3 resultados para Raggi cosmici,Filamenti cosmici,Ponti intracluster,Radiogalassia gigante,Energia,UHECR
em Universidad de Alicante
Resumo:
The center of our Galaxy hosts a supermassive black hole, Sagittarius (Sgr) A∗. Young, massive stars within 0.5 pc of Sgr A∗ are evidence of an episode of intense star formation near the black hole a few million years ago, which might have left behind a young neutron star traveling deep into Sgr A∗’s gravitational potential. On 2013 April 25, a short X-ray burst was observed from the direction of the Galactic center. With a series of observations with the Chandra and the Swift satellites, we pinpoint the associated magnetar at an angular distance of 2.4±0.3 arcsec from Sgr A∗, and refine the source spin period and its derivative (P = 3.7635537(2) s and ˙ P = 6.61(4) × 10−12 s s−1), confirmed by quasi simultaneous radio observations performed with the Green Bank Telescope and Parkes Radio Telescope, which also constrain a dispersion measure of DM = 1750 ± 50 pc cm−3, the highest ever observed for a radio pulsar. We have found that this X-ray source is a young magnetar at ≈0.07–2 pc from Sgr A∗. Simulations of its possible motion around Sgr A∗ show that it is likely (∼90% probability) in a bound orbit around the black hole. The radiation front produced by the past activity from the magnetar passing through the molecular clouds surrounding the Galactic center region might be responsible for a large fraction of the light echoes observed in the Fe fluorescence features.
Resumo:
In 2013 April a new magnetar, SGR 1745−2900, was discovered as it entered an outburst, at only 2.4 arcsec angular distance from the supermassive black hole at the centre of the Milky Way, Sagittarius A*. SGR 1745−2900 has a surface dipolar magnetic field of ∼2 × 1014 G, and it is the neutron star closest to a black hole ever observed. The new source was detected both in the radio and X-ray bands, with a peak X-ray luminosity LX ∼ 5 × 1035 erg s−1. Here we report on the long-term Chandra (25 observations) and XMM–Newton (eight observations) X-ray monitoring campaign of SGR 1745−2900 from the onset of the outburst in 2013 April until 2014 September. This unprecedented data set allows us to refine the timing properties of the source, as well as to study the outburst spectral evolution as a function of time and rotational phase. Our timing analysis confirms the increase in the spin period derivative by a factor of ∼2 around 2013 June, and reveals that a further increase occurred between 2013 October 30 and 2014 February 21. We find that the period derivative changed from 6.6 × 10−12 to 3.3 × 10−11 s s−1 in 1.5 yr. On the other hand, this magnetar shows a slow flux decay compared to other magnetars and a rather inefficient surface cooling. In particular, starquake-induced crustal cooling models alone have difficulty in explaining the high luminosity of the source for the first ∼200 d of its outburst, and additional heating of the star surface from currents flowing in a twisted magnetic bundle is probably playing an important role in the outburst evolution.
Resumo:
El único ejemplo claro de Modernidad en la ciudad de Albacete (y así lo registra el Docomomo Ibérico) es el Edificio Legorburo en la calle Mayor, 43 esquina a Marqués de Molíns, un proyecto de comercio y viviendas de 1935 de los arquitectos José Luis García Pellicer y Baldomero Pérez Villena. Paradigma del más depurado racionalismo, rotundo, pero discreto, representa en Albacete, en el cruce de la calle Ancha, nuevo eje burgués, con una calle histórica y mirando hacia el Parque, lo que el Edificio Capitol en la Gran Vía madrileña. Pero, además de su posición y composición, encierra toda una serie de lecciones que nos proponemos desentrañar. Una de ellas es que el proyecto es resultado de un concurso convocado por la propiedad, en 1935, a través del Colegio de Arquitectos de Valencia, lo cual llama poderosamente la atención sobre el procedimiento del encargo y sobre el proceder de los promotores. Otra es la auténtica aventura que su construcción supone, arrancando a finales de 1935, quedando paralizada por la guerra y sobreviviendo a continuación a base de reinventarse hasta 1946 en que se concluye. Los cambios entre proyecto y obra evidencian ese ejercicio, apasionante y dramático, de ir repensando el proyecto una y otra vez para poderlo construir con los materiales y recursos disponibles en cada momento. El Edificio Legorburo es un magnífico exponente de la idea corbuseriana de la arquitectura como juego sabio y soberbio de los volúmenes bajo la luz pues es la plasticidad de sus cuerpos, muy matizados, la que le confiere su fuerza y elegancia casi mendelsohnianas. Estos cuerpos, acusados por sus respectivos planos, son tres: el principal y de mayor vuelo de los pisos, que resuelve la esquina en curva así como las transiciones con ésta y con las medianeras; el del bajo que, ajustándose a la alineación oficial, emerge sobre el principal en la esquina, como un faro que iluminara la ciudad con su linterna; y el de transición entre ambos, de vuelo intermedio, en el entresuelo y sobreático, flancos de la torre y medianeras. Este juego de volúmenes acusa un sinfín de matices resueltos con gran clase, como la transformación del mirador de la esquina en balcón, donde asienta la torre y se derrama luego a los costados, o el descenso hasta el bajo de la torre. El tratamiento de superficies insiste en este concepto escultural: las estrías verticales que simulan un orden gigante de pilastras, las franjas horizontales que delinean y subrayan las curvas, los antepechos de los huecos con cuadrados almohadillados... Todo está exquisitamente cuidado, trabajado y pensado. Las plantas, modélicas, albergan dos viviendas por piso con sus zonas de día recayentes a fachada y sus servicios a medianeras, en cuyo centro se aloja una majestuosa escalera elíptica y un patio que absorbe las irregularidades del trazado. Todas estas razones (funcional, impecablemente resuelta; técnica, ingeniosamente conseguida; formal, espectacularmente consumada y el entendimiento del lugar), tienen especial validez en el contexto actual puesto que son auténticas y genuinas lecciones de arquitectura.