Reflexiones en torno a un centro rural de tratamiento en r��gimen semi-abierto.

Describir la instituci��n y establecer las relaciones externas que realiza. Presentar el proyecto educativo del centro. Describir la tipologia de los menores. Granja-Escuela 'El Collet' St Fruit��s del Bages. Establecer las caracter��sticas y la procedencia de los menores, el procedimiento de ingreso. Describe la estancia en la Granja-Escuela desde la perspectiva del educador y del educando. Describe el proceso interno de evaluaci��n continuada del proyecto educativo individual. Presenta el proceso habitual de salida del centro y la situaci��n de los menores frente a la salida. Documentos oficiales del centro 'El Collet'. Se valoran positivamente los recursos para la salida que se ofrecen a los sujetos clasificados en Pre-laborales, laborales y acad��micos. Concluye que se debe cuestionar si la instituci��n cumple la finalidad ��ltima de adaptar a los sujetos a las redes normalizadas de la ��poca. Por otro lado concluye que es positiva la oferta de recursos que se hace desde la instituci��n. Fecha tomada del c��digo del documento.

Propuesta de un modelo de evaluaci��n econ��mica de proyectos educativos.

El problema planteado es el siguiente: el an��lisis de los modelos actualmente en uso deja clara la ausencia y poco inter��s que ha generado la evaluaci��n econ��mica de los proyectos educativos, m��s a��n Scriven y Stufflebeam la dejan expl��citamente fuera de sus modelos. Los objetivos son realizar evaluaciones econ��micas de proyectos educativos en t��rminos de sus relaciones: (1) costo-eficiencia, (2) costo-eficacia, (3) costo-efectividad, (4) costo-utilidad y, (5) costo-beneficio, y verificar si el modelo es aplicable en condiciones reales. Alumnos y profesores de distintos niveles de bienestar. El m��todo desarrollado es la evaluaci��n de programas educativos y de proyectos sociales permitiendo realizar evaluaciones econ��micas en igualdad de condiciones con los proyectos del ��mbito financiero. El proceso del proyecto cuenta con cuatro etapas: etapa de las ideas, etapa de preinversi��n, estudio inicial y la etapa de operaci��n. Los proyectos sociales, compiten en desventaja con proyectos con rentabilidad financiera y adem��s, las evaluaciones se presentan, en general, desde modelos de evaluaci��n econ��mica originados en modelos de evaluaci��n financiera.

Concepciones alternativas sobre contenidos de astronom��a : capacidades espaciales implicadas.

Estudiar las concepciones alternativas sobre el planeta tierra, el d��a y la noche, y las estaciones del a��o, en sujetos de distintas edades; Estudiar estas concepciones con determinadas capacidades cognitivas. Objeto: astronom��a. Muestra : 80 sujetos que cursan segundo, cuarto y sexto de primaria y segundo de secundaria (20 sujetos por cada nivel escolar, 10 ni��os y 10 ni��as) de un centro escolar situado en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona). Una vez conseguida la aprobaci��n del centro escolar para su colaboraci��n, se realizaron las pruebas pertinentes (tests, cuestionarios...) por la autora de esta tesis. El idioma fue el catal��n o castellano, seg��n los deseos de los sujetos de la muestra. Variables : la edad en los distintos sujetos y la capacidad cognitiva de estos. Se ha utilizado la prueva horizontal de l��quidos, la prueva de las tres monta��as, el test de figuras enmascarada de Witkin y Goodenough, y la entrevista estructurada de Novak y Nussbaum. Se ha utilizado el CEFT y el EFT. Los resultados entre otros son los siguientes: aparece la idea de una tierra o suelo plano que se extiende indefinidamente, as�� como la tierra con una forma determinada (disco, esfera...). El planeta tierra tiene forma esf��rica, en el interior de esta esfera viven las personas sobre un mismo plano horizontal. Tambi��n aparece la idea de que las personas viven alrededor de la superficie esf��rica del planeta tierra orientadas en un sistema de referencia absoluto hacia abajo. En el caso de la noche y el d��a, aparece la concepci��n de que el d��a ocurre por la presencia del sol en el cielo y la noche por la ocultaci��n de ��ste, ya que por la noche solo es visible la luna. Los movimientos de estos no son astron��micos, se basan en la simple apariencia. A la hora de diferenciar las estaciones del a��o, lo hacen con el calor o el fr��o, no con los movimientos de la tierra alrededor del sol. En general, los resultados obtenidos reflejan el aspecto negativo de la investigaci��n sobre las concepciones alternativas, se��alado por Disessa (1996), que pone de manifiesto las limitaciones de la ense��anza formal para transformar las concepciones alternativas cient��ficas. En esta investigaci��n un 40.

Qu�� fem amb els nostres infants malalts? : el fora i dins d'una realitat educativa complexa. '��Qu�� hacemos con nuestros ni��os enfermos? todo sobre una realidad educativa'.

Convertir en una aventura la realizaci��n de la tesis; Establecer un di��logo entre los diferentes fen��menos que han influido a la vez de escoger y presentar la tesis; Convertir en sujeto la autora de la tesis para poder afrontar el trabajo y para lograr un di��logo con todo que envuelve la tesis. Objeto : Educaci��n. Muestra : la autora de la tesis y diferentes sujetos de las aulas hospitalarias del Hospital de St. Pere y St. Pablo. A trav��s del estudio y el an��lisis de datos se puede llevar a cabo la investigaci��n, para poder entender las bases de la organizaci��n educativa en el periodo de tratamiento del sujeto.Variables : la edad en los distintos sujetos y duraci��n de su tratamiento. No se ha utilizado ning��n programa inform��tico, tan solo la simple comparaci��n de los resultados, unos con otros y con la bibliograf��a. gEn conclusi��n la autora de la tesis se��ala la importancia de la relaci��n medico-paciente para tener una necesaria flexibilidad en la organizaci��n educativa del paciente.

La formaci��n del pedagogo en Espa��a : an��lisis comparativo de los planes de estudio.

Ofrecer un mejor y m��s aproximado conocimiento global de los estudios de Ciencias de la Educaci��n en Espa��a. Reflejar las orientaciones y desorientaciones de la formaci��n del pedagogo en Espa��a desde un punto de vista curricular. Planes de estudio espa��oles de Ciencias de la Educaci��n. Realiza una aproximaci��n te��rica a la Pedagog��a y las Ciencias de la Educaci��n respecto a cuestiones epistemol��gicas, clasificaciones y sistematizaciones, y un an��lisis comparativo-descriptivo de los Planes de estudio de Ciencias de la Educaci��n en Espa��a, con un sentido formal y material: realiza agrupamientos terminol��gicos por ciclo y un an��lisis de contenido. Clasifica las asignaturas impartidas por las Universidades y analiza e interpreta los resultados seg��n criterios de: ubicaci��n, extensi��n del objeto o contenido, tipo de conocimiento y ��reas pedag��gicas. Fuentes bibliogr��ficas, principalmente el BOE de 1970 a 1980. An��lisis de contenido. Cuadros de distribuciones de frecuencias, porcentajes, pol��gonos de frecuencia y perfiles. En la formaci��n b��sica se incluyen las asignaturas generales, te��rico-teor��ticas (que predominan en el primer ciclo), los ��mbitos auxiliares y el ��rea sistem��tica que predomina sobre todas las dem��s. Dentro de ella destaca el mayor peso de las asignaturas espec��ficamente pedag��gicas frente a las interdisciplinarias, las cuales escasean. En la formaci��n profesional predomina el ��rea Pedag��gico-especializada, Educaci��n Especial y Pedagog��a terap��utica. En el ��rea de Did��ctica y Tecnolog��a es donde aparece un acuerdo m��s general entre planes. Destaca tambi��n un predominio de asignaturas de tipo especial y te��rico-pr��ctico aplicado en el segundo ciclo, aunque se difiere en la intensidad. El ��rea de investigaci��n aparece con bastante claridad en todos los planes, pero tambi��n con intensidad variable. En el an��lisis de los Planes de estudio de Ciencias de la Educaci��n del periodo de 1970 a 1980, destaca que no hay un acuerdo global respecto la formaci��n del pedagogo en Espa��a. Hay una cierta desorganizaci��n, desorientaci��n y falta de definici��n de la mayor��a de los planes de estudio. Las ��reas profesionales m��s espec��ficas del pedagogo son las que est��n menos desarrolladas. La estructura de los planes de estudio es d��bil y deficitaria de cara al desarrollo de algunas especialidades pedag��gicas.

An��lisis de patrones conductuales en comedores escolares.

Obtener y analizar patrones conductuales de aquellos ni��os considerados por sus monitores como 'conflictivos' en el comedor escolar. Alumnos de segundo curso de EGB que hacen uso del servicio de media pensi��n de una escuela de Barcelona. An��lisis te��rico: presenta las bases te��ricas y describe la escuela donde lleva a cabo la investigaci��n. Desarrollo emp��rico: plantea la investigaci��n. Analiza los datos y elabora los resultados. Propone conclusiones. Controla las variables: tipo de conducta, tiempo, men��. Observaciones. Procedimiento gr��fico aproximativo (Flanders 1960) y an��lisis secuencial en datos interactivos por el m��todo de retardos (Sackett 1979). A/ A lo largo de las observaciones se ve un descenso del tiempo invertido, en los sujetos con conflictividad media. B/ En los sujetos de conflictividad alta, no se aprecia una mejora en las conductas observadas. No existen comportamientos 'contaminados', es decir la aparici��n de una conducta no comporta otras sucesivas. Se da una ausencia de un criterio com��n en las monitoras a la hora de valorar las conductas.

Entorno f��sico y educaci��n : hacia una pedagog��a del espacio construido por el hombre.

Comprender el significado de las relaciones del ser humano y su entorno f��sico. Objetivizar pedag��gicamente la relaci��n. 26 maestros de EGB. Busca aspectos generales del objeto de trabajo desde diversas disciplinas. Aporta el punto de vista de la Psicolog��a ambiental. Describe el entorno f��sico y la educaci��n bajo una perspectiva pedag��gica. Explora las concepciones y actitudes de los maestros de EGB frente al entorno f��sico escolar. Cuestionario exploratorio sobre criterios pedag��gico-espaciales. Estudio descriptivo. ��ndices estad��sticos. Distribuci��n de frecuencias. Gr��ficas. Programa de ordenador Stat View. Existe una necesidad de formar a los profesionales de la educaci��n escolar, a todos los niveles educativos, en el tema de las relaciones entre el entorno f��sico y la educaci��n, como condici��n de eficacia y calidad docente y educativa. La pedagog��a del entorno f��sico puede contribuir a formar a los formadores, proporcion��ndoles instrumentos de aprendizaje y modos de entrenamiento y actuaci��n.

Observaci��n de la interacci��n en grupos peque��os : aplicaci��n al estudio de la conducta verbal en ni��os de sexto de EGB, en clase de Pretecnolog��a.

Estudiar el desarrollo de la observaci��n de la interacci��n en grupos peque��os. Confeccionar un sistema de categor��a de observaci��n para estudiar la conducta de los ni��os de sexto de EGB, realizando un tipo concreto de actividades. Una clase de sexto de EGB compuesta por 42 alumnos de ambos sexos de un colegio nacional situado en la zona Franca de Barcelona. Realiza una exposici��n sobre lo que se entiende por el concepto de interacci��n elaborando un desarrollo hist��rico de los sistema de categorizaci��n de la interacci��n, abarcando casi un siglo de historia desde Horn (1914) hasta 1978. A continuaci��n llevan a cabo el estudio pr��ctico de la observaci��n de la interacci��n de la conducta verbal en una clase de alumnos de sexto de EGB, construyendo un sistema de categor��as para ese fin. Observaci��n no participante. Observaci��n sistematizada. Sistema de categor��as. Registro de frecuencias. Distribuci��n de frecuencias. Porcentajes. Matrices de doble entrada. El an��lisis de resultados refleja el n��mero de frecuencias de las categor��as que hacen referencia al comportamiento del profesor en su relaci��n de interacci��n con sus alumnos en la clase. Algunas de estas categor��as son: presentaci��n de la informaci��n u opini��n, acepta o rechaza ideas, acepta o rechaza la conducta del alumno, acepta o rechaza sentimientos. La interpretaci��n de los resultados se refleja en las conclusiones. En la escuela, el comportamiento verbal de los ni��os puede ser muy amplio, pero no se puede negar la existencia de unas limitaciones impuestas por el propio marco de la situaci��n que, en buena parte, vendr��n dadas por la conducta verbal del profesor. Los conocidos sistemas de categorizaci��n de grupos peque��os de Bales (1950), Carter (1951) y Borgatta y Crowther (1965) no son directamente utilizables en la observaci��n de la interacci��n en la escuela. Cada escuela, cada tipo y grado de alumnos, y cada situaci��n requerir�� la confecci��n de un sistema de categor��as adecuado.

Apuntes psicol��gicos para una teor��a de la instrucci��n.

Estudiar el concepto de desarrollo de diversos autores relacion��ndolo con sus ideas sobre el aprendizaje, para poder entresacar y proponer principios generales v��lidos para una posible teor��a de la instrucci��n. 32 ni��os de edades comprendidas entre los 5 y 6 a��os que cursan el ��ltimo grado de Preescolar. La primera parte del trabajo es una amplia explicaci��n del concepto de desarrollo y aprendizaje por importantes te��ricos, como Piaget, Vygotskii y Bruner, con el fin de entresacar y proponer principios generales v��lidos para una posible teor��a de la instrucci��n. La segunda parte es una experiencia pr��ctica donde el autor analiza una realidad pr��ctica ligada, por una parte, a un campo de aprendizaje restringido: la clase de Matem��ticas, y, por otra, a una actividad libre: juegos. Con este an��lisis pretende conocer: c��mo son adquiridos en la pr��ctica los conceptos de desarrollo epig��nico y operatorio. ��Hasta qu�� punto facilita el maestro el aprendizaje de las nociones que dice trabajar?. ��Qu�� tipo de estrategias espont��neas contruyen los ni��os de Preescolar?. Observaci��n, entrevista, grabaciones en v��deo, notas de campo, pruebas (ad-hoc). An��lisis de contenido. Descripci��n e interpretaci��n de las actividades y explicaciones de los ni��os. Los caminos empleados por los ni��os para llegar a la soluci��n del problema planteado son varios, incluso dentro del mismo estadio de desarrollo, dependen adem��s de ��ste, de su aprendizaje anterior, y de sus diferencias individuales. La maestra s��lo eval��a y responde ante conclusiones. Ignora los procesos y los puntos de partida de los ni��os. No se para a observar c��mo los logran, ni piensa en aptitudes y destrezas necesarias o en el modo de representar la realidad que tienen los ni��os, ni siquiera en el grado en que dependen de su ayuda para solucionar el problema, hecho que le dar��a pistas sobre su zona pr��xima de desarrollo. El ni��o deber��a participar en los acontecimientos, no ser simplemente un espectador. As�� el aprendizaje no es significante, ni personal, ni socio-cultural. El grupo clase no crea una cultura significativa, dado que las iniciativas posibles de intercambio son pocas y se dan pocos medios al ni��o para que pueda llevar esto a cabo. La escuela no puede ir ligada s��lo al momento evolutivo del ni��o, sino que debe adelantarse conociendo su zona de desarrollo pr��ximo.

La comunicaci��n no-verbal del educador f��sico : construcci��n de un sistema categorial de observaci��n y de an��lisis del comportamiento cin��sico.

Analizar la gestualidad de comportamiento cin��sico del educador f��sico en su trabajo docente, para llegar a constituir un sistema categorial ��til y aplicable en la observaci��n y an��lisis de la tarea docente.. Educadores de varios niveles educativos: guarder��a, BUP... para tantear el estudio. Investigaci��n basada en la observaci��n de un solo sujeto, un profesor de una escuela rural de la comarca del Sergri�� (Catalunya).. Trata la dimensi��n comunicativa de la motricidad humana partiendo de una concepci��n sist��mica de la misma. Profundiza en el concepto de cuerpo como veh��culo de expresi��n y aproxima aportaciones de car��cter semi��tico para completarlo. Aporta el estudio del comportamiento cin��sico y de la figura del educador de actividades f��sico-deportivas. Complementa la parte te��rica inicial con un trabajo emp��rico de metodolog��a observacional.. Metodolog��a observacional.. Gr��ficas, diagramas circulares, tablas num��ricas, dibujos, c��lculo estad��stico.. La linealidad de la palabra fundamenta nuestra comunicaci��n humana, pero no se puede olvidar la aportaci��n de lo no-verbal que la complementa. Se ha conseguido elaborar un sistema categorial ��til y manejable a ra��z de una exhaustiva definici��n molar y molecularizada de conductas cin��sicas. Se han descubierto y definido los elementos que conforman nuestra lengua no-verbal.. La producci��n motriz, al contrario de la emisi��n f��nica, no es lineal y podemos movernos y gesticular en la tridimensionalidad espacial, simult��neamente en el tiempo, con diversas partes de nuestro cuerpo. La motricidad se desarrolla en una realidad multidimensional que le confiere una enorme riqueza, al mismo tiempo, dif��cil de analizar. El an��lisis de la labor docente del educador, pues, debe enmarcarse en el discurso verbal y el no verbal..

La interacci�� educativa en l'activitat f��sico-recreativa per a la gent gran. Una an��lisi d'integraci�� metodol��gica. 'La interacci��n educativa en la actividad f��sico-recreativa para la gente mayor. Un an��lisis de integraci��n metodol��gica'.

Analizar la dimensi��n interactivo-educativa que se establece en un peque��o grupo formado por gente mayor durante la realizaci��n de una experiencia f��sico-deportiva de recreaci��n acu��tica, as�� como poner en pr��ctica una nueva v��a de an��lisis metodol��gica, plural e integradora, en la obtenci��n y an��lisis de los datos de la investigaci��n.. 4 sujetos extra��dos mediante muestreo focal del grupo-clase formado por 23 personas de 50 a��os en adelante pertenecientes a un municipio rural de la provincia de L��rida.. Desarrolla un marco te��rico sobre la educaci��n f��sica, su aplicaci��n a las actividades f��sico-recreativas para la gente mayor dentro del ocio y del deporte para todos. Expone su posicionamiento metodol��gico centrado en un modelo plural para el estudio de fen��menos pedag��gicos de la educaci��n f��sica. Desarrolla la parte emp��rica. Centr��ndose en la observaci��n participante, utiliza instrumentos cualitativos y cuantitativos para la obtenci��n de datos y contrasta su validez. Realiza dos tipos de an��lisis para comprobar si han existido diferencias de opini��n y conducta entre los sujetos al inicio y al final de la experiencia. 1- An��lisis individual por cada instrumento por separado: interpretaci��n cualitativa de informaciones incidentales y interpretaci��n de los par��metros y indicadores cuantitativos. 2- An��lisis sincr��nico: interpretaci��n a partir de pruebas de correlaci��n entre datos cuantitativos de diferentes instrumentos y interpretaci��n cualitativa y global.. Entrevistas informales y entrevistas semiestructuradas. Encuestas sociom��tricas. Notas de campo y registros narrativos. Observaci��n sistem��tica: elaboraci��n de un sistema de categor��as ad hoc.. An��lisis de contenido de las entrevistas. Coeficientes sociom��tricos. Comunicogramas. Coeficiente de concordancia de Kendall entre variables y sujetos. M��todo de retardos de Sackett.. Aunque no existe una significaci��n en la correlaci��n cuantitativa de los datos y el coeficiente de Kendall no ha dado una significaci��n estad��stica suficiente, la actividad natatoria ha supuesto una demanda interactiva considerable, ha hecho inclinar la opini��n de los practicantes hacia cotas m��s positivas respecto a la relaci��n con otros sujetos de un entorno m��s inmediato. Ha ayudado a reestructurar el grupo y a cohesionarlo hacia comportamientos m��s solidarios, de aceptaci��n y de colaboraci��n en la resoluci��n de conflictos iniciales y en la integraci��n de los miembros menos influyentes.. Como conclusi��n general se afirma que si bien es cierto que cada vez existe m��s voluntad de combinar datos cualitativos y cuantitativos, se hace ya ineludible poner en juego herramientas e instrumentos de etiolog��a diversa. La adopci��n de esta perspectiva ha permitido el acercamiento a la conducta interactiva de la motricidad recreativa de una manera m��s global y m��s ajustada al proceso interactivo real de estas actividades f��sicas..

Aspectos sociol��gicos de la delincuencia juvenil.

Reflexionar acerca de la problem��tica de la delincuencia juvenil y de sus factores condicionantes. Mostrar cu��l es la postura de la sociedad ante la delincuencia juvenil. La metodolog��a utilizada ha consistido en recoger datos procedentes de las propias experiencias del autor de su trabajo pastoral (1949-1959); de las visitas a instituciones y establecimientos; de las entrevistas de consulta, asesoramiento y seguimiento de trabajo; del acopio de documentaci��n varia, la consulta de estad��sticas y la lectura o consulta de libros. Cartas, expedientes, actuaciones, autorizaciones, noticias publicitarias, tablas estad��sticas, gr��ficas. Utilizaci��n de los porcentajes para el an��lisis de situaciones. 1) Reformar la legislaci��n vigente que codifica y tipifica la delincuencia (concretamente el C��digo Penal y la Ley de Peligrosidad Social), y efectuar la reforma penitenciaria. 2) Solucionar el hecho de que se terminen los estudios de EGB a los 14 a��os y no se pueda empezar a trabajar legalmente hasta los 16. Y, en este campo, promover unos planes de ocupaci��n post-escolar y pre-colocaci��n. 3) Estimular las promociones estudiantiles para que surjan educadores especializados, fomentar su profesionalizaci��n y facilitar su tarea.

An��lisi de problemes de comportament i aplicaci�� de programes a l'aula en dos centres d'EGB. ' An��lisis de problemas de comportamiento y aplicaci��n de programas en el aula en dos centros de EGB'.

Crear una normativa para alumno de Preescolar y primer ciclo de EGB que permita solucionar o mejorar los problemas de disciplina que se suscitan a esas edades en las escuelas; evitar las interrupciones suscitadas constantemente a trav��s, en parte, de la captaci��n del alumnado en actividades m��s sugestivas que sienten las bases para cursos posteriores. Facilitar una metodolog��a normativa a los maestros para enfrentar los diferentes problemas. Maestros del ciclo referido. Elaboraci��n de categor��as de problemas de comportamiento establecidas a partir de estudios anteriores para localizar el foco de estudio. Aplicaci��n de pautas sugeridas y an��lisis del comportamiento posterior, estudio y discusi��n de la forma de registro y los resultados. Descripci��n de los centros y aulas donde se ha desarrollado la experiencia. Cuestionario a los maestros sobre constituci��n de la clase. Formulario de observaci��n en fase previa a la aplicaci��n: primero a horas fijas, despu��s fuera de horario prefijado. Cuestionario al maestro para inferir sus actitudes, comportamiento, l��neas en la clase. Seguimiento de una semana tras el periodo de aplicaci��n de la nueva normativa. Tratamiento estad��stico, tablas, gr��ficos. Los problemas m��s frecuentes son, por grupos, conductas contra las normas de la clase (hablar sin permiso, levantarse sin permiso, jugar en clase), contra rendimiento escolar (distracci��n, lentitud en el trabajo, pereza), contra compa��eros (molestar, chivarse o ser dominante). Las que han disminuido tras la aplicaci��n son todas las de normas de clase y la lentitud en el trabajo m��s el h��bito de molestar o chivarse. Por otra parte se observan mejoras en la reducci��n de conductas agresivas y de trabajos descuidados. Por lo que respecta al maestro se observa que su autoridad y actitud influyen en el comportamiento del grupo, la falta de relaci��n entre maestros crea pautas conflictivas mientras la revisi��n conjunta de maestros y alumnos reduce los problemas. Existen diferencias de comportamiento pero muchos de los problemas observados en muestra parecen generales. Cuanto mayor es el n��mero de alumnos en aula mayores son los problemas. La normativa debe mantenerse activa durante todo el curso. Quedan ni��os a los que hay que ayudar con especialistas pues no son reconducidos por la normativa. Es necesaria la interacci��n social en appoyo del profesor (familia, personal especializado). Las condiciones ambientales y temporales afectan a la conducta del alumno (calor, mal tiempo, final de trimestre, de curso, etc.). Hay que tener en cuenta cambios de profesor, diferencia entre parvulario y escuela, altas y bajas de alumnos.

El proceso de planificaci��n en la intervenci��n educativa comunitaria.

Reflejar la importancia de la utilizaci��n de la t��cnica de planificaci��n de estrategias de intervencion, gesti��n y organizaci��n educativa por parte del educador dentro del trabajo comunitario. Presentar la t��cnica que favorece el desarrollo del proceso educativo en espacios de la vida cotidiana. Analizar la figura del educador como profesional y por ��ltimo, presentar el proceso de intervenci��n educativa de un educador especializado durante el per��odo de formaci��. Realizar la planificaci��n con un sujeto de 16 a��os en un centro urbano de Rub��. Un sujeto adolescente con una patolog��a psic��tica y falta de control. Adoptado a los tres a��os por ser maltratado por sus padres biol��gicos. Ingresado en un centro urbano de Rub�� (Barcelona). Se realiza una evaluaci��n inicial del entorno, de los sujetos, de la instituci��n y del educador. Eval��a los recursos y, posteriormente, se eval��an diferentes estrategias de intervenci��n y la programaci��n. Se propone la realizaci��n, tras la aplicaci��n, de otra evaluaci��n para reprogramar si se considera necesario. El programa de intervenci��n a nivel te��rico concluye que se hace necesaria la consolidaci��n del v��nculo entre el educador y el sujeto, as�� como ofrecer la posibilidad de establecer intercambios entre los agentes educativos implicados mediante la t��cnica de planificaci��n expuesta, estableciendo prioridades comunes y calculando los propios l��mites de la acci��n educativa.

Comer�� just, una opci�� de consum, una opci�� de just��cia : quadern de treball. 'Comercio justo, una opci��n de consumo, una opci��n de justicia : cuaderno de trabajo'.

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