9 resultados para Boccara, Colette
em Memoria Académica - FaHCE, UNLP - Argentina
Resumo:
El presente trabajo se enmarca en el Proyecto de investigación 'Lógica y alcance de las operaciones del analista según Freud: colegir (erraten), interpretar, construir', acreditado pro la Universidad Nacional de La Plata en el marco del Programa de Incevntivos del Ministerio de Educación de la Nación, y dirigido por el Dr. Carlos J. Escars. Cátedra de Teoría Psicoanalítica. Facultad de Psicología, UNLP. La metodología del mismo presentó dos etapas que se conjugaron en un segundo momento. En una primera instancia presentó la forma de un análisis y comparación de textos basado en un método argumentativo. Abordamos los escritos freudianos y notas de Strachey. En una segunda, analizamos publicaciones e investigaciones vigentes sobre las denominadas presentaciones y patologías de época. Finalmente arribamos a conclusiones que en el presente esbozaremos y que nos sitúa en esta doble vertiente indisociable en psicoanálisis: la vertiente epistémica y la vertiente terapéutica. Este trabajo se propone como objetivo situar algunos aspectos que hacen al estatuto lógico de los bordes del saber psicoanalítico, cernidos los mismos a partir de la brecha establecida entre intento de de formalización y aquello que se resiste a hacer sistema. Con tal propósito, apelamos a los escritos técnicos de Freud y nos ocuparemos de las apuestas freudianas por formalizar la técnica psicoanalítica, así como también de los obstáculos clínicos que le impidieron la pretendida mecanización de la técnica. Proseguiremos con un rastreo de los usos que Freud le ha dado a 'lo actual'. Es este mismo significante, 'actual' el que aparece asociado a los límites de la cura por la palabra así como también a una de sus primeras organizaciones nosográficas. De este modo nos serviremos de la categoría de Neurosis Actuales para realizar un recorrido sobre aquello que allá por 1895 Freud había situado una de las mayores momento. En una primera instancia presentó la forma de un análisis y comparación de textos basado en un método argumentativo. Abordamos los escritos freudianos y notas de Strachey. En una segunda, analizamos publicaciones e investigaciones vigentes sobre las denominadas presentaciones y patologías de época. Finalmente arribamos a conclusiones que en el presente esbozaremos y que nos sitúa en esta doble vertiente indisociable en psicoanálisis: la vertiente epistémica y la vertiente terapéutica. Este trabajo se propone como objetivo situar algunos aspectos que hacen al estatuto lógico de los bordes del saber psicoanalítico, cernidos los mismos a partir de la brecha establecida entre intento de de formalización y aquello que se resiste a hacer sistema. Con tal propósito, apelamos a los escritos técnicos de Freud y nos ocuparemos de las apuestas freudianas por formalizar la técnica psicoanalítica, así como también de los obstáculos clínicos que le impidieron la pretendida mecanización de la técnica. Proseguiremos con un rastreo de los usos que Freud le ha dado a 'lo actual'. Es este mismo significante, 'actual' el que aparece asociado a los límites de la cura por la palabra así como también a una de sus primeras organizaciones nosográficas. De este modo nos serviremos de la categoría de Neurosis Actuales para realizar un recorrido sobre aquello que allá por 1895 Freud había situado una de las mayores resistencias a la técnica psicoanalítica: lo no analizable, aquello que no se advenía al trabajo asociativo en transferencia. En nuestra actualidad, cien años después del planteo freudiano, nos encontramos con una apuesta similar: bajo el epígrafe de presentaciones actuales o de época se intenta formalizar aquello que se resiste a hacer sistema. A partir de la pregunta sobre la época esbozada por los analistas y sus intentos de respuesta, intentamos cernir el lugar lógico que el significante época (o actual) porta para el edificio teórico en psicoanálisis así como su posible vinculación con la ausencia de saberes que oficien de garantes y orienten el hacer psicoanalítico. Epoca que tomada como categoría lógica pondrá en cuestión -al igual que el caso- el edificio teórico del psicoanálisis, y que conminará al analista a enfrentarse con lo incalculable/inclasificable de las presentaciones clínicas. De esta manera pareciera conformarse una dimensión de la experiencia analítica vinculada con la construcción colectiva de saberes. Experiencia diferente, pero no independiente de la configurada por la pregunta en transferencia, cuyos saberes se proponen que el psicoanálisis opere. Saberes, mecanismos y reglas técnicas que permitirán un cálculo posible, efecto mismo del intento de formalizar aquello que del caso por caso construye regularidad. Coordenadas del cálculo que, sin embargo, deberán dar lugar a lo incalculable. La teoría que orienta a la clínica psicoanalítica es derivada de las categorías diagnósticas de la clínica psiquiátrica. Tanto Freud como Lacan tienen como referencia dicha nosografía pero arriban a una teoría explicativa de lo que devendrá su propia clínica. Ahora bien, ¿cómo surge este saber sobre la clínica? Es de la clínica misma, de sus obstáculos bajo transferencia, que se elabora este saber determinado por la estructura de la experiencia analítica. Se vuelve así indisociable en el psicoanálisis, como plantea Colette Soler (2003-2004), la vertiente epistémica de la vertiente terapéutica: mediante la exploración del inconsciente, de los significantes, deseos y palabras que por él circulan, se obtienen modificaciones, se curan los síntomas. Intentaremos en este trabajo abordar aquello que se resiste a ser sistematizado de la técnica así como las dificultades que las 'patologías actuales' representan para la misma
Resumo:
El presente trabajo aborda un tema que ha sido y continúa siendo controvertido en el campo psicoanalítico: el diagnóstico. Problemática trabajada, analizada y discutida por muchos, que sin embargo conlleva cierta actualidad que parecería serle inherente. no de los objetivos del trabajo es entonces indagar acerca de la actualidad de esta discusión. Para esto, es necesario partir de la diferenciación entre el diagnóstico psicoanalítico y el diagnóstico psiquiátrico. Al respecto, se toman como base los desarrollos de Colette Soler (2003-2004), quien articula el establecimiento del diagnóstico con el tipo de síntomas considerados por la perspectiva psicoanalítica y la perspectiva médica. Se introducen además las estructuras clínicas delimitadas por Jaques Lacan a partir de la relectura de los desarrollos freudianos: neurosis, psicosis y perversión; y se definen brevemente las dos primeras. Segúneste autor, tales estructuras se establecerán a partir del mecanismo psíquico en juego. Afirma a su vez, que el mecanismo sea la represión o la forclusión, tendrá consecuencias a nivel del leguaje y de los fenómenos de retorno. En relación al diagnóstico, se toma la discusión acerca del uso que se hace de éste dentro del psicoanálisis mismo en tanto, según Adriana Rubinstein (1999) para algunos constituye un momento fundamental de la práctica, mientras que para otros carece de valor. Durante el recorrido del trabajo, se introduce y problematiza además la cuestión de la supervisión en psicoanálisis, su relación con el establecimiento de un diagnóstico, así como los posibles usos que pueden hacerse de la lectura propuesta por el supervisor. Se subraya la necesidad de escuchar los dichos del paciente, intentando soportar la tensión entre no dejar de lado los aportes del supervisor ni investir sus palabras de un valor de significante amo. El lugar otorgado a la supervisión es entonces el de un espacio donde se elabora un saber sobre el caso que, no debería obturar la escucha de lo nuevo.profundidad una viñeta clínica, y se interroga el diagnóstico en juego. Luego del recorrido, se establece el diagnóstico de psicosis, a partir de criterios situados a la luz de la definición de esta estructura referida previamente. Se destacan como determinanten a la hora de establecer un diagnóstico, los efectos de las intervenciones de la analista; intervenciones que no son sino en transferencia. Se introduce, además, la pregunta acerca de por qué sería necesario determinar un diagnóstico. A respecto, se sitúa que en la viñeta analizada, lo que se evidencia como necesario es construir una orientación en la cura. La formalización del relato permitiría trazar una dirección posible. Es entonces de acuerdo a la posición del paciente en transferencia y de su respuesta a las intervenciones del analista, que se puede establecer un diagnóstico que permita proyectar un cálculo que a la vez deje lugar a lo incalculable. Se destaca que es la clínica la que genera las preguntas y la misma clínica la que da elementos para construir respuestas, aunque nunca acabadas. En este sentido, se propone considerar la relación teoría-práctica como dialéctica. Luego del recorrido realizado, se define al diagnóstico, como una conjetura que se construye a partir de lo que se escucha y que debe ser verificada también en lo que se escucha, vez a vez. Finalmente, este 'vez a vez', tan propio del psicoanálisis, arrima a una respuesta posible acerca de actualidad de la problemática. Introducción Este escrito aborda un tema que ha sido y continúa siendo controvertido en el campo psicoanalítico: el diagnóstico. Problemática trabajada, analizada y discutida por muchos, que sin embargo conlleva siempre cierta actualidad que parecería serle inherente. Se tratará de preguntarse entonces acerca del por qué de esta actualidad. Durante el recorrido del trabajo, se introducirá además el tema de la supervisión en psicoanálisis, su relación con el establecimiento de un diagnóstico, así como los posibles usos que pueden hacerse de la lectura propuesta por el supervisor. Se subraya la necesidad de escuchar los dichos del paciente, intentando soportar la tensión entre no dejar de lado los aportes del supervisor ni investir sus palabras de un valor de significante amo. El lugar otorgado a la supervisión es entonces el de un espacio donde se elabora un saber sobre el caso que, no debería obturar la escucha de lo nuevo.profundidad una viñeta clínica, y se interroga el diagnóstico en juego. Luego del recorrido, se establece el diagnóstico de psicosis, a partir de criterios situados a la luz de la definición de esta estructura referida previamente. Se destacan como determinanten a la hora de establecer un diagnóstico, los efectos de las intervenciones de la analista; intervenciones que no son sino en transferencia. Se introduce, además, la pregunta acerca de por qué sería necesario determinar un diagnóstico. A respecto, se sitúa que en la viñeta analizada, lo que se evidencia como necesario es construir una orientación en la cura. La formalización del relato permitiría trazar una dirección posible. Es entonces de acuerdo a la posición del paciente en transferencia y de su respuesta a las intervenciones del analista, que se puede establecer un diagnóstico que permita proyectar un cálculo que a la vez deje lugar a lo incalculable. Se destaca que es la clínica la que genera las preguntas y la misma clínica la que da elementos para construir respuestas, aunque nunca acabadas. En este sentido, se propone considerar la relación teoría-práctica como dialéctica. Luego del recorrido realizado, se define al diagnóstico, como una conjetura que se construye a partir de lo que se escucha y que debe ser verificada también en lo que se escucha, vez a vez. Finalmente, este 'vez a vez', tan propio del psicoanálisis, arrima a una respuesta posible acerca de actualidad de la problemática. Introducción: Este escrito aborda un tema que ha sido y continúa siendo controvertido en el campo psicoanalítico: el diagnóstico. Problemática trabajada, analizada y discutida por muchos, que sin embargo conlleva siempre cierta actualidad que parecería serle inherente. Se tratará de preguntarse entonces acerca del por qué de esta actualidad. Durante el recorrido del trabajo, se introducirá además el tema de la supervisión en psicoanálisis, su relación con el establecimiento de un diagnóstico, así como los posibles usos que pueden hacerse de la lectura propuesta por el supervisor. Para esto, se analizará en profundidad una viñeta clínica, interrogando el diagnóstico en juego, y problematizando la necesidad de determinarlo
Resumo:
El presente trabajo se enmarca en el Proyecto de investigación 'Lógica y alcance de las operaciones del analista según Freud: colegir (erraten), interpretar, construir', acreditado pro la Universidad Nacional de La Plata en el marco del Programa de Incevntivos del Ministerio de Educación de la Nación, y dirigido por el Dr. Carlos J. Escars. Cátedra de Teoría Psicoanalítica. Facultad de Psicología, UNLP. La metodología del mismo presentó dos etapas que se conjugaron en un segundo momento. En una primera instancia presentó la forma de un análisis y comparación de textos basado en un método argumentativo. Abordamos los escritos freudianos y notas de Strachey. En una segunda, analizamos publicaciones e investigaciones vigentes sobre las denominadas presentaciones y patologías de época. Finalmente arribamos a conclusiones que en el presente esbozaremos y que nos sitúa en esta doble vertiente indisociable en psicoanálisis: la vertiente epistémica y la vertiente terapéutica. Este trabajo se propone como objetivo situar algunos aspectos que hacen al estatuto lógico de los bordes del saber psicoanalítico, cernidos los mismos a partir de la brecha establecida entre intento de de formalización y aquello que se resiste a hacer sistema. Con tal propósito, apelamos a los escritos técnicos de Freud y nos ocuparemos de las apuestas freudianas por formalizar la técnica psicoanalítica, así como también de los obstáculos clínicos que le impidieron la pretendida mecanización de la técnica. Proseguiremos con un rastreo de los usos que Freud le ha dado a 'lo actual'. Es este mismo significante, 'actual' el que aparece asociado a los límites de la cura por la palabra así como también a una de sus primeras organizaciones nosográficas. De este modo nos serviremos de la categoría de Neurosis Actuales para realizar un recorrido sobre aquello que allá por 1895 Freud había situado una de las mayores momento. En una primera instancia presentó la forma de un análisis y comparación de textos basado en un método argumentativo. Abordamos los escritos freudianos y notas de Strachey. En una segunda, analizamos publicaciones e investigaciones vigentes sobre las denominadas presentaciones y patologías de época. Finalmente arribamos a conclusiones que en el presente esbozaremos y que nos sitúa en esta doble vertiente indisociable en psicoanálisis: la vertiente epistémica y la vertiente terapéutica. Este trabajo se propone como objetivo situar algunos aspectos que hacen al estatuto lógico de los bordes del saber psicoanalítico, cernidos los mismos a partir de la brecha establecida entre intento de de formalización y aquello que se resiste a hacer sistema. Con tal propósito, apelamos a los escritos técnicos de Freud y nos ocuparemos de las apuestas freudianas por formalizar la técnica psicoanalítica, así como también de los obstáculos clínicos que le impidieron la pretendida mecanización de la técnica. Proseguiremos con un rastreo de los usos que Freud le ha dado a 'lo actual'. Es este mismo significante, 'actual' el que aparece asociado a los límites de la cura por la palabra así como también a una de sus primeras organizaciones nosográficas. De este modo nos serviremos de la categoría de Neurosis Actuales para realizar un recorrido sobre aquello que allá por 1895 Freud había situado una de las mayores resistencias a la técnica psicoanalítica: lo no analizable, aquello que no se advenía al trabajo asociativo en transferencia. En nuestra actualidad, cien años después del planteo freudiano, nos encontramos con una apuesta similar: bajo el epígrafe de presentaciones actuales o de época se intenta formalizar aquello que se resiste a hacer sistema. A partir de la pregunta sobre la época esbozada por los analistas y sus intentos de respuesta, intentamos cernir el lugar lógico que el significante época (o actual) porta para el edificio teórico en psicoanálisis así como su posible vinculación con la ausencia de saberes que oficien de garantes y orienten el hacer psicoanalítico. Epoca que tomada como categoría lógica pondrá en cuestión -al igual que el caso- el edificio teórico del psicoanálisis, y que conminará al analista a enfrentarse con lo incalculable/inclasificable de las presentaciones clínicas. De esta manera pareciera conformarse una dimensión de la experiencia analítica vinculada con la construcción colectiva de saberes. Experiencia diferente, pero no independiente de la configurada por la pregunta en transferencia, cuyos saberes se proponen que el psicoanálisis opere. Saberes, mecanismos y reglas técnicas que permitirán un cálculo posible, efecto mismo del intento de formalizar aquello que del caso por caso construye regularidad. Coordenadas del cálculo que, sin embargo, deberán dar lugar a lo incalculable. La teoría que orienta a la clínica psicoanalítica es derivada de las categorías diagnósticas de la clínica psiquiátrica. Tanto Freud como Lacan tienen como referencia dicha nosografía pero arriban a una teoría explicativa de lo que devendrá su propia clínica. Ahora bien, ¿cómo surge este saber sobre la clínica? Es de la clínica misma, de sus obstáculos bajo transferencia, que se elabora este saber determinado por la estructura de la experiencia analítica. Se vuelve así indisociable en el psicoanálisis, como plantea Colette Soler (2003-2004), la vertiente epistémica de la vertiente terapéutica: mediante la exploración del inconsciente, de los significantes, deseos y palabras que por él circulan, se obtienen modificaciones, se curan los síntomas. Intentaremos en este trabajo abordar aquello que se resiste a ser sistematizado de la técnica así como las dificultades que las 'patologías actuales' representan para la misma
Resumo:
El presente trabajo aborda un tema que ha sido y continúa siendo controvertido en el campo psicoanalítico: el diagnóstico. Problemática trabajada, analizada y discutida por muchos, que sin embargo conlleva cierta actualidad que parecería serle inherente. no de los objetivos del trabajo es entonces indagar acerca de la actualidad de esta discusión. Para esto, es necesario partir de la diferenciación entre el diagnóstico psicoanalítico y el diagnóstico psiquiátrico. Al respecto, se toman como base los desarrollos de Colette Soler (2003-2004), quien articula el establecimiento del diagnóstico con el tipo de síntomas considerados por la perspectiva psicoanalítica y la perspectiva médica. Se introducen además las estructuras clínicas delimitadas por Jaques Lacan a partir de la relectura de los desarrollos freudianos: neurosis, psicosis y perversión; y se definen brevemente las dos primeras. Segúneste autor, tales estructuras se establecerán a partir del mecanismo psíquico en juego. Afirma a su vez, que el mecanismo sea la represión o la forclusión, tendrá consecuencias a nivel del leguaje y de los fenómenos de retorno. En relación al diagnóstico, se toma la discusión acerca del uso que se hace de éste dentro del psicoanálisis mismo en tanto, según Adriana Rubinstein (1999) para algunos constituye un momento fundamental de la práctica, mientras que para otros carece de valor. Durante el recorrido del trabajo, se introduce y problematiza además la cuestión de la supervisión en psicoanálisis, su relación con el establecimiento de un diagnóstico, así como los posibles usos que pueden hacerse de la lectura propuesta por el supervisor. Se subraya la necesidad de escuchar los dichos del paciente, intentando soportar la tensión entre no dejar de lado los aportes del supervisor ni investir sus palabras de un valor de significante amo. El lugar otorgado a la supervisión es entonces el de un espacio donde se elabora un saber sobre el caso que, no debería obturar la escucha de lo nuevo.profundidad una viñeta clínica, y se interroga el diagnóstico en juego. Luego del recorrido, se establece el diagnóstico de psicosis, a partir de criterios situados a la luz de la definición de esta estructura referida previamente. Se destacan como determinanten a la hora de establecer un diagnóstico, los efectos de las intervenciones de la analista; intervenciones que no son sino en transferencia. Se introduce, además, la pregunta acerca de por qué sería necesario determinar un diagnóstico. A respecto, se sitúa que en la viñeta analizada, lo que se evidencia como necesario es construir una orientación en la cura. La formalización del relato permitiría trazar una dirección posible. Es entonces de acuerdo a la posición del paciente en transferencia y de su respuesta a las intervenciones del analista, que se puede establecer un diagnóstico que permita proyectar un cálculo que a la vez deje lugar a lo incalculable. Se destaca que es la clínica la que genera las preguntas y la misma clínica la que da elementos para construir respuestas, aunque nunca acabadas. En este sentido, se propone considerar la relación teoría-práctica como dialéctica. Luego del recorrido realizado, se define al diagnóstico, como una conjetura que se construye a partir de lo que se escucha y que debe ser verificada también en lo que se escucha, vez a vez. Finalmente, este 'vez a vez', tan propio del psicoanálisis, arrima a una respuesta posible acerca de actualidad de la problemática. Introducción Este escrito aborda un tema que ha sido y continúa siendo controvertido en el campo psicoanalítico: el diagnóstico. Problemática trabajada, analizada y discutida por muchos, que sin embargo conlleva siempre cierta actualidad que parecería serle inherente. Se tratará de preguntarse entonces acerca del por qué de esta actualidad. Durante el recorrido del trabajo, se introducirá además el tema de la supervisión en psicoanálisis, su relación con el establecimiento de un diagnóstico, así como los posibles usos que pueden hacerse de la lectura propuesta por el supervisor. Se subraya la necesidad de escuchar los dichos del paciente, intentando soportar la tensión entre no dejar de lado los aportes del supervisor ni investir sus palabras de un valor de significante amo. El lugar otorgado a la supervisión es entonces el de un espacio donde se elabora un saber sobre el caso que, no debería obturar la escucha de lo nuevo.profundidad una viñeta clínica, y se interroga el diagnóstico en juego. Luego del recorrido, se establece el diagnóstico de psicosis, a partir de criterios situados a la luz de la definición de esta estructura referida previamente. Se destacan como determinanten a la hora de establecer un diagnóstico, los efectos de las intervenciones de la analista; intervenciones que no son sino en transferencia. Se introduce, además, la pregunta acerca de por qué sería necesario determinar un diagnóstico. A respecto, se sitúa que en la viñeta analizada, lo que se evidencia como necesario es construir una orientación en la cura. La formalización del relato permitiría trazar una dirección posible. Es entonces de acuerdo a la posición del paciente en transferencia y de su respuesta a las intervenciones del analista, que se puede establecer un diagnóstico que permita proyectar un cálculo que a la vez deje lugar a lo incalculable. Se destaca que es la clínica la que genera las preguntas y la misma clínica la que da elementos para construir respuestas, aunque nunca acabadas. En este sentido, se propone considerar la relación teoría-práctica como dialéctica. Luego del recorrido realizado, se define al diagnóstico, como una conjetura que se construye a partir de lo que se escucha y que debe ser verificada también en lo que se escucha, vez a vez. Finalmente, este 'vez a vez', tan propio del psicoanálisis, arrima a una respuesta posible acerca de actualidad de la problemática. Introducción: Este escrito aborda un tema que ha sido y continúa siendo controvertido en el campo psicoanalítico: el diagnóstico. Problemática trabajada, analizada y discutida por muchos, que sin embargo conlleva siempre cierta actualidad que parecería serle inherente. Se tratará de preguntarse entonces acerca del por qué de esta actualidad. Durante el recorrido del trabajo, se introducirá además el tema de la supervisión en psicoanálisis, su relación con el establecimiento de un diagnóstico, así como los posibles usos que pueden hacerse de la lectura propuesta por el supervisor. Para esto, se analizará en profundidad una viñeta clínica, interrogando el diagnóstico en juego, y problematizando la necesidad de determinarlo
Resumo:
El presente trabajo se enmarca en el Proyecto de investigación 'Lógica y alcance de las operaciones del analista según Freud: colegir (erraten), interpretar, construir', acreditado pro la Universidad Nacional de La Plata en el marco del Programa de Incevntivos del Ministerio de Educación de la Nación, y dirigido por el Dr. Carlos J. Escars. Cátedra de Teoría Psicoanalítica. Facultad de Psicología, UNLP. La metodología del mismo presentó dos etapas que se conjugaron en un segundo momento. En una primera instancia presentó la forma de un análisis y comparación de textos basado en un método argumentativo. Abordamos los escritos freudianos y notas de Strachey. En una segunda, analizamos publicaciones e investigaciones vigentes sobre las denominadas presentaciones y patologías de época. Finalmente arribamos a conclusiones que en el presente esbozaremos y que nos sitúa en esta doble vertiente indisociable en psicoanálisis: la vertiente epistémica y la vertiente terapéutica. Este trabajo se propone como objetivo situar algunos aspectos que hacen al estatuto lógico de los bordes del saber psicoanalítico, cernidos los mismos a partir de la brecha establecida entre intento de de formalización y aquello que se resiste a hacer sistema. Con tal propósito, apelamos a los escritos técnicos de Freud y nos ocuparemos de las apuestas freudianas por formalizar la técnica psicoanalítica, así como también de los obstáculos clínicos que le impidieron la pretendida mecanización de la técnica. Proseguiremos con un rastreo de los usos que Freud le ha dado a 'lo actual'. Es este mismo significante, 'actual' el que aparece asociado a los límites de la cura por la palabra así como también a una de sus primeras organizaciones nosográficas. De este modo nos serviremos de la categoría de Neurosis Actuales para realizar un recorrido sobre aquello que allá por 1895 Freud había situado una de las mayores momento. En una primera instancia presentó la forma de un análisis y comparación de textos basado en un método argumentativo. Abordamos los escritos freudianos y notas de Strachey. En una segunda, analizamos publicaciones e investigaciones vigentes sobre las denominadas presentaciones y patologías de época. Finalmente arribamos a conclusiones que en el presente esbozaremos y que nos sitúa en esta doble vertiente indisociable en psicoanálisis: la vertiente epistémica y la vertiente terapéutica. Este trabajo se propone como objetivo situar algunos aspectos que hacen al estatuto lógico de los bordes del saber psicoanalítico, cernidos los mismos a partir de la brecha establecida entre intento de de formalización y aquello que se resiste a hacer sistema. Con tal propósito, apelamos a los escritos técnicos de Freud y nos ocuparemos de las apuestas freudianas por formalizar la técnica psicoanalítica, así como también de los obstáculos clínicos que le impidieron la pretendida mecanización de la técnica. Proseguiremos con un rastreo de los usos que Freud le ha dado a 'lo actual'. Es este mismo significante, 'actual' el que aparece asociado a los límites de la cura por la palabra así como también a una de sus primeras organizaciones nosográficas. De este modo nos serviremos de la categoría de Neurosis Actuales para realizar un recorrido sobre aquello que allá por 1895 Freud había situado una de las mayores resistencias a la técnica psicoanalítica: lo no analizable, aquello que no se advenía al trabajo asociativo en transferencia. En nuestra actualidad, cien años después del planteo freudiano, nos encontramos con una apuesta similar: bajo el epígrafe de presentaciones actuales o de época se intenta formalizar aquello que se resiste a hacer sistema. A partir de la pregunta sobre la época esbozada por los analistas y sus intentos de respuesta, intentamos cernir el lugar lógico que el significante época (o actual) porta para el edificio teórico en psicoanálisis así como su posible vinculación con la ausencia de saberes que oficien de garantes y orienten el hacer psicoanalítico. Epoca que tomada como categoría lógica pondrá en cuestión -al igual que el caso- el edificio teórico del psicoanálisis, y que conminará al analista a enfrentarse con lo incalculable/inclasificable de las presentaciones clínicas. De esta manera pareciera conformarse una dimensión de la experiencia analítica vinculada con la construcción colectiva de saberes. Experiencia diferente, pero no independiente de la configurada por la pregunta en transferencia, cuyos saberes se proponen que el psicoanálisis opere. Saberes, mecanismos y reglas técnicas que permitirán un cálculo posible, efecto mismo del intento de formalizar aquello que del caso por caso construye regularidad. Coordenadas del cálculo que, sin embargo, deberán dar lugar a lo incalculable. La teoría que orienta a la clínica psicoanalítica es derivada de las categorías diagnósticas de la clínica psiquiátrica. Tanto Freud como Lacan tienen como referencia dicha nosografía pero arriban a una teoría explicativa de lo que devendrá su propia clínica. Ahora bien, ¿cómo surge este saber sobre la clínica? Es de la clínica misma, de sus obstáculos bajo transferencia, que se elabora este saber determinado por la estructura de la experiencia analítica. Se vuelve así indisociable en el psicoanálisis, como plantea Colette Soler (2003-2004), la vertiente epistémica de la vertiente terapéutica: mediante la exploración del inconsciente, de los significantes, deseos y palabras que por él circulan, se obtienen modificaciones, se curan los síntomas. Intentaremos en este trabajo abordar aquello que se resiste a ser sistematizado de la técnica así como las dificultades que las 'patologías actuales' representan para la misma
Resumo:
El presente trabajo aborda un tema que ha sido y continúa siendo controvertido en el campo psicoanalítico: el diagnóstico. Problemática trabajada, analizada y discutida por muchos, que sin embargo conlleva cierta actualidad que parecería serle inherente. no de los objetivos del trabajo es entonces indagar acerca de la actualidad de esta discusión. Para esto, es necesario partir de la diferenciación entre el diagnóstico psicoanalítico y el diagnóstico psiquiátrico. Al respecto, se toman como base los desarrollos de Colette Soler (2003-2004), quien articula el establecimiento del diagnóstico con el tipo de síntomas considerados por la perspectiva psicoanalítica y la perspectiva médica. Se introducen además las estructuras clínicas delimitadas por Jaques Lacan a partir de la relectura de los desarrollos freudianos: neurosis, psicosis y perversión; y se definen brevemente las dos primeras. Segúneste autor, tales estructuras se establecerán a partir del mecanismo psíquico en juego. Afirma a su vez, que el mecanismo sea la represión o la forclusión, tendrá consecuencias a nivel del leguaje y de los fenómenos de retorno. En relación al diagnóstico, se toma la discusión acerca del uso que se hace de éste dentro del psicoanálisis mismo en tanto, según Adriana Rubinstein (1999) para algunos constituye un momento fundamental de la práctica, mientras que para otros carece de valor. Durante el recorrido del trabajo, se introduce y problematiza además la cuestión de la supervisión en psicoanálisis, su relación con el establecimiento de un diagnóstico, así como los posibles usos que pueden hacerse de la lectura propuesta por el supervisor. Se subraya la necesidad de escuchar los dichos del paciente, intentando soportar la tensión entre no dejar de lado los aportes del supervisor ni investir sus palabras de un valor de significante amo. El lugar otorgado a la supervisión es entonces el de un espacio donde se elabora un saber sobre el caso que, no debería obturar la escucha de lo nuevo.profundidad una viñeta clínica, y se interroga el diagnóstico en juego. Luego del recorrido, se establece el diagnóstico de psicosis, a partir de criterios situados a la luz de la definición de esta estructura referida previamente. Se destacan como determinanten a la hora de establecer un diagnóstico, los efectos de las intervenciones de la analista; intervenciones que no son sino en transferencia. Se introduce, además, la pregunta acerca de por qué sería necesario determinar un diagnóstico. A respecto, se sitúa que en la viñeta analizada, lo que se evidencia como necesario es construir una orientación en la cura. La formalización del relato permitiría trazar una dirección posible. Es entonces de acuerdo a la posición del paciente en transferencia y de su respuesta a las intervenciones del analista, que se puede establecer un diagnóstico que permita proyectar un cálculo que a la vez deje lugar a lo incalculable. Se destaca que es la clínica la que genera las preguntas y la misma clínica la que da elementos para construir respuestas, aunque nunca acabadas. En este sentido, se propone considerar la relación teoría-práctica como dialéctica. Luego del recorrido realizado, se define al diagnóstico, como una conjetura que se construye a partir de lo que se escucha y que debe ser verificada también en lo que se escucha, vez a vez. Finalmente, este 'vez a vez', tan propio del psicoanálisis, arrima a una respuesta posible acerca de actualidad de la problemática. Introducción Este escrito aborda un tema que ha sido y continúa siendo controvertido en el campo psicoanalítico: el diagnóstico. Problemática trabajada, analizada y discutida por muchos, que sin embargo conlleva siempre cierta actualidad que parecería serle inherente. Se tratará de preguntarse entonces acerca del por qué de esta actualidad. Durante el recorrido del trabajo, se introducirá además el tema de la supervisión en psicoanálisis, su relación con el establecimiento de un diagnóstico, así como los posibles usos que pueden hacerse de la lectura propuesta por el supervisor. Se subraya la necesidad de escuchar los dichos del paciente, intentando soportar la tensión entre no dejar de lado los aportes del supervisor ni investir sus palabras de un valor de significante amo. El lugar otorgado a la supervisión es entonces el de un espacio donde se elabora un saber sobre el caso que, no debería obturar la escucha de lo nuevo.profundidad una viñeta clínica, y se interroga el diagnóstico en juego. Luego del recorrido, se establece el diagnóstico de psicosis, a partir de criterios situados a la luz de la definición de esta estructura referida previamente. Se destacan como determinanten a la hora de establecer un diagnóstico, los efectos de las intervenciones de la analista; intervenciones que no son sino en transferencia. Se introduce, además, la pregunta acerca de por qué sería necesario determinar un diagnóstico. A respecto, se sitúa que en la viñeta analizada, lo que se evidencia como necesario es construir una orientación en la cura. La formalización del relato permitiría trazar una dirección posible. Es entonces de acuerdo a la posición del paciente en transferencia y de su respuesta a las intervenciones del analista, que se puede establecer un diagnóstico que permita proyectar un cálculo que a la vez deje lugar a lo incalculable. Se destaca que es la clínica la que genera las preguntas y la misma clínica la que da elementos para construir respuestas, aunque nunca acabadas. En este sentido, se propone considerar la relación teoría-práctica como dialéctica. Luego del recorrido realizado, se define al diagnóstico, como una conjetura que se construye a partir de lo que se escucha y que debe ser verificada también en lo que se escucha, vez a vez. Finalmente, este 'vez a vez', tan propio del psicoanálisis, arrima a una respuesta posible acerca de actualidad de la problemática. Introducción: Este escrito aborda un tema que ha sido y continúa siendo controvertido en el campo psicoanalítico: el diagnóstico. Problemática trabajada, analizada y discutida por muchos, que sin embargo conlleva siempre cierta actualidad que parecería serle inherente. Se tratará de preguntarse entonces acerca del por qué de esta actualidad. Durante el recorrido del trabajo, se introducirá además el tema de la supervisión en psicoanálisis, su relación con el establecimiento de un diagnóstico, así como los posibles usos que pueden hacerse de la lectura propuesta por el supervisor. Para esto, se analizará en profundidad una viñeta clínica, interrogando el diagnóstico en juego, y problematizando la necesidad de determinarlo
Resumo:
En el presente trabajo intentaremos dar cuenta del encuentro entre algunos conceptos provenientes de la producción teórica de Althusser y la Filosofía de Género. Más precisamente, exploraremos la influencia del althusserianismo en ciertos debates del feminismo teórico, sobre todo aquellos centrados en la producción dimórfica de sujetos generizados mediante la ideología y el mecanismo de interpelación. De este modo, analizaremos las consecuencias de una particular recepción de Althusser en el ámbito de los Estudios de Género, así como los aportes fundamentales del diálogo entre ambos. Para ello, tomaremos como eje el concepto de "apropiación" propuesto por Colette Guillaumin, intentando articularlo con elementos provenientes del marco teórico althusseriano y balibariano. El objetivo es poder arrojar luz sobre los procesos de subjetivación diferenciales que operan a la hora de constituir sujetos concretos ?mujeres?, sobre la base de una relación de apropiación, la cual revela a la vez la naturaleza de su opresión y las características de su sujeción
Resumo:
En el presente trabajo intentaremos dar cuenta del encuentro entre algunos conceptos provenientes de la producción teórica de Althusser y la Filosofía de Género. Más precisamente, exploraremos la influencia del althusserianismo en ciertos debates del feminismo teórico, sobre todo aquellos centrados en la producción dimórfica de sujetos generizados mediante la ideología y el mecanismo de interpelación. De este modo, analizaremos las consecuencias de una particular recepción de Althusser en el ámbito de los Estudios de Género, así como los aportes fundamentales del diálogo entre ambos. Para ello, tomaremos como eje el concepto de "apropiación" propuesto por Colette Guillaumin, intentando articularlo con elementos provenientes del marco teórico althusseriano y balibariano. El objetivo es poder arrojar luz sobre los procesos de subjetivación diferenciales que operan a la hora de constituir sujetos concretos ?mujeres?, sobre la base de una relación de apropiación, la cual revela a la vez la naturaleza de su opresión y las características de su sujeción
Resumo:
En el presente trabajo intentaremos dar cuenta del encuentro entre algunos conceptos provenientes de la producción teórica de Althusser y la Filosofía de Género. Más precisamente, exploraremos la influencia del althusserianismo en ciertos debates del feminismo teórico, sobre todo aquellos centrados en la producción dimórfica de sujetos generizados mediante la ideología y el mecanismo de interpelación. De este modo, analizaremos las consecuencias de una particular recepción de Althusser en el ámbito de los Estudios de Género, así como los aportes fundamentales del diálogo entre ambos. Para ello, tomaremos como eje el concepto de "apropiación" propuesto por Colette Guillaumin, intentando articularlo con elementos provenientes del marco teórico althusseriano y balibariano. El objetivo es poder arrojar luz sobre los procesos de subjetivación diferenciales que operan a la hora de constituir sujetos concretos ?mujeres?, sobre la base de una relación de apropiación, la cual revela a la vez la naturaleza de su opresión y las características de su sujeción