958 resultados para End-stage renal failure
Resumo:
Introducción. Las soluciones de hemodiálisis (HD) tienen una concentración estándar de sodio (Na) 139 mEq/L la cual no permite perder sodio por difusión llevando incluso a balance positivo de Na perpetuando la sensación de sed, hipertensión, hipertrofia ventricular y elevadas ganancias de peso interdialítica. Objetivo. Determinar cuales son los efectos cardiovasculares con el uso soluciones de HD con concentraciones de Na de 132 mEq/L en pacientes con insuficiencia renal crónica (IRC) de la unidad renal RTS cardioinfantil entre agosto 2008 y enero 2009. Métodos. Se realizo un estudio aleatorizado controlado, con doble enmascaramiento, inicialmente una fase de lavado de las concentraciones de sodio de 2 semanas y luego aleatorización en bloques en dos grupos, realizando la intervención durante 8 semanas. Resultados. Se evaluó 82 pacientes de los cuales ingresaron a la intervención 64, distribuidos al grupo de intervención 31 y al grupo control 33 pacientes. Hubo un aumento de la presión de pulso en el grupo de intervención y disminución de la sensación de sed y ganancia de peso interdialítica. Los hallazgos ecocardiográficos mostraron disminución del diámetro de la vena cava inferior en los dos grupos y disminución del volumen telediastólico del ventrículo izquierdo. Se presentaron más eventos adversos en el grupo de intervención. Discusión. Los resultados difieren de la literatura por tener un mayor número de diabéticos en el grupo control y por el tiempo de intervención. No se pueden sacar conclusiones con respecto al aumento de la presión de pulso ni a la disminución del diámetro de la vena cava inferior en HD. Conclusión. La solución de HD con concentración de Na de 132 mEq/L no disminuye la presión arterial, ni el consumo de medicamentos antihipertensivos, sin embargo disminuye la sensación de sed y la ganancia de peso interdialítica.
Resumo:
Introducción: La displasia renal multiquistica es una variante de displasia renal, anomalía congénita frecuente del tracto urinario, con una prevalencia del 2.9 - 50 % de insuficiencia renal crónica; frecuentemente asociada a otras malformaciones urinarias, sin datos en bogotá sobre prevalencia y comportamiento clínico. Objetivo: Evaluar la prevalencia de insuficiencia renal crónica en niños con displasia renal multiquistica valorados en consulta de nefrología en Fundación Cardioinfantil, instituto de cardiología de Bogotá. Metodología: Estudio de corte transversal, en niños con displasia renal multiquistica, confirmado por ecografía, valorados en consulta de Nefrología Pediátrica en los últimos diez años. Se realizó un análisis descriptivo de las variables, cálculos de prevalencia de Insuficiencia renal crónica. Resultados: Se revisó información de 70 pacientes, encontrando una prevalencia de IRC de 22.85% (IC 95 % 13.0 %-35.1 %); mayor frecuencia mujeres 12.85 %; 14.28% con otras malformaciones renales; 5.71 % en involución parcial, 4.28% en pacientes con involución completa del tamaño del riñón displásico. Se encontró 31.4% proteinuria; 22.8 % hiperfiltración; 4.28% hipertrofia compensadora del riñón sano; 24.2% involución parcial, 31.4 % involución completa del tamaño renal; frecuencia de HTA de 7,1% (IC95% 1%-9%). El 87.14% tuvo diagnóstico prenatal (IC 95% 81.0%-96.0%). Discusión: La prevalencia se encuentra dentro de los rangos de la literatura mundial, mayor a la colombiana y suramericana, predominando en pacientes con otras malformaciones renales asociadas, con mayor prevalencia de hipertensión arterial, que requiere estudios multicéntricos para determinar causalidad o presencia de otros factores.
Resumo:
Introducción: Las indicaciones por las cuales un paciente requiere una nefrectomía son múltiples: las neoplasias, la hidronefrosis y la exclusión funcional son las principales. En manos expertas la nefrectomía es un procedimiento seguro, especialmente porque en la actualidad el abordaje por excelencia es realizar una técnica mínimamente invasiva con conservación de nefronas. Se presenta el análisis de la experiencia en Mederi, Hospital Universitario Mayor en esta intervención. Metodología: Se realizó una serie de casos de pacientes llevados a nefrectomía entre mayo de 2008 y mayo de 2012. Se incluyeron la totalidad de los casos. Resultados: Se analizaron 72 registros, 49 mujeres y 25 hombres; 13 de ellas fueron laparoscópicas. La edad promedio fue de 58,6 años. El tiempo medio operatorio fue 169,23 minutos (118-220 minutos). El sangrado operatorio promedio fue de 680,63 ml (IC95%: 2,83-1358 ml). El tiempo de hospitalización promedio fue de 4,88 días IC95%. La mayoría de los pacientes se distribuyeron en estadios medios de la enfermedad tumoral, con poco compromiso ganglionar y metástasis; el diagnóstico histológico y estadio dominante fueron el carcinoma de células renales grado 3 de Fuhrman respectivamente. Se reportan 13 casos de compromiso de la capsula de Gerota y 11 con compromiso del hilio. Discusión: La experiencia en nefrectomía de la institución es muy positiva por el bajo número de mortalidad y complicaciones. En cuanto a la técnica, es importante promover la técnica laparoscópica
Resumo:
Introducción: El trasplante hepático es la terapia de elección para los pacientes con enfermedad hepática terminal, logrando mejorar su expectativa y calidad de vida, de acuerdo a estudios realizados en otros países. En la Fundación Cardioinfantil – Instituto de Cardiología (FCI-IC) se han realizado 332 trasplantes hepáticos hasta el 2014, pero no se conoce la supervivencia y los factores pronósticos propios de los pacientes intervenidos. Objetivo Principal: Estimar la supervivencia a 1, 3 y 5 años e identificar los principales factores pronósticos de los pacientes a quienes se les realizó trasplante hepático en el periodo 2005-2013 en la FCI-IC. Método: Estudio observacional y retrospectivo, basado en revisión de historias clínicas de los pacientes adultos a quienes se les realizó trasplante hepático en el periodo 2005-2013 en la FCI-IC. Resultados: La supervivencia al año fue de 90.91% (IC95% 86.40-93.98), a los 3 años 83.64% (IC95% 77.89-88.01) y a los 5 años de 79.18% (IC95% 72.54-84.39). Los principales factores pronósticos fueron el antecedente de ascitis (HR 2.449, IC 1.252 – 4.792), la edad del donante (HR 1.040, IC 1.009 – 1.071) y el receptor (HR 1.037, IC 1.014 – 1.060). Se encontró una mayor supervivencia en los pacientes con cirrosis alcohólica (HR 0.099, IC 0.021 – 0.467). Conclusiones: El estudio mostró una supervivencia mayor a la reportada en estudios realizados en Estados Unidos (67.4-73.0% a los 5 años) y España (73,3% a los 3 años) y similar a la de Chile (80.0% a los 5 años). Cabe resaltar que estos estudios incluyeron series más grandes de pacientes.
Resumo:
O transplante hepático é o tratamento de escolha para uma série de doenças terminais agudas e crônicas do fígado. Contudo, sua oferta tem sido restringida pela falta de doadores, o que tem provocado o aumento do número de pacientes em lista de espera. A escassez de órgãos condiciona a aceitação para transplante de enxertos provindos de doadores sem as melhores condições para tal – os chamados doadores marginais. O dano de isquemia/reperfusão (IR) é resultado dos fatores perioperatórios inerentes ao procedimento, incluindo as condições do doador. Quanto pior o doador, pior o órgão transplantado, e maior a possibilidade de desenvolvimento de disfunção primária do enxerto (DPE). DPE comumente é definida pela elevação das enzimas hepáticas. As aminotransferases, entretanto, podem alterar-se por outras complicações que não a lesão de isquemia/reperfusão. A histologia hepática, por sua vez, pode fornecer informações acerca da IR. Com o objetivo de estimar a extensão histológica do dano de preservação (necrose hepatocelular e neutrofilia sinusoidal), correlacioná-la a variáveis bioquímicas (índice de reperfusão: AST + ALT + LDH / 3) e avaliar a sua influência no período pós-operatório imediato (até 7 dias), foi realizado um estudo transversal com análise sistemática de 55 pacientes adultos que receberam seu primeiro enxerto hepático entre Setembro de 1996 e Dezembro de 1999. Foram comparados os fatores de risco relacionados ao doador, ao receptor, ao procedimento cirúrgico e ao período pós-operatório e analisadas as biópsias feitas antes e imediatamente após o procedimento cirúrgico. Houve dano de preservação em todos os pacientes estudados tanto por critérios anatomopatológicos quanto por critérios bioquímicos. Houve associação significativa entre os achados bioquímicos e histológicos (p=0,04; coeficiente gamma=0,49). A extensão da necrose hepatocitária parece ser o dado anatomopatológico isolado que melhor se relaciona ao índice de reperfusão (p=0,05; coeficiente gamma=0,48). Houve associação entre DPE e a histologia hepática (p=0,02). O índice bioquímico associou-se à DPE (p=0,001) e à incidência de insuficiência renal aguda (IRA) (p<0,0001). A mortalidade inicial foi maior nos pacientes com índice de reperfusão grave (p=0,002). O índice de reperfusão foi um fator de risco independente para a função do enxerto (p=0,004) e IRA (0,04). A sobrevida atuarial em 1 ano foi significativamente menor nos pacientes com dano de preservação grave (p=0,003). A análise da biópsia de reperfusão é capaz de detectar o dano de preservação sofrido pelo enxerto e se correlaciona às variáveis bioquímicas em sua estimativa.
Resumo:
Conselho Nacional de Desenvolvimento Científico e Tecnológico (CNPq)
Resumo:
Coordenação de Aperfeiçoamento de Pessoal de Nível Superior (CAPES)
Resumo:
It is understood by Chronic Renal Failure (CRF) or Stage IV Chronic Kidney Disease (CKD) the morbid state in which there is a substantial and irreversible loss of functional capacity, metabolic and endocrine function in both kidneys, leading to a framework of dehydration, azotemia, electrolyte imbalance, anemia, uremic syndrome, secondary hyperparathyroidism, among other conditions that make the patient's life without treatment unfeasible. An adequate nutritional support to patients with CKD at any stage aims to maintain a good clinical condition and an attempt to delay the progression of the disease. The basis of a diet for patients with CKD is the restriction in this protein being of high biological value, low-phosphorus, high energy density, fiber and antioxidants combined with a good dietary practices that allow the patient a good quality of life
Resumo:
Fundação de Amparo à Pesquisa do Estado de São Paulo (FAPESP)
Resumo:
Background-It remains uncertain whether acetylcysteine prevents contrast-induced acute kidney injury. Methods and Results-We randomly assigned 2308 patients undergoing an intravascular angiographic procedure with at least 1 risk factor for contrast-induced acute kidney injury (age >70 years, renal failure, diabetes mellitus, heart failure, or hypotension) to acetylcysteine 1200 mg or placebo. The study drugs were administered orally twice daily for 2 doses before and 2 doses after the procedure. The allocation was concealed (central Web-based randomization). All analysis followed the intention-to-treat principle. The incidence of contrast-induced acute kidney injury (primary end point) was 12.7% in the acetylcysteine group and 12.7% in the control group (relative risk, 1.00; 95% confidence interval, 0.81 to 1.25; P = 0.97). A combined end point of mortality or need for dialysis at 30 days was also similar in both groups (2.2% and 2.3%, respectively; hazard ratio, 0.97; 95% confidence interval, 0.56 to 1.69; P = 0.92). Consistent effects were observed in all subgroups analyzed, including those with renal impairment. Conclusions-In this large randomized trial, we found that acetylcysteine does not reduce the risk of contrast-induced acute kidney injury or other clinically relevant outcomes in at-risk patients undergoing coronary and peripheral vascular angiography.
Resumo:
OBJECTIVE: To compare low and high MELD scores and investigate whether existing renal dysfunction has an effect on transplant outcome. METHODS: Data was prospectively collected among 237 liver transplants (216 patients) between March 2003 and March 2009. Patients with cirrhotic disease submitted to transplantation were divided into three groups: MELD > 30, MELD < 30, and hepatocellular carcinoma. Renal failure was defined as a ± 25% decline in estimated glomerular filtration rate as observed 1 week after the transplant. Median MELD scores were 35, 21, and 13 for groups MELD > 30, MELD < 30, and hepatocellular carcinoma, respectively. RESULTS: Recipients with MELD > 30 had more days in Intensive Care Unit, longer hospital stay, and received more blood product transfusions. Moreover, their renal function improved after liver transplant. All other groups presented with impairment of renal function. Mortality was similar in all groups, but renal function was the most important variable associated with morbidity and length of hospital stay. CONCLUSION: High MELD score recipients had an improvement in the glomerular filtration rate after 1 week of liver transplantation.
Resumo:
A variety of chronic kidney diseases tend to progress towards end-stage kidney disease. Progression is largely due to factors unrelated to the initial disease, including systemic hypertension and proteinuria. Drugs that block the renin-angiotensin II-aldosterone system, either ACE inhibitors or angiotensin II receptor antagonists, reduce both BP and proteinuria and appear superior to a more conventional antihypertensive treatment regimen in preventing progression to end-stage kidney disease. The most recent recommendations state that the BP goal in children with chronic kidney disease is the corresponding 90th centile for body height, age, and gender.Since satisfactory BP control is often not achieved, the mnemonic acronym DELTAREPROSI was generated to recall the following tips for the practical management of hypertension and proteinuria in childhood chronic renal parenchymal disease: DEfinition of hypertension and Low blood pressure TArget in REnal disease (90th centile calculated by means of simple formulas), potential of drugs inhibiting the REnin-angiotensin II-aldosterone system in hypertension and PROteinuria, advantages of SImplified treatment regimens and escalating the doses every SIx weeks.
Resumo:
To assess the relationship between renal plasma flow (ERPF) or glomerular filtration rate (GFR) and the levels of norepinephrine (NE) or epinephrine (E) in plasma or urine in the presence of progressive degrees of non-oliguric renal functional impairment, these variables were assessed simultaneously in 18 normal subjects, 72 with parenchymal kidney disease and 14 with essential hypertension. ERPF and GFR were lower (P less than 0.01 to 0.001) in the groups with renal disease (mean +/- SD, 340 +/- 230 and 68 +/- 43 ml/min/1.73 m2, respectively) or essential hypertension (434 +/- 101 and 97 +/- 25 ml/min/1.73 m2) than normal subjects (597 +/- 133 and 118 +/- 14 ml/min/1.73 m2). Plasma and urinary NE and E did not differ significantly among groups and were unrelated with ERPF or GFR (range 4 to 160 ml/min/1.73 m2), except for reduced (P less than 0.001) urinary NE and E excretion in the presence of a GFR less than 20 ml/min. Subgroups with renal disease and a normal (N = 39) or high blood pressure (N = 33) also were comparable in their plasma and urinary NE and E, while ERPF and GFR tended to be lower in hypertensive patients. It is concluded that a chronic reduction in excretory kidney function may have no relevant impact on circulating levels of NE and E per se, although their urinary excretion falls distinctly at the stage of advanced renal failure. These aspects deserve consideration when pathogenetic or diagnostic studies of catecholamines are performed in normotensive or hypertensive patients with impaired kidney function.
Resumo:
Advanced glycation end products (AGEs) are thought to contribute to the abnormal lipoprotein profiles and increased risk of cardiovascular disease of patients with diabetes and renal failure, in part by preventing apolipoprotein B (apoB)-mediated cellular uptake of low density lipoproteins (LDL) by LDL receptors (LDLr). It has been proposed that AGE modification at one site in apoB, almost 1,800 residues from the putative apoB LDLr-binding domain, may be sufficient to induce an apoB conformational change that prevents binding to the LDLr. To further explore this hypothesis, we used 29 anti-human apoB mAbs to identify other potential sites on apoB that may be modified by in vitro advanced glycation of LDL. Glycation of LDL caused a time-dependent decrease in its ability to bind to the LDLr and in the immunoreactivity of six distinct apoB epitopes, including two that flank the apoB LDLr-binding domain. ApoB appears to be modified at multiple sites by these criteria, as the loss of glycation-sensitive epitopes was detected on both native glycated LDL and denatured, delipidated glycated apoB. Moreover, residues directly within the putative apoB LDLr-binding site are not apparently modified in glycated LDL. We propose that the inability of LDL modified by AGEs to bind to the LDLr is caused by modification of residues adjacent to the putative LDLr-binding site that were undetected by previous immunochemical studies. AGE modification either eliminates the direct participation of the residues in LDLr binding or indirectly alters the conformation of the apoB LDLr-binding site.
Resumo:
BACKGROUND Gastrointestinal (GI) complications often delay recovery after radical cystectomy with urinary diversion. The authors investigated if perioperative administration of a potassium-enriched, chloride-depleted 5% glucose solution (G5K) accelerates recovery of GI function. METHODS This randomized, parallel-group, single-center double-blind trial included 44 consecutive patients undergoing radical cystectomy and pelvic lymph node dissection with urinary diversion. Patients were randomized to receive either a G5K (G5K group) solution or a Ringer's maleate solution (control group). Fluid management aimed for a zero fluid balance. Primary endpoint was time to first defecation. Secondary endpoints were time to normal GI function, need for electrolyte substitution, and renal dysfunction. RESULTS Time to first defecation was not significantly different between groups (G5K group, 93 h [19 to 168 h] and control group, 120 h [43 to 241 h]); estimator of the group difference, -16 (95% CI, -38 to 6); P = 0.173. Return of normal GI function occurred faster in the G5K group than in the control group (median, 138 h [range, 54 to 262 h] vs. 169 h [108 to 318 h]); estimator of the group difference, -38 (95% CI, -74 to -12); P = 0.004. Potassium and magnesium were less frequently substituted in the G5K group (13.6 vs. 54.5% [P = 0.010] and 18.2 vs. 77.3% [P < 0.001]), respectively. The incidence of renal dysfunction (Risk, Injury, Failure, Loss and End-stage kidney disease stage "risk") at discharge was 9.1% in the G5K group and 4.5% in the control group; P = 1.000. CONCLUSIONS Perioperative administration of a G5K did not enhance first defecation, but may accelerate recovery of normal GI function, and reduces potassium and magnesium substitution after radical cystectomy and urinary diversion.