6 resultados para gobernanza local
em Universidad Politécnica de Madrid
Resumo:
Se evalúa con indicadores de gobernanza urbana la sostenibilidad de las formas de hacer ciudad hibrida compleja del gobierno de la gestión visible (GGV). Argumenta que el GGV hace ciudad para legitimarse por desempeño y fortalecer la gobernanza local, en un contexto de mutaciones múltiples y radicales que tienden a diluir y centralizar el poder local y fractalizar la ciudad, profundizando la segregación sociopolítica-territorial y la ingobernabilidad genética de la ciudad hibrida, poniendo en riesgo el Estado federal descentralizado, el derecho a la ciudad, al gobierno local y la gobernanza urbana y multinivel (hipótesis). La estrategia de evaluación de gobernanza innovadora (EEG+i) diseñada para evaluar la relación entre las formas de hacer ciudad hibrida (variables espaciales) y gobernanza (variable a-espacial) es transversal, multidimensional y se construye desde la complejidad, el análisis de escenarios, formulación de constructos, modelos e indicadores de gobernanza, entretejiendo tres campos de conocimiento, gobierno, ciudad y sostenibilidad, en cuatro fases. La Fase 1, contextualiza la gobernanza en la dramática del siglo XXI. La Fase 2, desarrolla la fundamentación teórico-práctica, nuevos conceptos y un abordaje analítico propio ‘genética territorial’, para analizar y comprehender la complejidad de la ciudad hibrida de países en desarrollo, tejiendo ontogenética territorial y el carácter autopoiético del gen informal. En la Fase 3, se caracterizan las formas de hacer ciudad desde la genética del territorio, se formulan modelos e indicadores de gobernanza con los que se evalúan, aplicando un delphi y cuestionarios, los genes tipológicos-formas de hacer ciudad y validan las conclusiones. En la Fase 4, se correlacionan los resultados de los instrumentos aplicados con la praxis urbana del GGV, durante cuatro periodos de gobierno (1996-2010). Concluyendo que, la estrategia de evaluación comprobó las hipótesis y demostró la correlación transversal y multinivel existente entre, las mutaciones en curso que contradicen el modelo de gobernanza constitucional, el paisaje de gobernanza latinoamericano y venezolano, la praxis de los regímenes híbridos ricos en recursos naturales, las perspectivas de desarrollo globales y se expresa sociopolíticamente en déficit de gobernanza, Estado de derecho y cohesión-capital social y, espaciolocalmente, en la ciudad hibrida dispersa y diluida (compleja) y en el gobierno del poder diluido centralizado. La confrontación de flujos de poder centrípetos y centrífugos en la ciudad profundiza la fragmentación socioespacial y política y el deterioro de la calidad de vida, incrementando las protestas ciudadanas e ingobernabilidad que obstaculiza la superación de la pobreza y gobernanza urbana y multinivel. La evaluación de la praxis urbana del GGV evidenció que la correlación entre gobernanza, la producción de genes formales y la ciudad por iniciativa privada tiende a ser positiva y entre gobernanza, genes y producción de ciudad informal negativa, por el carácter autopoiético-autogobernable del gen informal y de los nuevos gobiernos sublocales que dificulta gobernar en gobernanza. La praxis del GGV es contraria al modelo de gobernanza formulado y la disolución centralizada del gobierno local y de la ciudad hibrida-dispersa es socio-espacial y políticamente insostenible. Se proponen estrategias y tácticas de gobernanza multinivel para recuperar la cohesión social y de planificación de la gestión innovadora (EG [PG] +i) para orquestar, desde el Consejo Local de Gobernanza (CLG) y con la participación de los espacios y gobiernos sublocales, un proyecto de ciudad compartido y sostenible. ABSTRACT The sustainability of the forms of making the hybrid-complex city by the visible management government (VMG) is evaluated using urban governance indicators. Argues that the VMG builds city to legitimate itself by performance and to strengthen local governance in a context of multiple and radical mutations that tend to dilute and centralize local power and fractalize the city, deepening the socio-spatial and political segregation, the genetic ingovernability of the hybrid city and placing the decentralized federal State, the right to city, local government and urban governance at risk (hypothesis). The innovative governance evaluation strategy (GES+i) designed to assess the relationship between the forms of making the hybrid city (spatial variables) and governance (a-spatial variable) is transversal, multidimensional; is constructed from complexity, scenario analysis, the formulation of concepts, models and governance indicators, weaving three fields of knowledge, government, city and sustainability in four phases. Phase 1, contextualizes governance in the dramatic of the twenty-first century. Phase 2, develops the theoretical and practical foundations, new concepts and a proper analytical approach to comprehend the complexity of the hybrid city from developing countries, weaving territorial ontogenetic with the autopiethic character of the informal city gen. In Phase 3, the ways of making city are characterized from the genetics of territory; governance indicators and models are formulated to evaluate, using delphi and questionnaires, the ways of making city and validate the conclusions. In Phase 4, the results of the instruments applied are correlated with the urban praxis of the VMG during the four periods of government analyzed (1996-2010). Concluding that, the evaluation strategy proved the hypothesis and showed the transversal and multilevel correlation between, mutations that contradict the constitutional governance model, the governance landscape of Latinamerica and the country, the praxis of the hybrid regimes rich in natural resources, the perspectives of the glocal economy and expresses socio-politically the governance and rule of law and social capital-cohesion deficit and spatial-temporarily the hybrid disperse and diluted city (complex) and the diluted-centralized local government. The confrontation of flows of power centripetal and centrifugal in the city deepens the socio-spatial and political fragmentation and deterioration of the quality of life, increasing citizens' protests and ingovernability which hinders poverty eradication and, multilevel and urban governance. The evaluation of the VMG urban praxis showed the correlation between governance, the production of formal genes and city by private initiative tended to be positive and, between informal genes-city production and governance negative, due to its autopiethic-self governable character that hinders governance. The urban praxis of the VMG contradicts the formulated governance model and thecentralized dissolution of the local government and hybrid city are socio-spatial and politically unsustainable. Multiscale governance strategies are proposed to recreate social cohesion and a management planning innovative method (EG [PG] + i) to orchestrate, from the Local Governance Council (LGC) and with the participation of sublocal governments and spaces, a shared and sustainable city project.
Resumo:
Los cambios recientes en la producción del espacio deben entenderse en el marco de la reestructuración económico-política post-1989/1991; a su vez, el sentido de ambos procesos se revela más nítidamente si los contextualizamos en ciclos históricos más amplios (Harvey, 2005). En esa perspectiva tanto la crisis actual como la etapa de “apogeo” precedente, con todas sus implicaciones territoriales y espaciales, pueden concebirse como una fase avanzada de la agenda de políticas neoliberales inaugurada en la década de 1970 — en particular, en relación a las políticas urbanas, en el episodio fundacional de la crisis fiscal de la ciudad de Nueva York (Tabb, 1982). Se abre aquí un nuevo régimen de gobernanza local sustentando en los principios de austeridad fiscal, desmantelamiento de los acuerdos regulatorios del fordismokeynesianismo y ampliación de las prerrogativas de actores corporativos en la administración y la actividad urbanística (Harvey, 1989). Junto a la progresiva globalización de las cadenas productivas, la expansión de las telecomunicaciones y redes logísticas, y la financiarización de volúmenes crecientes de actividad económica, esta reestructuración de la gobernanza y la economía locales constituye uno de los pilares básicos de un orden que sigue vigente hoy día. Motor proteico de esa nueva economía política, las ciudades y ciudades-región —y por tanto las políticas y programas urbanísticos— han cobrado un papel protagonista, a medida que las agendas económicas nacionales se re-escalaban para aprovechar las ventajas competitivas de sus activos territoriales más estratégicos en un nuevo mapa de lucha global por la localización de capitales (Brenner, 2004; Brenner & Theodore, 2002).
Resumo:
El eje central de esta comunicación es la relación de la participación ciudadana y la gobernanza urbana con el modelo de desarrollo y su componente territorial. Las transformaciones de los últimos años han reconfigurado las relaciones políticas, sociales y económicas. En ese proceso se ha impuesto una nueva gobernanza de orden global y la participación ha quedado cada vez más alejada de los centros de decisión, lo que ha supuesto la concentración de poder en unas pocas manos y la desconfianza en las instituciones, derivada de la complejidad administrativa y la falta de transparencia en la toma de decisiones. La construcción del espacio requiere de participación ciudadana y una gobernanza urbana que busque la acción pública enfocada en las necesidades reales de la sociedad ? y no en los intereses económicos de élites? y que desarrolle el sentido de responsabilidad colectivo ante el entorno. La vinculación (y comprensión) de los procesos de toma de decisiones a diferentes escalas (multi-level-governance) y la puesta en valor de la escala local para las cuestiones espaciales son claves necesarias para una gobernanza urbana que incorpore la acción social como fuerza transformadora de los modelos de desarrollo y su componente territorial.
Resumo:
En el artículo introduciremos en primer lugar el nuevo entorno en que se enmarca el cambio sustancial en la naturaleza de la Web tal y como la conocemos. Adoptaremos para ello un enfoque híbrido, diseccionando con un poco más de detalle los elementos tecnológicos, socioeconómicos, administrativos y legislativos que, a nuestro parecer, pueden conformar el contexto que enmarcaría un escenario factible para la introducción de una Gobernanza 2.0 ?de nueva generación? capaz de integrar de una manera sostenible ?ecosistémicamente viable? tecnologías y procesos que soporten de forma natural el paso de una era post-industrial de la información en la que vivimos hace unos años, hacia una sociedad de la información, poblada por verdaderos infociudadanos (nativos digitales en una creciente mayoría) y que debería ser sólo el paso previo para la última utopía: la sociedad del conocimiento, un estadio de la evolución sociotécnica al que se pretende llegar por el ancestral método de la profecía autocumplida, ignorando una realidad vigente considerablemente compleja.
Resumo:
El objetivo de la presente investigación es analizar el proceso de implantación de la nueva gobernanza dirigido por diferentes actores, en contextos rurales de Chiapas, México, que permita generar aportes conceptuales y propuestas de acción pública para su gestión. En la presente investigación se desarrollaron tres estudios de caso con un enfoque comparativo. Cada caso tuvo un actor diferente que dinamizó el proceso, en el primero fue el privado empresarial, en el segundo la sociedad civil y en el tercero el gobierno local. Lo registrado en la presente investigación señala que la nueva gobernanza no se acota a lo definido por organismos externos al territorio y tampoco se arriba a través de una sola ruta, se estructura fundamentalmente por lo que los mismos actores locales trabajen mediante un proceso de aprendizaje social en su definición y proceso de cambio según sus elementos socio-culturales. La nueva gobernanza dirigida por la sociedad civil es quien tuvo los mejores resultados respecto a los casos guiados por la iniciativa privada y el gobierno local. Sin embargo, es este último actor quien tiene las mayores posibilidades de detonar los procesos de nueva gobernanza en la mayoría de los contextos territoriales para dar paso a la sociedad civil o la iniciativa privada que posibiliten la sostenibilidad de los procesos en el largo plazo. The purpose of the current research is to analyze the new governance implantation process directed by different actors, in the rural contexts of Chiapas, México which will permit to generate conceptual contributions and public action proposals for its management. In the current research three case studies were developed each one based on comparative focus. Each case had a different actor which put into effect such process. In the first case it was private business, in the second the civilian society and in the third the local government. The information that was registered in the current research points out that the new governance do not encloses to elements defined by those organisms which are external to the territory and neither arrives through a single pathway; it is fundamentally structured and for this reason the same local actors work through a social learning process in its definition and change process in accordance to the socio-cultural elements. The new governance which is directed by the civilian society is the one that had the best results regarding the cases that were guided by the private sector and the local government. Nevertheless, this last actor is the one who had the best chances to trigger the new governance processes in most of the territorial contexts yielding the civilian society or private business to enable the long term processes sustainability.
Resumo:
En las últimas tres décadas, las dinámicas de restructuración económica a nivel global han redefinido radicalmente el papel de las ciudades. La transición del keynesianismo al neoliberalismo ha provocado un cambio en las políticas urbanas de los gobiernos municipales, que han abandonado progresivamente las tareas de regulación y redistribución para centrarse en la promoción del crecimiento económico y la competitividad. En este contexto, muchas voces críticas han señalado que la regeneración urbana se ha convertido en un vehículo de extracción de valor de la ciudad y está provocando la expulsión de los ciudadanos más vulnerables. Sin embargo, la regeneración de áreas consolidadas supone también una oportunidad de mejora de las condiciones de vida de la población residente, y es una política necesaria para controlar la expansión de la ciudad y reducir las necesidades de desplazamiento, promoviendo así ciudades más sostenibles. Partiendo de la hipótesis de que la gobernanza de los procesos de regeneración urbana es clave en el resultado final de las operaciones y determina el modelo de ciudad resultante, el objetivo de esta investigación es verificar si la regeneración urbana es necesariamente un mecanismo de extracción de valor o si puede mejorar la calidad de vida en las ciudades a través de la participación de los ciudadanos. Para ello, propone un marco de análisis del proceso de toma de decisiones en los planes de regeneración urbana y su impacto en los resultados de los planes, tomando como caso de estudio la ciudad de Boston, que desde los años 1990 trata de convertirse en una “ciudad de los barrios”, fomentando la participación ciudadana al tiempo que se posiciona en la escena económica global. El análisis se centra en dos operaciones de regeneración iniciadas a finales de los años 1990. Por un lado, el caso de Jackson Square nos permite comprender el papel de la sociedad civil y el tercer sector en la regeneración de los barrios más desfavorecidos, en un claro ejemplo de urbanismo “desde abajo” (bottom-up planning). Por otro, la reconversión del frente marítimo de South Boston para la construcción del Distrito de Innovación nos acerca a las grandes operaciones de regeneración urbana con fines de estímulo económico, tradicionalmente vinculadas a los centros financieros (downtown) y dirigidas por las élites gubernamentales y económicas (la growth machine) a través de procesos más tecnocráticos (top-down planning). La metodología utilizada consiste en el análisis cualitativo de los procesos de toma de decisiones y la relación entre los agentes implicados, así como de la evaluación de la implementación de dichas decisiones y su influencia en el modelo urbano resultante. El análisis de los casos permite afirmar que la gobernanza de los procesos de regeneración urbana influye decisivamente en el resultado final de las intervenciones; sin embargo, la participación de la comunidad local en la toma de decisiones no es suficiente para que el resultado de la regeneración urbana contrarreste los efectos de la neoliberalización, especialmente si se limita a la fase de planeamiento y no se extiende a la fase de ejecución, y si no está apoyada por una movilización política de mayor alcance que asegure una acción pública redistributiva. Asimismo, puede afirmarse que los procesos de regeneración urbana suponen una redefinición del modelo de ciudad, dado que la elección de los espacios de intervención tiene consecuencias sobre el equilibrio territorial de la ciudad. Los resultados de esta investigación tienen implicaciones para la disciplina del planeamiento urbano. Por una parte, se confirma la vigencia del paradigma del “urbanismo negociado”, si bien bajo discursos de liderazgo público y sin apelación al protagonismo del sector privado. Por otra parte, la planificación colaborativa en un contexto de “responsabilización” de las organizaciones comunitarias puede desactivar la potencia política de la participación ciudadana y servir como “amortiguador” hacia el gobierno local. Asimismo, la sustitución del planeamiento general como instrumento de definición de la ciudad futura por una planificación oportunista basada en la actuación en áreas estratégicas que tiren del resto de la ciudad, no permite definir un modelo coherente y consensuado de la ciudad que se desea colectivamente, ni permite utilizar el planeamiento como mecanismo de redistribución. ABSTRACT In the past three decades, the dynamics of global economic restructuring have radically redefined the role of cities. The transition from keynesianism to neoliberalism has caused a shift in local governments’ urban policies, which have progressively abandoned the tasks of regulation and redistribution to focus on promoting economic growth and competitiveness. In this context, many critics have pointed out that urban regeneration has become a vehicle for extracting value from the city and is causing the expulsion of the most vulnerable citizens. However, regeneration of consolidated areas is also an opportunity to improve the living conditions of the resident population, and is a necessary policy to control the expansion of the city and reduce the need for transportation, thus promoting more sustainable cities. Assuming that the governance of urban regeneration processes is key to the final outcome of the plans and determines the resulting city model, the goal of this research is to verify whether urban regeneration is necessarily a value extraction mechanism or if it can improve the quality of life in cities through citizens’ participation. It proposes a framework for analysis of decision-making in urban regeneration processes and their impact on the results of the plans, taking as a case study the city of Boston, which since the 1990s is trying to become a "city of neighborhoods", encouraging citizen participation, while seeking to position itself in the global economic scene. The analysis focuses on two redevelopment plans initiated in the late 1990s. The Jackson Square case allows us to understand the role of civil society and the third sector in the regeneration of disadvantaged neighborhoods, in a clear example of bottom-up planning. On the contrary, the conversion of the South Boston waterfront to build the Innovation District takes us to the big redevelopment efforts with economic stimulus’ goals, traditionally linked to downtowns and led by government and economic elites (the local “growth machine”) through more technocratic processes (top-down planning). The research is based on a qualitative analysis of the processes of decision making and the relationship between those involved, as well as the evaluation of the implementation of those decisions and their influence on the resulting urban model. The analysis suggests that the governance of urban regeneration processes decisively influences the outcome of interventions; however, community engagement in the decision-making process is not enough for the result of the urban regeneration to counteract the effects of neoliberalization, especially if it is limited to the planning phase and does not extend to the implementation of the projects, and if it is not supported by a broader political mobilization to ensure a redistributive public action. Moreover, urban regeneration processes redefine the urban model, since the choice of intervention areas has important consequences for the territorial balance of the city. The results of this study have implications for the discipline of urban planning. On the one hand, it confirms the validity of the "negotiated planning" paradigm, albeit under public leadership discourse and without a direct appeal to the leadership role of the private sector. On the other hand, collaborative planning in a context of "responsibilization" of community based organizations can deactivate the political power of citizen participation and serve as a "buffer" towards the local government. Furthermore, the replacement of comprehensive planning, as a tool for defining the city's future, by an opportunistic planning based on intervention in strategic areas that are supposed to induce change in the rest of the city, does not allow a coherent and consensual urban model that is collectively desired, nor it allows to use planning as a redistribution mechanism.