19 resultados para Ovulación
Resumo:
Resumen Para evaluar los efectos de una progesterona (P4) inyectable en suspensión oleosa en tratamientos de sincronización de la ovulación se realizaron tres experimentos en vacas Holando multíparas en distinto estado reproductivo: 1) 24 vacas con más de 140 días posparto (DPP), en anestro, en tres grupos: Ovsynch + CIDR, Ovsynch + 200 mg y Ovsynch + 400 mg de MAD-4; 2) 8 vacas en anestro con menos de 100 DPP en dos grupos: Ovsynch + CIDR y Ovsynch + 200 mg de MAD-4; y 3) 15 vacas repetidoras ciclando con más de 200 DPP en dos grupos: Ovsynch + 200 y Ovsynch + 400 mg de MAD-4. En todos los experimentos se realizaron sangrados frecuentes y ultrasonografías ováricas. En el experimento 1 el grupo CIDR mantuvo niveles de P4 constantes en 1,5±0,7 ng/mL; los grupos MAD 200 y MAD 400 alcanzaron niveles de P4 superiores a 10 ng/mL (P<0,05) a las 8 h, descendiendo a las 48 h a valores basales. El diámetro del folículo dominante (DF) al día 9 fue 5 mm superior en el grupo CIDR que en los grupos MAD (P<0,05). En los experimentos 2 y 3 los niveles de P4 fueron similares a los del experimento 1, así como la diferencia del diámetro del DF al día 9. Se concluyó que los niveles de P4 circulantes luego de la administración de P4 inyectable aumentan excesivamente al comienzo del tratamiento, disminuyendo rápidamente a las 48 h, lo que además de ser menos efectivo como fuente de P4 en tratamientos de inducción de ovulación que la administración intravaginal, afectan el diámetro del folículo dominante inducido.
Resumo:
Tesis (Magister en Ciencias Veterinarias).-- Universidad de La Salle. Facultad de Ciencias Agropecuarias.Maestría en Ciencias Veterinarias, 2014
Resumo:
En la actualidad los resultados de la combinación del semen sexado y superovulación (SOV) no han sido muy alentadores debido a la baja cantidad de espermatozoides así como a la corta vida media de los mismos. En un trabajo previo realizado en Brasil en vacas Holstein, se demostró que usando el protocolo de SOV P36/Lh60 e inseminando con semen sexado a las 18 y 30 horas de aplicado el inductor de la ovulación (intervalo de 12 hs entre inseminaciones) se obtiene igual cantidad de estructuras transferibles que inseminando a las 12 y 24 horas con semen no sexado. El objetivo de esta investigación fue ajustar las horas de la inseminación artificial (IA) en vacas superovuladas e inseminadas con semen sexado para lograr mejor sincronía con las ovulaciones y así aumentar la cantidad de embriones transferibles. Este ajuste evaluó 2 momentos de IA en los cuales el intervalo entre ambas se disminuyó a 6 hs. Para esto se usaron 30 vacas Holstein en producción superovuladas con el protocolo P36/LH60 y se dividieron en tres grupos en forma aleatoria; en el grupo IA18/30 (control; n=10) las inseminaciones se realizaron a las 18 horas y 30 hs de la aplicación del inductor de la ovulación (GnRh); en el grupo IA18/24 (n=10) sé inseminó a las 18 y 24 hs de la GnRH y al grupo IA24/30 (n=10) se inseminó a las 24 y 30 (se usó 2.1x106 espermatozoides sexados / inseminación). No se encontró diferencia estadística en los tres grupos, sin embargo el grupo IA18/24 mostró ventaja numérica sobre el grupo IA24/30 y el Control (4,1±1,5 vs 1,3±0,4 y 1,9±0,6 respectivamente) en la cantidad de embriones transferibles, con lo que concluimos que el ajuste en las horas de IA con semen sexado en vacas Holstein superovuladas puede ser usado con resultados similares a los trabajos anteriores
Resumo:
La dismenorrea primaria (DP) debe considerarse como el desorden ginecológico crónico más doloroso en mujeres en edad reproductiva y debe ser considerado como un desorden multifactorial, se puede describir como un síndrome doloroso, sin causa orgánica objetiva, generalmente de tipo cólico en la parte inferior del abdomen que puede irradiar a la zona lumbar y a la pelvis y se pueden asociar síntomas como náuseas, diarrea, mareos, dolor de cabeza y vómitos; el dolor suele aparecer el primer día de la menstruación con una intensidad muy elevada y su duración es de 48 a 72 horas. La DP habitualmente empieza durante la adolescencia, de 6 a 12 meses tras la menarquia, cuando la ovulación se regulariza y si no se toma ninguna medida farmacológica, el dolor se cronifica durante toda la etapa fértil de la mujer. Como factores de riesgo de la DP encontramos los antecedentes familiares de dismenorrea con probable predisposición genética y la menarquia antes de los 13 años. Según la literatura mundial, la prevalencia de DP oscila del 16% al 91% en mujeres en edad reproductiva y de ese porcentaje del 2% al 29% muestran un dolor severo; si la edad de inicio es sobre los 12, 13 años y la de desaparición sobre los 45 a 50, las mujeres pueden llegar a presentar dolor en 20-30 años de su vida; la DP es la primera causa de absentismo escolar y laboral en adolescentes y jóvenes. En España hay un 50% de adolescentes que sufren dolor y de ellas en el 10 % de los casos les incapacita durante 1 a 3 días para realizar una vida normal, el impacto en la calidad de vida y a nivel psicosocial es muy importante...