995 resultados para concepto de víctima
Resumo:
El presente trabajo forma parte del plan de tareas de los adscriptos y auxiliares en docencia e investigación de la cátedra de Teoría Psicoanalítica de la Facultad de Psicología de la UNLP. El propósito del mismo consiste en indagar la conceptualización freudiana de la pulsión en sus artículos sobre Metapsicología: 'Pulsiones y destinos de pulsión', 'La represión' y 'Lo inconsciente'. La pregunta que guiará el trabajo de investigación es: ¿qué es la pulsión?, la cual da lugar a los siguientes interrogantes: ¿es una energía, un quantum, un afecto, una representación, un representante? Se abordarán dichos textos a partir de tres definiciones de pulsión. para ello se tomarán dos ejes fundamentales: las nociones de representación y de afecto. A su vez, se introducirán los puntos de vista tópico, dinámico y económico que constituyen la apreciación metapsicológica. La pulsión, concepto fundamental y básico del Psicoanálisis, es definida en principio como un concepto fronterizo entre lo anímico y lo somático. Se interrogará esta formulación freudiana al plantear la hipótesis de que no sólo es un concepto de deslinde, sino también de unión, de conexión. A esta primera formulación perteneciente a 'Pulsiones y destinos de pulsión' se suman las definiciones planteadas en 'La represión' y 'Lo inconsciente', que aluden a la pulsión en relación con la tópica y la dinámica psíquica, lo que podría leerse como el funcionamiento pulsional en el aparato psíquico y su relación con las diferentes instancias. Es en este contexto en que aparecen las nociones de agencia representante de pulsión, representación, monto de afecto y afectos. Con respecto a la representación, y a los modos en que la pulsión puede encontrar expresión o representación en el psiquismo, se examinarán las dos nociones que Freud utiliza: Representación (Vorstellung) para referirse a un contenido ideico, figural, y representante (Repräsentant) para referirse a lo que representa a algo en el sentido de la acción de delegar, de una presencia en lugar de una ausencia. La inscripción de la pulsión en el aparato anímico se produciría por una fijación de la agencia representante psíquica, en el marco de la represión primordial fundante del inconsciente. La represión propiamente dicha recaerá sobre los retoños o mociones pulsionales en los que dicha agencia se continúa. Esta represión que entra en juego en la dinámica psíquica consistirá en disociar aquellos componentes de la moción pulsional: representación (Vorstellung) y afecto, los cuales encontrarán destinos independientes. Respecto de la representación es posible indicar su ubicación en la tópica psíquica: inconsciente, preconsciente, conciencia. No tan claro se plantea la localización del afecto, como tal sólo puede ser consciente, pero: ¿qué ocurre con él cuando una moción es reprimida?. Freud planteará tres destinos posibles: ser sofocado, mudarse en otro afecto (en particular angustia) o permanecer en la conciencia. Sin embargo, Freud planteará que al divorciarse la representación y el afecto, éste último desligado de la representación corresponderá a una cantidad, una posibilidad de planteo, sólo pasible de ser leído en términos económicos. Es dicho planteo económico el que parece imponerse en la caracterización freudiana de la pulsión. Desde los primeros planteos, considera que su esencia consiste en una exigencia de trabajo, un esfuerzo (Drang), que lo corporal impone a lo psíquico; y luego establecerá que, desprendida de sus medios de expresión o sus representantes que son representación y afecto, sólo puede ser caracterizada económicamente. Sin embargo, son estos representantes (Vorstellung y afecto) los que constituyen el campo propio donde se despliega la cuestión de la pulsión. Permiten que la misma pueda entrar en la dinámica psíquica, ubicarse tópicamente, y por consiguiente, que algo de esta energía o cantidad pueda ser leída
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Para conseguir la cohesión social y la reproducción de una sociedad concebida en marcha hacia el progreso, la racionalidad moderna sostuvo la ecuación educaciónciudadanía y democracia. Durkheim justificaba la necesidad de una educación moral en función de la división del trabajo y de la cohesión social. Surgen sociedades de hombres libres y solidarios que requieren de un aparato institucional, instalado en el propio Estado, destinado a formar ciudadanos capaces de adaptarse a la sociedad como ciudadanos pasivos (Rigal, 2008). La configuración estatal neoliberal quiebra los preceptos de la racionalidad moderna y conforma una nueva sociedad: dualismo estructural, polaridad social y heterogeneización de las clases subalternas, que en Latinoamérica, encuentra respuesta en la intensificación de un ciclo ascendente de acción colectiva, protestas y manifestaciones de los movimientos sociales (Gómez, M., 2006). Este trabajo pretende realizar aportes para avanzar en el conocimiento de los procesos habituales de formación docente relacionados con la construcción ciudadana en contexto de crisis de las instituciones de la modernidad (Dubet, 2004). Para Laclau y Mouffe (1987) la identidad social y la constitución de la hegemonía política transitan un camino común. Durante el siglo XX estos procesos de identidad social tiene lugar en la educación básica y durante el siglo XXI involucra, también, a la escuela media, de aquí el interés de otorgarle relevancia al trabajo con la formación docente de ambos niveles educativos (Friedt, Ramos, Sablich, 2010; Hillert, 2010). Se realizarán aportes que posibiliten instalar debates acerca de las resistencias y condicionamientos presentes en el profesorado para abordar a la ciudadanía como un proceso de adquisición de facultades críticas y formas de lucha social para la práctica (Giroux, 2006; Hillert, 2008; Jaramillo, 2008) y para explicar su configuración histórica desde América, asumiendo un perspectiva descolonial (Quijano, A., 2000) es decir, redefiniéndola como ciudadanía emancipadora.
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En la presente comunicación analizaremos de qué modo los mitos presentes en la geórgica I (Ceres; la Edad de Hierro; Deucalión; el perjurio de Laomedonte) confluyen a articular la noción de labor como la condición para la agricultura. El labor implica la dedicación al trabajo diario del campo (remover la tierra, vallar los campos, marcar el ganado, fabricar y mantener las herramientas, etc), conocer la topografía del cielo y venerar a los dioses para que favorezcan la producción. Tales indicaciones son constitutivas de la parte didáctica del texto y constituyen asimismo parte del labor del poeta, que con esta obra se inserta en el proyecto político económico y agrario de Augusto. Sin embargo, el poema trasciende esta problemática formando parte del proyecto poético de Virgilio.
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Este trabajo muestra los principales hallazgos obtenidos en una corriente investigación de maestría en la que analizamos el concepto de sublimación desde un punto de vista ético, teniendo en cuenta el planteo original del psicoanalisis en la consideración de un sujeto. Así, el concepto de sublimación es esencial para entendermos el movimiento en la clínica psicoanalítica, en su imbricación teoria y práxis. La sublimación nos señala una dimensión de lo singular que, antes de se oponer, se anuda a lo universal. Por qué son valorizados los produtos de la sublimación? En qué ámbito ubicar este aprecio por la obra de arte, por ejemplo? Éstas son unas de las preguntas que nos instigan. De hecho, la cuestión es amplia y tiene su cuna en la clínica, ya que de ahí notamos el movimiento desde una impotencia hacia una imposibilidad. Cuestión con todo un alcance en la cultura, mientras nos enseña la diferencia fundamental que hay entre la fijación involucrada en la idealización y la mobilidade que nos oferece la sublimación, la cual es siempre una deriva y implica creación. Metodológicamente, nuestro trabajo se orienta por la investigación, tal cual se da con frecuencia en psicoanálisis, buscando no apartar los elementos clínicos de la teoría. Además, buscamos analisar el concepto de sublimación, cuestionando sus fundamentos, evidenciando la inconsistencia que lo caracteriza, a fin de le conferir una nueva forma - aunque confrontando los diversos aspectos elegidos en la concepción del término, incluso con otros campos ajenos al psicoanálisis (estética, filosofia) -, mirarlo bajo otra perspectiva.. Así también se constituyo el esfuerzo de Freud, ya que la investigación, en psicoanálisis, implica el empeño del investigador (la teoría adviene de una clínica, punto de origen de nuestro estudio) y, por consecuencia, hay una remodulación en la teorización, la cual refleja el propio movimiento de la clínica. Lo inédito de cada caso de la clínica es así un correlato de lo singular que se muestra en el proceso de sublimación, por el cual la creación de un individuo logra conquistar espacio en el campo del Otro, entablando lazos sociales otros, sin que, por ello, uno se niegue a si propio, su singularidad, o ignore la dimensión de un imposible. Los horizontes a que nos conducen esta investigación nos permíten trazar los aspectos éticos de la experiênciaclínica, en psicoanalisis, y que orientan su práxis. Así, por medio del análisis y del estudio de un concepto en el campo psicoanalítico, logramos dilucidar lo que él refleja en la clínica y, por ende, en la cultura, es decir, donde el sujeto forma lazos sociales. La sublimación señala así algo esencial de la pulsión, otro concepto también fundamental, que representa la posibilidad de entablar lazos sociales otros, de manera que ante lo imposible y lo raro de la experiencia humana algo sea creado. De un punto de vista teórico, nuestra discusión se vuelca en una cuestión estrictamente ética. ¿Qué orienta, pues, nuestras relaciones con lo real, región adonde nos conduce la experiencia psicoanalitica, y, qué posiciones asumimos ante nuestro sufrimiento - una que se adapta a los ideales o otra que crea algo a partir de lo imposible, sin que lo rechaze? El concepto de sublimación señala pues dos aspectos fundamentales de la cuestión ética planteada por el psicoanálisis, en la medida en que ella se aleja de los ideales, que muchas veces se transfiguran en normas e patrones, o se acerca de un rasgo singular sin menoscabar lo general que ello implica. Y, en todas estas direcciones, hay implicaciones y consecuencias que se figuran como teóricas y, en mayor alcance, como políticas y culturales. He aquí el argumento que es el telón de fondo de nuestra investigación
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Temática principal: El presente trabajo se inscribe en un proyecto de investigación que tiene por objetivo general caracterizar las modalidades de la violencia vincular en grupos familiares en situación de pobreza. En este marco, se desarrolla la definición del concepto de violencia que utilizamos en nuestra indagación. Objetivos: -desarrollar el concepto de violencia, desde el corpus teórico psicoanalítico; -establecer los conceptos límites que se presentan para esa definición; -dejar planteados interrogantes sobre el proceso de operacionalización del concepto. Metodología: A nivel metodológico, se realiza un análisis cualitativo de contenido bibliográfico que incluye, entre otras actividades: identificación de fuentes bibliográficas (primarias y secundarias), sistematización de los datos relevados y análisis de los resultados. Resultados Desde el punto de vista etimológico, el vocablo violencia tiene dos acepciones: aquello que se le hace a una cosa para sacarla de su estado, modo o situación natural, mediante el uso de la fuerza; como ejercicio de poder mediante la fuerza, implicando diferencias jerárquicas. Esta doble vertiente semántica se plantea asimismo en el corpus teórico del Psicoanálisis y el Psicoanálisis vincular. El Psicoanálisis se ha ocupado en forma preferencial del problema de la agresión y la agresividad, ligadas a partir de los años 20, al concepto freudiano de pulsión de muerte. La agresividad es conceptualizada como una tendencia dirigida a dañar, a destruir al otro. Actúa tempranamente en el desarrollo del sujeto (previo al accionar de la pulsión sexual) y puede presentarse unida o desunida de la sexualidad. La funcionalidad psíquica de la agresividad estaría en relación a posibilitar la diferenciación, la separación con respecto al otro. Está en íntima relación a la constitución del Yo, por lo que puede quedar ubicada dentro de las problemáticas narcisistas. La violencia constituiría una aberración de la agresividad; supone un 'plus de destructividad', de 'depredación' que la cualifica. Pensándolo como un fenómeno propiamente humano, la violencia supone un accionar que intenta someter al otro por el uso de la fuerza. Desde una perspectiva vincular, la violencia apunta a anular la singularidad del otro, sus límites y autonomía. En el espacio intersubjetivo, la violencia vincular supone el despojo del carácter de ajenidad del otro, intentando tornarlo similar o idéntico al Yo. La violencia punta a anular la otredad, la diferencia del otro que es una característica irreductible de los vínculos humanos. En relación a la crueldad, supone la imposición a un sujeto, de una idea o acto que no está en condiciones de recibir, generando un efecto de destitución subjetiva. Conclusiones: Queda de manifiesto la polisemia y múltiples matices del concepto de violencia. Se resalta, al final del recorrido, la dicotomía inicial que supone la definición etimológica del concepto. Quedan interrogantes por responder, con respecto a la delimitación y operacionalización del concepto de violencia, en los siguientes aspectos: cuál es el límite entre la agresividad y la violencia; revisar si se trata de una diferencia que pueda plantearse a priori, o evaluarse más bien por los efectos; situar la relación entre la violencia y la crueldad; identificar si toda violencia es cruel, y si toda crueldad implica violencia
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Fil: Hernández, Néstor. Universidad Nacional de La Plata. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación; Argentina.
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Es sabido que en la obra de Karl Marx confluyen teoría sociológica y pensamiento político revolucionario. Consideramos que el concepto de ideología es uno de los puntos donde es factible rastrear el cruce entre pensamiento sociológico y crítica del orden social en El Capital. Si bien éste no aparece mencionado explícitamente, el concepto de fetichismo de la mercancía permitiría explicar el carácter ideológico del modo de producción capitalista. El presente trabajo, entonces, se propone indagar sobre una posible definición de ideología a partir de la noción de fetichismo de la mercancía, con el propósito de examinar el potencial que proporciona tal categoría para la crítica del modo de producción capitalista. Para abordar tales objetivos, analizaremos en primer lugar la concepción de la dialéctica presente en la Introducción general a la crítica de la economía política y en los prólogos de El Capital. En segundo lugar, abordaremos la categoría de fetichismo de la mercancía en relación a los fundamentos de la teoría del valor. Para concluir con la indagación del carácter ideológico de la relación capital-trabajo asalariado a partir del análisis del proceso de producción capitalista como unidad del proceso de trabajo y del proceso de valorización
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El contexto ideológico jónico ha sido considerado básico como sustento de la elegía solónica. El presente artículo explora la relación intertextual entre el fr.3 D., llamado Eunomía, de Solón y Odisea. A partir del lenguaje compartido por ambos textos, de la absorción de fórmulas épicas y de conceptos nuevamente definidos se propone explicar el papel admonitorio que Solón adquiere como la expresión de una acción heroica ejecutada en una dimensión política
Resumo:
El objetivo del trabajo se centra en la posibilidad de brindar una definición de cuerpo que sirva al análisis de diversas prácticas corporales. Para ello es preciso considerar dos elementos que circunscriben este esfuerzo de conceptualización; ellos son 1) que no se reduzca a una visión biologicista y organicista del cuerpo y 2) que no se identifique cuerpo con vivencia. En términos positivos podemos indicar que la definición que se espera alcanzar vincula estrechamente al noción de cuerpo con la de sujeto, especialmente con la idea de subjetivación como modo específico en que los organismos biológicos llamados hombres se identifican, implican y comprometen activamente con las prácticas (políticas) que hacen a su modo de vida. El esfuerzo teórico a realizar se inscribe en las referencias conceptuales que brinda la filosofía política contemporánea, especialmente Foucault, Agamben y Nancy, éste último brinda una interpretación del dualismo cartesiano que se ubica en las antípodas de las interpretaciones convencionales, postulando incluso la inexistencia del mismo.