88 resultados para Movilizaciones obreras
Resumo:
El dirigente del Sindicato de Luz y Fuerza cordobés Agustín Tosco fue la figura más emblemática del gremialismo combativo y democrático durante las décadas de 1960 y 1970. Su intensa actuación como cuadro sindical y, a la vez, también, político, se extendió a lo largo de casi veinticinco años, en los que la clase obrera libró un combate denodado por obtener o mantener sus reivindicaciones y conquistas, y en los que se sucedieron diversas experiencias de movilización y organización obreras. Existieron algunas tensiones irresueltas en Tosco. Reclamó la actuación autónoma y combativa de la clase obrera en el campo sindical, aunque no logró empalmar completamente con una de las corrientes que más radicalmente expresó ese curso hacia principios de los años setenta: la tendencia clasista articulada en torno al SITRAC-SITRAM. En el plano político, propugnó la necesidad de que la clase obrera se aliara a otros sectores sociales subalternos, populares o antiimperialistas para articular un Frente de Liberación Nacional y Social, lo que podía conducir a licuar esa acción autónoma de los trabajadores e, incluso, a abrir paso a indeterminadas alianzas con fracciones burguesas progresistas. Se proveyó de un diagnóstico que señalaba el carácter burgués policlasista, nacional-estatista, bonapartista y reformista del peronismo pero no pudo proyectar un camino completamente separado de éste en todas sus múltiples configuraciones. Postuló la necesidad de una política obrera independiente, sin orientarse hacia el camino práctico de la construcción de un partido de los trabajadores, socialista o revolucionario. Se erigió como un militante convencido del carácter emancipatorio que debía asumir la brega proletaria y de la necesidad del socialismo, aunque se mostró menos capacitado para lograr traducir eficazmente su ?sindicalismo de liberación? al plano de la construcción política. El objetivo de esta ponencia es abordar estas tensiones irresueltas en Tosco, realizando algunas observaciones acerca de los vínculos que éste construyó con las izquierdas
Resumo:
A lo largo de la década del 90' y los primeros años del 2000 los sujetos que conforman el sector hortícola del Gran La Plata desarrollaron una serie de enfrentamientos que expresaron la situación de crisis que estaban atravesando. A través de diferentes métodos (asambleas, declaraciones, movilizaciones y cortes de calles) intentaron denunciar e incidir en la forma en que las políticas del estado municipal, provincial y nacional afectaban al sector. La situación que operó de contexto se caracterizó por el plan de convertibilidad, la desregulación, la apertura externa y una menor participación del Estado en la actividad económica. El estudio de dicho proceso se realizará a partir de una metodología que reconoce a los enfrentamientos como los ejes generadores del movimiento de lo social. En este trabajo se intentará responder: en qué consistió la lucha que llevaron adelante los "horticultores" del Gran la Plata; qué sujetos participaron; qué organizaciones encabezaron las acciones y cuáles fueron sus lineamientos políticos; qué aliados lograron en apoyo de sus reclamos; qué métodos se utilizaron; cuáles fueron sus reivindicaciones y qué logros obtuvieron. Cómo fue evolucionando el conflicto a lo largo de esos diez años, qué momentos podemos delimitar en los enfrentamientos, cambios y continuidades. Reconocer qué conciencia expresan en relación a sus reivindicaciones, qué clase o fracción de clase representan. Qué similitudes y diferencias se pueden observar con la situación denunciada por otros sujetos
Resumo:
La vinculación entre izquierdas partidarias y clase obrera presenta tópicos invariables, aún pese a las diferencias históricas de actores y contextos. La izquierda pretende influir en los trabajadores, con el fin de convertirse en su dirección política. Cuando esa intervención se hizo inicialmente ?desde afuera?, con una izquierda que debía conquistar su presencia orgánica en las filas proletarias, las disyuntivas quedaban planteadas: ¿cómo acercarse a la clase, cómo efectuar la labor de penetración en ella, cómo lograr que sus cuadros se conviertan en referentes de los trabajadores? Las cuestiones de la ?implantación?, la ?inserción?, la ?proletarización?, así como la de los repertorios de organización relacionadas con ellas, quedan planteadas. Nos proponemos reflexionar a partir de dos casos históricos: el Partido Comunista durante 1920-1930 (en el contexto de una clase obrera industrial desorganizada y, en buena medida, carente de representación política); y el PRT-La Verdad, de orientación trotskista, que actuó durante el ciclo 1968-1972, el de la emergencia de tendencias obreras clasistas y de parcial cuestionamiento a la burocracia peronista. En el trabajo, se describirá cada proceso y se buscará alcanzar algunas conclusiones comparativas y generales
Resumo:
El mercado de Bonpland se origina en el ciclo de movilizaciones y organización popular con epicentro en la crisis del 2001. Heredero directo de la Asamblea de Palermo Viejo, lo integran mayoritariamente organizaciones surgidas en el mismo período así como algunas más antiguas. Comparten el espacio y el proyecto del mercado asambleas populares, cooperativas, ONGs, grupos de pequeños productores beneficiarios de programas sociales y fábricas recuperadas. Su trayectoria como colectivo de un movimiento social recorre casi una década e incluye conflictos con autoridades gubernamentales así como a su interior. Tres rasgos salientes de este colectivo son: a) que congrega a las múltiples expresiones de la creciente economía social (seguridad alimentaria, producción orgánica, autogestión, lucha contra el trabajo esclavo): b) a diferencia de muchas otras experiencias, perdura y prospera a pesar de la indiferencia u hostilidad del gobierno local; y c) se encuentra localizado, paradójicamente, en una de las zonas de mayor transformación y valorización residencial, comercial y gastronómica de la ciudad de Buenos Aires. Esta ponencia analiza la trayectoria del mercado desde sus orígenes y, asimismo, describe cada una de las organizaciones de la economía social que congrega
Resumo:
La instalación del modelo neoliberal consideró la privatización de la educación bajo la hipótesis de que al entrar nuevos actores económicos se produciría una mejora en la calidad, producto de la competencia. El resultado de esta política fue el surgimiento de dos tipos de educación: una privada que suponía mejor calidad, y una pública con resultados inferiores, lo cual contribuyó a segmentar la educación entre una ?para ricos? y otra ?para pobres?. A día de hoy no se ha comprobado que la hipótesis que dio origen al sistema haya resultado; lejos de aquello, las mediciones de la calidad de la educación tanto en establecimientos públicos como privados permanecen en niveles muy bajos, resultando únicamente en la consolidación de grupos económicos que se han beneficiado de las subvenciones que el Estado entrega, lo cual ha generado diversas movilizaciones tanto de estudiantes como de profesores en pos de defender el derecho a una educación de calidad, pública y gratuita para todos. A partir de aquí el artículo reflexiona en torno a las consecuencias de la entrada de la educación en el mercado, específicamente en la transformación de padres y profesores en "sujetos de mercado" más que en "agentes educativos"
Resumo:
Argentina, desde mediados de la década de los noventa se fue convirtiendo en escenario para movilizaciones y acciones colectivas de protesta, entre las cuales se ubicaron los movimientos de trabajadores desocupados. La relevancia de estos sucesos despertó atracción en el campo científico el cual viene desarrollando investigaciones vinculadas a la historia, las condiciones de emergencia del nuevo actor colectivo (los piqueteros) y las (re)definiciones en el juego de fuerzas que supuso su ingreso en la política nacional. No obstante, en el transcurso de los últimos años están aconteciendo ciertos procesos de cambio en el escenario político nacional que generan transformaciones dentro de las organizaciones de desocupados así como, también, abren nuevas articulaciones y (re)definiciones de sus proyectos políticos con consecuencias sustanciales en la dimensión identitaria y en el accionar militante. Por tanto, el proyecto busca analizar representaciones y prácticas políticas de los militantes de organizaciones de desocupados con el propósito de indagar en la constitución de "identidades militantes". Para ello se propone reconstruir, desde la perspectiva de los militantes, los sentidos colectivos, lógicas de acción e interacciones presentes en la constitución de los proyectos políticos de las agrupaciones políticas: MTD- Evita y MTD- Aníbal Verón de Gran La Plata.
Resumo:
El grado de desintegración social, desigualdad y de fragmentación de las identidades hicieron paradigmática la crisis del ordenamiento social neoliberal en Argentina. Hacia finales de la década del noventa y a través de la politización de las distintas situaciones de precariedad, de los nuevos contextos de sociabilidad territorial y de la recuperación de lazos y redes sociales ya existentes, surgieron novedosas respuestas de acción colectiva y organización popular. Una de esas "novedades", fue la movilización de grandes agrupamientos de desocupados que protagonizaron movilizaciones -primero en el interior del país y luego en el Conurbano Bonaerense- donde alcanzaron masividad y características muy particulares. El presente trabajo se centrará particularmente en el campo de los Movimientos de Desocupados que se sitúan en la perspectiva política autónoma, y dentro de éstos, retomaremos sólo la experiencia Frente Popular Darío Santillán (FPDS) y del Movimiento de Trabajadores Desocupados "Aníbal Verón" ya que éste se constituyó como su antecedente inmediato. De esta manera, nuestra unidad de referencia será el FPDS en tanto organización y nos propondremos analizar sus dinámicas políticas, posicionamientos y reposicionamientos en la nueva coyuntura político-social abierta con el kirchnerismo en el período de la post convertibilidad, a través de la reconstrucción de su trayectoria organizativa
Resumo:
Nuestra investigación se centró fundamentalmente en las distintas formas en que las derechas respondieron a los conflictos suscitados en el mundo del trabajo durante el período de entreguerras. En primer lugar, advertimos que la cuestión social fue adquiriendo un rol protagónico en la agenda nacionalista tal como puede verse, por ejemplo, a través del análisis de los periódicos. En efecto, los diarios más importantes adscriptos al nacionalismo desarrollaron un discurso radical respecto a los problemas sociales e incluyeron secciones específicas para tratar estas cuestiones y expresar una posición al respecto. Las respuestas del nacionalismo argentino frente a la cuestión obrera han sido múltiples y han abarcado distintas esferas de la vida social. Lejos de esperar que la solución a los problemas sociales proviniera exclusivamente de las medidas restrictivas y represivas hacia el movimiento obrero, los nacionalistas elaboraron programas sociales, políticos, económicos y culturales que formaron parte de su proyecto de nación autoritaria y jerárquica. Los proyectos sociales y las propuestas de organización sindical fueron en gran parte inspirados por los fascismos europeos los cuales incluyeron programas de contención social dentro de un orden político totalitario. En este sentido los nacionalistas argentinos intentaron mediante sus propuestas imponer un orden que contemplara las necesidades básicas de los sectores populares y que preservara las jerarquías sociales limitando la participación política o sindical de los trabajadores y eliminando definitivamente alas fuerzas de la izquierda revolucionaria. Las organizaciones obreras nacionalistas incluyeron todo tipo de trabajadores en sus filas y procuraron captar tanto a los afiliados de los sindicatos autónomos como a los trabajadores socialistas. Algunas de estas organizaciones fueron efímeras mientras que otras tuvieron más éxito y lograron atraer adherentes. Las mismas conformaron la corriente que hemos denominado nacionalismo sindicalista, la cual desarrolló su propia doctrina social fuertemente influenciada por las encíclicas papales. Las manifestaciones nacionalistas en el espacio público porteño han sido también analizadas in extenso. Existieron distintos tipos de manifestaciones para movilizar a los seguidores del nacionalismo y para captar nuevos adherentes, especialmente aquellos provenientes de los sectores populares. Las manifestaciones se convirtieron en el escenario de las disputas ideológicas mantenidas tanto contra la política liberal como contra la revolucionaria. La "revolución nacionalista", según la formulaban sus partidarios, implicaba trascender los aspectos políticos y económicos incorporando transformaciones en otras áreas de la vida social: las costumbres, las formas de vida, los gustos culturales, los valores. Los nacionalistas advirtieron que para lograr este tipo de "revolución" debían hacer usa de los medios de comunicación masivos y diseñar proyectos para regular las industrias culturales. El objetivo de representar a los sectores populares fracasó rotundamente. El discurso nacionalista que condenaba la diversidad étnico-religiosa, que amenazaba con eliminar las distintas voces políticas existentes, y que expresaba un odio visceral a sus enemigos (ya fueran judíos, anarquistas, comunistas, o liberales) fue extremadamente desafortunado para quienes procuraron ensanchar las bases de un movimiento antidemocrático originalmente elitista que, a la luz del contexto internacional y de las condiciones locales, devino en populista
Resumo:
En Argentina, desde mediados de la década del 50, se produjo un doble proceso: una crisis de legitimidad y una crisis de rentabilidad que explica en gran parte la inestabilidad política e institucional del período. En este proceso, la clase trabajadora jugó un rol fundamental, al protagonizar diversas acciones como huelgas, manifestaciones, sabotajes, ocupaciones de los lugares de trabajo, resistencias abiertas y solapadas, que fueron cristalizando en diferentes formas organizativas. Éstas fueron tanto producto de la acumulación de experiencias y prácticas ligadas al proceso de la denominada resistencia peronista como de una coyuntura que llevó a los/as trabajadores/as a poner en acto nuevas prácticas y formas de protesta. La mayor parte de la historiografía coincide en caracterizar al período 1955-76 como un ciclo de protestas atravesado por la inestabilidad política, las recurrentes crisis económicas y la conflictividad social. También los estudios historiográficos sostienen que el protagonismo de la clase trabajadora en los diversos momentos del ciclo de protesta 1955-1976 se debió a su rol significativo en la estructura social, producto del importante desarrollo de la industria para esa época. En un marco nacional de ISI [Industrialización Sustitutiva de Importaciones] Mendoza tuvo un trayecto económico diferenciado al del centro del país. Sin embargo, pese a no haberse producido un proceso de industrialización ni haberse conformado un proletariado industrial; también hubo conflictos constantes entre las fuerzas del capital y del trabajo; y ya desde la resistencia peronista trabajadores/as de distintos sectores protagonizaron numerosos paros y masivas movilizaciones que pusieron en jaque a las distintas intervenciones militares, produciéndose en abril de 1972 el Mendozazo, hecho que tuvo hondas consecuencias en las experiencias organizativas de distintos sectores de trabajadores/as. Esta tesis busca abordar el enfrentamiento entre las fuerzas del capital y los/as trabajadores/as en Mendoza, una provincia agroindustrial, en el período abierto entre el Mendozazo [1972] y la dictadura militar de 1976; procurando producir un relato que permita construir, desde las perspectivas de clase y género, tanto el momento de auge de masas como las respuestas represivas de la clase dominante y el papel jugado por el Estado en un momento de agudización de la lucha de clases y de superposición de las crisis de dominación y acumulación. Para ello realizaremos una reconstrucción del ciclo de protestas en la provincia en el lapso 1972-1976, para luego concentrarnos en la experiencia de los sectores de trabajadores que tuvieron mayor visibilidad en dicho ciclo [docentes, estatales, bancarios y contratistas de viña] apuntando a conocer qué factores y dimensiones actuaron en la articulación de intereses comunes. Atenderemos también al accionar de los grupos parapoliciales que actuaron en la provincia [Comando Anticomunista Mendoza y Comando Moralizador Pío XII], teniendo en cuenta el carácter sexuado que la represión adquirió, la genealogía de los grupos de derecha y sus conexiones a un lado y otro de la cordillera así como al proceso que los condujo a confluir en la represión del enemigo político en un momento de articulación de redes represivas en el Cono Sur
Resumo:
El trabajo estudia los procesos de toma de conciencia que tuvieron lugar en la provincia de Mendoza a principios de los años '70. Momento en que distintas fracciones de la clase obrera construyeron alternativas políticas que buscaban la superación del sistema social vigente, nos abocamos a conocer los alineamientos político-sociales que asumieron los trabajadores alejados de los grandes centros industriales. Analizamos también el desarrollo de los conflictos intragremiales, los que en gran medida dejan entrever procesos de construcción de autonomía. Optamos por abordar el estudio de los conflictos obreros a nivel provincial a través de una medición cuantitativa de sus luchas, metodología que entendemos nos permite objetivar los procesos de lucha de clases en que se encontraba el conjunto de la sociedad argentina. En esta línea, el Mendozazo [abril de 1972] aparece como un hito central a dilucidar, entendiéndolo como un salto en cantidad y en calidad respecto de los procesos de toma de conciencia. Éste expresa un proceso de ruptura, que en su búsqueda por lograr ya sea la democratización o la superación de la forma en que se encuentra organizada la sociedad, entronca con las luchas nacionales del período. Nos interrogamos acerca su génesis y desarrollo, y por los cambios ocurridos en las formas de organización y de lucha de los trabajadores a nivel provincial como producto de este hecho social de masas. Para ello elaboramos un mapa de los conflictos obreros entre los años 1969 y 1974, que nos permite registrar la intensidad de los conflictos, el lugar de su ocurrencia, los sectores más movilizados y los objetivos de su acción. Asimismo, da cuenta de la dinámica de la conflictividad de carácter inter e intragremial, política y teórica; disputas que no estuvieron escindidas del posicionamiento que las distintas fracciones obreras asumieron respecto de las fuerzas sociales que por entonces disputaban el poder en la Argentina. Estos datos cuanti-cualitativos son luego puestos en diálogo con un estudio en profundidad, que analiza la experiencia del SOEP, sindicato de obreros y empleados públicos surgido al calor del Mendozazo. El mismo nos sirve para pensar cómo el proceso de avance de las fracciones más retardatarias de la sociedad logró cooptar a ciertos sectores que habían iniciado un proceso de autonomía e indisciplinamiento social; puesto que tanto de los resultados que arroja el mapeo como del proceso que muestra el estudio de caso seleccionado, se desprende que al menos hasta el momento que comprende este trabajo, el disciplinamiento gremial no fue un proceso que necesitó de grandes niveles de violencia material, sino que expresa un momento de construcción de hegemonía por parte de los sectores del denominado sindicalismo ortodoxo