77 resultados para PSICOSIS
Resumo:
En la actualidad, son muchos los autores que se dedican a investigar las psicosis, tanto como la clínica psicoanalítica posible en este campo. La época de los alienistas supuestamente ya pasó. El psicoanálisis, desde Sigmund Freud, es uno de los discursos que sostiene el sujeto del síntoma, y, porque no decirlo, el sujeto de la locura. Tal discurso, en términos generales, da lugar al ser hablante, legitimando su palabra. La palabra del loco -subrayadas las diferencias entre locura y psicosis- se da a escuchar; y, nuevamente, interroga el lugar de aquél que en su escucha se propone a estar. Es a partir de este punto, que el presente escrito pretende avanzar. Para eso, hace falta retroceder y rescatar cierta intuición freudiana ante a las psicosis. Reconocemos que en el campo psicoanalítico aún persiste cierto modo de teorizar la psicosis que boicotea su propio avance: la psicosis muchas veces es leída desde el lugar de déficit. Pensamos que tal supuesto tiene como base la idea de que laestructura es una, y que es la de la neurosis. El contrapunto de la psicosis con la neurosis, por cierto tiempo, hizo consistir a las psicosis. Ciertamente cumplió una función, pero actualmente representa una suerte de traba al avance de la clínica de las psicosis. Necesitamos, cada vez más, profundizar en lo propio de la psicosis. Y, para eso, hace falta correrse del lugar de déficit. Freud, sostenido en su escucha clínica, interrogó los alienistas. Desde su postura investigativa y clínica, sostuvo el lugarde la psicosis, más allá de los límites impuestos por su propio desarrollo teórico. Entonces, nos interesa seguir la intuición clínica de Freud, dejarnos llevar por sus inquietudes. ¿Qué función cumple el 'no analizable' de la psicosis en la obra de Freud? Entendemos que analizar el lugar que ocupa las psicosis en la obra de Freud es interrogar las posibles funciones de lo 'no analizable' en su desarrollo teórico; remarcando, a partir de ahí, las huellas de su intuición clínica en este particular campo. Si la neurosis es el objeto freudiano de estudio, ¿por qué el autor escribe tanto sobre las psicosis al desarrollar la constitución psíquica del sujeto? ¿Qué busca Freud en las psicosis? Sostenemos que, por un lado, Freud le confiere a la psicosis el particular lugar de garante de la teoría psicoanalítica; y, por otro, denuncia, a partir de su escucha clínica, las huellas de cierta suposición de saber o posición subjetiva. Con relación al saber en la psicosis, a veces tal saber alcanza tamaña verdad que dialoga de igual a igual con el investigador. Buscaremos sostener tal lectura de la obra de Freud, en el campo de la psicosis, a partir del análisis de algunos textos freudianos, dedicados a la constitución psíquica del sujeto. Entendemos que es un desafío avanzar en el campo de la psicosis sin remitirse al déficit. Un desafío que nos convoca diariamente en la clínica con estos sujetos; y que, por su complejidad, sostiene de modo particular el deseo del analista
Resumo:
El presente trabajo se propone interrogar el problema clínico de los tratamientos terminables e interminables de las psicosis desde una perspectiva que enfoca cómo se produce el pasaje de la crisis a la solución en una cura y a partir de qué conceptos pueden teorizarse los momentos de normalidad conservada en la psicosis. El abordaje de este problema supone que las concepciones de los analistas sobre las psicosis tienen su incidencia en la dirección de la cura y en los efectos que ésta produce. El marco teórico en que se inscribe este trabajo es el psicoanálisis de orientación lacaniana, especialmente las elaboraciones de los discípulos de Lacan sobre el tratamiento posible de las psicosis. La investigación se realizó con una metodología teórico - clínica que contempla la presentación de dos casos con el fin de poner a prueba la teoría, detectar los obstáculos a los que se arriba y proponer nuevas operaciones de lectura que permitan esclarecer la lógica del material. El análisis de los resultados permite cuestionar aquellas orientaciones que apuntan a producir una limitación del goce sostenida en la posición del analista como guardián de esos límites o como analista sinthome que forma parte de la solución, abordaje cuyo obstáculo radica en que los efectos de la cura se soportan de la presencia real del analista, conduciendo a tratamientos interminables. Se propone otra clave de lectura a partir de un segundo caso en el cual el pasaje de la crisis a la solución se produce a partir de la construcción en transferencia de un sostén asintótico del deseo cuyo efecto es cierta regulación del goce, donde el analista opera como objeto causa del deseo. Este tipo de solución se mantuvo más allá de la presencia del analista y condujo a un final del tratamiento. A partir de estos resultados, se somete a discusión la reintroducción del concepto de deseo para pensar las regulaciones del goce en la psicosis y la construcción de soluciones sinthomáticas. Como conclusión se extrae que la continuación indefinida de un tratamiento o su finalización no dependen de condiciones estructurales inherentes a la psicosis, sino de la posición del analista y de la incidencia que sus concepciones tienen en la dirección de la cura
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El presente trabajo se propone interrogar el problema clínico de los tratamientos terminables e interminables de las psicosis desde una perspectiva que enfoca cómo se produce el pasaje de la crisis a la solución en una cura y a partir de qué conceptos pueden teorizarse los momentos de normalidad conservada en la psicosis. El abordaje de este problema supone que las concepciones de los analistas sobre las psicosis tienen su incidencia en la dirección de la cura y en los efectos que ésta produce. El marco teórico en que se inscribe este trabajo es el psicoanálisis de orientación lacaniana, especialmente las elaboraciones de los discípulos de Lacan sobre el tratamiento posible de las psicosis. La investigación se realizó con una metodología teórico - clínica que contempla la presentación de dos casos con el fin de poner a prueba la teoría, detectar los obstáculos a los que se arriba y proponer nuevas operaciones de lectura que permitan esclarecer la lógica del material. El análisis de los resultados permite cuestionar aquellas orientaciones que apuntan a producir una limitación del goce sostenida en la posición del analista como guardián de esos límites o como analista sinthome que forma parte de la solución, abordaje cuyo obstáculo radica en que los efectos de la cura se soportan de la presencia real del analista, conduciendo a tratamientos interminables. Se propone otra clave de lectura a partir de un segundo caso en el cual el pasaje de la crisis a la solución se produce a partir de la construcción en transferencia de un sostén asintótico del deseo cuyo efecto es cierta regulación del goce, donde el analista opera como objeto causa del deseo. Este tipo de solución se mantuvo más allá de la presencia del analista y condujo a un final del tratamiento. A partir de estos resultados, se somete a discusión la reintroducción del concepto de deseo para pensar las regulaciones del goce en la psicosis y la construcción de soluciones sinthomáticas. Como conclusión se extrae que la continuación indefinida de un tratamiento o su finalización no dependen de condiciones estructurales inherentes a la psicosis, sino de la posición del analista y de la incidencia que sus concepciones tienen en la dirección de la cura
Resumo:
En la actualidad, son muchos los autores que se dedican a investigar las psicosis, tanto como la clínica psicoanalítica posible en este campo. La época de los alienistas supuestamente ya pasó. El psicoanálisis, desde Sigmund Freud, es uno de los discursos que sostiene el sujeto del síntoma, y, porque no decirlo, el sujeto de la locura. Tal discurso, en términos generales, da lugar al ser hablante, legitimando su palabra. La palabra del loco -subrayadas las diferencias entre locura y psicosis- se da a escuchar; y, nuevamente, interroga el lugar de aquél que en su escucha se propone a estar. Es a partir de este punto, que el presente escrito pretende avanzar. Para eso, hace falta retroceder y rescatar cierta intuición freudiana ante a las psicosis. Reconocemos que en el campo psicoanalítico aún persiste cierto modo de teorizar la psicosis que boicotea su propio avance: la psicosis muchas veces es leída desde el lugar de déficit. Pensamos que tal supuesto tiene como base la idea de que laestructura es una, y que es la de la neurosis. El contrapunto de la psicosis con la neurosis, por cierto tiempo, hizo consistir a las psicosis. Ciertamente cumplió una función, pero actualmente representa una suerte de traba al avance de la clínica de las psicosis. Necesitamos, cada vez más, profundizar en lo propio de la psicosis. Y, para eso, hace falta correrse del lugar de déficit. Freud, sostenido en su escucha clínica, interrogó los alienistas. Desde su postura investigativa y clínica, sostuvo el lugarde la psicosis, más allá de los límites impuestos por su propio desarrollo teórico. Entonces, nos interesa seguir la intuición clínica de Freud, dejarnos llevar por sus inquietudes. ¿Qué función cumple el 'no analizable' de la psicosis en la obra de Freud? Entendemos que analizar el lugar que ocupa las psicosis en la obra de Freud es interrogar las posibles funciones de lo 'no analizable' en su desarrollo teórico; remarcando, a partir de ahí, las huellas de su intuición clínica en este particular campo. Si la neurosis es el objeto freudiano de estudio, ¿por qué el autor escribe tanto sobre las psicosis al desarrollar la constitución psíquica del sujeto? ¿Qué busca Freud en las psicosis? Sostenemos que, por un lado, Freud le confiere a la psicosis el particular lugar de garante de la teoría psicoanalítica; y, por otro, denuncia, a partir de su escucha clínica, las huellas de cierta suposición de saber o posición subjetiva. Con relación al saber en la psicosis, a veces tal saber alcanza tamaña verdad que dialoga de igual a igual con el investigador. Buscaremos sostener tal lectura de la obra de Freud, en el campo de la psicosis, a partir del análisis de algunos textos freudianos, dedicados a la constitución psíquica del sujeto. Entendemos que es un desafío avanzar en el campo de la psicosis sin remitirse al déficit. Un desafío que nos convoca diariamente en la clínica con estos sujetos; y que, por su complejidad, sostiene de modo particular el deseo del analista
Resumo:
En la actualidad, son muchos los autores que se dedican a investigar las psicosis, tanto como la clínica psicoanalítica posible en este campo. La época de los alienistas supuestamente ya pasó. El psicoanálisis, desde Sigmund Freud, es uno de los discursos que sostiene el sujeto del síntoma, y, porque no decirlo, el sujeto de la locura. Tal discurso, en términos generales, da lugar al ser hablante, legitimando su palabra. La palabra del loco -subrayadas las diferencias entre locura y psicosis- se da a escuchar; y, nuevamente, interroga el lugar de aquél que en su escucha se propone a estar. Es a partir de este punto, que el presente escrito pretende avanzar. Para eso, hace falta retroceder y rescatar cierta intuición freudiana ante a las psicosis. Reconocemos que en el campo psicoanalítico aún persiste cierto modo de teorizar la psicosis que boicotea su propio avance: la psicosis muchas veces es leída desde el lugar de déficit. Pensamos que tal supuesto tiene como base la idea de que laestructura es una, y que es la de la neurosis. El contrapunto de la psicosis con la neurosis, por cierto tiempo, hizo consistir a las psicosis. Ciertamente cumplió una función, pero actualmente representa una suerte de traba al avance de la clínica de las psicosis. Necesitamos, cada vez más, profundizar en lo propio de la psicosis. Y, para eso, hace falta correrse del lugar de déficit. Freud, sostenido en su escucha clínica, interrogó los alienistas. Desde su postura investigativa y clínica, sostuvo el lugarde la psicosis, más allá de los límites impuestos por su propio desarrollo teórico. Entonces, nos interesa seguir la intuición clínica de Freud, dejarnos llevar por sus inquietudes. ¿Qué función cumple el 'no analizable' de la psicosis en la obra de Freud? Entendemos que analizar el lugar que ocupa las psicosis en la obra de Freud es interrogar las posibles funciones de lo 'no analizable' en su desarrollo teórico; remarcando, a partir de ahí, las huellas de su intuición clínica en este particular campo. Si la neurosis es el objeto freudiano de estudio, ¿por qué el autor escribe tanto sobre las psicosis al desarrollar la constitución psíquica del sujeto? ¿Qué busca Freud en las psicosis? Sostenemos que, por un lado, Freud le confiere a la psicosis el particular lugar de garante de la teoría psicoanalítica; y, por otro, denuncia, a partir de su escucha clínica, las huellas de cierta suposición de saber o posición subjetiva. Con relación al saber en la psicosis, a veces tal saber alcanza tamaña verdad que dialoga de igual a igual con el investigador. Buscaremos sostener tal lectura de la obra de Freud, en el campo de la psicosis, a partir del análisis de algunos textos freudianos, dedicados a la constitución psíquica del sujeto. Entendemos que es un desafío avanzar en el campo de la psicosis sin remitirse al déficit. Un desafío que nos convoca diariamente en la clínica con estos sujetos; y que, por su complejidad, sostiene de modo particular el deseo del analista
Resumo:
Este documento, dirigido especialmente a profesionales de la salud mental, reúne información y recomendaciones para la atención a personas diagnosticadas de esquizofrenia y psicosis. Aborda cuestiones como las intervenciones psicológicas (arteterapia, terapia de apoyo, intervención, manejo del trauma psicológico…), intervenciones entre iguales y autocuidado, fomento de la salud física, alternativas al ingreso en la unidad de agudos, acceso e implicación de las minorías sociales, etc.
Resumo:
El presente trabajo tiene como propósito hacer una revisión crítica de dos de los trabajos más relevantes que abordan la relación entre salud mental y arte, a saber: Artistry of the Mentally Ill, de Hans Prinzhorn (1922/1972) y Madness and Art, de Walter Morgenthaler (1921/1992). Para ello, se presenta primero un recuento de estos textos, y en un segundo momento, su respectivo análisis. De esta manera, llevo a cabo una revisión crítica de los ya mencionados libros a la luz de diferentes teorías psicoanalíticas que abordan algunos temas cruciales dentro de esta relación, como lo son la psicosis, y desde otras perspectivas, el arte marginal y la creatividad, aportando así a la investigación teórica de este tema particular.
Resumo:
En estas páginas se pretende proponer un modo de entender lo visto siempre como adaptación inmanente, deseo y simbolización, esto es, entenderlo como imagen. Se hará conforme a un concepto de ‘superficie’ que prolonga la lectura que hiciera Didi-Huberman del concepto de imagen-síntoma de Aby Warburg, y se apoya en textos de teoría psicoanalítica de la mano de Jacques Lacan, en un intento no de arruinar la capacidad de hermenéutica del observador, sino de entender la búsqueda del sentido y de la esencia –del arte por ejemplo– como la investigación sobre un conflicto histórico de pérdidas, crisis y memoria. ‘Superficie’ en tanto que masa átona y sin sentido donde el ojo siempre visiona formas: ver superficie es que el ojo siempre adapte lo visto, deseando abrirlo visionariamente en su significado para recabar su verdad oculta, pero paradójicamente cerrándolo. Porque mirar imágenes supone siempre perder visión respecto de una supuesta totalidad en la que se darían todos los significados en todas sus ambigüedades y en todas sus posibilidades históricas, pérdida sólo decible en su retorno en tanto que resignificación traumática. Aquí postulamos que la ilusión será creer no que las apariencias son ilusorias, sino que más allá de ellas hay “más realidad”. Este planteamiento no sólo ratifica la posición del sujeto, inserto en una superficie/cuadro dada-a-ver, sino que descubre la brecha constitutiva que le rige y que es un “más en él” que él mismo.
Resumo:
Como viene siendo habitual en las últimas películas de Pedro Almodóvar, las imágenes de La piel que habito (2011) se organizan en programas iconográficos que en este caso emanan de operaciones “trans” realizadas tanto en el cuerpo (transexualidad, transgénesis y trasplante), como en el texto (transtextualidad). El presente trabajo se ocupa de la genealogía y formalización de dichos programas así como de cuestiones teóricas surgidas a lo largo del desarrollo de este estudio –la relación entre cuerpo e identidad o el llamado muro de pantallas, entre otras–, de indudable calado en el filme.
Resumo:
En el siguiente estudio presento1 el análisis retrospectivo de un tratamiento individual de 17 sesiones de danza movimiento terapia en un caso crónico de una mujer de 59 años, institucionalizada, con un diagnóstico de esquizofrenia residual. Mi objetivo es evaluar la evolución y conclusión del tratamiento, con el fin de encontrar puntualizaciones de interés en la técnica de la DMT para pacientes con diagnósticos de psicosis y seguir construyendo y fortaleciendo la teoría y técnica de la DMT en esta población. Mis influencias teórico-técnicas provienen principalmente de los modelos de trabajo con pacientes psiquiátricos de Chaiklin y Schmais, S. (1979), Chaiklin, S. (1981), Jones (1992) y Liebowitz (1992). Utilicé las técnicas de la improvisación, el reflejo empático (Sandel, S. 1995), la verbalización (Stark & Lohn, 1995), la imagen, la metáfora y el símbolo (Sandel, S. 1995) y las enseñanzas del sistema de análisis del movimiento de Kestenberg (1999). Las aportaciones sobre creatividad de Brainsky (1988) y Pinchas Noy (1968-1969) me fueron de gran ayuda. Para el análisis triangulo información de varias fuentes: diarios de campo realizados durante el tratamiento junto con sus señalamientos producto de supervisiones y tutorías, la entrevista inicial y final a la paciente y un video analizado con la paciente y posteriormente estudiado bajo la óptica del sistema de análisis del movimiento de Kestenberg (Kestenberg y otros, 1999). Vivencio a través de mi paciente la utilidad y éxito de la DMT en la psicosis y las técnicas que nos permiten acercarnos a esta población. La DMT trabaja la estructura, no exclusivamente el fenómeno psicótico; aunque no se transforme la personalidad se fortalece, permitiéndole al sujeto vivir mejor en su condición, ser más autónomo, eficaz, feliz y móvil. La condición perse del proceso terapéutico con un psicótico es establecer una relación terapéutica para la cual es necesario entender en el cuerpo y en la mente que el funcionamiento de un psicótico no es el mismo que el de un neurótico; la barrera neurótica del terapeuta ha de sobrepasarse para lograr la fusión simbiótica que permitirá el bottom-up del psicótico. Los objetivos de trabajo en el caso individual son: integrar y desarrollar la unidad psiquesoma, contactar y expresar emociones, desarrollar las habilidades interpersonales y sociales, expandir el universo simbólico y desarrollar el movimiento espontáneo y la creatividad. Las fases del tratamiento son: los acercamientos y observaciones preliminares; la exploración del cuerpo, identificación de los focos de trabajo y comienzo de la ampliación del movimiento; la profundización y nacimiento del símbolo en la terapia y la consolidación de los avances y cierre del tratamiento. La técnica principal, es el reflejo empático del movimiento y la emoción en la improvisación y otras útiles, el masaje, automasaje, relajación, el dibujo, entre otras.
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Resumen tomado de la publicaci??n
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Los síntomas mentales son limitantes por sí mismos: déficits cognitivos, alteraciones afectivas, psicosis, entre otros, impiden un desempeño satisfactorio en los retos de la cotidianidad; pero la psicopatología no es moderadora exclusiva en dicha restricción, los linderos impuestos por la sociedad al enfermo mental en tanto prejuicios y estereotipos lesionan de forma significativa a estos individuos, coartándolos de las oportunidades que otros sin su condición poseen (1,2,3). Para la Organización Mundial de la Salud, el estigma representa una carga adicional a la enfermedad mental, y su control requiere esfuerzos urgentes (4).
Resumo:
La prevalencia de no adherencia en el tratamiento de mantenimiento en el Trastorno Afectivo Bipolar esta en los rangos de 20% y un 60%, interviniendo diversos factores relacionados con el paciente, la enfermedad, el tratamiento, y la relación con el terapeuta, asociándose a una mayor morbilidad, mortalidad y riesgo de reingresos hospitalarios. Objetivos: Determinar la prevalencia y factores asociados a la no adherencia en tratamiento de mantenimiento de pacientes adultos con diagnóstico de trastorno afectivo bipolar. Métodos: Estudio de corte transversal incluyo 124 paciente que asistieron a consulta los meses de noviembre y diciembre , se aplicó cuestionario estructurado, que contenía las variables de factores asociados, demográficos, relacionadas con el paciente, con la enfermedad, el tratamiento, relación terapéutica y el sistema de salud, relacionados con la familia; la Escala de Impresión Global Para el Trastorno Bipolar Modificado (CGI BPM -M) y apgar familiar Resultados: La prevalencia de no adherencia al tratamiento farmacológico de mantenimiento fue del 29.8%. Siendo esta mayor para las mujeres (64.9%) que para los hombres (35.1%), aunque esta diferencia no fue estadísticamente significativa (p= 0.17). Los factores asociados que estadísticamente significativos fueron mayor gravedad de la enfermedad OR 1.9 , antecedente de no adherencia (38% P=0.001), percepción negativa del terapeuta, menor insight( 87% RP4.65), mayor estigma(50% RP 6.2), no tener familiar que le recuerde toma del medicamento(73%). Conclusiones: La prevalencia estuvo en el rango de otros estudios realizados por Scott, Vieta et al, los factores asociados como estigma, antecedente de no adherencia, no tener apoyo familiar, un insight pobre y el habito de fumar ,pueden ser identificados desde el abordaje del paciente y modificados para mejorar la adherencia terapéutica