2 resultados para Tromboprofilaxis
Resumo:
Tercera parte de personas de 65 años o mayores caen anualmente con consecuencias variables. Los riesgos de caída aumentan con la edad y los de lesiones graves con cada caída. Lesiones severas son debido a fracturas, principalmente de cadera y más del 75% no recuperan funcionalidad previa. Estudio descriptivo cohorte retrospectiva, Clínica Los Rosales, Pereira, 1 de Enero/2007 a 31 de Diciembre/2008, la clínica avaló revisión de base de datos, escogidos códigos CIE 10 relacionados con Fractura de cadera origen traumático, excluyendo accidentes de tránsito y lesiones metastásicas óseas, edad 65 o más años. Historias clínicas fueron revisadas, información recolectada acorde al Instrumento diseñado. Consolidación base de datos, procesada por la herramienta estadística SPSS 17.0 para análisis descriptivo y obtener información demográfica, y cruce de variables con variable muerte buscando relación entre resultado y mortalidad. Total 48 pacientes, 33 cumplían criterios de ingreso, 15 excluidos por no tener información del tratamiento, 4 fueron remitidos, 11 restantes sin información por historia clínica ni telefónica de sobrevida. Edad promedio 83,4 años, género femenino 60,6% y 75,8% procedían del área urbana de Pereira, comorbilidades previas predominantes enfermedades cardiovasculares, 32,8%. Mayor consumo de medicamentos previos antihipertensivos, 81,8%, el 18,2% no recibían. Intrahospitalariamente 90,9% pacientes recibieron profilaxis antitrombotica, cirugía realizada en 90,9%, en 36,7% hecha los primeros 2 días y 42,4% al 5 día habían egresado. 9,1% registro un evento previo de fractura de cadera. 81,8% sin complicación, 9,1% murieron los primeros 3 meses posfractura. No se encontró asociación entre muerte y variables: cirugía, tromboprofilaxis.
Resumo:
La enfermedad tromboembólica venosa (ETV) en pacientes médicos hospitalizados constituye en la actualidad un problema común, de gran importancia y en la mayoría de las ocasiones evitable con tromboprofilaxis (TP). Múltiples trabajos en los últimos años han mostrado un grado insuficiente en la aplicación de los protocolos de prevención, sobre todo en el grupo de pacientes médicos, pudiendo estar influenciado por la asociación de un aumento observado de las complicaciones hemorrágicas en algunos estudios. Además, existen pocas escalas desarrolladas específicamente para este subgrupo de pacientes para la valoración de las posibles complicaciones. Diseñamos un estudio con el objetivo principal de desarrollar una escala de valoración del riesgo conjunto trombótico y hemorrágico en pacientes médicos agudos hospitalizados al ingreso hospitalario y como objetivos secundarios identificar los posibles factores de riesgo trombóticos y hemorrágicos, establecer el grado de acuerdo entre las escalas de valoración de riesgo trombótico previamente existentes y evaluar el grado de adecuación de la TP a los protocolos de uso general establecidos. El trabajo se compone de un estudio preliminar descriptivo para analizar la situación sobre una muestra de pacientes en un hospital de tercer nivel. Ante la hipótesis de un aumento del riesgo trombótico y hemorrágico que podría ser paralelo y para disponer de un mayor poder estadístico que permitiera desarrollar una escala predictiva que tuviera en cuenta ambos riesgos de forma conjunta, se estudió en una gran cohorte retrospectiva de pacientes hospitalizados los posibles factores de riesgo trombóticos y hemorrágicos durante el ingreso. Con respecto a los resultados, se analizó el riesgo trombótico mediante diferentes escalas (ACCP, PRETEMED, Padua, IMPROVE). Según las recomendaciones de la ACCP el 50% tenían bajo riesgo y el 50% alto, siendo la TP adecuada en el 74,2%. Según la guía PRETEMED el 34,4% de los pacientes tenían riesgo bajo, el 6,3% moderado y el 59,4% alto, siendo la TP adecuada en el 72,7%. La adecuación observada con la escala de Padua y la escala IMPROVE fue del 74,2% y 72,7% respectivamente. En relación a los grados de acuerdo entre las mismas observamos que eran mejores entre ACCP, PRETEMED y Padua (0,7-0,81), e inferiores con la escala IMPROVE (0,53-0,6) ya que contempla menos factores de riesgo, siendo la escala que más sobreestima el riesgo PRETEMED. Posteriormente, en el estudio retrospectivo sobre una muestra de 1.148.301 pacientes, observamos una incidencia de hemorragia y ETV del 3,1% y 1,21% respectivamente. 8 variables clínicas fueron asociadas de manera independiente a un riesgo elevado tanto de ETV como de hemorragia, 1 a un descenso de ambos riesgos, 4 a un aumento de riesgo de ETV y a un descenso de riesgo de hemorragia, 2 a un aumento de riesgo de hemorragia y un descenso de riesgo de ETV y 1 a un descenso del riesgo de hemorragia. Considerando todas estas variables, desarrollamos una escala en la cual se asignan puntos a cada una de acuerdo con la ratio entre la OR para hemorragia y la OR para ETV. El 21% de los pacientes tuvieron menos de 0 puntos con una ratio entre hemorragia y ETV de 1,19, el 55% tuvieron 0-1 puntos, con una ratio de 2,13 y el 24% tuvieron más de un punto con una ratio de 6,1. Como conclusión principal, la escala de valoración conjunta del riesgo trombótico y hemorrágico desarrollada en el presente trabajo permite detectar al ingreso hospitalario los pacientes médicos que presentan simultáneamente un alto riesgo trombótico y hemorrágico, demostrando ser una herramienta útil para la optimización de la profilaxis trombótica.