9 resultados para Grupos co-operativos

em Memoria Académica - FaHCE, UNLP - Argentina


Relevância:

40.00% 40.00%

Publicador:

Resumo:

Los primeros diseños de trabajo de lo grupal en Argentina surgen de 'la Mítica Intervención en el Hospicio de las Mercedes', y 'la Experiencia de Rosario'. Planificada y dirigida por Enrique Pichon-Rivière, la Experiencia de Rosario fue el punto de partida de las investigaciones sobre los grupos operativos. Los grupos operativos conjuntamente con otras formas de abordajes grupales, fueron instrumentos claves para el trabajo en espacios públicos, y se constituyeron en un fuerte anclajepara aquellos jóvenes profesionales que se sostenían como agentes de cambio social desde la salud pública. Ya en la década del 40, Pichon-Rivière, tuvo la iniciativa de organizar cursos para enfermeros por medio de los cuales se proponía superar el déficit de conocimiento en el tratamiento de pacientes. Esta experiencia no se limitaba a proporcionar información sobre el hacer de su práctica, sino que se incluían en ese espacio, problemáticas de otra índole con pacientes y familiares de los mismos. Un paro de enfermeros acaecido en aquel momento suscitó una segunda experiencia que ponía en movimiento un curso de enfermería destinado ahora a los pacientes menos graves. Esta experiencia permitió no solo el sostenimiento del servicio sino que tuvo importantes consecuencias prácticas, estos internos mejoraban ostensiblemente su salud mental, tenían una nueva adaptación dinámica a la sociedad, especialmente porque se sentían útiles. Posteriormente comenzó a esbozar el dispositivo de los grupos operativos. En 1958 comienza a gestarse la denominada 'Experiencia de Rosario'. Su principal objetivo era trabajar con la comunidad empleando técnicas distintas y una didáctica interdisciplinaria. David Liberman, Fernando Ulloa, José Bleger, Edgardo Rolla fueron los integrantes del equipo de profesionales especializados en el manejo de técnicas grupales que coordinaron esa experiencia de laboratorio social La metodología operativa comenzó a influir en las prácticas de la época. Los docentes que no recibían entrenamiento en pedagogía, empezaron a tener entrenamiento en manejo de grupos. De este modo, la modalidad operativa se incluyó en la enseñanza de Medicina, Psicología y otras carreras La aplicación de los grupos operativos llegó también a la enseñanza en las clases dictadas en la Escuela Privada de Psiquiatría. Pichon-Rivière y sus discípulos señalaban que tras la exposición magistral surgía la necesidad de reformular los temas expuestos dadas las profundasdistorsiones qué, sobre esos saberes, aparecían en los alumnos. La clase magistral configuraba un procedimiento anacrónico e inconducente si la exposición de conceptos teóricos, descripciones clínicas, técnicas terapéuticas, etc. no era seguida por un momento de replanteo y discusión en un grupo operativo La impronta de Rivière y el atravesamiento por diferentes experiencias operativas dejaron una marca en sus discípulos que llevó a su aplicación en diferentes espacios: la industria, la familia y la enseñanza universitaria. Uno de ellos, Edgardo Rolla, referente de los primeros psicólogos platenses, implementó en 1964 los grupos operativos en la enseñanza en la UNLP Para Rolla la implementación de los grupos operativos en la formación de los psicólogos era central. Enseñar no era solo transmitir conocimiento sino propiciar en quien aprende un posicionamiento autónomo que promueva el arte de comprender, 'Arte de comprender que en el psicólogo es la clave de toda su tarea'. De modo que,ya en el proceso formativo, los alumnos transitaban por esa modalidad. La aplicación de este sistema permitió comprobar que las dificultades en la comprensión de lo aprendido disminuían significativamente favoreciendo de este modo no solo el cumplimiento de los objetivos trazados para la enseñanza sino el alejamiento de prácticas de enseñanza anacrónicas como la clase magistral, el aprendizaje memorístico y la no utilización del pensamiento reflexivo por parte de los alumnos. La trasmisión de la modalidad operativa no quedó circunscripta al relevamiento de su aplicación en la enseñanza en la UNLP. en su libro 'Psicoterapia Individual y Grupal' da cuenta de la aplicación de esta modalidad en la fábrica, la pareja y los que denominó grupos preformados. Lo grupal no solo arribaba a través de la implementación de los grupos operativos en la enseñanza de Psicología Profunda en 1964 sino que se hacía presente en la Revista de Psicología. Allí se hacían recomendaciones sobre bibliografía específica: 'Un análisis de la psicoterapia grupal' de Taylor y 'Dinamics of groups at work' de Thelen además de publicitar el dictado de conferencias sobre Técnicas Psicodramáticas a cargo de E. Pavlovsky y Rojas Bermudez. Becarios de esa Universidad viajaban al exterior para especializarse en grupos operativos y dinámica de grupos en la Tavistock Clinic de Londres. De este modo, el psicoanálisis grupal también comenzaba a dejar sus huellas en la ciudad de las Diagonales

Relevância:

40.00% 40.00%

Publicador:

Relevância:

40.00% 40.00%

Publicador:

Relevância:

40.00% 40.00%

Publicador:

Resumo:

Los primeros diseños de trabajo de lo grupal en Argentina surgen de 'la Mítica Intervención en el Hospicio de las Mercedes', y 'la Experiencia de Rosario'. Planificada y dirigida por Enrique Pichon-Rivière, la Experiencia de Rosario fue el punto de partida de las investigaciones sobre los grupos operativos. Los grupos operativos conjuntamente con otras formas de abordajes grupales, fueron instrumentos claves para el trabajo en espacios públicos, y se constituyeron en un fuerte anclajepara aquellos jóvenes profesionales que se sostenían como agentes de cambio social desde la salud pública. Ya en la década del 40, Pichon-Rivière, tuvo la iniciativa de organizar cursos para enfermeros por medio de los cuales se proponía superar el déficit de conocimiento en el tratamiento de pacientes. Esta experiencia no se limitaba a proporcionar información sobre el hacer de su práctica, sino que se incluían en ese espacio, problemáticas de otra índole con pacientes y familiares de los mismos. Un paro de enfermeros acaecido en aquel momento suscitó una segunda experiencia que ponía en movimiento un curso de enfermería destinado ahora a los pacientes menos graves. Esta experiencia permitió no solo el sostenimiento del servicio sino que tuvo importantes consecuencias prácticas, estos internos mejoraban ostensiblemente su salud mental, tenían una nueva adaptación dinámica a la sociedad, especialmente porque se sentían útiles. Posteriormente comenzó a esbozar el dispositivo de los grupos operativos. En 1958 comienza a gestarse la denominada 'Experiencia de Rosario'. Su principal objetivo era trabajar con la comunidad empleando técnicas distintas y una didáctica interdisciplinaria. David Liberman, Fernando Ulloa, José Bleger, Edgardo Rolla fueron los integrantes del equipo de profesionales especializados en el manejo de técnicas grupales que coordinaron esa experiencia de laboratorio social La metodología operativa comenzó a influir en las prácticas de la época. Los docentes que no recibían entrenamiento en pedagogía, empezaron a tener entrenamiento en manejo de grupos. De este modo, la modalidad operativa se incluyó en la enseñanza de Medicina, Psicología y otras carreras La aplicación de los grupos operativos llegó también a la enseñanza en las clases dictadas en la Escuela Privada de Psiquiatría. Pichon-Rivière y sus discípulos señalaban que tras la exposición magistral surgía la necesidad de reformular los temas expuestos dadas las profundasdistorsiones qué, sobre esos saberes, aparecían en los alumnos. La clase magistral configuraba un procedimiento anacrónico e inconducente si la exposición de conceptos teóricos, descripciones clínicas, técnicas terapéuticas, etc. no era seguida por un momento de replanteo y discusión en un grupo operativo La impronta de Rivière y el atravesamiento por diferentes experiencias operativas dejaron una marca en sus discípulos que llevó a su aplicación en diferentes espacios: la industria, la familia y la enseñanza universitaria. Uno de ellos, Edgardo Rolla, referente de los primeros psicólogos platenses, implementó en 1964 los grupos operativos en la enseñanza en la UNLP Para Rolla la implementación de los grupos operativos en la formación de los psicólogos era central. Enseñar no era solo transmitir conocimiento sino propiciar en quien aprende un posicionamiento autónomo que promueva el arte de comprender, 'Arte de comprender que en el psicólogo es la clave de toda su tarea'. De modo que,ya en el proceso formativo, los alumnos transitaban por esa modalidad. La aplicación de este sistema permitió comprobar que las dificultades en la comprensión de lo aprendido disminuían significativamente favoreciendo de este modo no solo el cumplimiento de los objetivos trazados para la enseñanza sino el alejamiento de prácticas de enseñanza anacrónicas como la clase magistral, el aprendizaje memorístico y la no utilización del pensamiento reflexivo por parte de los alumnos. La trasmisión de la modalidad operativa no quedó circunscripta al relevamiento de su aplicación en la enseñanza en la UNLP. en su libro 'Psicoterapia Individual y Grupal' da cuenta de la aplicación de esta modalidad en la fábrica, la pareja y los que denominó grupos preformados. Lo grupal no solo arribaba a través de la implementación de los grupos operativos en la enseñanza de Psicología Profunda en 1964 sino que se hacía presente en la Revista de Psicología. Allí se hacían recomendaciones sobre bibliografía específica: 'Un análisis de la psicoterapia grupal' de Taylor y 'Dinamics of groups at work' de Thelen además de publicitar el dictado de conferencias sobre Técnicas Psicodramáticas a cargo de E. Pavlovsky y Rojas Bermudez. Becarios de esa Universidad viajaban al exterior para especializarse en grupos operativos y dinámica de grupos en la Tavistock Clinic de Londres. De este modo, el psicoanálisis grupal también comenzaba a dejar sus huellas en la ciudad de las Diagonales

Relevância:

40.00% 40.00%

Publicador:

Relevância:

40.00% 40.00%

Publicador:

Resumo:

Los primeros diseños de trabajo de lo grupal en Argentina surgen de 'la Mítica Intervención en el Hospicio de las Mercedes', y 'la Experiencia de Rosario'. Planificada y dirigida por Enrique Pichon-Rivière, la Experiencia de Rosario fue el punto de partida de las investigaciones sobre los grupos operativos. Los grupos operativos conjuntamente con otras formas de abordajes grupales, fueron instrumentos claves para el trabajo en espacios públicos, y se constituyeron en un fuerte anclajepara aquellos jóvenes profesionales que se sostenían como agentes de cambio social desde la salud pública. Ya en la década del 40, Pichon-Rivière, tuvo la iniciativa de organizar cursos para enfermeros por medio de los cuales se proponía superar el déficit de conocimiento en el tratamiento de pacientes. Esta experiencia no se limitaba a proporcionar información sobre el hacer de su práctica, sino que se incluían en ese espacio, problemáticas de otra índole con pacientes y familiares de los mismos. Un paro de enfermeros acaecido en aquel momento suscitó una segunda experiencia que ponía en movimiento un curso de enfermería destinado ahora a los pacientes menos graves. Esta experiencia permitió no solo el sostenimiento del servicio sino que tuvo importantes consecuencias prácticas, estos internos mejoraban ostensiblemente su salud mental, tenían una nueva adaptación dinámica a la sociedad, especialmente porque se sentían útiles. Posteriormente comenzó a esbozar el dispositivo de los grupos operativos. En 1958 comienza a gestarse la denominada 'Experiencia de Rosario'. Su principal objetivo era trabajar con la comunidad empleando técnicas distintas y una didáctica interdisciplinaria. David Liberman, Fernando Ulloa, José Bleger, Edgardo Rolla fueron los integrantes del equipo de profesionales especializados en el manejo de técnicas grupales que coordinaron esa experiencia de laboratorio social La metodología operativa comenzó a influir en las prácticas de la época. Los docentes que no recibían entrenamiento en pedagogía, empezaron a tener entrenamiento en manejo de grupos. De este modo, la modalidad operativa se incluyó en la enseñanza de Medicina, Psicología y otras carreras La aplicación de los grupos operativos llegó también a la enseñanza en las clases dictadas en la Escuela Privada de Psiquiatría. Pichon-Rivière y sus discípulos señalaban que tras la exposición magistral surgía la necesidad de reformular los temas expuestos dadas las profundasdistorsiones qué, sobre esos saberes, aparecían en los alumnos. La clase magistral configuraba un procedimiento anacrónico e inconducente si la exposición de conceptos teóricos, descripciones clínicas, técnicas terapéuticas, etc. no era seguida por un momento de replanteo y discusión en un grupo operativo La impronta de Rivière y el atravesamiento por diferentes experiencias operativas dejaron una marca en sus discípulos que llevó a su aplicación en diferentes espacios: la industria, la familia y la enseñanza universitaria. Uno de ellos, Edgardo Rolla, referente de los primeros psicólogos platenses, implementó en 1964 los grupos operativos en la enseñanza en la UNLP Para Rolla la implementación de los grupos operativos en la formación de los psicólogos era central. Enseñar no era solo transmitir conocimiento sino propiciar en quien aprende un posicionamiento autónomo que promueva el arte de comprender, 'Arte de comprender que en el psicólogo es la clave de toda su tarea'. De modo que,ya en el proceso formativo, los alumnos transitaban por esa modalidad. La aplicación de este sistema permitió comprobar que las dificultades en la comprensión de lo aprendido disminuían significativamente favoreciendo de este modo no solo el cumplimiento de los objetivos trazados para la enseñanza sino el alejamiento de prácticas de enseñanza anacrónicas como la clase magistral, el aprendizaje memorístico y la no utilización del pensamiento reflexivo por parte de los alumnos. La trasmisión de la modalidad operativa no quedó circunscripta al relevamiento de su aplicación en la enseñanza en la UNLP. en su libro 'Psicoterapia Individual y Grupal' da cuenta de la aplicación de esta modalidad en la fábrica, la pareja y los que denominó grupos preformados. Lo grupal no solo arribaba a través de la implementación de los grupos operativos en la enseñanza de Psicología Profunda en 1964 sino que se hacía presente en la Revista de Psicología. Allí se hacían recomendaciones sobre bibliografía específica: 'Un análisis de la psicoterapia grupal' de Taylor y 'Dinamics of groups at work' de Thelen además de publicitar el dictado de conferencias sobre Técnicas Psicodramáticas a cargo de E. Pavlovsky y Rojas Bermudez. Becarios de esa Universidad viajaban al exterior para especializarse en grupos operativos y dinámica de grupos en la Tavistock Clinic de Londres. De este modo, el psicoanálisis grupal también comenzaba a dejar sus huellas en la ciudad de las Diagonales

Relevância:

30.00% 30.00%

Publicador:

Resumo:

¿Qué alteraciones son necesarias producir para que el modelo pedagógico tradicional devenga en un dispositivo pedagógico de capacitación clínica en y con grupos y agrupamientos? Problema que ha insistido en cada diseño de dispositivos de capacitación implementados en la cátedra de Psicoterapia II, materia del bloque clínico de la Licenciatura en Psicología- Facultad de Psicología UNLP- desde el año 2002 hasta hoy. De allí, deviene la decisión de implementar un dispositivo experienciario, no sólo con la finalidad de conocer y aprender conceptualizaciones específicas, sino de operativizarlas en una instrumentación práctica efectiva. De esta manera pensamos, implementamos y transformamos el dispositivo pedagógico tradicional en un dispositivo de capacitación clínica, con la finalidad de que la heterogeneidad de elementos (institucionales, socio-históricos, a significantes, significantes, económicos, etc) que componen los espacios de trabajos prácticos, se constituyan en ocasión de pensar los modos actuales de producciones de subjetivación y de hacer lazo con otros; experiencia que en el anudamiento con una eficaz transmisión de saberes específicos produce capacitación y entrenamiento en el posicionamiento clínico del futuro psicólogo para trabajar en y con otros. Pensamos el dispositivo pedagógico tradicional como aquel que produce 'la clase' donde, al decir de Peter Pál Pelbart (2008) 'está todo dado de antemano, lo que se puede decir, lo que se puede preguntar, lo que se puede saber. ¿Cómo demoler todos estos estereotipos? Es muy difícil, porque hasta el acto de demolición esta estipulado: el anti-profesor es también una farsa'. En este sentido diseñar e implementar un dispositivo pedagógico de capacitación clínica en la universidad, ha sido y es un problema que insiste. El dispositivo de capacitación clínica se funda en la experiencia efectuada por Fernando Ulloa en 1973, quien propone pensar la Clínica como 'una metodología no restringida a ser aplicada solamente a campos psicopatológicos', y respecto al dispositivo de comunidad clínica dice: 'es un método de aprendizaje y en este caso el aprendizaje se refiere al proceder clínico'. Pensar la constitución de un equipo de coordinación de los espacios de trabajos prácticos; la capacitación clínica en coordinación de espacios grupales y/o multipersonales cómo la integración en equipos transdisciplinarios sobre el piso de construcción del co-pensor tiene sus fundamentos en la tesis de que en los diversos ámbitos de inserción, los/as futuros/as psicólogo/as, se encontraran en la coyuntura del armado de equipos transdisciplinario o del diseño e implementación de dispositivos grupales, de talleres, multipersonales, etc, para lo cual se requiere de una capacitación clínica que habilite la disponibilidad a trabajar y trabajarse con otros; y en la advertencia de los inevitables efectos que produce la indisponibilidad, inmunización e impermeabilización del posicionamiento clínico del psicólogo que pretenda trabajar en espacios con otros. El presente trabajo se propone pensar la implementación de dispositivos pedagógicos de capacitación clínica en y con grupos y agrupamientos, centrándose en unos de los elementos del mismo: el equipo de coordinación-co-pensor. Se propone pensar sobre aquellos procedimientos y posicionamientos que hacen que dos o más personas, cuando se disponen a coordinar un trabajo práctico, devengan en un equipo de coordinación. 'La tensión está entre esa intención, que casi siempre tenemos, de llegar a un lugar, querer armar algo y que pasen cosas, y su contraposición, que implica sumarse a lo que está pasando, ser capaces de leer y nadar en lo que pasa ahí. (...) leer, nadar y por supuesto que también hay ahí un sostener. Pero el sostener tiene que ver con el nadar; el sostener no es extrínseco a lo que sucede, no viene de afuera'. (Peter Pál Pelbart. 2008)

Relevância:

30.00% 30.00%

Publicador:

Resumo:

¿Qué alteraciones son necesarias producir para que el modelo pedagógico tradicional devenga en un dispositivo pedagógico de capacitación clínica en y con grupos y agrupamientos? Problema que ha insistido en cada diseño de dispositivos de capacitación implementados en la cátedra de Psicoterapia II, materia del bloque clínico de la Licenciatura en Psicología- Facultad de Psicología UNLP- desde el año 2002 hasta hoy. De allí, deviene la decisión de implementar un dispositivo experienciario, no sólo con la finalidad de conocer y aprender conceptualizaciones específicas, sino de operativizarlas en una instrumentación práctica efectiva. De esta manera pensamos, implementamos y transformamos el dispositivo pedagógico tradicional en un dispositivo de capacitación clínica, con la finalidad de que la heterogeneidad de elementos (institucionales, socio-históricos, a significantes, significantes, económicos, etc) que componen los espacios de trabajos prácticos, se constituyan en ocasión de pensar los modos actuales de producciones de subjetivación y de hacer lazo con otros; experiencia que en el anudamiento con una eficaz transmisión de saberes específicos produce capacitación y entrenamiento en el posicionamiento clínico del futuro psicólogo para trabajar en y con otros. Pensamos el dispositivo pedagógico tradicional como aquel que produce 'la clase' donde, al decir de Peter Pál Pelbart (2008) 'está todo dado de antemano, lo que se puede decir, lo que se puede preguntar, lo que se puede saber. ¿Cómo demoler todos estos estereotipos? Es muy difícil, porque hasta el acto de demolición esta estipulado: el anti-profesor es también una farsa'. En este sentido diseñar e implementar un dispositivo pedagógico de capacitación clínica en la universidad, ha sido y es un problema que insiste. El dispositivo de capacitación clínica se funda en la experiencia efectuada por Fernando Ulloa en 1973, quien propone pensar la Clínica como 'una metodología no restringida a ser aplicada solamente a campos psicopatológicos', y respecto al dispositivo de comunidad clínica dice: 'es un método de aprendizaje y en este caso el aprendizaje se refiere al proceder clínico'. Pensar la constitución de un equipo de coordinación de los espacios de trabajos prácticos; la capacitación clínica en coordinación de espacios grupales y/o multipersonales cómo la integración en equipos transdisciplinarios sobre el piso de construcción del co-pensor tiene sus fundamentos en la tesis de que en los diversos ámbitos de inserción, los/as futuros/as psicólogo/as, se encontraran en la coyuntura del armado de equipos transdisciplinario o del diseño e implementación de dispositivos grupales, de talleres, multipersonales, etc, para lo cual se requiere de una capacitación clínica que habilite la disponibilidad a trabajar y trabajarse con otros; y en la advertencia de los inevitables efectos que produce la indisponibilidad, inmunización e impermeabilización del posicionamiento clínico del psicólogo que pretenda trabajar en espacios con otros. El presente trabajo se propone pensar la implementación de dispositivos pedagógicos de capacitación clínica en y con grupos y agrupamientos, centrándose en unos de los elementos del mismo: el equipo de coordinación-co-pensor. Se propone pensar sobre aquellos procedimientos y posicionamientos que hacen que dos o más personas, cuando se disponen a coordinar un trabajo práctico, devengan en un equipo de coordinación. 'La tensión está entre esa intención, que casi siempre tenemos, de llegar a un lugar, querer armar algo y que pasen cosas, y su contraposición, que implica sumarse a lo que está pasando, ser capaces de leer y nadar en lo que pasa ahí. (...) leer, nadar y por supuesto que también hay ahí un sostener. Pero el sostener tiene que ver con el nadar; el sostener no es extrínseco a lo que sucede, no viene de afuera'. (Peter Pál Pelbart. 2008)

Relevância:

30.00% 30.00%

Publicador:

Resumo:

¿Qué alteraciones son necesarias producir para que el modelo pedagógico tradicional devenga en un dispositivo pedagógico de capacitación clínica en y con grupos y agrupamientos? Problema que ha insistido en cada diseño de dispositivos de capacitación implementados en la cátedra de Psicoterapia II, materia del bloque clínico de la Licenciatura en Psicología- Facultad de Psicología UNLP- desde el año 2002 hasta hoy. De allí, deviene la decisión de implementar un dispositivo experienciario, no sólo con la finalidad de conocer y aprender conceptualizaciones específicas, sino de operativizarlas en una instrumentación práctica efectiva. De esta manera pensamos, implementamos y transformamos el dispositivo pedagógico tradicional en un dispositivo de capacitación clínica, con la finalidad de que la heterogeneidad de elementos (institucionales, socio-históricos, a significantes, significantes, económicos, etc) que componen los espacios de trabajos prácticos, se constituyan en ocasión de pensar los modos actuales de producciones de subjetivación y de hacer lazo con otros; experiencia que en el anudamiento con una eficaz transmisión de saberes específicos produce capacitación y entrenamiento en el posicionamiento clínico del futuro psicólogo para trabajar en y con otros. Pensamos el dispositivo pedagógico tradicional como aquel que produce 'la clase' donde, al decir de Peter Pál Pelbart (2008) 'está todo dado de antemano, lo que se puede decir, lo que se puede preguntar, lo que se puede saber. ¿Cómo demoler todos estos estereotipos? Es muy difícil, porque hasta el acto de demolición esta estipulado: el anti-profesor es también una farsa'. En este sentido diseñar e implementar un dispositivo pedagógico de capacitación clínica en la universidad, ha sido y es un problema que insiste. El dispositivo de capacitación clínica se funda en la experiencia efectuada por Fernando Ulloa en 1973, quien propone pensar la Clínica como 'una metodología no restringida a ser aplicada solamente a campos psicopatológicos', y respecto al dispositivo de comunidad clínica dice: 'es un método de aprendizaje y en este caso el aprendizaje se refiere al proceder clínico'. Pensar la constitución de un equipo de coordinación de los espacios de trabajos prácticos; la capacitación clínica en coordinación de espacios grupales y/o multipersonales cómo la integración en equipos transdisciplinarios sobre el piso de construcción del co-pensor tiene sus fundamentos en la tesis de que en los diversos ámbitos de inserción, los/as futuros/as psicólogo/as, se encontraran en la coyuntura del armado de equipos transdisciplinario o del diseño e implementación de dispositivos grupales, de talleres, multipersonales, etc, para lo cual se requiere de una capacitación clínica que habilite la disponibilidad a trabajar y trabajarse con otros; y en la advertencia de los inevitables efectos que produce la indisponibilidad, inmunización e impermeabilización del posicionamiento clínico del psicólogo que pretenda trabajar en espacios con otros. El presente trabajo se propone pensar la implementación de dispositivos pedagógicos de capacitación clínica en y con grupos y agrupamientos, centrándose en unos de los elementos del mismo: el equipo de coordinación-co-pensor. Se propone pensar sobre aquellos procedimientos y posicionamientos que hacen que dos o más personas, cuando se disponen a coordinar un trabajo práctico, devengan en un equipo de coordinación. 'La tensión está entre esa intención, que casi siempre tenemos, de llegar a un lugar, querer armar algo y que pasen cosas, y su contraposición, que implica sumarse a lo que está pasando, ser capaces de leer y nadar en lo que pasa ahí. (...) leer, nadar y por supuesto que también hay ahí un sostener. Pero el sostener tiene que ver con el nadar; el sostener no es extrínseco a lo que sucede, no viene de afuera'. (Peter Pál Pelbart. 2008)