3 resultados para Intestinal morphometrics
em Repositorio Institucional de la Universidad de El Salvador
Resumo:
El parasitismo intestinal, representa un problema de salud pública de mucha importancia a nivel mundial, sobre todo en zonas rurales y urbanas de los países en desarrollo, donde un gran número de habitantes viven en hacinamiento con graves problemas sanitarios y ausencia de hábitos higiénicos. Los parásitos en los niños son causa importante de trastornos en el desarrollo físico y mental de los mismos, el mecanismo y vía de contagio varía, la mayoría de los parásitos se adquieren al ingerir agua o alimentos contaminados con sus quistes o huevecillos. No obstante; todas las personas a cualquier edad pueden ser portadores de parásitos. El Objetivo del presente estudio fue comparar el porcentaje de alumnos de primero a tercer grado que presentan parasitismo intestinal en los Centros Escolares Cantón Ojo de Agua y Colonia El Cocal del Municipio y Departamento de Usulután en el periodo de junio a agosto de 2014. Metodología es una investigación de tipo prospectivo, transversal, comparativa, descriptiva y de laboratorio; la investigación incluyó a todos los alumnos de los grados antes mencionados en ambos Centros Escolares, se aplicaron criterios de inclusión y exclusión para establecer la población, además se administró una cédula de entrevista a los responsables de los niños para recopilar la información necesaria acerca de las condiciones de vida, hábitos higiénicos y alimenticios de los niños incluidos en el estudio. Se realizó el examen general de heces para poder observar la presencia de parásitos intestinales. Se utilizó una hoja de reporte de examen general de heces lo cual permitió realizar la tabulación de datos. Resultados: De un total de 83 niños estudiados en ambos Centros Escolares 44 (53.1%) resultaron negativos, 39 (46.9%) resultaron positivos para algún parasito; en el Centro Escolar Cantón Ojo de Agua ubicado en la zona rural 51 alumnos se sometieron al estudio de estos 26 (50.9%) resultaron con parasitismo intestinal, mientras que en el Centro Escolar Colonia Cocal se analizaron 32 muestras de heces de las cuales 13 (40.6%) resultaron con parásitos. De los 39 casos positivos de ambos Centros Escolares, 22 (56.4%) resultaron con un solo tipo de parásito y 17 (43.6%) con multiparasitismo. Los parásitos encontrados con mayor frecuencia fueron: Endolimax nana (51.3%) y Entamoeba histolytica (48.7%), el parasito encontrado con menor frecuencia fue: Iodamoeba butschlii (7.7%). Conclusión: Estadísticamente el porcentaje de parasitismo intestinal de los alumnos del Centro Escolar Cantón Ojo de Agua fue igual que el de los alumnos del Centro Escolar Colonia El Cocal.
Resumo:
En la costa de El Salvador, el “curil” (Anadara tuberculosa), constituyen una fuente importante de alimento, empleo y beneficios económicos para las personas que habitan en las cercanías de zonas costeras y estuarinas del país. Aunque ésta especie es reproducida artificialmente en el laboratorio de la Estación Acuícola de Producción de Moluscos de Puerto el Triunfo, Usulután, no existe información específica acerca de sus hábitos alimenticios en su hábitat natural para la región centroamericana. Por lo cual, el presente trabajo tuvo como objetivo determinar la composición específica de su dieta, a través del contenido estomacal e intestinal durante los meses de septiembre 2013 a enero 2014 en cuatro sitios de la Bahía de Jiquilisco, El Chile (EC), EL Jobal (EJ), Boca Los Lagartos (BL) e Isla Magueyal (IM). Se analizaron un total de 540 tractos digestivos de Anadara tuberculosa, obteniendo un total de 30,328 ítems alimenticios, en su mayoría correspondientes a 37 especies de diatomeas (95,91%), principalmente por los géneros Thalassiosira plicata (12,78%), Diploneis smithii (9,21%), Diploneis gruendleri (7,59%), Thalassiosira sp. (5,0%), Thalassionema nitzchioides (4,91%). Además, se aplicaron los índices de Levins (Bi=0,42) y Shannon-Wiener (H’=3,24), para amplitud y diversidad de dieta, respectivamente, indicando que esta especie se tipifica como especialista, debido a que presenta un espectro trófico diverso, dominado por pocas especies. Así mismo, se realizó un traslape de dieta de Morisita-Horn, en cuanto a rangos de tallas establecidos (menores de 4 cm, 4-5 cm y mayores de 5 cm), encontrando valores de Cλ=0,50 a 0,90, evidenciando que existe un traslape medio-alto en las especies filtradas por las diferentes tallas; así como también, para los sitios de muestreo se estimaron los índices de similitudes de Jaccard (Ij= 0,63-0,82) y Sorensen (Is= 0,72-0,90) indicando que no existen diferencias significativas en cuanto a los ítems alimenticios encontrados en los tractos digestivos de A. tuberculosa para la Bahía de Jiquilisco.
Resumo:
Actualmente es bien conocida la influencia que la presión ejercida tiene en la reducción de la invaginación, bien neumática o hidrostática. Inicialmente fue difícil conseguir de una manera fiable ejercer presiones significativas y se desarrollaron diversos sistemas que incluían jeringas e instrumentos que sellaban la región anal. En nuestro país no existen estudios ni protocolos acerca del uso del enema baritado como herramienta terapéutica de inicio de la invaginación intestinal, a pesar de que la incidencia de ésta patología es similar a la publicada en la mayoría de estudios internacionales, por lo que se vuelve importante conocer más acerca de éste tratamiento y de cómo aplicarlo en nuestros hospitales. Objetivo: evaluar la utilización del enema baritado como tratamiento de primer escoge de la invaginación intestinal en niños menores de 2 años ingresados en el Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom entre los años 2005 y 2013. Metodología: se realizó un estudio de corte transversal, de carácter descriptivo, retrospectivo, en el cual se incluyeron la totalidad de niños a los cuales se les realizó enema baritado como primera opción de tratamiento de la invaginación intestinal en el HNNBB en el período comprendido entre 2005 a 2013. Resultados: se incluyeron un total de 37 pacientes con una ligera preponderancia del sexo masculino provenientes del área urbana y en su mayoría menores de 1 año. El promedio de evolución fue de menos de 24 horas y los tres síntomas principales fueron enterorragia, vómitos y otros que incluía irritabilidad como principal síntoma. El diagnóstico se realizaba principalmente en las primeras 24 horas y el método diagnóstico más utilizado fue la USG abdominal. El motivo de referencia principal fue la sospecha de invaginación intestinal. Fueron 20 pacientes en los cuales resolvió el enema baritado la invaginación y sólo uno de ellos presentó un íleo como complicación y 2 de ellos se reinvaginaron nuevamente un mes y tres meses después. 17 pacientes el enema no resolvió la invaginación y tuvieron que ser intervenidos quirúrgicamente, de ellos solo 1 presentó con complicación y fue por una sepsis secundaria al cuadro de invaginación, estuvo en UCI 10 días. La EIH fue relativamente menor cuando la invaginación fue resuelta sólo por enema baritado. La leucocitosis es el hallazgo de laboratorio más encontrado en ésta serie. Conclusión: en su mayoría los datos coinciden con los reportados en las series revisadas. Cabe destacar la poca utilización del enema baritado como medida terapéutica de la invaginación intestinal, ésto debido a múltiples factores que van desde la falta de personal capacitado, falta de recursos materiales y de recurso humano disponible las 24 horas del día y por la falta de protocolos de manejo que orienten a la utilización del procedimiento. Existe además un alto índice de intervenciones quirúrgicas que no permite hacer énfasis en métodos alternativos de tratamiento.