4 resultados para Procedimientos quirúrgicos menores
em Repositorio Institucional de la Universidad de El Salvador
Resumo:
La cirugía ambulatoria cubre un amplio espectro de procedimientos quirúrgicos mayores. La colecistectomía laparoscópica fue reportada por primera vez por Mouret en Francia en 1987, y es ahora considerada el abordaje “gold standard”. En 1996 se implementó como un procedimiento quirúrgico de día. Para la realización de cirugías ambulatorias es necesaria una unidad con infraestructura destinada para tal fin. En el Hospital Nacional Rosales, a principios de año 2013, la Cirugía Mayor Ambulatoria se presentó como un proyecto de programa organizado y delimitado. Materiales y métodos: se realizó un estudio observacional descriptivo, longitudinal, de tipo prospectivo de seguimiento de la cohorte de pacientes programados para colecistectomía laparoscópica ambulatoria en Hospital Nacional Rosales en el periodo del 1o. de mayo 2014 al 30 de mayo del 2015. Resultados: se encontró un total de 205 colecistectomías laparoscópicas: 182 mujeres y 33 hombres. La mediana de edad en la población fue de 41 años. 73.02% residían en San Salvador. El 92% de los pacientes eran ASA I y II. El 100% tenían criterios para colecistectomía laparoscópica. El 94.4% tenían criterios sociales para cirugía ambulatoria. La tasa de suspensión de cirugía fue de 10.48%. de las cirugías realizadas: la tasa de conversión fue de 1.95%, por adherencia (3) y Síndrome de Mirizzi (1). La tasa de ingreso hospitalario fue de 15.12%, la causa más frecuente fueron las complicaciones transoperatorias. No hubo reingresos ni mortalidad. Conclusión: El programa de colecistectomía laparoscópica ambulatoria en el HNR es un procedimiento seguro.
Resumo:
La Falla Renal Aguda (FRA) es un síndrome multifactorial de etiología variada e incidencia que difiere según países y poblaciones de estudio. A nivel mundial no existe un consenso en cuanto a una definición universal. Últimamente se ha reconocido la importancia que tiene la reducción leve a moderada de la función renal en la morbimortalidad especialmente en los pacientes críticos. En 2004, la Acute Dialysis Quality Initiative, realizó un consenso para definir la falla renal aguda, a través del criterio de RIFLE (Riesgo, Injuria, Falla, Pérdida y Estado final de la falla), el cual utilizó los criterios de los adultos y lo extrapoló hacia los pacientes pediátricos. Objetivo: diagnosticar falla renal aguda de acuerdo con los criterios RIFLE en los pacientes de 1 a 5 años hospitalizados en la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos del Hospital Bloom en el año 2013, identificación de la prevalencia y de las principales causas etiológicas en las cuales se presenta. Muestra: pacientes de 1 a 5 años hospitalizados en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom, los cuales no fueron sometidos a procedimientos quirúrgicos o presentaron insuficiencia renal crónica. Método: se realizó un estudio retrospectivo, descriptivo, desarrollado en la unidad de cuidados intensivos de dicho hospital, haciendo el diagnóstico de falla renal aguda mediante la aplicación los criterios RIFLE para demostrar la utilidad de ésta metodología en el diagnóstico temprano de FRA. Se analizaron los datos epidemiológicos, clínicos y analíticos de todos los pacientes con falla renal aguda. Consideraciones éticas: el presente estudio se evaluó y aprobó por el comité de ética del HNNBB considerándolo adecuado y de bajo riesgo para los pacientes. Resultados: hubo 27 episodios de FRA en 43 pacientes con edad de 1 a 5 años lo cual corresponde al 62.7% de los casos estudiados, el 52% sexo femenino. La patología primaria más frecuente fueron las patologías de origen infeccioso, más común en las neumonías; la media de edad de presentación son los 26 meses. Mediante la aplicación de los criterios RIFLE se permitió diagnosticar de forma más temprana la FRA.
Resumo:
El cumplimiento de medidas de bioseguridad es imprescindible en la atención a los pacientes durante los procedimientos quirúrgicos, lo cual constituye un conjunto de medidas preventivas que tienen como finalidad proteger la salud y la seguridad del profesional, así como también la del paciente y la comunidad, siendo necesario conocer las distintas medidas y técnicas asépticas, así como el uso de estos estándares para disminuir la probabilidad de adquirir infecciones cruzadas intrahospitalarias. El objetivo de la investigación es Evaluar el nivel de cumplimiento de medidas de bioseguridad por el personal de salud, Hospital Nacional Santa Rosa de Lima, Año 2015. La metodología utilizada en el estudio fue Descriptiva y de campo, en la población se incluyeron 26 profesionales los cuales son “10 cirujanos, 6 anestesistas y 10 enfermeras” que laboran dentro del área quirúrgica, en las técnicas de obtención de datos estuvieron las documentales, de campo y la observación. Los resultados obtenidos fueron procesados mediante el sistema SPSS versión 19, aceptando la Hipótesis de Investigación: el Personal de Salud del Hospital Nacional Santa Rosa de Lima tiene un alto nivel de cumplimiento en las medidas de bioseguridad y bajo la prueba estadística U de Mann Whitney se determino que no se presentan diferencias en la comparación del personal médico–anestesista, anestesista–enfermería y enfermería–médico, en el cumplimiento de las medidas durante los procedimientos quirúrgicos.
Resumo:
Uno de los rubros, de mayor importancia para las Organizaciones No Gubernamentales lo constituyen las Propiedades, Planta y Equipo, ya que por su naturaleza, son una de las fuentes para la generación de ingresos por su capacidad instalada. En forma general los activos se clasifican en activos corrientes y no corrientes, ubicándose dentro de éstos últimos las Propiedades, Planta y Equipo, los cuales son adquiridos para usarse y no para venderse ya sea que se adquieran con fondos propios o donados, además, se espera que éstos puedan usarse por más de un ejercicio contable. Al momento de adquirir un activo que se clasifique dentro de éste grupo, el registro inicial deberá realizarse al costo de adquisición, sumándole todos aquellos desembolsos que son necesarios para dejarlo listo y usarlo; la adquisición de estos activos se puede hacer ya sea en efectivo o mediante un intercambio por otro activo que sea o no similar con el que se está intercambiando, también, estos pueden ser construidos por la propia organización que los utilizara. Por otro lado, por la importancia que éstos activos y su representatividad dentro de los estados financieros tienen, es necesario que se lleven o se tengan controles adecuados para este tipo de bienes en cuanto a la pérdida de valor por el uso se refiere, de manera que los valores que se reflejen al cierre de cada ejercicio contable, representen la razonabilidad y confiabilidad de las cifras. Para lograr esto es necesario que al momento de determinar la pérdida de valor se tenga en consideración las características del activo en sí, como el nivel de uso al que esté siendo sometido. Otro concepto que brinda razonabilidad a los valores de los activos, es la revaluación, ya que en ciertas ocasiones el valor en libros de algunos activos es menor al valor de mercado. Las Organizaciones No Gubernamentales deben evaluar al cierre de cada ejercicio contable, si los valores en libros de los activos representados dentro de los estados financieros son menores o mayores al valor razonable, ya que en cualquiera de los dos casos implicaría hacer ajustes para que el valor en libros y el valor razonable no difieran significativamente y se expresen sobrevaluados o subvalorados. Si el valor en libros es menor al valor razonable, el ajuste consistiría únicamente en revisar el método de depreciación que se esté utilizando en ese momento, y si es necesario cambiarlo por otro método que refleje mejor el desgaste que sufre el bien previa autorización de la administración. Por otro lado, si el valor en libros es mayor al valor razonable, entonces, el ajuste que deberá efectuarse consistirá en calcular el precio de venta neto o el valor de uso para compararlo con el valor en libros, la diferencia será registrada como pérdida de valor por el deterioro. Para conocer si dentro de la organización existen activos que podrían haberse deteriorado en un periodo, se deben de considerar indicadores internos y externos, los cuales pudiera darse el caso que estos influyeran en la representación de los valores razonables de los activos. Para efectuar el cálculo de la pérdida por deterioro es necesario que la organización considere ciertos aspectos importantes tales como: calcular el precio de venta neto, para lo cual se deben considerar la existencia de un mercado activo; acordar el precio de venta neto, para esto será necesario la existencia de un compromiso formal de venta; estimar el valor de uso, para esto es necesario la utilización de la técnica del valor presente estimado o esperado. Para determinar los flujos de efectivo futuros, se debe considerar los ingresos potenciales y los costos y gastos de operación que genera el activo en uso. Al momento de reconocer una pérdida de valor por el deterioro es necesario considerar o tener en cuenta el principio de importancia relativa, ya que si el valor determinado como pérdida no es significativo, no será necesario hacer la aplicación y registro por el deterioro del activo. Dentro de alguna organización puede pasar que se haya determinado una pérdida de valor por deterioro en períodos anteriores, sin embargo, se puede dar el caso de que las situaciones que lo originaron disminuyan o desaparezcan completamente, esto traería como consecuencia que dicha organización revierta los efectos por la pérdida de valor registrada anteriormente, ésta reversión deberá cubrir únicamente el valor de la pérdida, pero si es mayor el valor de la reversión, entonces se efectuará una revaluación.