1 resultado para María Juana, 1750-1762, Archiduquesa de Austria
em Repositorio Institucional de la Universidad de El Salvador
Resumo:
Lo fundamental de haber desarrollado el trabajo de graduación titulado “El DETERIORO DE ACTIVO SEGÚN NORMAS DE INFORMACIÓN FINANCIERAS ADOPTADAS EN EL SALVADOR, APLICACIÓN CONTABLE DE LAS EMPRESAS DEL SECTOR CONSTRUCCIÓN EN EL AREA METROPOLITANA DE SAN SALVADOR”, surgió de la necesidad que tienen los contadores de las empresas constructoras de conocer la aplicación contable del deterioro de los activos. Antiguamente el hombre se vio obligado a llevar registros y controles de sus bienes porque su memoria no bastaba para guardar información y esto siguió evolucionando y surgieron conceptos que explicaban que en toda operación comercial no existía deudor sin acreedor, siendo ésta la base del principio de la partida doble. El desarrollo industrial y comercial de los países crea la necesidad de promulgar Principios y Normas de Contabilidad, con el propósito de presentar en forma adecuada y confiable la información financiera ya que la uniformidad de los Estados Financieros permite comparar resultados. El Salvador tiene la oportunidad de dar un nuevo salto cualitativo a través de la construcción y se creó la empresa constructora “mejoramiento social”, como una institución autónoma de derecho y utilidad, con el objetivo de elevar el nivel social de la población y están asociados a La Cámara de la Industria de la Construcción (CASALCO). Los activos sujetos a deterioro son: propiedad, planta y equipo y algunos activos intangibles, en donde el sector industrial es más afectado por el deterioro de los activos. Al tener indicios que el valor de los activos fijos se han deteriorado, la empresa debe estimar el importe recuperable para cada activo individual o para la unidad generadora de efectivo a la que pertenece. Debe reconocerse una pérdida por deterioro cuando el importe en libros sea mayor al importe recuperable y debe reconocerse inmediatamente como un gasto en El Estado de Resultado, si la pérdida por deterioro disminuye o ya no existe, debe procederse a reconocer la reversión como un ingreso. Si las empresas constructoras no contabilizan el deterioro del valor de los activos, la información presentada en los Estados Financieros no es fiable a la realidad económica y las decisiones tomadas por los empresarios no son las adecuadas.