7 resultados para food frequency questionnaire
em Universidad de Alicante
Resumo:
Introducción: analizar la asociación entre la frecuencia de consumo de alimentos y la presencia de sobrepeso-obesidad a partir de datos de la Encuesta Nacional de Salud Española 2006 (ENS-06). Material y métodos: estudio transversal retrospectivo de fuentes secundarias de la ENS-06. Se seleccionaron 29.321 individuos que respondieron el Cuestionario de Frecuencia de Consumo de Alimentos, compuesto por una lista de 12 grupos, sobre los que se preguntaba su frecuencia de consumo en 5 opciones de respuesta y que se categorizaron en 3 para el análisis (consumo diario, semanal y ocasional). Se realizó un análisis descriptivo del consumo de grupos de alimentos categorizados por frecuencia de consumo, y calculando la diferencia (brecha) entre hombres y mujeres. La asociación entre frecuencia de consumo de alimentos y sobrepeso-obesidad se realizó mediante regresión logística. Resultados: el 40,7% de la población consume a diario verduras-hortalizas y el 65,2% consume frutas a diario. El 69,8%, y el 46,3% de las mujeres cumplen las recomendaciones de consumo de frutas (brecha -7,2), y de verduras-hortalizas (brecha -14,0) respectivamente. Consumir fruta ocasionalmente, disminuye la probabilidad de padecer obesidad (OR=0,72 IC95%: 0,63-0,82), frente a consumirla a diario. Consumir embutidos a diario, disminuye la probabilidad de padecer obesidad (OR=0,75 IC95%: 0,68-0,83), frente a un consumo ocasional. Conclusiones: Los resultados muestran contradicciones científicas por la presencia de sesgos en el instrumento utilizado en la recogida de la información, sugiriendo la necesidad de que la ENS incluya un método de recogida de información dietética-nutricional validado y adoptado, que permita mediciones de mayor calidad y exactitud.
Resumo:
Fundamentos: Existe una gran diferencia entre el consumo de agua y las bebidas que contiene agua (bebidas carbonatadas, azucaradas, zumos o bebidas alcohólicas). El consumo de estas bebidas está relacionado con el desarrollo de enfermedades crónicas (obesidad, diabetes tipo 2, hipertensión arterial o dislipemias). El objetivo es determinar la frecuencia de consumo de bebidas de los estudiantes de la Universidad de Alicante. Métodos: Estudio transversal descriptivo. Población 26.273 estudiantes. Se seleccionaron 396 mediante muestreo aleatorio simple. Se utilizó un cuestionario frecuencia consumo para estimar la ingesta individual. Variables: bebidas (n=12) y frecuencia de consumo (n=4). Resultados: El 29,6% de hombres y el 13,0% de mujeres consumen bebidas carbonatadas con azúcar a diario (p-valor<0,001). El consumo diario de vino es nulo. El 41,4% de la población consume cerveza y destilados semanalmente. El 76,1% de hombres y el 58,7% de mujeres, consumen alcohol como mínimo una vez a la semana, p-valor=0,001. Conclusiones: Los resultados plantean la necesidad de estudios epidemiológicos que orienten el desarrollo de políticas nutricionales dirigidas a reducir el consumo de bebidas azucaradas y alcohólicas entre la población joven. Mediante un trabajo conjunto entre las autoridades gubernamentales, medios de comunicación, industria alimentaria y la sociedad en general.
Resumo:
Objetivo: Describir los hábitos alimenticios de una comunidad universitaria. Material y métodos: Se llevó a cabo un estudio descriptivo transversal. El instrumento utilizado fue un cuestionario de frecuencias de consumo, administrado por entrevista personal a una muestra accidental de 147 personas. Constaba de cuatro secciones: 1) número de comidas y lugar donde se realizan, 2) patrones de consumo de los distintos grupos de alimentos, 3) modos de preparación de los alimentos, 4) datos de identificación y demográficos. Resultados: En comparación con el patrón de Vivanco y Palacios, nuestra muestra se caracteriza por: alto consumo de carnes (4 veces/semana), disminución del consumo de huevos (2v/sem.), incremento del consumo de hidratos de carbono complejos (5v/sem.), consumo ligeramente inferior de frutas (5v/sem.), ingesta insuficiente de verduras (4v/sem), legumbres (2v/sem) y pescados (2,5v/sem). Conclusiones y Recomendaciones: Atendiendo a los estudios referenciados, es conveniente disminuir el consumo de carnes, aumentando los aportes de pescados, verduras, hortalizas y legumbres, alimentos que, habiendo sido habituales en nuestra dieta mediterránea, parecen haber sido abandonados en beneficio de la conformación de una dieta que tiende a la homogeneización cultural.
Resumo:
Objetivo: determinar la calidad de la dieta española mediante el Índice de Alimentación-Saludable (IASE) y su relación con variables geográficas y socioeconómicas. Metodología: Estudio descriptivo transversal a partir de Encuesta-Nacional-Salud-2006 (ENS-2006) Se estudiaron 29.478 personas (Mujeres = 15.019; Hombres = 14.459) que respondieron el Cuestionario de Frecuencia de Consumo (CFC). El IASE se compone de 10 variables (Cereales-derivados, Verduras-hortalizas, Frutas, Leche-derivados, Carnes, Legumbres, Embutidos-fiambres, Dulces, Refrescos-azúcar y Variedad-dieta), construidas a partir del CFC y las recomendaciones de las Guías-Alimentarias (Sociedad-Española-Nutrición-Comunitaria-2004). Categorías IASE (puntuación-máxima 100): Alimentación-saludable: > 80 puntos; Necesita-cambios: > 5.080; Poco-saludable: 50. Se realizó un análisis descriptivo, de diferencias de medias (pruebas Kruskal–Wallis y Mann–Whitney), y prueba Chi-Cuadrado, para estudiar la independencia de las variables edad, sexo, clase-social y nivel de estudios con las categorías de IASE. Resultados: El 72% del total de la muestra necesita cambios en su alimentación. La puntuación media para mujeres es 73,7 ± 10,5 y para hombres 69,9 ± 11,3 (p < 0,001). En la categoría saludable obtienen mayor porcentaje (38,8%) el grupo de edad > 65 años y las mujeres (28,3%) frente a los hombres (18,4%). Así mismo, las clases-sociales más altas (clase-I: 24,4%, clase-II: 25,0%, clase-III: 25,8%) presentan mayor índice de alimentación-saludable, (p < 0,001). Las Comunidades-Autónomas: Comunitat Valenciana (5,4%), Illes Balears (4,6%) y Andalucía (4,3%) son las que presentan mayor índice en la categoría poco-saludable. Conclusiones: El IASE es un método rápido y económico de estimación de la calidad de la dieta de la población, porque utiliza datos secundarios procedente de la ENS y de las guías-alimentarias; siendo útil en la planificación de políticas nutricionales en España.
Resumo:
Objetivo: Determinar el patrón de consumo de alimentos del alumnado de la Universidad de Alicante (UA) mediante el grado de adecuación a la dieta mediterránea. Método: Estudio transversal descriptivo para estimar la ingesta individual a través de un cuestionario de frecuencia de consumo de alimentos (CFCA) en una muestra representativa de 380 universitarios. Variables a estudio: edad, sexo, área geográfica de procedencia, peso y talla autoreferidos. Así como los alimentos y frecuencias de consumo que componen el CFCA. Se determinó el porcentaje de adecuación teniendo en cuenta, consumo real sobre consumo recomendado por la guía dieta mediterránea tradicional: (100 x raciones consumidas/raciones recomendadas). Se establecieron 5 rangos de porcentaje adecuación: consumo óptimo (80%-119%), consumo aceptable (60%-79%), consumo deficiente (40%-59%), consumo muy deficiente (< 39%), consumo excesivo (> 120%). Se realizó contraste de diferencia de proporciones y la prueba t-Student con EPIDAT 3.1, y SPSS 15.0. Resultados: Prevalencia de sobrepeso-obesidad, es mayor en hombres (34,6%) que en mujeres (9,8%), p < 0,001. Mientras que las mujeres presentan mayor prevalencia de bajo peso (7,0%) que hombres (0,7%), p < 0,05. El consumo de cereales y derivados es muy deficiente (mujeres = 90,6; hombres = 94,9), y el consumo de carnes rojas (mujeres = 90,6; hombres = 92,7) y embutidos (mujeres = 95,9%, hombres = 96,3%) es excesivo. Ningún alumno cubre un “consumo óptimo” o un “consumo aceptable” de todos los grupos de alimentos (n = 12). Discusión: El nivel educativo y el acceso a la información no protegen a la población universitaria de factores socioambientales que influencian sus hábitos alimentarios. Deben reforzarse estrategias de salud pública dirigidas a este grupo de población.
Resumo:
Objectives: To design and validate a questionnaire to measure visual symptoms related to exposure to computers in the workplace. Study Design and Setting: Our computer vision syndrome questionnaire (CVS-Q) was based on a literature review and validated through discussion with experts and performance of a pretest, pilot test, and retest. Content validity was evaluated by occupational health, optometry, and ophthalmology experts. Rasch analysis was used in the psychometric evaluation of the questionnaire. Criterion validity was determined by calculating the sensitivity and specificity, receiver operator characteristic curve, and cutoff point. Testeretest repeatability was tested using the intraclass correlation coefficient (ICC) and concordance by Cohen’s kappa (k). Results: The CVS-Q was developed with wide consensus among experts and was well accepted by the target group. It assesses the frequency and intensity of 16 symptoms using a single rating scale (symptom severity) that fits the Rasch rating scale model well. The questionnaire has sensitivity and specificity over 70% and achieved good testeretest repeatability both for the scores obtained [ICC 5 0.802; 95% confidence interval (CI): 0.673, 0.884] and CVS classification (k 5 0.612; 95% CI: 0.384, 0.839). Conclusion: The CVS-Q has acceptable psychometric properties, making it a valid and reliable tool to control the visual health of computer workers, and can potentially be used in clinical trials and outcome research.
Resumo:
Objetivo: Diseñar un cuestionario para evaluar el equilibrio alimentario de menús escolares, basado en un índice y una escala que lo cuantifique. Material y Métodos: Estudio instrumental para la creación y la validación de contenido de un cuestionario para la evaluación del equilibrio alimentario y clasificación de menús escolares, a través de recomendaciones de organismos oficiales y panel de expertos. Se estudió frecuencia de grupos de alimentos, técnicas culinarias, adecuada información y combinación. Se resumió en un índice y una escala de equilibrio. Resultados: Se elaboró la herramienta con la recomendación de los expertos y las nuevas recomendaciones de organismos oficiales, proponiendo un índice de 17 ítems y la escala de 4, de muy poco equilibrado a equilibrado. Conclusiones: Se ha propuesto una herramienta cualitativa completa y fácil de usar. Es necesaria la validación del cuestionario, junto con el índice y la escala, que se propone para posteriores trabajos.