21 resultados para Terapeuta e paciente
Resumo:
En los equipos de rehabilitación (cardíaca, traumatológica, neurológica, etc.) solemos encontrarnos con Traumatólogos, Deportólogos, Kinesiólogos, Terapistas Ocupacionales, Psicólogos, Nutricionistas, cada uno dedicado a un segmento particular del tratamiento de cura y habilitación. La importancia de la actividad física como vector de salud ha llevado a incluir en estos equipos multidisciplinarios a profesionales de la Educación Física especializados en la "Rehabilitación por el Ejercicio". Ahora bien, ¿Qué tienen los primeros profesionales nombrados que no hallamos en el último? Evidentemente es fácil reconocer el ámbito de incumbencias de todos, pero ¿qué es aquello que los define como profesionales rápidamente en el imaginario colectivo, generando confianza y respeto previo en el paciente y sus familiares? Sin lugar a dudas: el NOMBRE que define sus incumbencias. Intentaremos justificar la importancia de un buen nombre que identifique a una actividad que ha adquirido un rol primordial en el tratamiento de pacientes en su fase de recuperación. Pero además, arriesgaremos una nomenclatura como propuesta universal, que identifique esta especialización y a los profesores y Licenciados en Educación Física que la realicen, como verdaderos terapeutas que demuestran en su acción cotidiana, la injerencia de estos saberes en la recuperación de los pacientes post trauma
Resumo:
El presente trabajo se abocara a estudiar la trasnferencia como fenómeno y la operación del analista en esta, ya que la dirección de la cura se hace en transferencia. Freud se fue encontrando en su experiencia clínica con la transferencia como una herramienta de la cura para determinar desde donde es demandado y escuchado el analista, desde donde es incluido en el conflicto neurótico. Al principio, se le atribuye a Freud operar desde un lugar de amo que paulatinamente revela el surgimiento del deseo del analista, noción que tendra que esperar a Lacan para su conceptualización. Así, Freud concibo a la transferencia como repetición, resistencia y motor de la cura, ontraindicando se intervenga por la vertiente sugestiva que también esta presente en la transferencia.Posteriormente, se necesitara del retorno de Lacan a la obra freudiana para que esta orientación sea nuevamente interrogada y el concepto de transferencia recupere su estatuto original. Lacan sitúa la transferencia al nivel de la estrategia ya que todo acto del analista tiene efecto por la posición que éste ocupa como lugar simbólico, es decir, en dependencia con el fantasma del analizante. Entonces, el analista dirige la cura, operando desde el lugar que ocupa, pero no al paciente. Dirigir la cura supone aplicar la regla fundamental de libre asociación, aunque ésta no lo es tanto ya que esta sujeta al deseo del analista. Así, el lugar que ocupe el analista como soporte de la transferencia esta fundado en el deseo del analista, es decir, en su ética. Es objetivo de esta propuesta determinar cual es la ética y, por ende, el deseo desde el cual opera el analista en la cura, en tanto nos permitira delimitar la dirección que tomara ésta y los posibles destinos de un sujeto intervenido, en un dispositivo donde la transferencia y el uso que de ella se hace, constituye una pieza clave. Para esto se establecera una distinción entre dos tipos de respuesta posibles a la demanda de análisis de un sujeto: - Algunos posfreudianos que afirmaron que el yo se encuentra debilitado por el conflicto y el analista debe acudir en auxilio de este yo, por lo tanto la acción debe orientarse hacia la realización de una reeducación emocional, lo que implicaría atribuirse, el propio terapeuta, un saber sobre lo que es mejor para el otro. El terapeuta resultaría funcional con la ética que rige el malestar en la cultura, conduciendo al malestar del deseo a través de su renuncia. - Por otro lado, Lacan que articulando la vertiente simbólica de la cadena significante con el goce del objeto a través del amor de transferencia posibilitara al analista operar sobre lo real a través de lo simbólico.De este modo, el analista opera desde el lugar que le da la transferencia del analizante, estando sostenida su presencia por el Otro simbólico del paciente. Como agalma puede captar el deseo del sujeto prestándose para cumplir esta función, sabiendo que enmascara el objeto que esta en causa para el analizante. Si esta operando el deseo del analista, el analizante podra localizar su deseo a partir de la falta de su signo en el Otro. En este caso, la ética en juego es una ética del deseo: el psicoanálisis se orienta del malestar al saber hacer con el síntoma, pasando por el deseo. Concluyendo, estas dos respuestas conducen hacia destinos con efectoscontrapuestos en la vida de un sujeto. Ambas derivaron de la lectura de la obra freudiana: una que perdió el sentido de su descubrimiento, otra que lo retomo. Entonces, la distinción radical que realiza el psicoanálisis entre el Otro del significante y el objeto a, obstaculiza toda posibilidad de asentar el dispositivo analítico en unacomunicación interpersonal. La identificación que favorece toda comunicación interpersonal es desalentada por el deseo del analista como función que empuja a la posición deseante, al más allá del amor de transferencia, donde el analista ofrece su presencia para que el objeto a adquiera su posición de semblante y reconduzca a la pulsión, posibilitando que el analizante pueda encontrarse con sus puntos de goce y hacer de ellos otra cosa que le implique menos sufrimiento. Que el analizante pueda encontrarse con que la falta es estructural e inherente a todo sujeto del lenguaje
Resumo:
Se argumentará acerca de las instancias de la supervisión clínica y de la evaluación metodológica en la investigación clínica, estableciendo las particularidades de cada una y el aporte específico para la práctica clínica. Las ideas que se exponen han surgido en el curso de una investigación en clínica de la adicción realizado en el marco de un Proyecto de Investigación, subsidiado por la Secretaría de Ciencia y Técnica y de la Secretaría de Extensión Universitaria de la Universidad Nacional de San Luis. Se llevó a cabo en el 'Programa de Investigación y Orientación Psicológica para sujetos que consumen drogas', en el Centro Interdisciplinario de Servicios de la Facultad de Ciencias Humanas en la mencionada Universidad. La investigación se situó en el ámbito psicoterapéutico desde una perspectiva teórica psicoanalítica. Se indagó acerca de las implicancias teórico-clínicas en el abordaje del paciente adicto a drogas, partiendo del conocimiento de la alta tasa de fracasos en estos tratamientos. La pregunta central que se deriva del planteo del problema que se suscita en la clínica cotidiana con estos pacientes, se centra en considerar las condiciones que se requieren instalar en el espacio terapéutico, para que el consumo de drogas dé paso a un más allá de la sustancia, y emerja un auténtico interés de conocimiento sobre sí mismo en el paciente que pueda constituirse en el centro del proceso psicoterapéutico. El objetivo general fue aportar a la elaboración de un modelo metapsicológico que permita describir, analizar y explicar las características psicodinámicas del funcionamiento psíquico del paciente adicto, y proponer las modalidades de intervenciones clínicas posibles que se corresponden. Los objetivos específicos abarcaron al paciente, al terapeuta y el tratamiento. Respecto del paciente se buscó: conocer el efecto que produce el consumo de drogas y las fantasías que subyacen para relacionarlo con el motivo de consulta y la demanda de tratamiento, identificar y caracterizar acerca del tipo de vínculos. Respecto del Terapeuta se buscó: identificar la modalidad de intervenciones terapéuticas, indagar cómo se opera frente a las variantes de la transferencia-contratransferencia. Respecto del Tratamiento se buscó caracterizar las particularidades del encuadre, analizar las intervenciones que favorecieron y obstaculizaron el tratamiento. Se siguió la metodología de la investigación clínica, con un diseño descriptivo- explicativo, con estrategia de estudio de casos. Las Unidades de Análisis fueron los casos clínicos (Psicodiagnóstico y Proceso Psicoterapéutico) de sujetos que han realizado consultas espontáneas o por derivación. El procedimiento abarcó la descripción del funcionamiento psíquico de los pacientes seleccionados, el análisis del material clínico y la articulación con conceptos teóricos psicoanalíticos. Se completaron las etapas de codificación del material clínico, categorización, relación, integración y modelización. Se elaboró una Clasificación de los Pacientes Adictos a drogas (Parásitos, Suspendidos, Ordálicos, Todopoderosos, Imposibles), propuesta estrictamente para la muestra estudiada y útil para analizar la variedad con que se presenta el fenómeno clínico de la drogadependencia. Se obtuvo como resultado un cuadro de propiedades cualitativas que representan a través de una clasificación de pacientes, el entrecruzamiento de los datos clínicos, configurado en torno de núcleos semánticos que expresan la realidad clínica observada. Estas clases permitieron explicar los casos clínicos de esta investigación y también podrán dar cuenta de los futuros casos clínicos en la práctica terapéutica. Este recorrido da evidencias de la utilidad de una construcción y de su armado en distintos niveles de integración desde el más elemental y concreto que parte de la empiria (paciente terapeuta-tratamiento) y el registro de lo que será el material clínico, al nivel de las variables, pasando por la delimitación y construcción del caso clínico, para proceder a su análisis e interpretación a la luz de la teoría psicoanalítica, hasta llegar al más conceptual, abstracto y superior que es el de las Clases de Pacientes. Paralelamente a este recorrido las instancias de la supervisión clínica y de la evaluación metodológica cumplen, respectivamente, la función de sostener la dirección del tratamiento y validar la producción teórica del analista-investigador
Resumo:
En este trabajo me propongo comunicar resultados de una investigación que estoy realizando sobre los escritos personales, notas o borradores que realizan terapeutas en el ámbito de la salud mental. Los borradores son escrituras precarias que el profesional utiliza para diversos fines posteriores. Es frecuente que los terapeutas tomen notas, ya sea durante la entrevista con el paciente o después de concluida esta. Estas escrituras suelen ser privadas, es decir, el profesional no las da a conocer. Una de sus finalidades es la confección de la historia clínica. Específicamente me voy a referir a las diferencias entre los géneros "historia clínica" y "escrito personal" del terapeuta. El corpus está compuesto por los borradores que he tomado en el año 1992 y la historia clínica correspondiente al paciente, que se realizaron para el Hospital de Quemados de la Ciudad de Buenos Aires. La escritura de la historia clínica es requerida por el funcionamiento de la institución hospitalaria. El objetivo es caracterizar los dos géneros y a partir de ello reflexionar sobre sus funciones en las prácticas profesionales. Este tipo de estudios puede resultar de interés para la formación de psicólogos, ya que se trata de escritos cuya presencia es muy amplia en la vida profesional de este ámbito
Resumo:
Partiendo de la sociología de la salud, el siguiente trabajo tiene como objetivo reconstruir la relación medico-paciente desde las experiencias y percepciones del paciente en el contexto hospitalario. Cabe aclarar que este trabajo nació de un ejercicio propuesto en el marco de una materia, por ello los datos provienen de las primeras 4 entrevistas en profundidad y las primeras 4 observaciones realizadas en el 2010 en el Hospital de Clínicas José de San Martín. El uso combinado de las técnicas de recolección nos permitió empezar a explorar el punto de vista de los pacientes, mientras comenzamos a vislumbrar las relaciones e interacciones en la dinámica hospitalaria. Elegimos este hospital porque los pacientes construyen significados relacionados con atenderse en esa institución por pertenecer a la UBA y por el nivel de "excelencia" de los médicos que ayudan a entender el tipo de relación que los actores crean. Por lo tanto, intentaremos mostrar por un lado como se construyen los roles del médico y del paciente en la interacción hospitalaria, y, por otro lado, la relación de confianza que se desarrolla entre ellos, denominada ?Weggenossenschaft? (compañerismo itinerante), para referirnos al vinculo afectivo desarrollado por las experiencias y percepciones que devienen, sobre todo, de una situación satisfactoria de atención. Al mismo tiempo, en contraposición a esta relación el paciente mantiene relaciones con otros actores hospitalarios