3 resultados para ACCIDENTES
em Biblioteca Digital de la Universidad Católica Argentina
Resumo:
La Ley de Riesgos del Trabajo (LRT) se puso en vigencia en el 1996 con el objetivo de incentivar la prevención de accidentes, mejorar la protección de los trabajadores y eliminar distorsiones del mercado del trabajo que favorecían el empleo en negro. Habiendo transcurrido 14 años se registran algunos logros significativos, como la caída en la cantidad de siniestros, pero en los últimos años ha habido un creciente aumento de la litigiosidad, en parte motivado por la falta de actualización de aspectos claves contemplados en la propia ley. Para no volver al regresivo sistema vigente antes de la reforma y erradicar la litigiosidad espuria, es necesario recomponer rápidamente las reglas básicas de funcionamiento del sistema
Resumo:
Resumen: En este trabajo seguimos la presentación de la materia, la forma y la privación realizada por Santo Tomás de Aquino en los dos primeros capítulos del De principiis naturae. Identificados como los principios de la naturaleza, son la clave para entender las definiciones de generación de las que nos provee el Aquinate. Él entiende la generación, protagonista de los cambios del mundo material, en sus principios, descubiertos en sus relaciones acto-potenciales. Completa esta presentación la distinción entre las substancias y los accidentes y sus consecuencias en el campo de los cambios de los cuerpos. Luego, Santo Tomás extiende los análisis de la privación y de la materia. La privación, entonces, es bien distinguida de la negación, porque el Aquinate muestra su dimensión potencial. La materia, por otro lado, se descubre en su pluralidad de sentidos y nos permite hablar de una participación de la materia, a partir de la principalísima materia ex qua o primera. Por último, tomamos nota de las fuentes secundarias de este texto, revisando pasajes de San Agustín y Averroes.
Resumo:
El entendimiento es la principal potencia del alma, la que primero emana de ella, la más perfecta de todas y la característica distintiva de la naturaleza humana. A través de ella el hombre participa en algo de los seres superiores, Dios y los ángeles. Como las demás potencias, el entendimiento no puede ser directamente conocido por nosotros, sino sólo por medio de sus actos propios. A diferencia de los sentidos, cuyo conocimiento se limita a los accidentes, el entendimiento penetra hasta la esencia de la realidad; más aún, la esencia de las cosas materiales constituye el objeto propio del entendimiento humano. El nombre con que se le designa (intellectus = intus-legere = leer dentro) quiere expresar precisamente esta índole peculiar. Penetrando en las esencias, el entendimiento humano es capaz de abstraer (extraer lo universal de lo particular o singular) y concebir ideas o conceptos. Estos actos y objetos, eminentemente espirituales, demuestran que su sujeto, el entendimiento, también lo es; y si el entendimiento es una potencia o energía espiritual, necesariamente debe serlo también el principio del cual fluye, o sea, el alma humana...