2 resultados para 1946-1986
em Andina Digital - Repositorio UASB-Digital - Universidade Andina Simón Bolívar
Resumo:
El presente trabajo investigativo aborda una temática, que aunque de viejo cuño sigue y seguirá siendo de trascendental importancia para la ciencias sociales. Hablar del desarrollo y de la educación no ha sido una tarea nada fácil; sin embargo considero que, luego de haber revisado una prolífica literatura sobre el tema, mis inquietudes lejos de satisfacerse se ha ensanchado por lo complejo del asunto y las nuevas ideas en boga. La educación puede ser considerada como un fin en sí misma en la medida que amplía las capacidades de las personas para vivir con mayor plenitud. En tal sentido, la finalidad de la educación excede el ámbito económico e incluye valores más trascendentes como la libertad, justicia, autodeterminación, etc. La educación es un determinante esencial del crecimiento y desarrollo económico debido al papel que desempeña en la formación de recursos humanos. Este rol es avalado por modernas teorías de crecimiento económico y por recientes enfoques que estudian la competitividad de empresas y naciones. Mientras las teorías tradicionales de crecimiento enfatizaban la importancia de la inversión en capital físico las teorías modernas postulan que la acumulación de capital 2 humano, las teorías modernas postulan que la acumulación de capital humano y desarrollo tecnológico forman la base del crecimiento sostenido de las economías. Las estrategias para el mejoramiento de la educación y el desarrollo científico - tecnológico son factores fundamentales para que los países alcancen un patrón de crecimiento sostenido. La importancia de las relaciones entre la educación y el desarrollo de alguna manera las he dejado expuestas en el presente trabajo.
Resumo:
Esta tesis indaga qué fue el sujeto revolucionario para la intelectualidad orgánica de la izquierda ecuatoriana en el período comprendido entre 1975 y 1986. Se parte de la existencia de interpretaciones diversas y divergentes del tema, tanto para las corrientes comunistas (PCE, MRT), las socialistas (PSE, PSRE); las maoístas (PCMLE), las nacionalistas (AVC, MPL) y las guevaristas (MIR). El corte temporal escogido (1975-1986) comienza con: I) la declaratoria de la Primera Huelga Nacional del FUT el 13 de noviembre de 1975, y el ascenso de la lucha de clases encabezada por el movimiento obrero; y culmina con: II) el decaimiento de los proyectos devenidos, de una u otra forma, del campo de la revolución (descabezamiento de AVC, liquidación de otras formas de subversión como MPL y OPM, extinción del PSRE, consolidación de la línea electoral en la mayor parte de los partidos de izquierda –como el PSE, el PCMLE y el PCE–, disgregación del MIR en varias fracciones, desaparición del MRT), y el ascenso de formas de lucha no clasistas con el advenimiento de los denominados movimientos sociales. Se entiende a los intelectuales orgánicos como la expresión de un ‘intelectual colectivo’ (el Partido para Gramsci) que abandera una determinada tendencia políticaideológica, integrada en un particular contexto histórico y social. En esta línea, los partidos analizados representan la voz de una intelectualidad de carácter colectivo. La ‘categoría’ sujeto revolucionario, hace referencia a actores sociales específicos que actúan, dinamizan y se crean en una determinada conflictividad. No se aborda al sujeto revolucionario como algo acabado, sino más bien como una creación particular, que se forja en el terreno de la lucha de clases concreta. A nivel de la estructura metodológica se establece un diálogo entre las preguntas: ¿cómo se pensó al sujeto revolucionario en la tradición marxista internacional? (capítulo uno), y ¿cómo se pensó el sujeto revolucionario en la izquierda ecuatoriana del período 1975-1986? (capítulo dos). Con la finalidad de determinar las tesis y puntos de vista convergentes de cada una de las tradiciones partidarias estudiadas (capítulo tres), agrupándose al sujeto revolucionario pensado desde la izquierda en las siguientes figuras o denominaciones: I) el militante revolucionario; II) el pueblo; III) la población sufragante; IV) el proletariado como clase obrera industrial; y, V) el proletariado como sujeto negativo.