2 resultados para Afro-américains
em Duke University
Resumo:
La disertación no define un campo disciplinario, ni una construcción formal, ni una metodología que intente llegar a una verdad racional. Se desobedece la linealidad epistémica occidental y el enfoque en un tema específico. El manuscrito opta por navegar a través de rutas relacionales en conversación desde, con y entre varios saberes y experiencias personales, tribales y comunitarias. Localizamos el andar decolonial en un territorio expandido donde incorporamos una geo-‐‑política trazada en la continuidad que ofrece la ancestralidad lingüística y cultural entre maya, seminole y loko, esta última conectada a la lengua madre arahuaca que se extiende desde la región amazónica del este de Los Andes, norte de Argentina y Paraguay desde 9000 A.C.
Al hilvanar experiencias y saberes otros, se establecen conexiones y rupturas más cercanas a los que entendimos como cosmos-‐‑existencia y cosmoconvivencia en los imaginarios indígenas, afro y US latinxs. La disertación no podrá abarcar todas las rutas y encrucijadas que propician la decolonialidad del imaginario erótico kairibe, pero transito caminos sacbes desde donde los trazos de la memoria y la experiencia sanan la opresión colonial y nutren el andar del espíritu por los saberes inscritos en los relatos de creación indígenas y afro caribe, la oralidad de las lenguas maya yucateca y loko, la expresión de varixs creadores decoloniales, y las conversaciones e intercambios sociales con algunos de los miembros del proyecto decolonial.
A partir de la propuesta metodológica de Linda Tuhiwai Smith, en la cual se afirma que las metodologías indígenas son el resultado de la elaboración de un tejido, este manuscrito entrelaza una plataforma crítica, una encrucijada de saberes donde confluyen la variabilidad de los proyectos metodológicos propuesto por Tuhiwai Smith (1999), el pensamiento fronterizo de Gloria Anzaldúa (1987), la corpo-‐‑política de Frantz Fanon (1987), la poética relacional de Edouard Glissant (1997), las pedagogía sagrada de Jacqui Alexander (2005), el desprendimiento, delinking de Walter D. Mignolo (2007), el poder erótico de Audre Lorde (1986), la transmodernidad de Enrique Dussel (2005) y la geopolítica del pensar propuesta por Catherine Walsh (2007).
Desde esta encrucijada de saberes, la disertación navega el racismo cognitivo eurocentrado, al mismo tiempo que efectúa el desligue epistémico y creativo hacia locaciones otras donde las experiencias y aprendizajes, conectados a las memorias ancestrales de lxs abuelxs, propician la decolonización del imaginario erótico kairibeafroxeri.
Resumo:
We Are the Ones We Have Been Waiting for: Pan-African Consciousness Raising and Organizing in the United States and Venezuela, draws on fifteen months of field research accompanying organizers, participating in protests, planning/strategy meetings, state-run programs, academic conferences and everyday life in these two countries. Through comparative examination of the processes by which African Diaspora youth become radically politicized, this work deconstructs tendencies to deify political s/heroes of eras past by historicizing their ascent to political acclaim and centering the narratives of present youth leading movements for Black/African liberation across the Diaspora. I employ Manuel Callahan’s description of “encuentros”, “the disruption of despotic democracy and related white middle-class hegemony through the reconstruction of the collective subject”; “dialogue, insurgent learning, and convivial research that allows for a collective analysis and vision to emerge while affirming local struggles” to theorize the moments of encounter, specifically, the moments (in which) Black/African youth find themselves becoming politically radicalized and by what. I examine the ways in which Black/African youth organizing differs when responding to their perpetual victimization by neoliberal, genocidal state-politics in the US, and a Venezuelan state that has charged itself with the responsibility of radically improving the quality of life of all its citizens. Through comparative analysis, I suggest the vertical structures of “representative democracy” dominating the U.S. political climate remain unyielding to critical analyses of social stratification based on race, gender, and class as articulated by Black youth. Conversely, I contend that present Venezuelan attempts to construct and fortify more horizontal structures of “popular democracy” under what Hugo Chavez termed 21st Century Socialism, have resulted in social fissures, allowing for a more dynamic and hopeful negation between Afro-Venezuelan youth and the state.