11 resultados para Minha Casa Minha Vida
em Memoria Académica - FaHCE, UNLP - Argentina
Resumo:
El aumento de la magnitud de la población que vive en la informalidad y en la precariedad urbana, en un contexto macroeconómico de mayor inequidad que en décadas anteriores, y la imposibilidad de brindar un hábitat adecuado y digno a través de las políticas públicas de vivienda que se implementaban tradicionalmente, ha llevado a que los gobiernos encaren, en especial desde la década del noventa del siglo pasado, políticas tendientes a mejorar la situación urbana de los pobres informales. El tipo de intervención que el Estado adopte para cumplir este objetivo dependerá de la visión que éste tenga de la informalidad urbana y sobre el conjunto de medidas a tomar para contrarrestarla
Resumo:
El aumento de la magnitud de la población que vive en la informalidad y en la precariedad urbana, en un contexto macroeconómico de mayor inequidad que en décadas anteriores, y la imposibilidad de brindar un hábitat adecuado y digno a través de las políticas públicas de vivienda que se implementaban tradicionalmente, ha llevado a que los gobiernos encaren, en especial desde la década del noventa del siglo pasado, políticas tendientes a mejorar la situación urbana de los pobres informales. El tipo de intervención que el Estado adopte para cumplir este objetivo dependerá de la visión que éste tenga de la informalidad urbana y sobre el conjunto de medidas a tomar para contrarrestarla
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El aumento de la magnitud de la población que vive en la informalidad y en la precariedad urbana, en un contexto macroeconómico de mayor inequidad que en décadas anteriores, y la imposibilidad de brindar un hábitat adecuado y digno a través de las políticas públicas de vivienda que se implementaban tradicionalmente, ha llevado a que los gobiernos encaren, en especial desde la década del noventa del siglo pasado, políticas tendientes a mejorar la situación urbana de los pobres informales. El tipo de intervención que el Estado adopte para cumplir este objetivo dependerá de la visión que éste tenga de la informalidad urbana y sobre el conjunto de medidas a tomar para contrarrestarla
Resumo:
La presente investigación se propone analizar de qué manera influye la experiencia educativa extraescolar La Casa en la vida de los jóvenes que participan de sus actividades educativas. Dicha experiencia se lleva a cabo desde el año 2009 en El Retiro, barrio periférico de la ciudad de La Plata caracterizado por condiciones de pobreza estructural. La misma está organizada por un grupo de personas, en su mayoría estudiantes y graduados universitarios, quienes buscan, a través de actividades educativas, construir herramientas que les brinden mayor autonomía a los habitantes del barrio. La Casa se enmarca en un proceso histórico caracterizado por el surgimiento, desde la sociedad civil, de diferentes alternativas que buscan dar algún tipo de respuesta a las consecuencias sociales del proceso de polarización y fragmentación social que tuvo lugar a partir de las transformaciones de las últimas décadas. En este caso, La Casa hace foco en la cuestión educativa, considerándolo el eje fundamental para generar autonomía en los sujetos. Durante el año 2010 y principios de 2011 se llevó a cabo la presente investigación de corte cualitativo, la cual se valió de herramientas como la observación participante y la entrevista semi-estructurada para alcanzar el objetivo de dar cuenta de la influencia de esta experiencia en la vida de los jóvenes entre 13 y 18 años que participan de las actividades educativas que allí se desarrollan, tanto desde la perspectiva de los mismos jóvenes, como de los talleristas, familiares y otros actores de la comunidad. Por otra parte, la reconstrucción de esta experiencia, sus modificaciones a lo largo del tiempo, el modo en que los distintos actores que participan de ella ven a La Casa y los efectos que tiene en los jóvenes abre el camino para una reflexión crítica en torno a las potencialidades y limitaciones, a las tensiones y las oportunidades de experiencias de este tipo
Resumo:
La presente investigación se propone analizar de qué manera influye la experiencia educativa extraescolar La Casa en la vida de los jóvenes que participan de sus actividades educativas. Dicha experiencia se lleva a cabo desde el año 2009 en El Retiro, barrio periférico de la ciudad de La Plata caracterizado por condiciones de pobreza estructural. La misma está organizada por un grupo de personas, en su mayoría estudiantes y graduados universitarios, quienes buscan, a través de actividades educativas, construir herramientas que les brinden mayor autonomía a los habitantes del barrio. La Casa se enmarca en un proceso histórico caracterizado por el surgimiento, desde la sociedad civil, de diferentes alternativas que buscan dar algún tipo de respuesta a las consecuencias sociales del proceso de polarización y fragmentación social que tuvo lugar a partir de las transformaciones de las últimas décadas. En este caso, La Casa hace foco en la cuestión educativa, considerándolo el eje fundamental para generar autonomía en los sujetos. Durante el año 2010 y principios de 2011 se llevó a cabo la presente investigación de corte cualitativo, la cual se valió de herramientas como la observación participante y la entrevista semi-estructurada para alcanzar el objetivo de dar cuenta de la influencia de esta experiencia en la vida de los jóvenes entre 13 y 18 años que participan de las actividades educativas que allí se desarrollan, tanto desde la perspectiva de los mismos jóvenes, como de los talleristas, familiares y otros actores de la comunidad. Por otra parte, la reconstrucción de esta experiencia, sus modificaciones a lo largo del tiempo, el modo en que los distintos actores que participan de ella ven a La Casa y los efectos que tiene en los jóvenes abre el camino para una reflexión crítica en torno a las potencialidades y limitaciones, a las tensiones y las oportunidades de experiencias de este tipo
Resumo:
La presente investigación se propone analizar de qué manera influye la experiencia educativa extraescolar La Casa en la vida de los jóvenes que participan de sus actividades educativas. Dicha experiencia se lleva a cabo desde el año 2009 en El Retiro, barrio periférico de la ciudad de La Plata caracterizado por condiciones de pobreza estructural. La misma está organizada por un grupo de personas, en su mayoría estudiantes y graduados universitarios, quienes buscan, a través de actividades educativas, construir herramientas que les brinden mayor autonomía a los habitantes del barrio. La Casa se enmarca en un proceso histórico caracterizado por el surgimiento, desde la sociedad civil, de diferentes alternativas que buscan dar algún tipo de respuesta a las consecuencias sociales del proceso de polarización y fragmentación social que tuvo lugar a partir de las transformaciones de las últimas décadas. En este caso, La Casa hace foco en la cuestión educativa, considerándolo el eje fundamental para generar autonomía en los sujetos. Durante el año 2010 y principios de 2011 se llevó a cabo la presente investigación de corte cualitativo, la cual se valió de herramientas como la observación participante y la entrevista semi-estructurada para alcanzar el objetivo de dar cuenta de la influencia de esta experiencia en la vida de los jóvenes entre 13 y 18 años que participan de las actividades educativas que allí se desarrollan, tanto desde la perspectiva de los mismos jóvenes, como de los talleristas, familiares y otros actores de la comunidad. Por otra parte, la reconstrucción de esta experiencia, sus modificaciones a lo largo del tiempo, el modo en que los distintos actores que participan de ella ven a La Casa y los efectos que tiene en los jóvenes abre el camino para una reflexión crítica en torno a las potencialidades y limitaciones, a las tensiones y las oportunidades de experiencias de este tipo
Resumo:
El caso clínico presentado muestra el trabajo psicoterapéutico realizado con una paciente oncológica, dentro del marco de intervención en Psicooncología, en la fase final de la evolución tumoral del cáncer. Si hay algo impreciso, inasible, alterante, dilemático, generador de fantasías y angustias en nuestra labor, es el tiempo que transcurre en torno a la fase final de la vida del paciente. Trabajar con el paciente moribundo, implica trabajar con nuestra propia muerte. Muerte es una palabra temida, olvidada, rechazada, final de todo. Morir hoy en día es un acto triste y solitario en la Unidad de Terapia Intensiva de los hospitales, donde la atención es despersonalizada, donde el paciente pierde el derecho de opinar y se vuelve un cuerpo a ser tratado. El agonizante pierde su status y la experiencia de la muerte es destituida de contenido. Las personas al final de su vida prefieren realmente estar en su casa, con sus afectos, y no en una sala de hospital. En la inmensa mayoría de los pacientes se puede lograr el objetivo de que puedan permanecer libres de dolor y otros síntomas molestos, estando lúcidos y preparándose para morir. Quien recibe el diagnóstico de una enfermedad grave tiene que hacer un duelo, transitar un duelo. No hay duelo solamente en el que se queda, sino también en el que se va. El objeto de duelo en los pacientes terminales es la vida misma. Es fundamental trabajar en el paciente con sus miedos y con su depresión, posibilitándole la oportunidad de participar de la muerte como participó de la vida. La Psicooncología entiende que para que una persona pueda tener cáncer se requiere previamente que ocurra una alteración yoica que lleva a aceptar como propio el tumor. Por ello es sensato y necesario un diagnóstico y tratamiento coadyuvante en el paciente con cáncer. Se entiende que el cáncer le pertenece a esa persona desde el punto de vista orgánico y psíquico. La descripción del tumor es una parte del problema. La otra parte es el individuo. La enfermedad y el pronóstico resultan de la interrelación del cáncer con la totalidad de la persona. Todo él está comprometido. No solo se trata de un proceso local que puede diseminarse por metástasis. Mucho antes, es un proceso general del individuo que se localizará. El cáncer es sólo un síntoma. La persona es mucho más que su enfermedad; así como también lo enfermo puede ser mucho más que el paciente Toda psicoterapia es un compromiso real y vital. La entrevista deberá tener la característica de que el fenómeno transferencial se cumpla desde los primeros instantes y permanezca. La Psicooncología investiga en el alma las respuestas emocionales y afectivas que pudieron provocar como síntoma ese cáncer. No busca traumas, ni estrés; busca la respuesta personal a esas circunstancias. De modo tal que la Psicooncología se ocupa de la VIDA y es un tratamiento coadyuvante que todo paciente tiene derecho a recibir. Con esta actividad no se pretende curar un proceso que ya ocurrió, se intenta buscar razones en lo que caracteriza al ser humano, en sus más importantes valores: buscar razones en su alma
Resumo:
El caso clínico presentado muestra el trabajo psicoterapéutico realizado con una paciente oncológica, dentro del marco de intervención en Psicooncología, en la fase final de la evolución tumoral del cáncer. Si hay algo impreciso, inasible, alterante, dilemático, generador de fantasías y angustias en nuestra labor, es el tiempo que transcurre en torno a la fase final de la vida del paciente. Trabajar con el paciente moribundo, implica trabajar con nuestra propia muerte. Muerte es una palabra temida, olvidada, rechazada, final de todo. Morir hoy en día es un acto triste y solitario en la Unidad de Terapia Intensiva de los hospitales, donde la atención es despersonalizada, donde el paciente pierde el derecho de opinar y se vuelve un cuerpo a ser tratado. El agonizante pierde su status y la experiencia de la muerte es destituida de contenido. Las personas al final de su vida prefieren realmente estar en su casa, con sus afectos, y no en una sala de hospital. En la inmensa mayoría de los pacientes se puede lograr el objetivo de que puedan permanecer libres de dolor y otros síntomas molestos, estando lúcidos y preparándose para morir. Quien recibe el diagnóstico de una enfermedad grave tiene que hacer un duelo, transitar un duelo. No hay duelo solamente en el que se queda, sino también en el que se va. El objeto de duelo en los pacientes terminales es la vida misma. Es fundamental trabajar en el paciente con sus miedos y con su depresión, posibilitándole la oportunidad de participar de la muerte como participó de la vida. La Psicooncología entiende que para que una persona pueda tener cáncer se requiere previamente que ocurra una alteración yoica que lleva a aceptar como propio el tumor. Por ello es sensato y necesario un diagnóstico y tratamiento coadyuvante en el paciente con cáncer. Se entiende que el cáncer le pertenece a esa persona desde el punto de vista orgánico y psíquico. La descripción del tumor es una parte del problema. La otra parte es el individuo. La enfermedad y el pronóstico resultan de la interrelación del cáncer con la totalidad de la persona. Todo él está comprometido. No solo se trata de un proceso local que puede diseminarse por metástasis. Mucho antes, es un proceso general del individuo que se localizará. El cáncer es sólo un síntoma. La persona es mucho más que su enfermedad; así como también lo enfermo puede ser mucho más que el paciente Toda psicoterapia es un compromiso real y vital. La entrevista deberá tener la característica de que el fenómeno transferencial se cumpla desde los primeros instantes y permanezca. La Psicooncología investiga en el alma las respuestas emocionales y afectivas que pudieron provocar como síntoma ese cáncer. No busca traumas, ni estrés; busca la respuesta personal a esas circunstancias. De modo tal que la Psicooncología se ocupa de la VIDA y es un tratamiento coadyuvante que todo paciente tiene derecho a recibir. Con esta actividad no se pretende curar un proceso que ya ocurrió, se intenta buscar razones en lo que caracteriza al ser humano, en sus más importantes valores: buscar razones en su alma
Resumo:
El caso clínico presentado muestra el trabajo psicoterapéutico realizado con una paciente oncológica, dentro del marco de intervención en Psicooncología, en la fase final de la evolución tumoral del cáncer. Si hay algo impreciso, inasible, alterante, dilemático, generador de fantasías y angustias en nuestra labor, es el tiempo que transcurre en torno a la fase final de la vida del paciente. Trabajar con el paciente moribundo, implica trabajar con nuestra propia muerte. Muerte es una palabra temida, olvidada, rechazada, final de todo. Morir hoy en día es un acto triste y solitario en la Unidad de Terapia Intensiva de los hospitales, donde la atención es despersonalizada, donde el paciente pierde el derecho de opinar y se vuelve un cuerpo a ser tratado. El agonizante pierde su status y la experiencia de la muerte es destituida de contenido. Las personas al final de su vida prefieren realmente estar en su casa, con sus afectos, y no en una sala de hospital. En la inmensa mayoría de los pacientes se puede lograr el objetivo de que puedan permanecer libres de dolor y otros síntomas molestos, estando lúcidos y preparándose para morir. Quien recibe el diagnóstico de una enfermedad grave tiene que hacer un duelo, transitar un duelo. No hay duelo solamente en el que se queda, sino también en el que se va. El objeto de duelo en los pacientes terminales es la vida misma. Es fundamental trabajar en el paciente con sus miedos y con su depresión, posibilitándole la oportunidad de participar de la muerte como participó de la vida. La Psicooncología entiende que para que una persona pueda tener cáncer se requiere previamente que ocurra una alteración yoica que lleva a aceptar como propio el tumor. Por ello es sensato y necesario un diagnóstico y tratamiento coadyuvante en el paciente con cáncer. Se entiende que el cáncer le pertenece a esa persona desde el punto de vista orgánico y psíquico. La descripción del tumor es una parte del problema. La otra parte es el individuo. La enfermedad y el pronóstico resultan de la interrelación del cáncer con la totalidad de la persona. Todo él está comprometido. No solo se trata de un proceso local que puede diseminarse por metástasis. Mucho antes, es un proceso general del individuo que se localizará. El cáncer es sólo un síntoma. La persona es mucho más que su enfermedad; así como también lo enfermo puede ser mucho más que el paciente Toda psicoterapia es un compromiso real y vital. La entrevista deberá tener la característica de que el fenómeno transferencial se cumpla desde los primeros instantes y permanezca. La Psicooncología investiga en el alma las respuestas emocionales y afectivas que pudieron provocar como síntoma ese cáncer. No busca traumas, ni estrés; busca la respuesta personal a esas circunstancias. De modo tal que la Psicooncología se ocupa de la VIDA y es un tratamiento coadyuvante que todo paciente tiene derecho a recibir. Con esta actividad no se pretende curar un proceso que ya ocurrió, se intenta buscar razones en lo que caracteriza al ser humano, en sus más importantes valores: buscar razones en su alma