2 resultados para Nanocompósitos. Montmorilonita. Poli (metacrilato de metila)
em Portal de Revistas Científicas Complutenses - Espanha
Resumo:
Desde tiempos de José Carlos Mariátegui, la crítica literaria indigenista viene articulando un discurso etnocentrista cuyo eje de producción se sitúa en Perú y los países vecinos, pero rara vez se ha mencionado una obra argentina que trate sobre las desigualdades que sufren los indígenas de ese país. Ni siquiera la academia argentina ha analizado ninguna novela desde la óptica indigenista.En un país cuyos gobiernos, desde el siglo XIX, han tratado de borrar cualquier traza de sangre indígena en su población, ya sea mediante la asimilación, exterminio o invisibilidad, y cuyas zonas de mayor asentamiento indígena se encuentran lejos del hegemónico Buenos Aires, las narraciones de problemas sociales ajenos quedaban encajonadas en el recóndito mundo de la literatura regional.Sin embargo, durante los años de eclosión del movimiento indigenista, escritores argentinos se hicieron eco de los sufrimientos y demandas de sus compatriotas indígenas por medio de novelas que sobrepasaron el peyorativo epíteto regionalista y que incomprensiblemente, han sido olvidadas.En este artículo, que forma parte de un estudio más amplio, se aborda el silencio crítico, se contextualiza la producción indigenista de la época y se analizan brevemente algunas de las obras.
Resumo:
Currently new digital tools used in architecture are often at the service of a conception of architecture as a consumer society’s cultural good. Within this neoliberal cultural frame, architects’ social function is no longer seen as the production of urban facts with sense of duty, but as a part within the symbolic logic that rules the social production of cultural values as it was defined by Veblen and developed by Baudrillard. As a result, the potential given by the new digital tools used in representation has shifted from an instrument used to verify a built project to two different main models: At the one hand the development of pure virtual architectures that are exclusively configured within their symbolic value as artistic “images” easily reproducible. On the other hand the development of all those projects which -even maintaining their attention to architecture as a built fact- base their symbolic value on the author’s image and on virtual aesthetics and logics that prevail over architecture’s materiality. Architects’ sense of duty has definitely reached a turning point.