6 resultados para Marlon Santi
em Memoria Académica - FaHCE, UNLP - Argentina
Resumo:
Fil: Disalvo, Santiago Aníbal. Universidad Nacional de La Plata. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación; Argentina.
Resumo:
Fil: Disalvo, Santiago Aníbal. Universidad Nacional de La Plata. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación; Argentina.
Resumo:
Fil: Disalvo, Santiago Aníbal. Universidad Nacional de La Plata. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación; Argentina.
Resumo:
Las clases medias en Argentina se han caracterizado, sobre todo desde la segunda mitad del siglo XX, por ser un sector social dinámico, por su optimismo en cuanto al progreso y por las amplias posibilidades de ascenso social que les brindaba la situación económica del país, posibilidades que el peronismo extendió luego a las clases trabajadoras. Durante los primeros años de la década del noventa, el país logró estabilizarse económicamente dejando atrás el fantasma hiperinflacionario, permitiendo un notable, si bien breve, crecimiento económico. La Convertibilidad permitió a gran parte de la población acceder a nuevos patrones de consumo; los shoppings y los barrios cerrados comenzaron a formar parte del paisaje urbano. A consecuencia se produce una mutación en las condiciones de vida y en los hábitos de consumo, sobre todo de los sectores medios. Al correr la década se advierten los costos del modelo neoliberal: el aumento veloz e inédito del desempleo, la caída en los ingresos de la mayoría de los trabajadores, el aumento de la pobreza y la marginalidad. En definitiva, la estructura social del país se vio modificada y sus efectos fueron sentidos por la gran mayoría de la población, aunque de diferente manera y en diferentes momentos. Los más afectados fueron los sectores de menores ingresos, pero en gran medida también aquellos ubicados en los sectores medio-bajo de la estructura social, que en su mayoría pasaron a conformar una nueva categoría social: los nuevos pobres. La investigación indaga acerca del impacto de la crisis económica en la subjetividad de los jóvenes de clase media, en particular en su visión acerca del país y en sus perspectivas a futuro. Al mismo tiempo, intenta delinear las nuevas prácticas, creencias y valores que adquieren las clases medias post-crisis, que debieron adaptarse a las nuevas circunstancias, y en muchos casos modificar sus hábitos de vida y patrones de consumo. Algunos hallazgos permitan afirmar que las transformaciones que ha sufrido el país en lo social y económico han sido tan profundas que impactaron en el imaginario e identidad social de los sectores medios: se desmoronan las tradicionales perspectivas de ascenso social, se desarrollan nuevas estrategias de consumo; el optimismo se revierte a consecuencia del futuro incierto, mientras que la educación parece ser uno de los pocos valores que se niegan a relegar
Resumo:
Las clases medias en Argentina se han caracterizado, sobre todo desde la segunda mitad del siglo XX, por ser un sector social dinámico, por su optimismo en cuanto al progreso y por las amplias posibilidades de ascenso social que les brindaba la situación económica del país, posibilidades que el peronismo extendió luego a las clases trabajadoras. Durante los primeros años de la década del noventa, el país logró estabilizarse económicamente dejando atrás el fantasma hiperinflacionario, permitiendo un notable, si bien breve, crecimiento económico. La Convertibilidad permitió a gran parte de la población acceder a nuevos patrones de consumo; los shoppings y los barrios cerrados comenzaron a formar parte del paisaje urbano. A consecuencia se produce una mutación en las condiciones de vida y en los hábitos de consumo, sobre todo de los sectores medios. Al correr la década se advierten los costos del modelo neoliberal: el aumento veloz e inédito del desempleo, la caída en los ingresos de la mayoría de los trabajadores, el aumento de la pobreza y la marginalidad. En definitiva, la estructura social del país se vio modificada y sus efectos fueron sentidos por la gran mayoría de la población, aunque de diferente manera y en diferentes momentos. Los más afectados fueron los sectores de menores ingresos, pero en gran medida también aquellos ubicados en los sectores medio-bajo de la estructura social, que en su mayoría pasaron a conformar una nueva categoría social: los nuevos pobres. La investigación indaga acerca del impacto de la crisis económica en la subjetividad de los jóvenes de clase media, en particular en su visión acerca del país y en sus perspectivas a futuro. Al mismo tiempo, intenta delinear las nuevas prácticas, creencias y valores que adquieren las clases medias post-crisis, que debieron adaptarse a las nuevas circunstancias, y en muchos casos modificar sus hábitos de vida y patrones de consumo. Algunos hallazgos permitan afirmar que las transformaciones que ha sufrido el país en lo social y económico han sido tan profundas que impactaron en el imaginario e identidad social de los sectores medios: se desmoronan las tradicionales perspectivas de ascenso social, se desarrollan nuevas estrategias de consumo; el optimismo se revierte a consecuencia del futuro incierto, mientras que la educación parece ser uno de los pocos valores que se niegan a relegar
Resumo:
Las clases medias en Argentina se han caracterizado, sobre todo desde la segunda mitad del siglo XX, por ser un sector social dinámico, por su optimismo en cuanto al progreso y por las amplias posibilidades de ascenso social que les brindaba la situación económica del país, posibilidades que el peronismo extendió luego a las clases trabajadoras. Durante los primeros años de la década del noventa, el país logró estabilizarse económicamente dejando atrás el fantasma hiperinflacionario, permitiendo un notable, si bien breve, crecimiento económico. La Convertibilidad permitió a gran parte de la población acceder a nuevos patrones de consumo; los shoppings y los barrios cerrados comenzaron a formar parte del paisaje urbano. A consecuencia se produce una mutación en las condiciones de vida y en los hábitos de consumo, sobre todo de los sectores medios. Al correr la década se advierten los costos del modelo neoliberal: el aumento veloz e inédito del desempleo, la caída en los ingresos de la mayoría de los trabajadores, el aumento de la pobreza y la marginalidad. En definitiva, la estructura social del país se vio modificada y sus efectos fueron sentidos por la gran mayoría de la población, aunque de diferente manera y en diferentes momentos. Los más afectados fueron los sectores de menores ingresos, pero en gran medida también aquellos ubicados en los sectores medio-bajo de la estructura social, que en su mayoría pasaron a conformar una nueva categoría social: los nuevos pobres. La investigación indaga acerca del impacto de la crisis económica en la subjetividad de los jóvenes de clase media, en particular en su visión acerca del país y en sus perspectivas a futuro. Al mismo tiempo, intenta delinear las nuevas prácticas, creencias y valores que adquieren las clases medias post-crisis, que debieron adaptarse a las nuevas circunstancias, y en muchos casos modificar sus hábitos de vida y patrones de consumo. Algunos hallazgos permitan afirmar que las transformaciones que ha sufrido el país en lo social y económico han sido tan profundas que impactaron en el imaginario e identidad social de los sectores medios: se desmoronan las tradicionales perspectivas de ascenso social, se desarrollan nuevas estrategias de consumo; el optimismo se revierte a consecuencia del futuro incierto, mientras que la educación parece ser uno de los pocos valores que se niegan a relegar