2 resultados para Contrabaixo acústico
em Andina Digital - Repositorio UASB-Digital - Universidade Andina Simón Bolívar
Resumo:
Existen un sin número de prácticas artísticas con sonido, aparentemente generadas en las vanguardias europeas y estadounidenses de inicios y mediados del siglo XX, producto de la apropiación y asimilación cultural, lingüística, musical y gráfica, de las expresiones simbólicas africanas y asiáticas, por parte de dadaístas, surrealistas, futuristas, expresionistas y minimalistas. Son estos procedimientos de apropiación y asimilación de matrices culturales no occidentales, los cuales generaron experiencias como 4'33'', de John Cage, que consistió en una acción de silencio frente al piano, de cuatro minutos y treinta y tres segundos, mientras un auditorio impaciente producía sonidos de roces, tosidos, respiraciones y murmullos. La intención del silencio, en 4'33'', para Cage se ligaba fundamentalmente a la filosofía oriental del Budismo Zen. Este tipo de prácticas afiliadas al uso de los aparatos de reproducción sonora, para la década de los sesenta, fueron diseminadas a lo largo y ancho de latinoamerica, como modelos innovativos para el campo de las artes y la música. Actualmente el desplazamiento, de prácticas visuales provenientes del arte, el cine, la fotografía y el video, al sonido, a más de las exploraciones de la música electroacústica, garantizan el devenir de lo sonoro como lugar de expresión. Quizá sea esta una de las razones por las que los agentes generadores de estas prácticas denominan su propio quehacer como arte sonoro, arte acústico, música experimental, en definitiva, un glosario de formas disciplinares de nombrar las prácticas sonoras que se definen y redefinen desde el lugar en el que operan los sujetos de estas prácticas. El Presente trabajo se basa en el análisis de estas agencias, y a partir de este análisis, una apuesta por un nuevo campo de estudios, el de los estudios sonoros. Cuyo fin último, es el de establecer una perspectiva epistemológica y política de las prácticas artísticas con sonido, en diálogo con proyectos provenientes de los estudios culturales como el proyecto modernidad- colonialidad, las teorías poscoloniales, los estudios subalternos. Desde estas posiciones teóricas y políticas estamos concientes de que el sonido y sus posibilidades experimentales, articulan un régimen influyente en el mundo contemporáneo. Razón por la que esta, sobre todo es una reflexión desde las prácticas sonoras que surgen en dos ciudades andinas Quito y Bogotá, como una expresión emergente de establecer encuentros, sur-sur, que puedan generar diálogos epistemológicos sobre el sonido. En otras palabras, el sonido como un lugar de conocimiento.
Resumo:
El presente trabajo aborda una revisión de los discursos y teorías que definen la actividad musical como una práctica artística que está regulada y normada por la disciplina musicológica. Se propone indisciplinar la discusión de lo musical para repensar no solo el aspecto acústico y formal de la obra musical, sino las condiciones sociales de emergencia e inserción en el sistema cultural que - de acuerdo con parámetros estéticos “occidentales” y con opciones de mercantilización- acoge unas expresiones consideradas artísticas y excluye otras que proscribe como des-actualizadas o sin estética. Se revisan las definiciones y significados de la estética como campo de lo sensible, y sus repercusiones en las formas de descripción clasificación y validación de las músicas colombianas: la música nacional, la música folclórica, la música popular. Acogiendo los aportes de los estudios culturales se resitúan las relaciones entre la cultura y el arte. Se re-dimensionan las relaciones entre música lugar y representación, como condición de entendimiento de los sentidos, los significados y los usos que hacen las comunidades de sus diversas y complejas formas de expresión artística. Partimos de las tradiciones orales como formas de producción de conocimiento local que representan estéticas propias. Es así que nos introducimos en el joropo de tiples y bandolas como expresiones locales de tradición oral de los pueblos de las planicies surorientales del territorio colombiano que han sido subalternizadas por la cultura hegemónica, y desvaloradas por los discursos institucionales y académicos. Recuperamos las voces y las sonoridades de los viejos tocadores de bandolón, guitarro, bandolas, tiples y en general de los diapasones con los que se configuró el lenguaje del joropo en la región del piedemonte llanero colombiano desde finales del siglo XIX. Músicas y músicos que encarnan la tradición y la cotidianidad y que se enuncian como “criollos”.