5 resultados para TRASTORNOS DE LA REPRODUCCION
em Repositorio Institucional de la Universidad de Málaga
Resumo:
El debate de la existencia de comorbilidad entre los trastornos del neurodesarrollo ha sido reconocido y estudiado desde hace mucho tiempo. Sin embargo la comorbilidad entre el Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad y el Trastorno de Espectro Autista es muy reciente en parte por la consideración de la coexistencia en el caso del TEA y en parte por el criterio de exclusividad para el diagnóstico de TDAH según las clasificaciones diagnósticas al uso. Este debate se ha superado con la reciente publicación del DSM-5 que permite diagnósticos comórbidos entre ambas condiciones. Por una parte, existe un creciente reconocimiento del Trastorno de la Comunicación Social (Pragmática), como un trastorno del neurodesarrollo con características singulares que los diferencia de otras condiciones, que se ha materializado con la inclusión de esta condición en la reciente publicación del DSM-5, aunque aún no hay un consenso en torno a la diferenciación entre síntoma o condición, ni en qué relaciones mantiene esta condición con otros trastornos del neurodesarrollo, u otros niveles del Lenguaje y la Comunicación. Por otra parte, existe un amplio debate en torno a la naturaleza de estos dos trastornos del neurodesarrollo, TDAH y TEA, y en torno al papel que juegan las alteraciones de la comunicación social (pragmática) en el déficit social presente en ambas condiciones clínicas. Una explicación plausible para estas dos condiciones es el déficit en funciones ejecutivas, sin embargo, la naturaleza emergente y multicausal de las alteraciones de la comunicación social (pragmática) señala que también es plausible que este dominio del lenguaje sea independiente con sus propias reglas y principios y que condicione el déficit social presente en ambas condiciones clínicas. Nuestro estudio pretende plantear y profundizar en el estudio de la comorbilidad entre TDAH y TEA y el rol causal que se puede atribuir a las alteraciones pragmáticas del lenguaje que presentan ambas condiciones. En el primer capítulo presentamos la evolución del debate de la comorbilidad entre TDAH y TEA y las cuestiones que plantea este debate que son el objeto principal de nuestro estudio. En el segundo capítulo revisamos la literatura en relación a los síntomas TDAH presentes en TEA y los síntomas TEA presentes en TDAH. En primer lugar presentaremos los argumentos que indican presencia de dificultades atencionales en los TEA. En segundo lugar los argumentos que indican la presencia de síntomas TEA presentes en TDAH en relación a las dificultades de interacción social y las conductas restringidas y estereotipadas. A continuación revisamos las diferencias en el perfil de inteligencia en ambas condiciones clínicas. Por último exploramos las dificultades psicolingüísticas comunes a ambos trastornos del neurodesarrollo. En el tercer capítulo exponemos la naturaleza ejecutiva de la comorbilidad entre ambas condiciones. Un endofenotipo que puede explicar la comorbilidad entre ambas condiciones es el déficit ejecutivo central. Hay acuerdo en que ambas condiciones presentan un déficit ejecutivo central que podría explicar la presentación comórbida de ambas condiciones clínicas, sin embargo, el déficit ejecutivo central no explica completamente los síntomas comórbidos que presentan conjuntamente ambos trastornos, ni la naturaleza heterogénea de ambas condiciones. Las dificultades psicolingüísticas y el déficit social comunes a los TDAH y a los TEA no pueden ser explicados de forma concluyente por el déficit ejecutivo. Sin embargo, el déficit pragmático podría explicar tanto el déficit lingüístico como el déficit social. Por tanto planteamos que el déficit pragmático es otro endofenotipo potencialmente explicativo de la comorbilidad entre estas poblaciones heterogéneas. En el cuarto capítulo abordamos el tema de las similitudes y diferencias en el perfil de comunicación social (pragmática) en ambos trastornos del neurodesarrollo señalando la dificultad de las herramientas diagnósticas en este campo y resaltando el uso de la CCC-2 para diferenciar perfiles entre ambas condiciones. En el quinto capítulo planteamos las similitudes y diferencias en la conducta conversacional en ambas poblaciones, TDAH y TEA. La tesis doctoral continúa con la parte empírica. En esta parte respondemos a las cuestiones específicas que nos ha planteado la revisión teórica realizada en los capítulos 1 al 5 y que se exponen inicialmente en el apartado Objetivos e Hipótesis. A continuación exponemos el método seguido en nuestro estudio, participantes y selección, herramientas estandarizadas y no estandarizadas utilizadas, y el procedimiento de análisis de datos. En el siguiente bloque exponemos los resultados de nuestro estudio para cada uno de los dominios señalados: Lenguaje, Comunicación, Conversación y Función Ejecutiva. En cada bloque exponemos primero los resultados para cada objetivo propuesto y al final de cada bloque planteamos una discusión parcial en cada dominio estudiado. En esta discusión parcial señalamos las evidencias de nuestro estudio que indican diferencias y similitudes en los perfiles de rendimiento de ambas condiciones y su coherencia con estudios previos así como la relación entre los dominios estudiados. Por último, en la discusión general abordamos la interpretación de las evidencias que hemos encontrado para aclarar el valor diagnóstico de las alteraciones de la comunicación social (pragmática) en la comorbilidad entre ambas condiciones y, la interpretación de las evidencias que nos permiten confirmar que los déficits pragmáticos son independientes del déficit ejecutivo y que constituyen una zona de solapamiento entre ambas condiciones.
Resumo:
En el seno de nuestra sociedad está presente la preocupación por la imagen corporal, que en ocasiones puede derivar en situaciones de insatisfacción corporal y provocar trastornos en la conducta alimentaria. El aspecto físico o apariencia de una persona se puede considerar como uno de los atributos que los niños y niñas primero describen de sí mismos y de los demás. Nuestra investigación tiene como objetivo indagar sobre la preocupación que tiene el alumnado de tercer ciclo de Educación Primaria sobre su imagen corporal valorando los índices de insatisfacción corporal y la percepción que tienen de su forma corporal, relacionando estas dos variables con el estado nutricional, con la frecuencia y motivaciones de práctica de actividad física y con los niveles de condición física salud. Se aborda la investigación desde diferentes perspectivas, estableciendo una triangulación de la información obtenida a través de diferentes cuestionarios y test de campo, categorizando la muestra por su estado nutricional, calculado a partir del Índice de Masa Corporal (IMC). Se utiliza una versión corta del cuestionario de insatisfacción corporal “Body Shape Questionnaire” (BSQ), un cuestionario de percepción a través de Siluetas Corporales, un cuestionario de práctica de Actividad Física y el “Test Europeo de Aptitud Física EUROFIT”. Los resultados arrojan conclusiones muy interesantes indicándonos la tendencia que la variable de insatisfacción corporal tiene con otras variables del estudio, la importancia de realizar actividad física recreativa en edad escolar y como el canon de belleza de cuerpo ideal difiere según el sexo.
Resumo:
Para el acceso a los estudios oficiales de danza, se realizan pruebas de aptitud en los Conservatorios Profesionales de Danza de España. Estas son realizadas por profesores de danza que evalúan aptitudes rítmicas, expresivas y psicomotrices y por médicos que realizan una evaluación de las características física. Objetivos: En primer lugar: a) evaluar los ítems de calificación de la Prueba de Aptitud por parte del profesorado de danza; b) comprobar si se correlacionan con los rangos adjudicados por la Administración; c) proponer una adaptación de las calificaciones de los ítems de la evaluación de la Prueba de Aptitud. En segundo lugar y relativo a los ítems de la valoración médica del alumnado, nuestros objetivos fueron: a) determinar si existe mayor riesgo de padecer trastornos de la conducta alimentaria (TCA) en nuestra población; b) valorar cuales son las variables de composición corporal más sensibles y específicas para el cribaje de TCA; c) describir cuales son las mediciones de flexibilidad de la Prueba de Aptitud más entrenables al aplicar un plan de entrenamiento; d) discernir qué tipo de entrenamiento de flexibilidad alcanza mejores resultados. Métodos: Se plantearon 3 estudios. Para la valoración de los ítems y para el estudio de la composición corporal y los TCA se realizaron estudios de tipo transversal. En el estudio del entrenamiento de la flexibilidad se practicó un estudio longitudinal experimental con pre evaluación y 4 evaluaciones post intervención, de grupos aleatorizados a 3 tipos de entrenamiento: estiramiento activo (EA), estiramiento pasivo (EP) y estiramiento balístico (BAL), con un grupo control (CT). Sujetos: 216 sujetos fueron seleccionados para los diferentes estudios, profesorado (n=27) y alumnos (n=189). Para obtener la información y realizar el estudio de la valoración de los ítems se aplicó un cuestionario ad hoc en dos páginas. En el estudio de la composición corporal las variables antropométricas, componentes del somatotipo y bioimpedancia eléctrica (BIA) fueron relacionadas con el test EAT-26 para la discriminación de los TCA. Se obtuvieron medidas antropométricas mediante las técnicas estandarizadas de la ISAK y se calculó el índice de masa corporal (IMC) de forma clásica, la masa grasa mediante la ecuación de Slaughter y la masa muscular esquelética (MME) mediante ecuación de Poortmans. La BIA de cuerpo entero se realizó con protocolo estandarizado. La aleatorización a grupos de entrenamiento se realizó mediante asignación numérica aleatoria a doble ciego de los grupos. Resultados: El profesorado de danza clásica (CL) prioriza calificaciones en los ítems peso/talla, morfología del pie y extensión de piernas, los docentes de danza española (ES) y flamenco (FL) conceden mayor importancia a la evaluación de la morfología de las piernas y aspectos de ritmo y expresión, mientras que en danza contemporánea (CO) se destaca la calificación de la morfología de la columna y pelvis, existen diferencias estadísticamente significativas en la distribución de las calificaciones de determinados ítems de evaluación, siendo los rangos de calificación aportados por el profesorado diferente al aportado por la Administración. En el cuestionario EAT-26, se comprueba que existen diferencias en nuestra población entre los puntos de corte de 10 y 20, y por especialidades se muestra la danza española y la danza contemporánea con mayor prevalencia que la danza clásica y el baile flamenco. Mediante un análisis con curvas ROC, la MME expresada en kilogramos demuestra ser la más sensible y específica para la discriminación de los TCA y de las variables de la BIA son la reactancia (Xc) y el ángulo de fase (Af) las que destacan como mejores predictoras de los TCA. Con respecto al entrenamiento de la flexibilidad se observaron diferencias estadísticamente significativas de las tres medidas estudiadas abducción de cadera (ABD), distancia dedos-suelo (DDS) y flexión plantar (FP), de los tres grupos de entrenamiento a estudio EP, EA, BAL, con respecto al CO a la semana decimosegunda (P<0,001), la máxima mejoría fue en DDS, en el grupo BAL. En los grupos de entrenamiento no hubo descenso del rango de movimiento (ROM) tras el cese del entrenamiento. Conclusiones: Todos estos resultados deberían ser tenidos en cuenta en el diseño futuro de las prueba de aptitud y selección de futuros bailarines. La inclusión en las pruebas de elementos de valoración de la composición corporal con mayor sensibilidad para la discriminación de TCA nos puede aportar información para la prevención y diagnóstico. Unas calificaciones basadas en los criterios unificados del profesorado, en elementos más entrenables y en las aptitudes más innatas facilitarían el proceso evaluador y de selección.
Resumo:
Sabemos que la ausencia de diagnóstico en la etapa infantil y adolescente de los trastornos de ansiedad favorece que los síntomas se vuelvan crónicos y muchos autores refieren la frecuencia de comorbilidad de síntomas en estas etapas a diferencia de lo que sucede en los adultos lo que dificulta la delimitación psicopatológica de los trastornos de ansiedad. Con un índice de prevalencia de dichos trastornos de ansiedad en la infancia y adolescencia que según autores oscila entre el 15% y 20% y siendo, como señala el profesor Godoy, la ansiedad uno de los problemas más importantes y frecuentes en la etapa infanto-juvenil donde la investigación no ha sido tan prolífica como en la población adulta es donde enmarcamos el presente trabajo. Aceptando que la ansiedad es una respuesta compleja integrada por aspectos internos, situacionales y fisiológicos postulamos la diferencia entre dos constructos teóricos que intervienen en el proceso cuales son la Ansiedad como Rasgo y la Sensibilidad a la Ansiedad; algunos autores consideran que son lo mismo. Hemos utilizado la versión española de SCAS que evalúa trastornos de ansiedad en infancia y adolescencia. Para evaluar la Ansiedad Rasgo utilizamos el STAIC-R y para la evaluación de la Sensibilidad a la Ansiedad en la infancia y adolescencia, existen dos versiones de la escala para adultos (ASI), una adaptada a la población española por Sandín y col. (CASI) y la otra escala, ASIC, que en el presente trabajo hemos validado y que nos ayudará a comprobar nuestras hipótesis, por un lado, que Ansiedad Rasgo y Sensibilidad a la Ansiedad son constructos relacionados pero no idénticos, por otro lado, que Ansiedad Rasgo y Sensibilidad a la Ansiedad se complementan entre sí a la hora de explicar los síntomas de los trastornos de ansiedad. Las garantías psicométricas que aportamos sobre el ASIC la muestran como una escala fiable y válida para evaluar Sensibilidad a la Ansiedad en chicos y chicas así como en niños y adolescentes, convirtiéndola en una herramienta útil para la prevención de Trastornos de Ansiedad, especialmente Trastornos de Pánico con/sin Agorafobia y Trastorno de Ansiedad Generalizada. Por último, la diferencia entre Sensibilidad a la Ansiedad y Ansiedad Rasgo nos permite a nivel de intervención terapéutica aplicar desde la Terapia Cognitivo Conductual, como señala Muris (2015), técnicas específicas para la vulnerabilidad que representa para el sujeto la Sensibilidad a la Ansiedad como la percepción amenazante del entorno por parte del sujeto con elevada Ansiedad Rasgo.
Resumo:
Introducción: La diminución de la capacidad de expansión del tejido adiposo juega un papel crucial en el origen y desarrollo de los trastornos asociados al síndrome metabólico. Hipótesis y Objetivos: Considerando que la expansión del tejido adiposo depende del estado de sus células mesenquimales multipotenciales (ASCs), es probable que las condiciones tisulares asociadas a los períodos de balance energético positivo generen alteraciones en los patrones heredables de transcripción génica mediante los que las ASCs quedan predispuestas a favor del fenotipo fibrótico e inflamatorio, en detrimento de su función adipogénica y neovascular. Para corroborar ésta hipótesis nos propusimos revelar la implicación de las ASCs en la remodelación tisular adiposa; su contribución a la disminución de la capacidad angiogénica del tejido adiposo; y evaluar su respuesta neovascular, migratoria e inflamatoria ante la hipoxia. Metodología: Aplicamos técnicas de cultivo celular, citometría de flujo, qPCR, western blot y ELISA a las ASCs aisladas del tejido adiposo visceral y subcutáneo de 69 sujetos agrupados en normopesos, y obesos con (SM) y sin síndrome metabólico (NoSM). Resultados: Los adipocitos generados a partir de las ASC visceral y subcutáneo evidenciaronn una disminución en los niveles intrínsecos de expresión del transportador de glucosa GLUT4 conforme aumenta la expresión de proteínas fibróticas, el BMI y el HOMA-IR de los pacientes. El empeoramiento del perfil metabólico de los sujetos estuvo acompañado por la disminución de la tasa proliferativa, el potencial clonogénico y la exportación del FGF2 hacia la superficie celular de las ASC derivadas de ambos tejidos. Las ASC visceral y subcutáneo de los sujetos SM también mostraron una disminución en la capacidad de formación de túbulos respecto a las ASCs de los sujetos obesos NoSM así como alteraciones en los niveles de expresión de proteínas implicadas en el balance redox celular y vinculadas al fenotipo secretor asociado a senescencia. El deterioro de las propiedades neovasculares de las ASC subcutáneo de los sujetos SM se evidenció además en los niveles de secreción del VEGF durante la adipogénesis y en los efectos del medio condicionado adipogénico sobre la formación de túbulos por células endoteliales. Aunque las ASC visceral de los sujetos SM cultivadas bajo hipoxia mostraron mayor porcentaje de células CD140b+/CD44+ y CD140b+/CD184+ así como mayor capacidad migratoria que las ASC visceral de los sujetos NoSM, también evidenciaron menor capacidad de formación de túbulos, transcribieron más RNAm NOX5 y su medio condicionado disminuyó la supervivencia de las células endoteliales. Conclusiones: El funcionamiento del tejido adiposo parece condicionar el deterioro de sus propias células precursoras y ante el cual las ASCs de los sujetos que desarrollan síndrome metabólico son más vulnerables.