La publicidad de lo íntimo. El Epistolario Sentimental de la revista Para Ti (1924-1933)

Para Ti, el semanario femenino de Editorial Atlántida apareció en el mercado en 1922 como una revista de servicios multipropósitos. El presente artículo se propone estudiar el Epistolario Sentimental, columna que intentaba dar respuesta a los conflictos del corazón. Esta sección constituyó un lugar para hablar de temas que en el resto de la revista no se trataban. Así, la sexualidad, la sensualidad, los deseos y los conflictos familiares ingresaron en el mundo de Para Ti y de su público a través de un canal marginal. En este sentido, el Epistolario Sentimental constituye un espacio privilegiado para analizar tensiones y cambios en las costumbres y la moral

Autosuperación del Hombre

Según Nietzsche, a partir de la Revolución Francesa tenemos que estar preparados para 'conmociones fundamentales'; desde entonces se producen acontecimientos que anuncian modificaciones infra y superestructurales para el próximo milenio, con lo cual, el orden social se ajustará al rumbo de las ?nuevas ideas?. En la actualidad, los triunfos y logros de la civilización ponen en peligro el desarrollo mismo de la cultura; son tiempos de procesos políticos extraordinarios o en otras palabras, de grandes luchas por el dominio de la tierra. Es así que se aproxima el 'ocaso de los ídolos', es decir, la ruina de las verdades antiguas pues casi todo lo que hasta el presente se llama verdad es sólo mentira y, cuando la nueva realidad se enfrente a las fabulaciones milenarias, nuestra cosmovisión sufrirá terribles sacudidas; las guerras serán inevitables y todas las instituciones basadas en el engaño y la ilusión caerán ante el asombro de los sobrevivientes. Nietzsche inicia la desacralización o 'desenmascaramiento' de las verdades eternas y la transmutación de todos los valores que son, en definitiva, procesos ineluctables. Asimismo, no hay fenómenos morales sino una 'interpretación moral de los fenómenos' o, en todo caso, una falsa interpretación. Y la moral no es otra cosa que una coacción prolongada. En la medida en que la Humanidad se aleja de la fe, más se acerca a la Ciencia, porque mientras la primera significa no querer saber qué es la verdad, la segunda nos asemeja a Dios. Según Nietzsche, estamos en ese camino. Día tras día el Hombre se perfecciona mediante la investigación de la Naturaleza; forma un cuerpo físico, mental y espiritual cada vez más enaltecido, realiza experimentos para mejorar la nutrición, el modo de vivir, la manera de interpretar los fenómenos de la Naturaleza y la expansión de la conciencia; pero en última instancia, no se trata del Hombre, pues éste tiene que ser superado. En consecuencia con lo dicho, el propósito del presente trabajo consiste en brindar una interpretación de la propuesta nietzscheana de 'Autosuperación del Hombre' en relación con los diferentes períodos de la vida intelectual de Nietzsche; la misma se inscribe en el marco de una teoría política contraria a las doctrinas antes mencionadas: la filosofía de la historia hegeliana, el socialismo, el nacionalismo, el anarquismo, la democracia y el cristianismo

Cáscaras vacías, un agujero en el orden del ser : Espectralidad y política en la literatura de Juan José Saer

La violencia como condición de posibilidad de la literatura es una idea esbozada por Saer. Su planteamiento nos conduce a reflexionar sobre cómo se configura la relación entre la dimensión política y social y el mundo específico de la escritura. Si se piensa su propia literatura a partir de lo que ha denominado "moral del fracaso" en el Quijote, podríamos decir, retomando a Julio Premat, que sus personajes habitan en una situación de duelo en donde el universo moral, las filiaciones familiares y políticas se encuentran profundamente resquebrajadas. Hay un sentimiento de pérdida y esto conlleva el acecho incesante de los fantasmas y las formas diversas de expurgarlos en una puja dentro del orden de la representación simbólica

Las transgresiones sexuales de Clitofonte : Seducción y adulterio

El protagonista de la novela de Aquiles Tacio Leucipa y Clitofonte incurre en dos tipos de transgresiones de la moral sexual: seducción de una joven virgen y adulterio. Analizaremos aquí el modo en que ambas faltas aparecen representadas en la novela, su definición, las reacciones sociales ante ellas y las penas que pueden aplicárseles, y compararemos esa representación con las caracterizaciones de estos delitos en las leyes griegas y romanas que interactuaban en el complejo panorama cultural del período imperial. Postulamos que este análisis puede aportar datos que contribuyan a la comprensión de la historia social y de los códigos morales y legales que delimitaban las relaciones lícitas e ilícitas entre los sexos, pues a pesar de que la ficción novelesca no refleja en forma directa la realidad histórica, afloran en ella elementos propios del contexto socio-cultural en que autor y público están inmersos

Ser un trabajador estatal : Sentidos del trabajo, moralidades y acción colectiva de trabajadores de la salud pública

Los sistemas de auto-clasificación que enuncian los trabajadores del Hospital Castro Rendón de Neuquén son múltiples y se ponen en juego en diversos contextos, operando como categorías con las que se definen a sí mismos y a los otros. A partir de una estrategia metodológica cualitativa basada en la realización de observaciones participantes y entrevistas en profundidad, en este artículo se analiza cómo se pone en juego la categoría de 'trabajador estatal' en tanto forma de auto-adscripción en el trabajo cotidiano y durante los momentos de huelga. Los sentidos asociados al trabajo son centrales para comprender la lógica de acción de los actores, ya que sirven de sustento de una comunidad moral y profesional de trabajadores que se opone a los 'funcionarios' dentro de las estructuras del Estado provincial. A su vez ello permite mostrar la lógica en que se manifiestan las disputas en los procesos de gestión de las políticas de salud pública neuquina.

Ronald Dworkin y los delitos sexuales : De la filosofía del derecho a la historia del derecho

El presente trabajo propone realizar un análisis interdisciplinario histórico-iufilosófico y de derecho tomando como eje el caso especial de los delitos contra la honestidad (actualmente delitos contra la integridad sexual) a la luz de cuatro aspectos de la teoría dworkiniana: el uso de la jurisprudencia y el precedente para resolver problemas jurídicos, el lugar de la moralidad en el derecho -especialmente en el argentino-, el concepto de "caso difícil" y el lugar del juez en su resolución. En este punto, pretendo mostrar cómo el objeto histórico se relaciona estrechamente con los desarrollos posteriores y problemas contemporáneos de la filosofía del derecho

El lenguaje clásico es atemporal. Entrevista a David Watkin

Watkin se ha distinguido como uno de los más certeros y sobrios polemistas y críticos arquitectónicos, como lo demuestra su celebérrimo ensayo Morality and Architecture (1977), una de las pocas obras imprescindibles en el debate arquitectónico del siglo XX, así como el gran numero de actos y campañas desarrolladas por él en defensa de la supervivencia de la tradición arquitectónica clásica y en solidaridad con los arriesgados arquitectos que hoy en día la representan. Esta faceta pública ha llevado a Watkin a las fronteras de la política y lo ha situado en el centro de un convulso debate público que aún se halla en pleno desarrollo, rodeando cada una de las obras de arquitectos estrella que se levantan en Inglaterra.

Theodicies, Utilitarianism, and Respect for Persons

Most theodicy responses to the problem of evil have in common the claim that God legitimately allows some evil such that greater good may come. This response is puzzling because the seemingly overwhelming consensus (at least amongst Christian apologists) is that 1) morality is deontological in nature (e.g. our duty of obedience to God’s commands, or acting in accordance with God’s purpose), and 2) relatedly, that humans are made in God’s image (i. e. are rational beings) and thus are worthy of respect. I shall argue that theodicy defenses that claim that God allows some evil such that greater good may come are untenable because they either unnecessarily bifurcate Christian morality in an ad hoc manner, or entail that God cannot have respect for persons.

Dando uma moral\' Moralidades, prazeres e poderes no caminho da adesão ao tratamento e da cura da tuberculose na população em situação de rua do município de São Paulo

A tuberculose entre pessoas em situação de rua é um grave problema de saúde pública, que carece de entendimentos e respostas melhor construídas. Questões envolvendo a dimensão coletiva do controle da doença, a dimensão individual do tratamento e o caminho para cura desta população são trazidos neste trabalho que tem como objetivo investigar os aspectos relacionados ao processo de gestão dos tratamentos e busca da cura nesta população. Para isto foram realizados estudos etnográficos junto as equipes de Consultório na Rua da cidade de São Paulo e no Hospital Leonor de Barros, em Campos do Jordão (SP), referência para internação deste grupo. A presença do uso de drogas, as co-infecções com o HIV, DSTs e as Hepatites Virais e o passado de tráfico e criminalidade são elementos presentes na história de vida dos internados, muitos dos quais já com passagem em presídios e alguns com problemas de saúde mental. Mesmo se sujeitando as regras do local em busca de um alento a seu estado de saúde, os pacientes buscam no uso de drogas escondido e no sexo discreto e não comentado, uma alternativa mediadora para suportarem as limitações a que estão expostos. A situação ainda revela uma dificuldade das instituições de internação no lidar com o tema a prática da estratégia de Redução de Danos ao uso de álcool e outras drogas, notando-se uma tendência a destacar práticas proibicionistas em qualquer ação desenvolvida. O entendimento do paciente frente à realidade encarada, revela-se principalmente pelas formas de resistência que eles desenvolvem para o período de reclusão que estarão submetidos durante o tratamento. Ao final se conclui que as diferenças sociais, oriundas de acessos dificultados, preconceitos, segregações e outros atos discriminatórios tem forte influência no processo de adesão do tratamento e cura. Além disto, percebeu-se a existência de vários enfoques de moralidades, envolvendo principalmente os profissionais de saúde e pacientes que refletem na gestão da atenção e cuidado e ainda a presença de uma diferenciação entre o conceito de ficar doente e ficar bom entre estes atores, criando um distanciamento de entendimentos e práticas.

Moralidade administrativa: o agente público na democracia do novo milênio

Os altos índices de corrupção no Brasil levaram a criação de algumas leis com o intuito de combater este mal que corrói a democracia e que preocupa todos os países democráticos. Este trabalho busca verificar as novas ferramentas jurídicas, bem como a responder a uma questão. Há mais alguma reforma necessária? Alguns estudos apontam influência de aspectos do sistema eleitoral no índice de corrupção. Se há, que reforma nesse sentido o Brasil poderia adotar? Foram utilizados método dialético e método comparativo, para análise de doutrina e legislação estrangeiras, comparando-as com as nacionais, e método indutivo para a análise de dados. Foram feitos grandes avanços legislativos, mas há que discutir o que pode ser aprimorado para criar um ambiente menos fértil à corrupção e tornar mais eficazes os mecanismos de controle dos agentes públicos.

Regime disciplinar do servidor público temporário

O presente trabalho tem por objetivo aprofundar o regime jurídico disciplinar do servidor público temporário. Analisam-se as características principais dessa espécie de agente público que o diferenciam dos demais servidores e que justificam um regime disciplinar próprio. Em uma breve investigação sobre as prováveis origens do temporário, constata-se a presença desse servidor na Administração Pública brasileira desde 1823. No direito estrangeiro (particularmente, no direito francês e no direito português), verifica-se a existência de figuras assemelhadas ao servidor público temporário brasileiro, que é uma espécie de servidor público do gênero agente público, exercendo uma função pública, mas não ocupando nem cargo, nem emprego públicos, sendo contratado por tempo determinado para atender a necessidade temporária de excepcional interesse público. A Constituição Federal, em seu artigo 37, IX, indica que a lei estabelecerá os casos de contratação por tempo determinado, mas não há uma uniformidade entre os entes da federação sobre o regime jurídico adotado para o servidor temporário. Esta análise concentra-se na Lei Federal n.º 8.745/93, que disciplina o assunto. No âmbito federal, o servidor público temporário é dotado de um regime jurídico com características mais próximas do regime jurídico administrativo, sendo recrutado por meio de contrato administrativo assemelhado ao regime estatutário. Tal contratação deve pautar-se pela observância dos princípios da continuidade do serviço público, da moralidade, da impessoalidade, da razoabilidade, da proporcionalidade e da motivação. Focaliza-se a responsabilidade do servidor público temporário no âmbito administrativo, procurando-se demonstrar que tal servidor, por um princípio de equiparação, submete-se a um processo administrativo disciplinar para apuração de suas faltas, o qual cumpre prazos especiais e condições específicas em razão do vínculo temporário com a Administração Pública, em tudo sendo respeitado o devido processo legal, a ampla defesa e o contraditório. Analisam-se as diferenças entre o processo disciplinar do servidor temporário (sindicância) e o processo do servidor público em geral, os ritos adotados, os prazos, as penalidades e os recursos, constatando-se que o servidor público temporário responde pelos atos ilícitos em todas as esferas: penal, civil, administrativa e por atos de improbidade. A transitoriedade na função não o exime de responsabilidades, por isso, com as devidas adaptações, está sujeito aos ônus e bônus do serviço público. Daí a necessidade de construir, com base nas características próprias dessa espécie de servidor público, um regime adaptado às especificações do vínculo especial a que se submete o servidor público temporário. Propõe-se aqui um miniprocesso disciplinar ou um processo disciplinar especial, ou uma minissindicância ou uma sindicância especial, sui generis.

Is it a Sin to Talk about Sin in Therapy?

The role of morality and sin in therapy is a controversial topic. However, therapy has a distinctly moral nature, and the Christian concept of sin provides a helpful framework within which the therapist can effectively respond to clients' feeling guilt for their wrong doing as they present in therapy. This paper discusses how the moral nature of therapy must be understood and embraced if it is to encourage both insight and increased self-efficacy in treatment. The Christian concept of sin is discussed as well as a psychological definition of sin and its effects. A potential treatment approach is presented which emphasizes responsibility and restoration through insight, compassion, and increased self-efficacy. This approach is then displayed through a case example.

Three Dichotomies in Lawyers’ Ethics (With Particular Attention to the Corporation as Client)

Three usually unexpressed, and too often unnoticed, conceptual dichotomies underlie our perception and understanding of lawyers’ ethics. First, the existence of a special body of professional ethics and professional regulation presupposes some special need or risk. Criminal and civil law are apparently insufficient. Ordinary day-to-day morality and ordinary ethics, likewise, are not considered to be enough. What is the risk entailed by the notion of a profession that is special; who needs protection, and from what? Two quite different possible answers to this question provide the first of the three dichotomies examined in this article: one can understand the risk as primarily to a vulnerable client from a powerful professional; or, to the contrary, from a powerful client-lawyer combination toward vulnerable others. Second, what is the foundational orientation of lawyers? Are lawyers serving primarily their particular clients, and those clients’ preferences, choices and autonomy? Or is the primary allegiance of lawyers to some community or collective goal or interest distinct from the particular goals or interests of the client? The third dichotomy concerns not the substance of the risk, or the primary orientation, but the appropriate means of responding to that risk or that fundamental obligation. Should professional ethics be implemented primarily through rules? Or, should we rely on character and the discretion of lawyers to make a thought out, all things considered, decision? Each of these three presents a fundamental difference in how we perceive and address issues of lawyers’ ethics. Each affects our understanding and analysis on multiple levels, from (1) determining the appropriate or requisite conduct in a particular situation, to (2) framing a specific rule or approach for a particular category of situations, to (3) more general or abstract theory or policy. A person’s inclinations in regard to the dichotomies affects the conclusions that person will reach on each of those levels of analysis, yet those inclinations and assumptions are frequently unexamined and unarticulated. One’s position on each of the dichotomies tends to structure the approach and outcome without the issues and choice having been explicitly addressed or possibly even noticed. This article is an effort to ameliorate that problem. Part I addresses the question of what is the risk in the work of lawyers, or the function of lawyers, for which professional ethics is the answer. The concluding section focuses on the particular problem of the corporation as client. Part II then asks the related and possibly consequent question of what is the foundational orientation or allegiance of the lawyer? Is it to the individual client? Or is it to some larger community interest? Again, the concluding section focuses on the corporation. Part III turns to the means or method for addressing the obligations and possible problems of the professional ethics of lawyers. Should lawyers’ ethics guide and confine the conduct of lawyers primarily through rules? Or should it function primarily through reliance on the knowledge, judgment and character of lawyers? If the latter were the guide, ethical decisions would be made on a situation by situation basis under the discretion of each lawyer. Toward the end of each discussion possibilities for bridging the dichotomy are considered (and with such bridges each dichotomy may come to look more like a spectrum or continuum.). At several points after its introduction in Parts I and II, the special problem of the corporation as client is revisited and possible solutions suggested. Illustrating the usefulness of keeping the dichotomies in view, Part IV applies them to several exemplary situations of ethical difficulty in actual lawyer practice. For readers finding it difficult to envision the consequences of these distinctions, turning ahead to Part IV may be useful in making the discussion more concrete. Some commonalities across the dichotomies and connections among them are then developed in the concluding section, Part V.

Three Dichotomies in Lawyers’ Ethics (With Particular Attention to the Corporation as Client)

Three usually unexpressed, and too often unnoticed, conceptual dichotomies underlie our perception and understanding of lawyers’ ethics. First, the existence of a special body of professional ethics and professional regulation presupposes some special need or risk. Criminal and civil law are apparently insufficient. Ordinary day-to-day morality and ordinary ethics, likewise, are not considered to be enough. What is the risk entailed by the notion of a profession that is special; who needs protection, and from what? Two quite different possible answers to this question provide the first of the three dichotomies examined in this article: one can understand the risk as primarily to a vulnerable client from a powerful professional; or, to the contrary, from a powerful client-lawyer combination toward vulnerable others. Second, what is the foundational orientation of lawyers? Are lawyers serving primarily their particular clients, and those clients’ preferences, choices and autonomy? Or is the primary allegiance of lawyers to some community or collective goal or interest distinct from the particular goals or interests of the client? The third dichotomy concerns not the substance of therisk, or the primary orientation, but the appropriate means of responding to that risk or that fundamental obligation. Should professional ethics be implemented primarily through rules? Or, should we rely on character and the discretion of lawyers to make a thought out, all things considered, decision? Each of these three presents a fundamental difference in how we perceive and address issues of lawyers’ ethics. Each affects our understanding and analysis on multiple levels, from (1) determining the appropriate or requisite conduct in aparticular situation, to (2) framing a specific rule or approach for a particular category of situations, to (3) more general or abstract theory or policy. A person’s inclinations in regard to the dichotomies affects the conclusions that person will reach on each of those levels of analysis, yet those inclinations and assumptions are frequently unexamined and unarticulated. One’s position on each of the dichotomies tends to structure the approach and outcome without the issues and choice having been explicitly addressed or possibly even noticed. This article is an effort to ameliorate that problem. Part I addresses the question of what is the risk in the work of lawyers, or the function of lawyers, for which professional ethics is the answer. The concluding section focuses on the particular problem of the corporation as client. Part II then asks the related and possibly consequent question of what is the foundational orientation or allegiance of the lawyer? Is it to the individual client? Or is it to some larger community interest? Again, the concluding section focuses on thecorporation. Part III turns to the means or method for addressing the obligations and possible problems of the professional ethics of lawyers. Should lawyers’ ethics guide and confine the conduct of lawyers primarily through rules? Or should it function primarily through reliance on the knowledge, judgment and character of lawyers? If the latter were the guide, ethical decisions would be made on a situation by situation basis under the discretion of each lawyer. Toward the end of each discussion possibilities for bridging the dichotomy are considered (and with such bridges each dichotomy may come to look more like a spectrum or continuum.). At several points after its introduction in Parts I and II, the special problem of the corporation as client is revisited and possible solutions suggested. Illustrating the usefulness of keeping the dichotomies in view, Part IV applies them to several exemplary situations of ethical difficulty in actual lawyer practice. For readers finding it difficult to envision the consequences of these distinctions, turning ahead to Part IV may be useful in making the discussion more concrete. Some commonalities across the dichotomies and connections among them are then developed in the concluding section, Part V.

Constitucionalismo principialista y constitucionalismo garantista

En este artículo, el autor presenta las diferencias más relevantes entre el neoconstitucionalismo y el constitucionalismo garantista. En primer lugar, afirma que el constitucionalismo puede ser concebido de dos formas opuestas: como una superación del positivismo jurídico en sentido tendencialmente iusnaturalista o como su expansión o perfeccionamiento, realizando para llevar a cabo esta labor una revisión terminológica. En segundo lugar, el autor considera que si las constituciones incorporan principios de justicia de carácter ético-político desaparece el principal rasgo distintivo del positivismo jurídico: la separación entre Derecho y moral o entre validez y justicia. A continuación, considera al constitucionalismo garantista como un iuspositivismo reforzado, completando al Estado de Derecho porque comporta el sometimiento al Derecho y al control de constitucionalidad. En cuarto lugar, el autor afirma que la tesis de que todo ordenamiento jurídico satisface objetivamente algún «mínimo ético» no es más que la vieja tesis iusnaturalista, que termina por convertirse en la actual versión del legalismo ético que es el constitucionalismo ético, en virtud del cual los principios constitucionales se pretenden objetivamente justos. En quinto lugar, el autor realiza una crítica a la contraposición entre principios y reglas, en los que se basa una concepción de la constitución y del constitucionalismo opuesta a la concepción positivista y garantista. En sexto lugar, el autor afirma que la idea de que los principios constitucionales son siempre objeto de ponderación y no de aplicación genera un peligro para la independencia de la jurisdicción y para su legitimación política. Finalmente, el autor considera que el constitucionalismo conlleva un debilitamiento y virtualmente un colapso de la normatividad de los principios constitucionales, así como una degradación de los derechos fundamentales establecidos en ellas a meras recomendaciones genéricas de carácter ético-político.