio Serrano Brú. En este estudio podremos encontrar algunas claves que nos permitan, en el futuro, un turismo que haga compatibles las preferencias vacacionales del hombre contemporáneo con la conservación de la esencia de nuestro hábitat natural y antropizado.
Resumo:
Este libro está dedicado a cuantos aún creen en el beneficio de la Arquitectura que a todos y a todas y en todas partes, salvo cuando ocasionalmente navegamos, nos sustenta y envuelve. No es, ni de lejos, un recetario. Es más bien un cuestionario que invita a pensar. Convencido de que la Arquitectura no se enseña, sino más bien ella nos enseña a vivir, el autor ha puesto por escrito aquellos interrogantes que, a lo largo de cuatro décadas, él mismo formuló de palabra, invitando a sus estudiantes y estudiosos a aprender de ella, interrogándola. Hablamos, pues, de Arquitectura. Hace dos tercios de siglo, Bruno Zevi, arquitecto e historiador vinculado al llamado Movimiento Moderno, publicó un libro titulado Saber ver la arquitectura. En su época fue un best-seller. Este libro apunta a algo diferente. Pues no trata de saber ver, sino de saber habitar la arquitectura. Lo que podría haber sido su título, porque éste es su propósito: y el que traza su itinerario. Un itinerario que va del lugar que habitamos en el planeta (la tierra) a la luz que nos remite al sistema (el cosmos) al que pertenecemos. El trayecto del libro contempla, a lo largo de sus 28 capítulos, otras tantas estaciones, o cuestiones, en las que el lector puede a su antojo subirse al tren o apearse de su discurso. Bien entendido que la fe en el poder de la Arquitectura no se discute: se da por supuesta. Ella está presente en cada uno de nuestros pasos sobre la tierra, alimenta el fuego de nuestros hogares, vehicula y canaliza el agua que sacia nuestra sed y ventila el aire que respiramos. En ella se dan cita, pues, los cuatro elementos de la sabiduría clásica del mundo. El libro agrupa las dichas 28 cuestiones en cuatro paquetes de siete, dos y dos. Los dos primeros atienden a los ritos, o protocolos, en los que se ejercita la voluntad de habitación. Los cuales, a su vez, suponen una toma de posesión con respecto al territorio, su geografía y su historia, su topografía y su paisaje, sus asentamientos y sus mitos. Y los dos siguientes refieren sus ritmos, materiales y formales, a través de los cuales la arquitectura se confabula con la vida y redunda en ella. Por medio del ritmo la arquitectura escenifica el rito de la habitación.
Resumo:
El presente capítulo trata de situar el cambio de sensibilidad por el que la arquitectura moderna (del movimiento moderno: 1919-1979ca) pasa a ser considerada patrimonio arquitectónico y se estima su protección y conservación. Además se desarrollan las herramientas básicas para su documentación, como base para la protección: inventarios, guías y catálogos. Los inventarios como el listado de bienes exhaustivo, detallado y preciso de una arquitectura moderna que se define con cada aproximación y que contribuyó a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, una arquitectura urbana. Las guías como ejercicio propio de la cultura posmoderna para trazar itinerarios mediante mojones con los que atravesar un territorio dirigiendo la mirada y el conocimiento (paisajes en el espacio y momentos en el tiempo). Ni los inventarios ni las guías son instrumentos legales de protección, estos son los catálogos. Catálogos en tanto que documento de selección de los elementos a preservar como legado para las generaciones venideras (memoria e identidad) a partir de rigurosos inventarios.
Resumo:
El conjunto arquitectónico de la Feria Internacional del Calzado de Elda (Alicante), obra del arquitecto Miguel López González, fue demolido en el año 2000 y, con él, han desaparecido sus documentos gráficos. Se trataba de un recinto ocupado por dos prismas: uno horizontal, más comercial, para la Feria, y otro vertical, más representativo, para oficinas. Un pabellón y un rascacielos: dos aportaciones del Movimiento Moderno. En este artículo, a partir de los escasos documentos gráficos y fotografías de la maqueta recuperados, así como de las huellas de su derribo, se intenta reconstruir el proceso de los proyectos que se sucedieron y sirvieron de base a la construcción del edificio. Con su desaparición, éste se ha convertido en representante, no solo de una corriente arquitectónica, sino de toda una sociedad, que se ha sometido a un proceso de amnesia, al perder parte de su patrimonio tanto construido como dibujado. Se procede, pues, a la recuperación de la memoria gráfica de este edificio emblemático.
Resumo:
I.- Enseñanza, pedagogía y arquitectura escolar. ¿Existe alguna relación entre ciclos de enseñanza, metodologías docentes y construcciones escolares? Esta parece ser la obsesión que ha guiado a los expertos de estos tres frentes en el siglo XX con el fin de definir la concreción física de los lugares para la transmisión de conocimientos y la formación de los alumnos. Y los tres frentes han ido cambiando: de la docencia informativa y dirigida a la formativa y participativa, del aprendizaje impositivo y memorístico al colaborativo y creativo, y de la construcción jerarquizada y cerrada a las arquitecturas libres y abiertas. Hoy los debates sobre la enseñanza del saber parecen centrarse menos en el ‘qué’ y más en el ‘cómo’ se enseña. A esta situación de consenso quizás se ha llegado tras décadas de experiencias docentes y estudios pedagógicos, cuestiones en las que los arquitectos intervienen poco. La administración de este ‘saber’ tiene varios límites que el poder regula, pero su escenificación en arquitecturas docentes ha quedado en manos de los profesionales para quienes la nueva tradición moderna ha señalado el método racional para proyectar. II.- Contenedores docentes: el aula como módulo base. Toda arquitectura responde a un programa de necesidades para cumplir su fin y todo contenedor escolar es materia abstracta antes de ser materia física, pero una materia normalizada en reglamentos. Contenidos del saber y métodos de aprendizaje se precipitan en los centros docentes. En el caso de España este proceso acusa cuatro hitos. Primero: en los años 30 la Constitución defiende la enseñanza pública, gratuita y laica. Segundo: en los años 50, se fija la edad de escolarización en los 10 años y se crea la formación profesional. Tercero: en los años 70 se aprueba la ley que eleva hasta los 14 años la enseñanza obligatoria. Y cuarto: en los 90 se promulga la ley que la amplía hasta los 16 años. ¿Qué relaciones mantienen, pues, ciclos de enseñanza, métodos pedagógicos y arquitecturas docentes? Todo comienza en el aula, donde tiene lugar la enseñanza. El jardín de infancia, la escuela, el colegio y el instituto resultan de la combinación modular de aulas genéricas y espacios específicos a los que se suman los recintos –cerrados o abiertos– para el deporte y el esparcimiento. Este es el relato de las modulaciones en la definición de tipos y soluciones de la arquitectura escolar a través de las combinaciones del módulo aula definido por la arquitectura moderna.
Resumo:
La ciudad y su arquitectura testimonian las culturas que modelan y remodelan sus formas y espacios en el tiempo. Toda comunidad tiene derecho a un ambiente urbano apto para el desarrollo humano sustentable. Desarrollo sustentable, es aquel que asegura la satisfacción de las necesidades del presente, sin comprometer los recursos con que generaciones futuras puedan satisfacer las propias (Naciones Unidas, 1987). Significa el uso racional y responsable de toda clase de recursos, especialmente los no renovables, como el patrimonio arquitectónico. La ciudad de San Juan fue reconstruida bajo influencias de los postulados del Movimiento Moderno tras el terremoto de 1944 que destruyó casi la totalidad de sus edificios patrimoniales. La arquitectura moderna es considerada internacionalmente un patrimonio a legar a las generaciones futuras. En San Juan, las obras residenciales modernas corren el riesgo de ser transformadas o demolidas ante un posible reemplazo por nuevas obras más redituables, por la dinámica del desarrollo urbano y la ausencia de protección que preserve este patrimonio. Es objetivo de este trabajo promover el reconocimiento, valoración y protección, de obras patrimoniales residenciales, exponentes de la modernidad arquitectónica local.
Resumo:
Es una constante que los edificios del Movimiento Moderno de Misiones, provincia del Noreste argentino, se han internalizado de tal forma en la población aledaña, que pasa frente a ellos, los exploran y los usan sin tomar conciencia de su valor patrimonial. Es así como en nuestras presentaciones aparecen sus usuarios contándonos: “Paso todos los días delante de ese edificio y era importante y no lo sabía…” o “vivo a la vuelta y nunca reparé en él…”