776 resultados para Oficio
Resumo:
Entre 1966 y 1967 un pequeño grupo de jóvenes arquitectos recién titulados en la Facultad de Arquitectura de Florencia escenifican en dos actos programados en las ciudades de Pistoia y Módenala exposición Superarchitettura, con la que sin saberlo inauguran un corto pero intenso periodo de experimentación arquitectónica que convulsionaría Italia durante los 10 años posteriores, dinamitados por multitud de propuestas que darán lugar a la última arquitectura con aspiraciones socio-políticas responsable de un vibrante legado teórico que proclamaba la vuelta a las raíces olvidadas de la profesión y que se mostraba más preocupada por reflexionar sobre sus fundamentos que por perpetuar la práctica de un oficio ahora puesto en crisis. Ambos eventos suponen también el nacimiento simultáneo de Superstudio y Archizoom, dos de los colectivos más influyentes de la arquitectura experimental italiana de estos años, convertidos en protagonistas de un agitado periodo de transición en el que una generación estaba dando paso a la siguiente a través de la sustitución de los principios doctrinarios recibidos de la modernidad por una jugosa incertidumbre desmitificadora ligada a una nueva realidad económica, política y social que marcaría los inicios de la posmodernidad. La experiencia italiana surge aprovechando la efervescencia de un fenómeno que posteriormente algunos críticos etiquetaron como Arquitectura Radical con la intención de unificar el trabajo de un heterogéneo y atomizado grupo de arquitectos fundamentalmente europeos – individualmente comprometidos con el replanteamiento total de la definición y objetivos de la disciplina, al tiempo que participaban en una particular cruzada existencial mediante la que pretendían, si no cambiar el mundo, al menos romper la dinámica estéril de la arquitectura profesional y tecnológica heredada. La presente tesis fomenta la recuperación interesada de este breve momento radical como un ambicioso proyecto de modernización inacabado, pero no solo para analizar las causas de su precipitado final, sino sobre todo para mostrar las razones de su gran éxito internacional, convirtiendo para ello el trabajo de Superstudio, ejemplo paradigmático de la actitud crítica compartida por el resto de operadores contemporáneos, en el catalizador adecuado a partir del cual interpretar y extrapolar su legado con el fin de narrar el cambio trascendental que este episodio supuso para la práctica arquitectónica, alejándola del diseño de edificios y centrándola en la adopción y aplicación de multitud de actividades no tectónicas en un intento por separarse de lo que era percibido como una disciplina corrupta. A lo largo de su corta carrera en común, los seis miembros de Superstudio sustituyeron la construcción convencional por la explotación intensiva de medios alternativos desde el diseño de mobiliario e iluminación y algunos experimentos en torno a la “arquitectura eléctrica”, hasta la expansión mediática de su trabajo a través de revistas, películas, exposiciones y conferencias contribuyendo así a una provocativa destrucción y posterior expansión de los límites dentro de los que hasta ese momento se había mantenido cómodamente instalada la arquitectura. Esta investigación descubre la trascendencia de considerar aquello que ocupó gran parte de la actividad de Superstudio y de sus colegas radicales (muebles, revistas, instalaciones, películas, labor teórica y docente, etc.) como nuevas formas de arquitectura con las que construir un nuevo lenguaje crítico, en un intento por contribuir a renovar y reforzar la relevancia y responsabilidad social de una profesión llamada a expandirse más allá de lo construido para nutrirse e interactuar con todos los ámbitos de nuestro entorno diario. ABSTRACT Between 1966 and 1967 a small group of newly qualified young architects from the Faculty of Architecture of Florence staged in two events planned in the cities of Pistoia and Modena the Superarchitettura exhibition, with which unwittingly inaugurated a short but intense period of architectural experimentation that convulse Italy during the following 10 years, blown up by a multitude of proposals that will result in the latest architecture with socio political aspirations responsible for a vibrant theoretical legacy proclaiming a return to forgotten roots of the profession and that was more concerned with reflect on its fundamentals than perpetuate the practice of a profession now put into crisis. Both events also involve the simultaneous birth of Superstudio and Archizoom, two of the most influential groups of Italian experimental architecture of these years, turned into protagonists of an hectic period of transition in which a generation was giving way to the next through replacing the received doctrinal principles of modernity by a juicy demystifying uncertainty linked to a new reality economic, political and social that would mark the beginning of postmodernism. The Italian experience arises taking advantage of the commotion of a phenomenon that later some critics labeled as Radical Architecture with the intention of unifying the work of a diverse and fragmented group of architects mainly European individually committed to the total rethinking of the definition and objectives of the discipline, while participating in a particular existential crusade with which they sought to, if not change the world, at least break out of the sterile dynamic of professional and technological architecture inherited. This doctoral thesis promotes an interested recovery of in this short radical time as an ambitious modernization project unfinished, but not only to analyze the causes of its precipitous end, but above all to show the reasons for it’s international success, turning the work of Superstudio, a paradigmatic example of the critical attitude shared by the rest of contemporary operators, into the suitable catalyst from which to interpret and extrapolate it’s legacy in order to recount the significant change that this episode marked for architectural practice, moving it away from building and focusing it on the adoption and implementation of many nonLtectonic activities in an attempt to separate from what was perceived as a corrupt discipline. Throughout their short career in common, the six members of Superstudio replaced conventional construction by intensive exploitation of alternative means L from furniture and lighting design and some experiments around the "electric architecture", to the media expansion of their work through magazines, films, exhibitions and lectures thus contributing to a provocative destruction and subsequent expansion of the limits within which architecture had remained ensconced until then. This dissertation finds out the importance of considering what occupied much of the activity of Superstudio and their radical colleagues (furniture, magazines, installations, films, theoretical and educational work, etc.) as new forms of architecture that build a new critical language, in an attempt to help renew and reinforce the relevance and social responsibility of a profession call to expand beyond the built to nourish and interact with all areas of our everyday environment.
Resumo:
El siglo XIX fue un siglo dedicado a los grandes edificios públicos. Los teatros, las academias, los museos. Sin embargo la arquitectura durante el siglo XX se dedicará al estudio de la casa. Todos los usos y tipologías se verán fuertemente revisados pero el núcleo de todos los esfuerzos y verdadero inicio de la arquitectura moderna será la vivienda. A partir de ella todos los preceptos modernos se irán aplicando a los distintos programas. Nikolaus Pevsner señala a William Morris como el primer arquitecto moderno porque precisamente entendió que un arte verdaderamente social, en consonancia con su tiempo y la sociedad a la que sirve, ha de ocuparse de aquello que preocupe a la gente. Con la nueva situación de la vivienda en el centro de las motivaciones disciplinares el mueble adopta un nuevo protagonismo. En un momento avanzado de su carrera Marcel Breuer observa entre curioso e irónico cómo el mueble moderno había sido promocionado paradójicamente no por los diseñadores de muebles sino por los arquitectos1. La respuesta la da Le Corbusier en una de sus conferencias de 1931 recogida en Precisiones 2 cuando señala la reformulación del mobiliario como el "nudo gordiano" de cuya resolución pendía la renovación de la planta moderna. El Movimiento Moderno se había visto obligado a atacar este tema para poder avanzar en sus propuestas domésticas. El Movimiento Moderno se propuso solucionar los problemas de la vivienda y de una Europa en reconstrucción pero se exigía además ser capaz de aportar una visión propositiva de la vida moderna. No se trataba únicamente de resolver los problemas ya existentes sino que además había la necesidad autoimpuesta de anticipar la domesticidad del futuro. Para ello sus viviendas al completo, mueble e inmueble, debían de presentarse bajo esa nueva imagen. El manifiesto fundacional de la Deustcher Werkbund extendía el radio de acción del nuevo arquitecto desde la construcción de las ciudades a los cojines del sofá. Este mobiliario tenía la compleja misión de condensar sintéticamente todos esos ideales que la modernidad había traído consigo: abstracción, higiene, fascinación maquínica, confianza positivista en la ciencia o la expresión material optimizada. Objetos de la vida moderna, en palabras de Le Corbusier, susceptibles de suscitar un estado de vida moderno. Pocas sillas en la historia del diseño habrán acarreado tanta polémica y tanta disputa por su autoría como la sillas voladas de tubo de acero en sus diferentes versiones. Para entenderlo situémonos en el año 1927 a las puertas de la exposición "Die Wohnung" ("La vivienda") organizada por los maestros de la Bauhaus y dirigida por Mies van der Rohe en la ladera Weissenhof de Stuttgart. Muchos nombres célebres de la arquitectura mostraron en esa ocasión su personal propuesta para la vivienda moderna y los objetos que la habitan. Entre ellos los muebles con tubo de acero fueron una presencia constante en la exposición pero hubo una pieza que destacó sobre todas las demás por su novedad y audacia. La pieza en cuestión era el modelo de silla volada, esto es, sin apoyos posteriores y cuya rigidez estaba conferida al esfuerzo solidario de la estructura continua de tubo de acero y que terminaría por convertirse en el cruce de caminos de tres figuras de la disciplina arquitectónica: Marcel Breuer, Mies van der Rohe y Mart Stam. Cada uno de ellos desarrolló su propio modelo de silla volada en sus versiones MR por parte de Mies, L&C Arnold de Stam y el posterior modelo BR 33 de Marcel Breuer. Los tres, en algún momento de su vida reclamaron de uno u otro modo su autoría como objetos que les pertenecían intelectualmente. Estas sillas se convirtieron en la expresión máxima de uno de los ansiados anhelos de la modernidad, la propia materialidad del acero, en su versión optimizada, era la que había derivado en una forma completamente nueva de un objeto cotidiano y cuyo tipo estaba ya totalmente asumido. Los nuevos materiales y las nuevas formas de hacer habían irrumpido hasta en los utensilios domésticos, y habían sido capaces de reformularlos. El punto de partida para esta investigación es precisamente esa coincidencia de tres figuras de la arquitectura moderna, los tres de formación artesanal, en un mismo modelo de silla y en una misma fecha. Tres arquitectos que se habían encargado de asegurar que el movimiento moderno no reconocía problemas formales sino solamente de construcción, iban a coincidir en el mismo tiempo y lugar, precisamente en una misma forma, como si tal coincidencia hubiera sido producto de una voluntad de época. Sin embargo el interés de este estudio no radica en una indagación sobre la autoría sino sobre cómo un mismo objeto resulta ser propositivo e interesante en campos muy diversos y la forma en que cada uno lo hace suyo incorporándolo a su propia investigación proyectual. La silla, más allá de ser un objeto de diseño exclusivamente, trasciende su propia escala para situarse inmersa en un proceso de búsqueda y exploración a nivel conceptual, formal, constructivo y estructural en la arquitectura cada uno de ellos. En un momento en que el oficio del arquitecto está siendo intensamente redefinido considero especialmente pertinente esta investigación, que en definitiva versa sobre la forma distintiva en que el pensamiento arquitectónico es capaz de proyectarse sobre cualquier disciplina para reformularla. ABSTRACT The nineteenth century was a century dedicated to the great public buildings; theaters, schools or museums. However the architecture in the twentieth century was devoted to the study of housing. All uses and typologies were heavily revised but the focus of all efforts and true beginning of modern architecture was housing. From these beginnings all modern precepts were applied to the various programs. Nikolaus Pevsner points to William Morris as the first modern architect precisely because he understood that a truly social art in line with its time and the society it serves must deal with social concerns at that time. With the new housing situation at the center of disciplinary concerns furniture took on a new prominence. At an advanced stage of his career Marcel Breuer observed partly with curiosity, partly with irony how modern furniture had been promoted not by furniture designers but by architects. The answer is given by Le Corbusier in one of his lectures of 1931 collected in Precisions when he pointed the reformulation of furniture as the "Gordian knot" for the renewal of modern plan resolution. Modernism had been forced to confront this issue in order to advance their domestic approaches. Modernism not only put forward a solution to the problems of housing and a Europe under reconstruction but is also needed to be able to contribute to an exciting vision of modern life. Not only did solve existing problems but also it had the self-imposed necessity of anticipating future domesticity and to do their houses full, movable and immovable, they should be submitted under this new image. The founding manifesto of the Deutsche Werkbund extended the scope of the new architect from building cities to the couch cushions. This furniture had the complex mission of synthetically condensing all the ideals of modernity had brought with it: abstraction, hygiene, mechanization, positivist confidence in science or material expression. Objects of modern life, in words of Le Corbusier, were likely to give rise a state of modern life. Few chairs in design history have resulted in so much controversy and so much dispute over their invention as the various versions of cantilevered tubular steel chairs. To understand this let us place ourselves in 1927 at the gates of the exhibition "Die Wohnung" ("Housing") organized by the teachers of the Bauhaus and directed by Mies van der Rohe in Stuttgart Weissenhoflung. Many famous names in architecture at that time showed their personal proposals for modern housing and the objects that inhabit them. Amongst these objects, the steel tube furniture was a constant presence at the exhibition but there was a piece so audacious that it stood out from all the others. This piece in question was the cantilever model chair, that is, which had no further rear support and whose rigidity was attributed to the solidity of its continues structure of steel tube. This piece would eventually become the crossroads of three very different personalities: Mart Stam, Marcel Breuer and Mies van der Rohe. Each of them developed their own model of cantilevered chair in different versions; The MR model developed by Mies van der Rohe, the L&C by Arnold Stam and a later model BR 33 by Marcel Breuer, and the three, at some point in their lives demanded the authorship of its invention as objects that belonged to them intellectually. These chairs epitomized one of the coveted objects of modernity, steel material in its optimized version, was what had led to a completely new form of an everyday object whose this type was fully adopted on board in design. New materials and production methods had burst into world of household objects, and had been able to reformulate their design. The bold design then became a dark object of controversy. The starting point for this doctoral thesis is the concurrent invention of the same model of chair by three different figures of modern architecture. These three architects, who were responsible for ensuring that the modern movement considered construction rather than form as the main design consideration, were working in the same place and at the same point in time. It was almost as if these three architects were shaped by the culture of the time (Zeitgeist). However the focus of this study lies not in an investigation of responsibility of ownership but in the investigation fo how the same object can turn out to be purposeful and interesting in many different fields and the way in which each researcher makes it his own by developing his own project research. 1927, the year of their meeting, was a initiatory year in the career of our players. The chair, beyond being only a design object transcended its own scale and became immersed in a process of research and development on a conceptual, formal, structural and constructive level in the architectural approach of each of the architects. At a time when the role of the architect is being redefined intensely I consider this research, which ultimately concerns the distinctive way the architectural thought can be projected onto and reformulate any discipline, to be particularly relevant.
Resumo:
Italy: the new domestic landscape, la ambiciosa exposición que en 1972 tuvo lugar en el MoMA, supone la consagración y a la vez escenifica la muerte de lo que algunos críticos acababan de catalogar como Arquitectura Radical, término con el que intentaban unificar el trabajo de un heterogéneo y atomizado grupo de arquitectos, principalmente italianos, comprometidos con el replanteamiento total de la definición y objetivos de la disciplina. Se ponía fin así a un corto pero intenso periodo dinamitado por multitud de propuestas experimentales durante el que se generó la última arquitectura con aspiraciones socio-políticas, responsable de un vibrante legado teórico que proclamaba la vuelta a las raíces olvidadas de la profesión y que se mostraba más preocupada por reflexionar sobre sus fundamentos que por perpetuar la práctica de un oficio puesto en crisis. La simbiosis entre el trabajo de Superstudio y Archizoom, dos de los grupos radicales más activos y cuya indisolubilidad hemos querido subrayar acuñando el término ‘superzoom’, articula esta breve revisión a modo de flashback del fenómeno radical italiano, capaz de demostrar en menos de diez años que el ejercicio de la arquitectura y su aplicación docente podían ser ética y políticamente relevantes, abriendo una senda crítica que, en el momento actual de nuestra contradictoria profesión, sería recomendable volver a transitar.
Resumo:
El padre Vicente tosca, arquitecto, filósofo, matemático, y astrónomo, Y comienza su Tratado de Arquitectura (que forma parte de su Compendio matemático, 9 vols. 1701-1715) abordando el tema de la traza o proyecto de bóvedas: Lo más sutil y primoroso de la Arquitectura... es la construcción de todo género de arcos y bóvedas, cortando sus piedras, y ajustándolas con tal artificio, que la misma gravedad y peso que las había de precipitar hácia la tierra, las mantenga constantes en el ayre, sustentándose las unas á las otras en virtud de la mutua complicación que las enlaza, con lo que cierran por arriba las fábricas con toda seguridad y firmeza. El equilibrio se alcanza a través de la geometría y, de este modo es posible la construcción de edificios de fábrica seguros. Las antiguas reglas tradicionales para el proyecto de bóvedas y estribos de fábrica tienen un carácter geométrico, ya que establecen ciertas relaciones entre las dimensiones de los elementos estructurales. Regulan, por ejemplo, que el grosor de un estribo debe ser una cierta fracción entera de la luz de las bóvedas. De hecho en la afirmación del padre Tosca encontramos la esencia misma del proyecto de estructuras de fábrica (Huerta 2004). Sin embargo para nosotros, arquitectos e ingenieros del siglo XXI, todo esto nos parece demasiado ingenuo, la demostración de la ignorancia de los antiguos maestros; de hecho, hasta el siglo XVIII no se desarrolló una teoría científica de las estructuras, basada en la Resistencia de Materiales y las leyes de la Mecánica (Huerta 1996). De cualquier forma estos *ignorantes+ maestros constructores levantaron el Pantheon de Roma, Santa Sofía y las catedrales góticas. Por tanto, puede que, después de todo, el enfoque geométrico tradicional no esté demasiado equivocado. Es posible que los antiguos maestros tuvieran una teoría, distinta de nuestra teoría científica, pero basada en un profundo conocimiento de la naturaleza y comportamiento de las estructuras de fábrica. Si fuera así, sería interesante conocer algo sobre esta teoría, la cual, si juzgamos por los resultados, era extraordinaria. Sin embargo, aunque podemos ampliar nuestros conocimientos, no podemos sustraernos a los que ya tenemos. Estamos forzados a abordar el tema del análisis de arcos y bóvedas desde un enfoque científico, dentro del marco de la teoría de estructuras actual. Antes de proseguir se deben hacer dos observaciones. La primera se refiere al objetivo de la Teoría de Estructuras. El objetivo de la teoría estructural es el proyecto de construcciones seguras o el análisis de la seguridad de las que ya existen. Es una ciencia aplicada no una ciencia pura. Como Rankine (1858) señaló, si la pregunta que se hace el científico es *qué quiero saber+, la del arquitecto o ingeniero es *qué quiero hacer+. Todas las consideraciones teóricas están condicionadas por la necesidad de una respuesta a un problema sin demora. La segunda observación hace referencia a nuestra propia ignorancia respecto al tema. Ya no se construyen bóvedas y toda la tradición de la construcción en fábrica se ha perdido en el mundo occidental. Esta parte de la arquitectura, que fue considerada *lo más sutil y primoroso+, nos es ajena. La mayor parte de los arquitectos e ingenieros nunca han visto construir una sencilla bóveda. Carecemos del oficio y experiencia del antiguo constructor, que seleccionaba la piedra, dibujaba las plantillas para cortarla, trazaba la cimbra, dirigía el proceso de construcción y, finalmente, supervisaba el descimbrado. Rodrigo Gil de Hontañón (Tratado de arquitectura, ca. 1540, copiado en García, 1681) después de describir la construcción de una bóveda gótica de crucería advierte que: . . . estas cosas, podran ser difiçiles de comprehender faltando en quien las procura la experiencia, la practi¬ca, la profesion de la canteria, y la execuçion, o el aberse allado presente a algunos çierres de cruçeria, para haçerse capaz en el asiento de ella. Esta es precisamente la situación de cualquier arquitecto o ingeniero de la actualidad. A partir de aquí trataremos de mostrar que los enfoques tradicional y moderno del cálculo de estructuras de fábrica llevan a la misma conclusión fundamental: la absoluta importancia de la geometría. Se demostrará que la moderna teoría del Análisis Límite de las estructuras de Fábrica, que ha sido desarrollada por el profesor Heyman, es la herramienta más apropiada para comprender y analizar las construcciones de fábrica. Esta teoría conduce al *enfoque del equilibrio+; el calculista necesita sólo estudiar posible estados de equilibrio con la fábrica trabajando a compresión. La existencia de estos posibles estados de equilibrio depende de la geometría. Una construcción segura es una construcción en equilibrio: la teoría moderna conduce a las mismas disposiciones geométricas que la tradicional. No podía ser de otro modo, los espectaculares logros de los antiguos arquitectos no pudieron ser fruto de la casualidad. Se harán numerosas referencias históricas con la intención de dejar claro que existe una antigua tradición en el cálculo científico de las estructuras de fábrica según el enfoque del equilibrio. Tenemos mucho que aprender de los arquitectos e ingenieros de la antigüedad. Pudieron no tener una profunda comprensión de la teoría, pero poseían los conocimientos esenciales, ésos que proporciona la reflexión sobre la práctica. Ars sine scientia nihil est, la práctica no es nada sin la teoría, pero la teoría sin la práctica es simplemente peligrosa. La experiencia, en nuestro caso, debemos buscarla en los edificios construidos y en lo que podemos extraer de la lectura crítica de los antiguos tratados de arquitectura e ingeniería.
Resumo:
Contiene la traducción de los siguientes privilegios: I. Traslado de la sentencia que obtuvo el oficio de tejedores de seda contra los arrendadores del derecho de mercadería de esta ciudad, sobre no pagar derecho de imposición.13-02-1484. Fol 2 v-10. II. Indulto concedido por Carlos I al oficio de veleros y confirmación de privilegios concedidos por los Reyes de Aragón. 20-08-1524. Fol 10-21. III. Privilegio del Rey Felipe II en confirmación de otro del Rey D. Juan II de Aragón dado en Monzón el 20 de febrero de 1470, sobre las Ordenanzas del gremio de veleros. 22-03-1564. IV. Privilegio del rey Felipe III en confirmación de los concedidos anteriormente al oficio de tejedores de sedas y velos por sus antecesores. 18-02-1604. Fol 31 v.-44. V. Privilegio concedido por el rey Felipe IV en confirmación de los concedidos al oficio de tejedores de seda y velos por sus antecesores. 12-04-1626. Fol 44-60.
Resumo:
En la gran metrópolis de Madrid hay espacios que han sido tomados por diferentes artistas para expresar su sentir social a través del pincel y la pintura. Estos artistas plasman sus creaciones en murales religiosos, informativos, publicitarios, de expresión social, culturales y educativos, espontáneos o sin ninguna temática específica. Sea cual sea el interés que mueve al artista para exponer sus creaciones, están ahí y forman parte del patrimonio artístico de Madrid. Esos murales representan el sentir individual de sus creadores, definen un estilo de vida y la expresión grupal de un segmento de los habitantes de la ciudad. Asimismo, promueven productos, bienes y servicios de toda índole para ofertarlos con estética y funcionalismo a un público determinado. Muchos de estos murales no pasan desapercibidos, pues su gran contenido visual, con sus gamas cromáticas, invita a los transeúntes a observar la composición y estructura que lo conforman. Por ello es de gran importancia analizar con la mayor objetividad posible todo lo relativo a esta expresión del arte en Madrid, escudriñando el porqué de esta manifestación artística que seduce con su colorido e inspira a los espectadores a involucrarse en estas creaciones de la plástica contemporánea, ya que casi siempre su contenido visual va más allá de lo que la imaginación puede proyectar y de lo que la vista puede observar. Estos murales hablan, cuentan historias e invitan a los espectadores a formar parte de los deseos ocultos de sus creadores y a rememorar situaciones olvidadas o ignoradas por la sociedad. Los murales de Madrid introducen en su contenido el lenguaje popular sencillo y cotidiano, pero al mismo tiempo contiene expresiones iconográficas insertadas a propósito en líneas ocultas. Es precisamente esa realidad el objeto de estudio de esta tesis final, con la cual se pretende interpretar el conjunto de símbolos y signos utilizados por los artistas en su proceso creativo, al tiempo de descubrir los mensajes que se transmiten o quieren transmitir a través la policromía o monocromía de sus obras de arte. También se busca conocer la percepción de los transeúntes con respecto a los murales de calles, iglesias, museos y parques. Algunos podrían calificarlos como una expresión vandálica y rebelde de jóvenes disidentes al sistema, pero que en ocasiones el espectador lo percibe como la forma decorativa que complementa el vacio de los espacios. En el caso de los murales religiosos, estos son motivo para renovar la fe, para temer y amar a líderes y entidades espirituales. Lo que el espectador percibe de las intervenciones hechas a las paredes y los espacios públicos, es nuestra tarea descubrirlo y para ello cuestionaremos al transeúnte que los observa o que simplemente los ignora por desinterés. El arte urbano está presente en todas las sociedades postmodernas como manifestación artística de la industria cultural o fruto de la espontaneidad e inmediatez representada por artistas de formación cultural común, con niveles sociales y culturales medios y bajos. Estos hacen uso de ese tipo de recurso pictórico para expresar sus divergencias con el sistema a través de murales improvisados y grafitis de todo tipo, o simplemente para exhibir su talento a través del colorido propio de estos tiempos. Muchos de esos murales lucen bastantes agradables, pues con la práctica los muralistas han alcanzado un perfeccionamiento aceptable, aunque en su mayoría hacen uso del embadurnamiento de matices y aplicaciones cromáticas exageradas en paredes y callejones de la urbe. Por otro lado, están los que hacen de esta expresión un oficio o modus vivendi, con un nivel formativo superior a los anteriores, pues su rol es embellecer, adornar e informar, procediendo a intervenir espacios para lograr entornos agradables a la vista de los transeúntes. Muchos de los murales de Madrid poseen significados que van más allá de lo que se observa a simple vista, pues algunos de estos son expresión de la actitud egocéntrica de los artistas, quienes denuncian o informan con espontaneidad sobre un acontecimiento pasado, presente o futuro. No existe un patrón reglamentario que delimite o trace pautas a los expositores de esta manifestación artística. Sin embargo, no es lo mismo que un artista del pincel intervenga un espacio para expresar e informar sobre hechos relevantes desde su punto de vista, a que este mismo artista sea contratado para realizar un trabajo de propaganda publicitaria. No es igual que un desorientado social delimite su territorio, haciendo uso de la pintura en espray para delimitar fronteras vandálicas, ensuciando paredes, a que este mismo personaje introduzca elementos decorativos en su arte, logrando cierto nivel estético en la combinación cromática. Mas el muralista de profesión puede introducir a su trabajo la aplicación de simetría en composiciones equilibradas, logrando niveles estéticos calificados y bien aceptados por el espectador, aun siendo un trabajo de contenido social o un encargo para promover productos, bienes y servicios. Cualquiera que sea el objetivo de estos artistas, muchos de los murales callejeros no pasan desapercibidos por los ciudadanos, ya sea por las molestias que causa el ruido visual de los colores o por la estética con que plasman las imágenes que componen esta expresión. El propósito central de esta investigación es descubrir todos los elementos implicados en la realización de un mural, su discurso visual, el conjunto iconográfico traducido en las imágenes que lo componen y al mismo tiempo cómo son percibidos por los espectadores.
Resumo:
La Inquisición española siempre ha sido un tema atractivo y polémico como pocos en la Historia de España. La bibliografía existente sobre ella es ingente, al igual que variados son los enfoques con los que investigadores y curiosos se han acercado a ella. Son muchos los temas sobre su historia abordados por los historiadores, tendiendo en ciertos casos a la repetición y la sobresaturación en algunos de ellos. Las víctimas, la tortura, el procedimiento..., son conceptos recurrentes, mientras que otros, también fundamentales para el conocimiento de la institución, han permanecido ignorados sin que se sepa muy bien la razón. Varias de estas cuestiones tienen que ver con el funcionamiento interno de los tribunales de distrito y, más en concreto, con su gestión administrativa. La presente tesis, que se adscribe a una nueva corriente de investigación, la Diplomática inquisitorial, tratará de paliar, en la medida de lo posible, ese vacío historiográfico. El primer objetivo será, por tanto, dar a conocer los principales documentos escriturados en los tribunales de distrito del Santo Oficio durante el desarrollo de sus funciones, lo que se traducirá en un amplio espectro temático. El siguiente gran objetivo no será otro que el de tratar de profundizar en la figura de los secretarios de estos tribunales. Para ello se expondrán sus categorías, funciones, formas de acceder al oficio, remuneraciones, etc. Se intentará trazar un perfil lo más completo posible de ellos en tanto que responsables de buena parte de la gestión administrativa del tribunal. Habiendo estudiado la documentación y a quienes la confeccionaban, será necesario también analizar la importancia de los archivos inquisitoriales en la mencionada gestión, de manera que se indagará acerca de su historia, funciones, organización...
Resumo:
Esta investigación doctoral versa sobre el dorado y los acabados del mobiliario y su propuesta de análisis responden al interés de profundizar en la historia material de este tipo de producción artística. La escasez de estudios específicos sobre las características, significado y evolución de ambas técnicas en el mobiliario constituye uno de los motivos que nos ha impulsado a abordar esta tesis. Con ella se pretende, además, confrontar en las fuentes históricas una serie de lugares comunes sobre estas técnicas, difundidas tanto por los propios artesanos del oficio como por diferentes tipos de publicaciones. El objetivo general de esta investigación ha consistido en la descripción de la evolución tecnológica del dorado y los acabados en el mobiliario europeo desde la época medieval hasta finales del siglo XIX, momento en que se afianza su fabricación industrial. Se apuntan además un conjunto de antecedentes históricos referidos a Egipto y a la Antigüedad clásica, por considerarlos imprescindibles para la mejor comprensión del desarrollo de ambas técnicas. Para efectuar esta tarea, aunque nos centramos en España, hemos convenido incluir referencias a Inglaterra, Francia e Italia, por ser los países donde la producción bibliográfica, tanto de técnicas artísticas en general como de dorados y acabados, es notablemente mayor. Del mismo modo, representan en las distintas épocas en estudio el lugar de origen de gran parte de las innovaciones estilísticas y tecnológicas relativas al ámbito del mobiliario. Si bien con este estudio no se ha pretendido agotar la materia de análisis, se ha reconstruido una panorámica general que puede servir de punto de partida para futuras investigaciones más concretas. Entre los objetivos específicos de este estudio destacan, en primer lugar, el propósito de verificar la aplicación en la práctica de los métodos y materiales recogidos en las fuentes literarias para la ejecución de los acabados y el dorado. En segundo lugar, probar la validez de un sistema de estudio que aúne investigación histórica y científica para conocer el mobiliario del pasado. En tercer lugar, proporcionar una bibliografía lo más exhaustiva posible sobre ambas técnicas. Por último, contribuir a poner en valor estas técnicas del mobiliario con el propósito de transmitir la necesidad de su adecuada conservación...
Resumo:
La formación de los arquitectos atiende, o pretende hacerlo, tanto a la componente técnica y científica de la profesión como a la componente creativa o, si se desea, artística. Pero sea cual fuere la proporción en que ambas se dan cita, existe una realidad previa que los actuales planes de estudios de arquitectura eluden: es la existencia o no de la vocación de arquitecto unida a las aptitutes que el aspirante a estudiante de arquitectura debería reunir. Para profundizar en esta cuestión, que es básica y principal no sólo para dirimir con conocimiento de causa aquello que se quiere estudiar sino también y además para conocerse a uno mismo, se propone que los planes de estudio de arquitecto contemplen un tiempo anterior al ingreso en las Escuelas en el que el alumno viaje y acuse recibo de la arquitectura de calidad que en su periplo descubra, conozca y reconozca. Esta especie de viaje iniciático le será útil no sólo para acreditarse como persona dotada y sensible para el oficio de arquitecto sino también y además para cultivarse y salir al encuentro de otras realidades enriquecedoras y distintas de las que hasta el momento han conformado su mundo y su vida.
Resumo:
En estos Paseos de Arquitectura, se invita al lector a recorrer Albacete, reconociendo y admirando sus mejores edificios, dignos algunos de una gran Ciudad. Hubo más, desde luego. Deplorar, sin embargo, su demolición no es el propósito de este libro. Los que permanecen son glorias suficientes para dar testimonio de una Arquitectura espléndida y del talento de unos arquitectos (Ramón Casas Massó, Francisco Manuel Martínez Villena, Daniel Rubio, Julio Carrilero, Miguel Ortiz e Iribas, Buenaventura Ferrando Castells y otros) que, en su día, creyeron en esta Ciudad y la adornaron con las mejores galas de su oficio, adelantándose incluso a su desarrollo urbano. Como sucede en empresas de empuje reciente, los emblemas se anticiparon a las fábricas. Los itinerarios que trazan sus trece capítulos siguen el hilo de la historia, sin someterse completamente a ella. Arquitectos y lugares nos distraerán a veces del estricto rigor cronológico. Pero es al lector curioso a quien concierne en definitiva organizar sus itinerarios propios, accediendo al libro por donde más le convenga y recorriéndolo, de corrido o a trechos, como a la Ciudad que describe, a su libre arbitrio. Acaso descubra (y sería la mejor alabanza de lo escrito) presencias y detalles de Arquitectura, cuya familiaridad hace que nos pasen desapercibidos y que pueden, no obstante, sorprendernos todavía por su nobleza y hermosura. El aprecio de arquitecturas que a diario nos rodean puede llegar a sernos tarea en verdad amena y gustosa.
Resumo:
Incluye cuadros estadísticos.
Resumo:
Mode of access: Internet.