995 resultados para Tomás de Aquino, Santo, 1225-1274-Teología moral
Resumo:
El politeísmo y el carácter terrenal de los valores fueron la base de la concepción de la virtud política en la Antigüedad. A partir del Bajo Imperio Romano y durante la Edad Media, se produjo la asimilación entre política y religión, por la que el hombre fue orientado hacia valores trascendentes con una ética que debió extenderse hacia todos los aspectos de su vida. La Modernidad fue testigo de una transformación dada como consecuencia de la dicotomía entre la política de Estado y la moral cristiana. De esta manera, la virtud política dejó de ser concebida en relación con la moral y pasó a recubrirse de un ropaje instrumental. Comenzó a ser utilizada entonces como una herramienta para la consecución de un nuevo fin: la adquisición y conservación del poder. En esta la última época surgieron numerosos escritos políticos que reflejaron las contradicciones de la mentalidad moderna. En este sentido, enmarcado en el Barroco Español, escribió Juan de Mariana. En la obra De Rege et Regis Institutione plantea su concepto de virtud política, pero no lo hace en el sentido filosófico estricto. Este jesuita estudia cuidadosamente cada uno de los valores que se le exigen a los gobernantes para realizar una buena administración de sus territorios, para la felicidad de su pueblo y el acercamiento de su reino al de Dios. Juan de Mariana mostró una virtud que podía ser, a la vez, política y cristiana.
Resumo:
En un primer examen de las auctoritates Ockham formula un claro acercamiento al esquema aristotélico-boeciano y a la definición de persona como sustancia en cuanto suppositum intellectualis, definición que encuentra conveniente aplicar tanto a lo creado como a Dios. Comienza luego una discusión más próxima y contemporánea con los moderni, que está centrada, por un lado en Escoto para quien la persona se ha de definir a partir de la relación; y por otro, con santo Tomás de Aquino. “Persona", para el Aquinate, no significa una naturaleza común quidditas, ousía o sustancia segunda, por el contrario, indica al individuo: “esta carne y estos huesos" pero lo significa de un modo vago e indeterminado. Precisamente, éste es el punto que Ockham discute: qué denota esta significación indeterminada; le dedica a la cuestión un amplio análisis que lo conduce a equiparar los conceptos de naturaleza y de persona. En un paso subsiguiente Ockham propone examinar las personas in divinis: no es posible establecer in divinis ninguna diferencia o distinción; si se afirma en Dios la presencia de tres personas y de una sola naturaleza la adhesión se presta por la fe sin que medie un acercamiento racional al tema. El aparato conceptual y metafísico para abordar el problema de la persona en sede divina, ha pasado por la criba de un examen que concluye, para Ockham, en la verdadera imposibilidad de elaborar una teología trinitaria.
Resumo:
Este trabajo se enfoca en la doctrina que Tomás de Aquino establece con respecto al sentido del gusto, estructurándose en tres partes. En primer lugar, se discute la ubicación que el autor otorga al gusto dentro del esquema de los cinco sentidos externos a partir de algunos aportes contemporáneos. Luego, se expone la relación que establece el Aquinate entre el gusto y sus objeto propio, el sabor, con todas las implicancias de orden biológico y antropológico que conlleva. Finalmente, se trata la valencia moral del sentido del gusto a partir de uno de los vicios capitales que se engendra en él, la gula, y la originalidad que Tomás aporta a esta discusión con respecto a la doctrina cristiana anterior.
Resumo:
Fil: Mendoza, José María Felipe.
Fergus Kerr, After Aquinas: versions of Thomism. Blackwell, Oxford, 2002, 264 pp. ISBN 0-631-21312-0
Resumo:
Fil: Muñoz, Ceferino Pablo.
Resumo:
En el siglo XIII, ningún autor negaba la absoluta simplicidad de Dios. Sin embargo, se utilizaban múltiples nombres para hablar de lo divino. ¿Se pueden considerar verdaderos todos esos predicados, sin que ello implique concebir una multiplicidad real en la esencia divina? Este trabajo intenta mostrar, bajo la guía de Tomás de Aquino, que la pluralidad de atributos divinos no contradice la simplicidad divina y que, sin entenderlos como sinónimos, dichos nombres constituyen predicaciones verdaderas in divinis.