5 resultados para Literatura oral
em Andina Digital - Repositorio UASB-Digital - Universidade Andina Simón Bolívar
Resumo:
Al interior de la tradición oral de muchas culturas del mundo las brujas han sido personajes ligados a lo sobrenatural, mujeres con poderes excepcionales, encarnadas de múltiples maneras a través de leyendas, historias, relatos e ilustraciones. La caracterización profana que se les otorga no deja, sin embargo, de estar ligada a lo sagrado. En el Ecuador, provincia del Carchi, encontramos un ejemplo de ello en los relatos orales acerca de las brujas “voladoras” del pueblo de Mira. La comunidad transmite generacionalmente su voz, la cual experimenta transformaciones que la nutren de nuevas expresiones. A través de la tradición oral mireña se puede leer su historia y vislumbrar a la gente que allí habita. En la construcción permanente y dinámica de estos relatos orales y sus personajes, las “voladoras”, se advierten metáforas cargadas de simbolismo, tanto en el texto revelado y su textura discursiva como en los vacíos y misterios que lo rodean.
Resumo:
Este trabajo hace una reflexión acerca de El monte, obra de la autora cubana Lydia Cabrera, publicada en 1954. Se trata de un texto de gran importancia para el folklor y la tradición oral del pueblo cubano, muy en especial para la cultura afrocubana, pues la autora rescató, de los últimos descendientes de los negros de nación, el caudal de leyendas, tradiciones, creencias, magia y supersticiones que estos hombres y mujeres conservaban de la lejana África. Debido a la cuantiosa y diversa información que nos ofrece el libro, es que éste ha sido concebido como texto híbrido, polifónico y heterogéneo que, en correspondencia con sus múltiples facetas escriturarias, ofrece múltiples posibilidades de lecturas. Ante esta disyuntiva, hemos optado por escoger dos entre las numerosas lecturas, la literaria y la de la memoria. En cuanto a la literatura, el trabajo analiza el valor de la obra a partir de los contextos de elaboración y recepción. Lydia elabora el texto como narradora ficcionalizada, cuya voluntad es narrar, hacer grato lo que cuenta, interpretar, dar sentido a los testimonios que ha escuchado de sus informantes, y de la misma forma pueden ser recibidos éstos: tanto el lector familiarizado con los temas como el ajeno a ellos, leen el texto como una ficción que tiene su referente en fenómenos culturales. Por otra parte, al ahondar en la memoria de sus informantes, L. Cabrera se percata de la existencia de una serie de núcleos de resistencia, de ordenamientos secretos que reproducen creencias, tradiciones que datan de la época colonial y se mantienen hasta nuestros días; ellas son las casas- templos en el caso de la Regla de Ocha o Santería y la Regla Conga o de Palo Monte y la Sociedad Secreta Abakuá. Para anoticiarnos de estas instituciones, la escritora explora, en su propio beneficio, tres de las propiedades de la memoria, (variabilidad, selectividad y significación), que le dan sentido a lo escrito. Al finalizar su recorrido por este mundo mágico de los negros, la investigadora nos revela su vinculación espiritual con el objeto de su investigación y su viaje se nos presenta como una verdadera travesía transcultural.
Resumo:
La autora analiza tres ejemplos de la actual narrativa oral quechua del distrito de Chinchero, en Perú. En ellos muestra cómo la incorporación del simbolismo culinario es una herramienta para inculcar y reforzar ciertas costumbres o la historia sociocultural del ayllu. En esta narrativa, la presencia de personajes que violan la etiqueta culinaria de la comunidad presagia, con frecuencia, eventos funestos, anticiparían la llegada de la muerte o de un personaje malévolo (el “condenado”, la layqa, la suq’a), o la desintegración de relaciones familiares. Por otro lado, si en la trama algún personaje ofrece comida bajo circunstancias inusuales o misteriosas, esta llega a causar daño o es, incluso, mortal. Para aumentar la tensión, los narradores quechuas utilizan la mímica, los efectos sonoros, las alusiones culinarias a comidas adulteradas, la creación de la estructura paralela y la repetición de los conceptos e ideas clave. La autora concluye que los relatos de advertencia cumplen dos funciones: entretener y enseñar, fortaleciendo en ambos casos la cohesión social en el ayllu.
Resumo:
El presente trabajo tiene por objeto mostrar que los relatos de la tradición oral afroecuatoriana hacen parte de una compleja construcción que no termina en la articulación de eventos más o menos ficticios cuyo destino es ser narrados. Así, Cimarronaje, Seres Intangibles, Guardianes de la tradición, entre otros elementos internos, de los cuales no puede desprenderse la narración, se articulan con el fin de llevar a cabo un proyecto de resistencia y conservación de las tradiciones. La ausencia de estos elementos daría como resultado una narración cuyo fin se limitaría al mero “entretener.” El Riviel, ser del mar que pese a los embates de la tecnología convive aún con los pescadores en las costas esmeraldeñas, es el ejemplo ideal para adentrarse y aventurar esta tesis. Más si se toma en cuenta que en cada una de las versiones aquí recogidas, los elementos a los que nos referimos no dejan de presentarse vigorosamente. De esta manera, el relato oral se convierte en un instrumento (con una máscara de ficción, si se quiere) urdido con la intensión de resistir. El lector que amablemente se acerque a estas líneas debe, sin embargo, ser advertido de lo que aquí se intenta: una aproximación al relato desde el ámbito académico. Esto, y a pesar de todo lo minuciosos que hayamos sido en la elección de las categorías que facilitan nuestro trabajo, no significa estar mejor dotados para la interpretación de “El Riviel” que cualquiera de sus propios Guardianes y creadores.