3 resultados para Viruela en las ovejas
em Universidad de Alicante
Resumo:
España no pudo asegurar la vacunación de toda su población infantil durante el siglo XIX. En este trabajo nos ocupamos de las causas de este fracaso utilizando como estudio de caso la ciudad de Alicante. Las principales causas de la inconstante práctica de la vacunación en Alicante fueron la ausencia de servicios sanitarios adecuados, la oposición o la negligencia de la población y algunos obstáculos técnicos.
Resumo:
La rápida propagación del método empírico para combatir la viruela dado a conocer por Edward Jenner conllevó algunas dificultades. A la necesidad de obtener la máxima aceptación posible entre la población, se añadió la de ejecutar con rigor la técnica así como la de producir, transportar y conservar el fluido vacunal con garantías de calidad. Abastecerse de vacuna era una preocupación solventada en parte gracias a los envíos realizados desde instituciones radicadas en Londres o París. Tras su recepción se iniciaban cadenas de vacunaciones mediante la técnica del brazo a brazo. El temor a la extinción del fluido vacunal, no obstante, despertó el interés por la producción autóctona. Era necesario encontrar vacas afectadas por viruela vacuna o en su defecto aprender a conservar la materia vacunal en las propias vacas u otros animales. Varias iniciativas exploraron esta posibilidad. El fondo documental de la Biblioteca Nacional de España conserva un texto que refleja 2 de estos ensayos realizados en la Real Escuela Veterinaria de Madrid a cargo del médico Joaquín de Villalba y el albéitar Antonio Roura en 1802 y 1803. La tentativa no obtuvo el éxito deseado.
Resumo:
Tras la inicial propagación del método jenneriano por Inglaterra y el resto del continente europeo, se mostró un gran interés por difundirlo hacia Oriente y América. En el caso de España, los focos epidémicos que estaban ocurriendo en los territorios de ultramar movieron a las autoridades de los distintos virreinatos a solicitar a la Corona que enviara cuanto antes el nuevo remedio. La monarquía borbónica, que había introducido las expediciones científicas como elemento de progreso y dominio, aprobó el proyecto conocido como “Real Expedición Filantrópica de la Vacuna”, que partió hacia América al mando de Balmis en 1803. Relatamos una propuesta inédita anterior a esa, en la que un desconocido cirujano, Rafael de Malaguilla, se ofreció para llevar a cabo una iniciativa similar.