223 resultados para Crianza
Resumo:
Se presenta una síntesis del nuevo proyecto de investigación, en el que se propone indagar las Modalidades de la diversidad en el ejercicio de la parentalidad y en la pareja , en dos campos de problemáticas. Una refiere a la diversidad en relación con las múltiples formas que adquieren hoy las configuraciones vinculares familiares. La otra a la diversidad en relación con la conformación sexual de la pareja. Se desarrollan los núcleos conceptuales con que se abordarán dichas problemáticas: origen y transformaciones del patriarcado ; sexualidad y diversidad ; complejización y ampliación de los conceptos del marco teórico que se vienen utilizando desde las anteriores investigaciones: concepto de familia (organización y aspectos estructurales), principios de permanencia y cambio , vínculo , diversidad y parejas parentales del mismo sexo. De investigaciones anteriores se evalúa que persiste la representación de la madre como eje central de la crianza y que el reparto del poder entre madres y padres en la familia y entre varones y mujeres en la sociedad surge con vacilaciones y ambivalencias. Orientará la presente investigación la indagación sobre los modos actuales de expresión de estas representaciones, en familias de organización y configuración de la pareja no convencionales. El análisis de sus transformaciones posibilitará dilucidar su relación con nuevas formas de lazo familiar que den cuenta de la diversidad
Resumo:
Desde mediados del siglo pasado, las mujeres han logrado importantes conquistas sociales y laborales tendientes a lograr una mayor igualdad de género. Pese a estos avances, el prejuicio sexista y la discriminación de género siguen estando extendidos en la mayoría de los países, asumiendo modalidades benévolas y difíciles de reconocer. A nivel laboral, los hombres, en comparación con las mujeres, siguen ganando más dinero y ocupando con mayor frecuencia puestos jerárquicos de toma de decisiones. Para explicar esta problemática, los especialistas han postulado la existencia de prejuicios sexistas (hostiles y benévolos) que usualmente se expresan en comportamientos de discriminación de género. Estos prejuicios generan un fenómeno conocido como 'laberinto de cristal', un conjunto de barreras invisibles y artificiales que obstaculizan el avance laboral-profesional de muchas mujeres calificadas dentro de sus organizaciones. Frente a esta situación, el objetivo del presente trabajo, enmarcado en el desarrollo de la tesis doctoral del autor, es analizar las características del prejuicio sexista (hostil y benévolo) y la tendencia a la discriminación de género en el lugar de trabajo. La muestra estuvo conformada por 235 trabajadores (52varones; promedio de edad 36.6 años) de organizaciones públicas y privadas de diversos rubros de la provincia de Santa Fe. La recolección de los datos se efectuó en los horarios habituales de trabajo, siendo la participación anónima y voluntaria. La batería de exploración estuvo integrada por la adaptación argentina del Inventario de Sexismo Ambivalente, un conjunto de escenarios para medir la tendencia a la discriminación de género en el lugar de trabajo, la adaptación argentina de la Escala de Deseabilidad Social del EPQ de Eysenck, una sección de datos sociodemográficos y el correspondiente consentimiento informado. Los resultados indican niveles medios de sexismo hostil y sexismo benévolo, y baja tendencia a la discriminación de género a nivel laboral. De los casos donde se registró esta última variable, predomina la discriminación contra las mujeres por embarazo o maternidad, seguida por la discriminación en decisiones de promoción. Los análisis de correlación mostraron que: (a)La mayor educación, menores montos de sexismo benévolo y menor tendencia a la discriminación de género en el lugar de trabajo; (b) a mayor tamaño organizacional, menor sexismo; (c) a mayor sexismo (hostil o benévolo), mayor tendencia a la discriminación de género; (d) a mayor sexismo hostil, menor deseabilidad social. A su vez, las pruebas de diferencia de medias efectuadas evidenciaron que: (e) los varones presentan mayor prejuicio sexista y mayor tendencia a la discriminación de género que las mujeres, quienes registran mayor deseabilidad social; (f) los trabajadores con nivel educativo universitario exhiben menores montos de sexismo benévolo; (g) en el sector privado se registra mayor tendencia a la discriminación que en el sector público; (h) en cuanto al ramo de actividad, los trabajadores de la administración pública informan menos sexismo benévolo que los pertenecientes a la industria o a la educación/investigación (téngase en cuenta que el 71.1de las personas encuestadas en la administración pública eran mujeres y el 97.1del ramo industria eran varones). Más allá del avance femenino en materia de igualdad de género y de la existencia de un amplio marco legal que prohíbe la discriminación, las mujeres continúan atravesando experiencias sexistas originadas en estereotipos de género tradicionales. De acuerdo con los resultados, a nivel laboral estas experiencias se traducen fundamentalmente en rechazo de posibilidades de promoción y discriminación por embarazo o maternidad. En general, estos actos fueron justificados apelando a estereotipos propios del sexismo benévolo, que plantean a la mujer como un ser puro, delicado, dependiente, que debe ser cuidado y protegido, siendo su responsabilidad primera el cuidado del hogar y la crianza de los hijos. La maternidad aparece así como un rol que perjudica el trabajo formal, especialmente de mediana y alta jerarquía. Asimismo, en línea con estudios anteriores, el prejuicio sexista se vinculó negativamente con el nivel educativo y el tamaño de la organización, y positivamente con la tendencia a los comportamientos de discriminación de género. Estos hallazgos resaltan la necesidad de crear estrategias tendientes a modificar estos prejuicios en los trabajadores, sobre todo de empresas privadas y organizaciones pequeñas, con el fin último de promover mayores niveles de igualdad de género a nivel laboral
Resumo:
Masten y Gewirtz (2006) sostienen que si bien desde siempre las historias que narran el triunfo de una persona frente a la adversidad han ejercido fascinación sobre la gente, el estudio científico de la resiliencia se inició entre los años sesenta y setenta. En 1990 Rutter sostuvo que el interés por conocer las características de aquellas personas que desarrollan 'resiliencia' a pesar de las condiciones adversas de crianza o en circunstancias que aumentan el riesgo de presentar psicopatologías, provenía de tres fuentes: una, el aumento y consistencia de datos empíricos sobre diferencias individuales en poblaciones infantiles de alto riesgo. La segunda se originó en las investigaciones sobre temperamento realizadas en USA en los años setenta. Para comprender la idea anglosajona de temperamento hay que pensar en 'tendencias a desarrollar la personalidad de una cierta manera' (Cyrulnik, 2008: 43). La tercera línea tuvo su origen en la observación de las distintas formas en que las personas enfrentan las experiencias vitales (Becoña, 2006). La primera generación de investigaciones eran consistentes entre sí sugiriendo la poderosa influencia del proceso adaptativo común y el interjuego de genes y experiencia en el desarrollo infantil. (Masten y Gewirtz, 2006) Uno de estos estudios pioneros fue realizado por Werner y Smith con 698 niños nacidos en Kauai (Hawai) en 1955. La totalidad de la población estudiada estaba en condiciones de riesgo pero aproximadamente un tercio estaba sujeto a múltiples factores de alto riesgo, a saber: pobreza, discordia parental, psicopatología parental y estrés perinatal. El seguimiento de la cohorte se realizó hasta los 40 años. Uno de los hallazgos fue que muchos de los jóvenes del subgrupo de alto riesgo que habían desarrollado problemas en la adolescencia se habían convertido en adultos con relaciones estables y satisfactorias en la familia y el trabajo. Solamente uno de cada seis adultos manifestaba problemas de diversa índole: pobreza, conflictos domésticos, violencia, abuso de sustancias, problemas de salud mental y baja autoestima. (Benard, 2004) Otra investigación seminal sobre resiliencia surgió de la búsqueda de las causas de la enfermedad mental. Los investigadores se concentraron en los hijos de padres mentalmente enfermos y advirtieron que muchos de estos niños se desarrollaban bien y no presentaban problemas de salud mental. Siguieron una perspectiva integrativa y de colaboración entre los especialistas clínicos y del desarrollo infantil y elaboraron un programa completo de investigación sobre resiliencia que duró varias décadas. (Masten y Powell, 2003) Estos primeros estudios se centraron en las cualidades de los niños resilientes, consideradas como atributos de los propios niños, solo posteriormente se observó la relación con características de las familias y sus comunidades de pertenencia. (Kotliarenco, Cáceres, y Fontecilla, 1997). Durante bastante tiempo se pensó que resiliencia era equivalente a invulnerabilidad y si bien desde la década del setenta dejó de utilizarse este término, aún hoy se considera que resiliencia y vulnerabilidad son los polos opuestos de un mismo continuo. Así encontramos en revisiones recientes que 'La vulnerabilidad se refiere a incrementar la probabilidad de un resultado negativo, típicamente como un resultado de la exposición al riesgo. La resiliencia se refiere a evitar los problemas asociados con ser vulnerable' aunque se admite en forma generalizada que este concepto se utiliza para referirse a 'un positivo y efectivo afrontamiento en respuesta al riesgo o a la adversidad'. (Becoña.2006:131). En sentido amplio, la vulnerabilidad afecta a cualquier sistema con un mínimo de organización sea éste natural, artificial o social. Cualquier análisis epistemológico de este concepto debe comenzar reconociendo que la diversidad de criterios responde a las diferentes unidades de análisis que recortan los investigadores y que sus definiciones dependen de los elementos articuladores que toman en consideración en cada dominio. En nuestro caso, - una investigación epidemiológica sobre salud mental infantil- partimos de dos supuestos básicos: a) la cualidad de vulnerable es una condición de todos los seres humanos pero no alcanza a todos por igual ni de la misma manera y b) toda vulnerabilidad es vulnerabilidad psicosocial dado que impacta de modo directo o indirecto sobre los sujetos en estudio. Sin embargo, el examen sería incompleto sino no se despeja previamente vulnerabilidad psicosocial de los conceptos de resiliencia y trauma con los que se lo relaciona en salud y educación. Algunas lecturas simplificadoras entienden que resiliencia es el resultado de la sumatoria de factores protectores mientras que vulnerabilidad es la sumatoria de los factores de riesgo. Dada la abundancia de investigaciones sobre estas temáticas, nos limitaremos a realizar una breve aproximación conceptual a cada uno de ellos y sus vinculaciones
Resumo:
La desnutrición es definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como el desbalance celular entre el suministro de nutrientes y energía que el cuerpo demanda para asegurar su crecimiento, su mantenimiento y las diferentes funciones específicas del mismo. En Argentina, las alteraciones del estado nutricional más prevalentes en niños menores de 5 años son: anemia, deficiencia de hierro, baja talla, sobrepeso y obesidad. Por el contrario, en nuestro país, la desnutrición aguda presenta prevalencias marginales desde una perspectiva poblacional. Los efectos perjudiciales de la desnutrición dependen de la gravedad de la misma. En lo concerniente al rendimiento cognitivo, la literatura sugiere que en los casos de desnutrición severa en la vida temprana, las consecuencias sobre el mismo ocurren al margen de las condiciones sociales, principalmente si el déficit se produce durante la concepción y los primeros tres años de vida. Sin embargo, no hay conclusiones definitivas sobre tal relación en los casos de desnutrición moderada y leve, que son los que prevalecen en nuestro país. En el presente trabajo se analizan algunas investigaciones que han evaluado la influencia de la desnutrición leve y moderada sobre el rendimiento cognitivo de niños que viven en condiciones de pobreza. El objetivo de tal análisis consiste en clarificar el vínculo entre ambas variables, contrastando los resultados a los que arriban los distintos estudios. Las investigaciones examinadas, muestran que no habría diferencias significativas en el desempeño cognitivo de los niños en función de su estado nutricional. Esto indicaría que el fenómeno de la desnutrición no explica aisladamente las dificultades cognitivas de los niños que viven en condiciones de pobreza. Asimismo, tales resultados destacan que los niños pobres, independientemente de su estado nutricional, manifestarían una disminución de sus capacidades cognitivas. Esto sugiere que las privaciones de índole material y simbólica vinculadas a la pobreza, afectarían tales capacidades, pudiendo ser determinantes más importantes que el estado nutricional del niño. Finalmente, se concluye señalando la importancia de una revisión conceptual del vínculo entre desnutrición y rendimiento cognitivo. En este sentido, algunos autores han iniciado una reconceptualización de tal relación, efectuando un desplazamiento desde una consideración unicausal y directa de dicha relación, hacia una comprensión desde la complejidad. Es decir, han incluido la desnutrición dentro de un modelo explicativo amplio, que contempla su interacción con otros factores de riesgo vinculados a condiciones más generales de vida. Las deficiencias nutricionales no se establecen en un vacío sociocultural y económico, y constituyen en sí mismas una problemática social, que excede lo estrictamente nutricional. Estimulación recibida en el hogar, pautas de crianza, acceso al sistema de salud, escolaridad y empleo de los padres, son algunos aspectos, generalmente vinculados al nivel socioeconómico, que junto al estado nutricional podrían condicionar el desarrollo cognitivo infantil. La complejidad de las interacciones demanda la realización de investigaciones que efectúen análisis multivariados de las diferentes variables influyentes en el rendimiento cognitivo. De lo contrario, el estudio aislado de la desnutrición, podría conducir a resultados incompletos y de poco valor heurístico o al sobredimensionamiento de los efectos de la misma
Resumo:
Temática principal: el presente trabajo, forma parte de la mesa temática autoconvocada 'familias, parejas y diversidad. Avances de investigación' y se enmarca en la investigación en curso 'modalidades de la diversidad en el ejercicio de la parentalidad y la pareja' (Facultad de Psicología. UNLP). Se propone una aproximación a nuevas presentaciones de la maternidad actual. Objetivos: en primer lugar, se hará una breve referencia a los objetivos de la investigación, las hipótesis que orientan las indagaciones y los lineamientos metodológicos. En cuanto a los objetivos de la tarea investigativa, se propone: investigar diferentes organizaciones familiares no convencionales; indagar sus modos de funcionamiento y de ejercicio de la parentalidad; analizar las particularidades delejercicio de la parentalidad, en familias con pareja del mismo sexo; comparar lo indagado en la presente investigación con materiales de las anteriores. En un segundo momento, se desarrolla lo relevado en relación a las presentaciones actuales de la maternidad. Metodología:se implementa una metodología cualitativa, centrada en la diversidad como postura epistemológica. Se selecciona un muestreo intencional: organizaciones familiares no tradicionales (uniparentales, ensambladas, entre otras); parejas del mismo sexo con y sin hijos; parejas de diferente sexo sin hijos, por elección e informantes clave. Se implementan entrevistas en profundidad, individuales y vinculares con madres y/o padres y parejas, realizadas por dos investigadores formados en abordajes vinculares. Resultados: la interpretación de los hallazgos y conclusiones tienen el carácter de provisorias y parciales, por partir de los primero datos relevados en el trabajo de campo. Se exploran y muestran algunos novedosos avatares que van surgiendo en nuestro medio, relativos a la elección de un grupo de mujeres de construir un proyecto de maternidad sin el complemento de su inclusión en una pareja: a partir de una gestación por fertilización asistidas en dos de los casos; por embarazo de una pareja ocasional con la que la mujer decide no convivir, ni darle participación en la crianza. Surge como recurrente, una primera presentación como supermadres autosuficientes, que no necesitan de la ayuda de otros. La descripción de la cotidianeidad, desmiente esta afirmación. Como singular, una de las madres ha construido una familia simbólica consensuada con amigos: abuelos, tíos y primos por afinidad. En esta construcción no dejaría de estar presente la representación de la familia tradicional. Desde el vínculo filial, ante la interrogación por parte de los pares escolares, surge la necesidad de conocer la identidad concreta del padre. Esto genera la representación de su falta y la necesidad de las madres de explicitar el origen o bien, el modo de concepción al que recurrieron. Conclusiones: se plantea como interrogante, si estas elecciones significan una persistencia de la figura de la mujer como madre ; si sería un retorno a la tradicional representación de la mujer o una nueva salida ante los reiterados fracasos del vínculo de pareja, donde el vínculo filial aparecería como un refugio más seguro. A su vez, van surgiendo, motivaciones ligadas a la búsqueda de conjurar la soledad y al deseo/anhelo narcisista de trascendencia, inherente a la condición humana. En una primera mirada, estas configuraciones podrían presentarse como una descomplejización de la parentalidad. Pero en sus singularidades, pueden ser oportunidad de construcciones creativas
Resumo:
En la Argentina existen muchos avances en la incorporación de los aspectos psicológicos y sociales en la atención de la salud en la infancia. Sin embargo, dichos avances aún no han incluido de manera significativa la perspectiva de género en la atención, tal como lo promueven los consensos internacionales. Con el fin de medir el grado en el cual estos avances han sido incorporados en las prácticas, esta investigación intenta identificar el modo en el cual los/as profesionales de la salud que atienden niños/as, han incorporado este bagaje en su práctica cotidiana. Esta incorporación se puede ubicar en los siguientes aspectos: epidemiología diferencial por género en la infancia, incluyendo la mayor prevalencia de un tipo de problemática en alguno de los dos sexos, así como el impacto que están teniendo en la actualidad las expectativas en los cambios ligados a los roles de género, los modos de crianza de las nuevas configuraciones familiares (monoparentales, homoparentales, ensambladas) y los llamados trastornos en la identidad de género (intersexualidad, transexualidad, travestismo) sobre la salud en la infancia
Resumo:
Desde mediados del siglo pasado, las mujeres han logrado importantes conquistas sociales y laborales tendientes a lograr una mayor igualdad de género. Pese a estos avances, el prejuicio sexista y la discriminación de género siguen estando extendidos en la mayoría de los países, asumiendo modalidades benévolas y difíciles de reconocer. A nivel laboral, los hombres, en comparación con las mujeres, siguen ganando más dinero y ocupando con mayor frecuencia puestos jerárquicos de toma de decisiones. Para explicar esta problemática, los especialistas han postulado la existencia de prejuicios sexistas (hostiles y benévolos) que usualmente se expresan en comportamientos de discriminación de género. Estos prejuicios generan un fenómeno conocido como 'laberinto de cristal', un conjunto de barreras invisibles y artificiales que obstaculizan el avance laboral-profesional de muchas mujeres calificadas dentro de sus organizaciones. Frente a esta situación, el objetivo del presente trabajo, enmarcado en el desarrollo de la tesis doctoral del autor, es analizar las características del prejuicio sexista (hostil y benévolo) y la tendencia a la discriminación de género en el lugar de trabajo. La muestra estuvo conformada por 235 trabajadores (52varones; promedio de edad 36.6 años) de organizaciones públicas y privadas de diversos rubros de la provincia de Santa Fe. La recolección de los datos se efectuó en los horarios habituales de trabajo, siendo la participación anónima y voluntaria. La batería de exploración estuvo integrada por la adaptación argentina del Inventario de Sexismo Ambivalente, un conjunto de escenarios para medir la tendencia a la discriminación de género en el lugar de trabajo, la adaptación argentina de la Escala de Deseabilidad Social del EPQ de Eysenck, una sección de datos sociodemográficos y el correspondiente consentimiento informado. Los resultados indican niveles medios de sexismo hostil y sexismo benévolo, y baja tendencia a la discriminación de género a nivel laboral. De los casos donde se registró esta última variable, predomina la discriminación contra las mujeres por embarazo o maternidad, seguida por la discriminación en decisiones de promoción. Los análisis de correlación mostraron que: (a)La mayor educación, menores montos de sexismo benévolo y menor tendencia a la discriminación de género en el lugar de trabajo; (b) a mayor tamaño organizacional, menor sexismo; (c) a mayor sexismo (hostil o benévolo), mayor tendencia a la discriminación de género; (d) a mayor sexismo hostil, menor deseabilidad social. A su vez, las pruebas de diferencia de medias efectuadas evidenciaron que: (e) los varones presentan mayor prejuicio sexista y mayor tendencia a la discriminación de género que las mujeres, quienes registran mayor deseabilidad social; (f) los trabajadores con nivel educativo universitario exhiben menores montos de sexismo benévolo; (g) en el sector privado se registra mayor tendencia a la discriminación que en el sector público; (h) en cuanto al ramo de actividad, los trabajadores de la administración pública informan menos sexismo benévolo que los pertenecientes a la industria o a la educación/investigación (téngase en cuenta que el 71.1de las personas encuestadas en la administración pública eran mujeres y el 97.1del ramo industria eran varones). Más allá del avance femenino en materia de igualdad de género y de la existencia de un amplio marco legal que prohíbe la discriminación, las mujeres continúan atravesando experiencias sexistas originadas en estereotipos de género tradicionales. De acuerdo con los resultados, a nivel laboral estas experiencias se traducen fundamentalmente en rechazo de posibilidades de promoción y discriminación por embarazo o maternidad. En general, estos actos fueron justificados apelando a estereotipos propios del sexismo benévolo, que plantean a la mujer como un ser puro, delicado, dependiente, que debe ser cuidado y protegido, siendo su responsabilidad primera el cuidado del hogar y la crianza de los hijos. La maternidad aparece así como un rol que perjudica el trabajo formal, especialmente de mediana y alta jerarquía. Asimismo, en línea con estudios anteriores, el prejuicio sexista se vinculó negativamente con el nivel educativo y el tamaño de la organización, y positivamente con la tendencia a los comportamientos de discriminación de género. Estos hallazgos resaltan la necesidad de crear estrategias tendientes a modificar estos prejuicios en los trabajadores, sobre todo de empresas privadas y organizaciones pequeñas, con el fin último de promover mayores niveles de igualdad de género a nivel laboral
Resumo:
Masten y Gewirtz (2006) sostienen que si bien desde siempre las historias que narran el triunfo de una persona frente a la adversidad han ejercido fascinación sobre la gente, el estudio científico de la resiliencia se inició entre los años sesenta y setenta. En 1990 Rutter sostuvo que el interés por conocer las características de aquellas personas que desarrollan 'resiliencia' a pesar de las condiciones adversas de crianza o en circunstancias que aumentan el riesgo de presentar psicopatologías, provenía de tres fuentes: una, el aumento y consistencia de datos empíricos sobre diferencias individuales en poblaciones infantiles de alto riesgo. La segunda se originó en las investigaciones sobre temperamento realizadas en USA en los años setenta. Para comprender la idea anglosajona de temperamento hay que pensar en 'tendencias a desarrollar la personalidad de una cierta manera' (Cyrulnik, 2008: 43). La tercera línea tuvo su origen en la observación de las distintas formas en que las personas enfrentan las experiencias vitales (Becoña, 2006). La primera generación de investigaciones eran consistentes entre sí sugiriendo la poderosa influencia del proceso adaptativo común y el interjuego de genes y experiencia en el desarrollo infantil. (Masten y Gewirtz, 2006) Uno de estos estudios pioneros fue realizado por Werner y Smith con 698 niños nacidos en Kauai (Hawai) en 1955. La totalidad de la población estudiada estaba en condiciones de riesgo pero aproximadamente un tercio estaba sujeto a múltiples factores de alto riesgo, a saber: pobreza, discordia parental, psicopatología parental y estrés perinatal. El seguimiento de la cohorte se realizó hasta los 40 años. Uno de los hallazgos fue que muchos de los jóvenes del subgrupo de alto riesgo que habían desarrollado problemas en la adolescencia se habían convertido en adultos con relaciones estables y satisfactorias en la familia y el trabajo. Solamente uno de cada seis adultos manifestaba problemas de diversa índole: pobreza, conflictos domésticos, violencia, abuso de sustancias, problemas de salud mental y baja autoestima. (Benard, 2004) Otra investigación seminal sobre resiliencia surgió de la búsqueda de las causas de la enfermedad mental. Los investigadores se concentraron en los hijos de padres mentalmente enfermos y advirtieron que muchos de estos niños se desarrollaban bien y no presentaban problemas de salud mental. Siguieron una perspectiva integrativa y de colaboración entre los especialistas clínicos y del desarrollo infantil y elaboraron un programa completo de investigación sobre resiliencia que duró varias décadas. (Masten y Powell, 2003) Estos primeros estudios se centraron en las cualidades de los niños resilientes, consideradas como atributos de los propios niños, solo posteriormente se observó la relación con características de las familias y sus comunidades de pertenencia. (Kotliarenco, Cáceres, y Fontecilla, 1997). Durante bastante tiempo se pensó que resiliencia era equivalente a invulnerabilidad y si bien desde la década del setenta dejó de utilizarse este término, aún hoy se considera que resiliencia y vulnerabilidad son los polos opuestos de un mismo continuo. Así encontramos en revisiones recientes que 'La vulnerabilidad se refiere a incrementar la probabilidad de un resultado negativo, típicamente como un resultado de la exposición al riesgo. La resiliencia se refiere a evitar los problemas asociados con ser vulnerable' aunque se admite en forma generalizada que este concepto se utiliza para referirse a 'un positivo y efectivo afrontamiento en respuesta al riesgo o a la adversidad'. (Becoña.2006:131). En sentido amplio, la vulnerabilidad afecta a cualquier sistema con un mínimo de organización sea éste natural, artificial o social. Cualquier análisis epistemológico de este concepto debe comenzar reconociendo que la diversidad de criterios responde a las diferentes unidades de análisis que recortan los investigadores y que sus definiciones dependen de los elementos articuladores que toman en consideración en cada dominio. En nuestro caso, - una investigación epidemiológica sobre salud mental infantil- partimos de dos supuestos básicos: a) la cualidad de vulnerable es una condición de todos los seres humanos pero no alcanza a todos por igual ni de la misma manera y b) toda vulnerabilidad es vulnerabilidad psicosocial dado que impacta de modo directo o indirecto sobre los sujetos en estudio. Sin embargo, el examen sería incompleto sino no se despeja previamente vulnerabilidad psicosocial de los conceptos de resiliencia y trauma con los que se lo relaciona en salud y educación. Algunas lecturas simplificadoras entienden que resiliencia es el resultado de la sumatoria de factores protectores mientras que vulnerabilidad es la sumatoria de los factores de riesgo. Dada la abundancia de investigaciones sobre estas temáticas, nos limitaremos a realizar una breve aproximación conceptual a cada uno de ellos y sus vinculaciones
Resumo:
Este estudio se centra en los llamados casos de abusos sexuales intrafamiliares (ASI), donde niños y adolescentes, o aun personas que ya han superado tales etapas vitales, se encuentran condicionadas en su integridad sexual por miembros de su entorno familiar con trato cotidiano, prolongado en el tiempo y con secuelas graves respecto a su estructuración subjetiva y a su vinculación social. En esta producción se intenta conceptualizar dentro de la problemática e abuso sexual, un fenómeno, que si bien no es nuevo, permanece oscurecido por otros que lo anteceden o del que derivan pero sin reconocerlo. Para ello se parte de la experiencia acumulada y del análisis de los textos más importantes sobre el tema. Además de la vinculación con otros profesionales que lo investigan. Esto promovió el deseo de profundizar en un campo, que si bien actualmente es rico en producciones teóricas, se visualiza como abierto, por su complejidad y demanda en aumento, a nuevas propuestas. Por otro lado el abuso sexual, en la actualidad, está reconocido como un hecho que convoca y requiere del compromiso de los profesionales de la salud, para realizar aportes que permitan un abordaje especializado y pertinente de la problemática. Este trabajo quiere brindar un primer punto fundamental para comprender, evaluar y tratar el abuso sexual, propone pensar una inscripción psíquica que funciona como potencialidad, es decir la construcción de atributos particulares que condicionan la concreción de la acción por parte del agresor y concomitantemente, la conversión de un sujeto en víctima de un abuso sexual, en especial cuando es intrafamiliar y prolongado. A tales condicionamientos se los llamará, aquí - Abusabilidad-. El enfoque supone la construcción de una característica particular en un sujeto que favorece que sea abusado, esta característica incluye componentes intrapsíquicos y vinculares, en un entramado complejo. El mismo requiere de una visión transdisciplinaria que permita captar el juego en el que se incluye tanto al abusador como al abusado y a todo el grupo primario al que pertenecen. La participación en este juego es lo que induce al abuso y lo sostiene en el tiempo. De él forma parte todo su grupo familiar y/o de crianza, por acción u omisión, en una característica que se llamará en este trabajo -ceguera y/o parálisis vincular- , y que presenta tanto la víctima directa como sus hermanos, madre u otros familiares. La víctima presenta, simultáneamente, la imposibilidad de defenderse y de pedir ayuda, y es inducida por el abusador y por el contexto en el que se da el abuso, al mantenimiento de un pacto de silencio. En el presente trabajo se intentará revertir el consenso establecido de que todo sujeto es igualmente pasible de resultar victimizado. La reversión surge, por un lado, de obviedades y experiencias (no hay dos sujetos iguales ni contextos idénticos); y, por otro, de lecturas que han orientado la reflexión hacia una dimensión crítica cuestionadora de lo instituido
Resumo:
La desnutrición es definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como el desbalance celular entre el suministro de nutrientes y energía que el cuerpo demanda para asegurar su crecimiento, su mantenimiento y las diferentes funciones específicas del mismo. En Argentina, las alteraciones del estado nutricional más prevalentes en niños menores de 5 años son: anemia, deficiencia de hierro, baja talla, sobrepeso y obesidad. Por el contrario, en nuestro país, la desnutrición aguda presenta prevalencias marginales desde una perspectiva poblacional. Los efectos perjudiciales de la desnutrición dependen de la gravedad de la misma. En lo concerniente al rendimiento cognitivo, la literatura sugiere que en los casos de desnutrición severa en la vida temprana, las consecuencias sobre el mismo ocurren al margen de las condiciones sociales, principalmente si el déficit se produce durante la concepción y los primeros tres años de vida. Sin embargo, no hay conclusiones definitivas sobre tal relación en los casos de desnutrición moderada y leve, que son los que prevalecen en nuestro país. En el presente trabajo se analizan algunas investigaciones que han evaluado la influencia de la desnutrición leve y moderada sobre el rendimiento cognitivo de niños que viven en condiciones de pobreza. El objetivo de tal análisis consiste en clarificar el vínculo entre ambas variables, contrastando los resultados a los que arriban los distintos estudios. Las investigaciones examinadas, muestran que no habría diferencias significativas en el desempeño cognitivo de los niños en función de su estado nutricional. Esto indicaría que el fenómeno de la desnutrición no explica aisladamente las dificultades cognitivas de los niños que viven en condiciones de pobreza. Asimismo, tales resultados destacan que los niños pobres, independientemente de su estado nutricional, manifestarían una disminución de sus capacidades cognitivas. Esto sugiere que las privaciones de índole material y simbólica vinculadas a la pobreza, afectarían tales capacidades, pudiendo ser determinantes más importantes que el estado nutricional del niño. Finalmente, se concluye señalando la importancia de una revisión conceptual del vínculo entre desnutrición y rendimiento cognitivo. En este sentido, algunos autores han iniciado una reconceptualización de tal relación, efectuando un desplazamiento desde una consideración unicausal y directa de dicha relación, hacia una comprensión desde la complejidad. Es decir, han incluido la desnutrición dentro de un modelo explicativo amplio, que contempla su interacción con otros factores de riesgo vinculados a condiciones más generales de vida. Las deficiencias nutricionales no se establecen en un vacío sociocultural y económico, y constituyen en sí mismas una problemática social, que excede lo estrictamente nutricional. Estimulación recibida en el hogar, pautas de crianza, acceso al sistema de salud, escolaridad y empleo de los padres, son algunos aspectos, generalmente vinculados al nivel socioeconómico, que junto al estado nutricional podrían condicionar el desarrollo cognitivo infantil. La complejidad de las interacciones demanda la realización de investigaciones que efectúen análisis multivariados de las diferentes variables influyentes en el rendimiento cognitivo. De lo contrario, el estudio aislado de la desnutrición, podría conducir a resultados incompletos y de poco valor heurístico o al sobredimensionamiento de los efectos de la misma
Resumo:
Temática principal: el presente trabajo, forma parte de la mesa temática autoconvocada 'familias, parejas y diversidad. Avances de investigación' y se enmarca en la investigación en curso 'modalidades de la diversidad en el ejercicio de la parentalidad y la pareja' (Facultad de Psicología. UNLP). Se propone una aproximación a nuevas presentaciones de la maternidad actual. Objetivos: en primer lugar, se hará una breve referencia a los objetivos de la investigación, las hipótesis que orientan las indagaciones y los lineamientos metodológicos. En cuanto a los objetivos de la tarea investigativa, se propone: investigar diferentes organizaciones familiares no convencionales; indagar sus modos de funcionamiento y de ejercicio de la parentalidad; analizar las particularidades delejercicio de la parentalidad, en familias con pareja del mismo sexo; comparar lo indagado en la presente investigación con materiales de las anteriores. En un segundo momento, se desarrolla lo relevado en relación a las presentaciones actuales de la maternidad. Metodología:se implementa una metodología cualitativa, centrada en la diversidad como postura epistemológica. Se selecciona un muestreo intencional: organizaciones familiares no tradicionales (uniparentales, ensambladas, entre otras); parejas del mismo sexo con y sin hijos; parejas de diferente sexo sin hijos, por elección e informantes clave. Se implementan entrevistas en profundidad, individuales y vinculares con madres y/o padres y parejas, realizadas por dos investigadores formados en abordajes vinculares. Resultados: la interpretación de los hallazgos y conclusiones tienen el carácter de provisorias y parciales, por partir de los primero datos relevados en el trabajo de campo. Se exploran y muestran algunos novedosos avatares que van surgiendo en nuestro medio, relativos a la elección de un grupo de mujeres de construir un proyecto de maternidad sin el complemento de su inclusión en una pareja: a partir de una gestación por fertilización asistidas en dos de los casos; por embarazo de una pareja ocasional con la que la mujer decide no convivir, ni darle participación en la crianza. Surge como recurrente, una primera presentación como supermadres autosuficientes, que no necesitan de la ayuda de otros. La descripción de la cotidianeidad, desmiente esta afirmación. Como singular, una de las madres ha construido una familia simbólica consensuada con amigos: abuelos, tíos y primos por afinidad. En esta construcción no dejaría de estar presente la representación de la familia tradicional. Desde el vínculo filial, ante la interrogación por parte de los pares escolares, surge la necesidad de conocer la identidad concreta del padre. Esto genera la representación de su falta y la necesidad de las madres de explicitar el origen o bien, el modo de concepción al que recurrieron. Conclusiones: se plantea como interrogante, si estas elecciones significan una persistencia de la figura de la mujer como madre ; si sería un retorno a la tradicional representación de la mujer o una nueva salida ante los reiterados fracasos del vínculo de pareja, donde el vínculo filial aparecería como un refugio más seguro. A su vez, van surgiendo, motivaciones ligadas a la búsqueda de conjurar la soledad y al deseo/anhelo narcisista de trascendencia, inherente a la condición humana. En una primera mirada, estas configuraciones podrían presentarse como una descomplejización de la parentalidad. Pero en sus singularidades, pueden ser oportunidad de construcciones creativas
Resumo:
Se presenta una síntesis del nuevo proyecto de investigación, en el que se propone indagar las Modalidades de la diversidad en el ejercicio de la parentalidad y en la pareja , en dos campos de problemáticas. Una refiere a la diversidad en relación con las múltiples formas que adquieren hoy las configuraciones vinculares familiares. La otra a la diversidad en relación con la conformación sexual de la pareja. Se desarrollan los núcleos conceptuales con que se abordarán dichas problemáticas: origen y transformaciones del patriarcado ; sexualidad y diversidad ; complejización y ampliación de los conceptos del marco teórico que se vienen utilizando desde las anteriores investigaciones: concepto de familia (organización y aspectos estructurales), principios de permanencia y cambio , vínculo , diversidad y parejas parentales del mismo sexo. De investigaciones anteriores se evalúa que persiste la representación de la madre como eje central de la crianza y que el reparto del poder entre madres y padres en la familia y entre varones y mujeres en la sociedad surge con vacilaciones y ambivalencias. Orientará la presente investigación la indagación sobre los modos actuales de expresión de estas representaciones, en familias de organización y configuración de la pareja no convencionales. El análisis de sus transformaciones posibilitará dilucidar su relación con nuevas formas de lazo familiar que den cuenta de la diversidad
Resumo:
En la Argentina existen muchos avances en la incorporación de los aspectos psicológicos y sociales en la atención de la salud en la infancia. Sin embargo, dichos avances aún no han incluido de manera significativa la perspectiva de género en la atención, tal como lo promueven los consensos internacionales. Con el fin de medir el grado en el cual estos avances han sido incorporados en las prácticas, esta investigación intenta identificar el modo en el cual los/as profesionales de la salud que atienden niños/as, han incorporado este bagaje en su práctica cotidiana. Esta incorporación se puede ubicar en los siguientes aspectos: epidemiología diferencial por género en la infancia, incluyendo la mayor prevalencia de un tipo de problemática en alguno de los dos sexos, así como el impacto que están teniendo en la actualidad las expectativas en los cambios ligados a los roles de género, los modos de crianza de las nuevas configuraciones familiares (monoparentales, homoparentales, ensambladas) y los llamados trastornos en la identidad de género (intersexualidad, transexualidad, travestismo) sobre la salud en la infancia
Resumo:
The aim of this work was to evaluate different management strategies to optimize rabbit production under chronic heat stress. To achieve it, three trials were conducted. In the first trial, to find the optimal cage density in tropical very dry forest condition, were measured growth performance, mortality rate, injured animals and carcass performance over an initial population of 300 cross-breed rabbits of New Zealand, California, Butterfly, Dutch and Satin, weaned at 30 days (535 ± 8 g, standard error). Treatments evaluated were: 6, 12, 18 and 24 rabbits/m2 (3, 6, 9 and 12 rabbits/cage, respectively, each cage of 0.5 m2). The maximal temperature-humidity index indicated a severe heat stress from weaning to 2.2 kg body weight (experimental time). At the end of experimental period 10, 20, 30 and 30 rabbits from the treatments of 6, 12, 18 and 24 rabbits/m2, respectively, were slaughtered and carcass performance recorded. Average daily gain and feed intake decreased by 0.31 ± 0.070 and 1.20 ± 0.25 g, respectively, per each unit that the density increased at the beginning of the experiment (P = 0.001). It increased the length of the fattening period by 0.91 ± 0.16 d (P = 0.001) per each unit of increment of density. However, rabbit production (kg/m2) increased linear and quadratically with the density (P < 0.008). Animals housed at the highest density compared to the lower one tended to show a higher incidence of ringworm (68.9 vs 39.4%; P = 0.075), injured animals (16.8 vs 3.03%; P = 0.12) and mortality (20.5 vs 9.63%; P = 0.043). The proportion of scapular fat (P = 0.042) increased linearly with increasing levels of density. Increasing density reduced linearly dorsal length (P = 0.001), and reduced linear and quadratically drip loss percentage (P = 0.097 and 0.018, respectively). In the second trial, 46 nulliparous rabbit does (23 clipped and 23 unclipped) with a BW of 3.67 ± 0.05 kg (s.e.) were used to evaluate heat stress and circadian rhythms comparing unclipped and clipped rabbit does, and to study if a more extensive breeding system increase litters performance at weaning without impairing rabbit doe performance,. Rectal temperature, feed and water 4 intake were recorded for 24 h. Rabbit does were mated 7 d after circadian measurements, and randomly assigned to two breeding systems. Control (C): mated at 14 d after parturition + litter weaned at 35 d of age. Extensive (E): mate at 21 after parturition + litter weaned at 42 d of age. The first three cycles were evaluated concerning to rabbit doe and litter performance. Two hundred twenty eight weaned rabbits, were divided into two cage sizes: 0.5 and 0.25 m2 with same density (16 rabbit/m2) and growing performance was recorded. Farm and rectal temperatures were minimal and feed and water intake maximal during the night (P < 0.001). Unclipped rabbit does showed higher rectal temperature (P = 0.045) and lower feed intake respect to clipped does (P = 0.019) which suggest a lower heat stress in the latter. Kits weaned per litter was reduced by 33% (P=0.038) in C group. This reduction was more important in the 2nd and 3rd cycles compared to the first (P ≤ 0.054). Rabbit doe feed efficiency tended to decrease in E respect C group (P = 0.093), whereas it was impaired from the first to the third cycle by 48% (P = 0.014). Growing rabbits from the E group were heavier at weaning (by 38%. P < 0.001), showed a higher feed intake (+7.4%) and lower feed efficiency (-8.4%) throughout the fattening period (P ≤ 0.056) respect to C group. Cage size had minor influence in growing performance. In the third trial, forty five non pregnant and non lactating rabbit does (21 nulliparous and 24 multiparous) were assigned randomly to farm water and to potable water to study if a water quality improvement can affect positively rabbit doe response to heat stress during pregnancy and lactation. A transponder was implanted in each animal to record subcutaneous temperature at 07:30 and 14:30 h. Experimental period extended from pregnancy (with no lactation) to the next lactation (until day 28). Body temperature and milk production were recorded daily, and body condition, feed and water intake weekly. Water quality did not affect any trait (P ≥ 0.15). Pregnant rabbit does were classified as does that weaned (W: 47%), not weaned (NW: 44%) or those pregnant that did not deliver (NB: 9%). Body temperature and feed intake decreased during pregnancy (P ≤ 0.031), but water intake remained constant. In this period body temperature decreased with metabolic weight (P ≤ 0.009). In W and NW does, 5 from mating to birth energy and protein balance impaired (P≤0.011). Body temperature of W does tended to be the lowest (P ≤ 0.090). Pregnancy length and total number of kits born tended to be longer and higher in NW than in W does (P = 0.10 and 0.053, respectively). Kit mortality at birth and from birth to 14 d of lactation was high, being worse for NW than for W does (97 vs. 40%; P<0.001). Body temperature during lactation was maximal at day 12, and milk production increased it (P ≤ 0.025). . In conclusion, in our heat stress conditions densities higher than 18 rabbits/m2 (34 kg/m2) at the end of fattening, are not recommended despite cage size, gestation and lactation productivity impaired not only when lactation is extended and along successive reproductive cycles but also due to a reduced embryo/kit survival and finally water quality improvement did not attenuate negative effect of heat stress. RESUMEN El propósito de éste trabajo fue evaluar diferentes estrategias de manejo para optimizar la producción de conejos bajo estrés térmico. Para lo cual se desarrollaron tres experimentos. En el primer experimento, para encontrar el número óptimo de gazapos por m2 de jaula durante el cebo en condiciones de bosque muy seco tropical, se estudiaron los rendimientos durante el cebo, mortalidad, animales lesionados y rendimiento de la canal sobre una población inicial de 300 conejos mestizos de Nueva Zelanda, California, Mariposa, Holandés y Satin, destetados a los 30 días de edad (535 ± 8g, error estándar). Los tratamientos evaluados fueron: 6, 12, 18 y 24 conejos/m2 (3, 6, 9 y 12 conejos/jaula, respectivamente, en jaulas de 0.5 m2). Durante el período experimental (destete a 2.2 kg de peso vivo), se observaron valores de THI correspondientes con un estrés térmico severo (THI max. De 31 a 35). Al final del período experimental, 10, 20, 30, y 30 conejos de los tratamientos con densidades de 6, 12, 18 y 24 conejos/m2, respectivamente, fueron sacrificados y su canal fue valorada. El promedio de la ganancia diaria y el consumo de alimento disminuyeron en 0.31 ± 0.070 y 1.20 ± 0.25 g, respectivamente, por cada unidad de incremento en la densidad al inicio del experimento (P=0.001). Esto alargó el período de engorde en 0.91 ± 0.16 d (P=0.001) por cada unidad de incremento de la densidad. Sin embargo, la producción de conejos (kg/m2) aumentó lineal y cuadráticamente con la densidad (P<0.008). Los animales alojados en las mayores densidades en comparación con el resto tendieron a mostrar una mayore incidencia de tiña (68.9 vs 39.4%; P=0.075), de cantidad de animales heridos (16.8 vs 3.03%; P=0.12), así como de mortalidad (20.5 vs 9.63%; P=0.043). El aumento en la densidad aumentó linealmente la proporción de grasa escapular (P=0.042) y redujo linealmente la longitud dorsal (P=0.001), y lineal y cuadráticamente el porcentaje de pérdida por goteo (P=0.018). En el segundo experimento, 46 conejas nulliparas (23 rasuradas y 23 no rasuradas) con un peso vivo de 3.67 ± 0.05 kg (e.e.) fueron usadas para evaluar el estrés 8 térmico y los ritmos circadianos comparando conejas rasuradas o no, y estudiar si un sistema de crianza más extensivo mejora el desempeño de la camada al destete sin perjudicar la productividad de la coneja. Durante 24 h se midió la temperatura rectal, consumo de alimento y de agua. Las conejas fueron montadas 7 días después, y distribuidas en dos sistemas de crianza. El control (C): monta a 14 días posparto y destete a 35 d de edad. El extensivo (E): monta a 21 días posparto y destete a 42 d de edad. Se controló la productividad de la coneja y la camada durante los tres primeros ciclos. Doscientos veintiocho gazapos fueron distribuidos en dos tamaños de jaulas (0.5 y 0.25 m2) con la misma densidad (16 conejos/m2) y se controlaron sus rendimientos productivos. Durante la noche se observaron los valores mínimos para la temperatura ambiental y rectal, y los máximos para consumo de alimento y agua (P< 0.001). Las conejas no rasuradas mostraron mayor temperatura rectal (P=0.045) y menores valores de consumo de alimento con respecto a las conejas rasuradas (P=0.019), lo que sugiere un menor estrés térmico en las últimas. El número de gazapos destetados por camada se redujo en 33% (P=0.038) en el grupo C. Este comportamiento se acentuó en el 2do y 3er ciclo en comparación con el primero (P≤0.054). La eficiencia alimenticia de las conejas tendió a disminuir en el grupo E con respecto al grupo C (P=0.093), dicha tendencia se acentúa del primer al tercer ciclo en un 48% (P=0.014). Los gazapos en fase de crecimiento provenientes del grupo E fueron más pesados al momento del destete (en 38% P<0.001), mostrando un mayor consumo de alimento (+7.4%) y menor eficiencia alimenticia (-8.4%) a lo largo del engorde (P≤0.056) con respecto al grupo C. El tamaño de la jaula tuvo una mínima influencia en el comportamiento durante el crecimiento de éstos gazapos. En el tercer experimento, cuarenta y cinco conejas no gestantes ni lactantes (21 nulíparas y 24 multíparas) se les asignó al azar agua dos tipos de agua: común de la granja y agua potable, con el fin de estudiar si una mejora en la calidad del agua puede afectar positivamente la respuesta de la coneja al estrés térmico durante la gestación y la lactancia. Se les implantó un transponder para registrar la temperatura subcutánea a las 7:30 y a las 14:30 h. El período experimental se extendió desde la gestación (sin 9 lactancia) hasta la lactanción consecutiva (hasta los 28 días). La temperatura corporal y la producción de leche se controlaron diariamente, y la condición corporal, consumo de agua y alimento, semanalmente. La calidad del agua no afectó a ninguna variable (P≥0.15). Las conejas preñadas fueron clasificadas como conejas que destetaron (W: 47%), que no destetaron (NW:44%) o aquellas que no parieron (NB: 9%). La temperatura corporal y consumo de alimento disminuyeron durante la gestación (P≤0.031), mientras que el consumo de agua se mantuvo constante. La temperatura corporal descendió con el peso metabólico durante la gestación (P≤0.009). El balance de energía y proteína disminuyó desde la monta al parto para las conejas W y NW (P≤0.011). Durante la gestación la temperatura corporal tendió a ser menor en las conejas W (P≤0.090). La longitud de la gestación y el número total de gazapos nacidos tendieron a ser mayores en conejas NW que en conejas W (P=0.10 y 0.053, respectivamente). La mortalidad de los gazapos al parto y del parto a los 14 días de lactancia fue alta, siendo peor para las conejas NW que para las W (97 vs 40%; P<0.001). Durante la lactancia la temperatura corporal alcanzó su valor máximo para el día 12, y la producción de leche indujo un incremento en la misma (P≤0.025). En conclusión, en nuestras condiciones de estrés térmico y sin importar el tamaño de la jaula, no se recomiendan densidades mayores a 18 conejos/m2 (34 kg/m2) al final del engorde. La productividad de la gestación y la lactancia disminuyen cuando la lactancia es mayor y se suceden varios ciclos reproductivos seguidos. Esto se debe al efecto negativo del estrés térmico sobre la vitalidad y supervivencia del embrión/gazapo. La mejora de la calidad del agua atenuó el efecto negativo del estrés térmico. Las conejas más productoras parece que son aquéllas que consiguen manejar mejor el estrés térmico.
Resumo:
La variedad Tempranillo es originaria de la zona limítrofe entre La Rioja y Burgos, se ha extendido siguiendo la ruta de los monasterios Cirtescienses por toda España, llegando así a Madrid, Valdepeñas, Cataluña, Extremadura y toda la ribera del río Duero, donde se ha extendido desde su nacimiento hasta Portugal. •La variedad Tempranillo es la variedad por excelencia dedicada en España a la producción de vinos de crianza y reserva. Actualmente es importante además de en España en Portugal y Argentina, y se esta empezando a cultivar en Australia, México y California para intentar imitar los grandes vinos de Rioja y Ribera de Duero que son los que dan más fama a esta variedad.