1 resultado para CONE BEAM
em Repositorio Academico Digital UANL
Resumo:
El conocimiento, así como la investigación de la morfología radicular y de sus variaciones entre las distintas poblaciones del mundo es de suma importancia en el área odontológica; es imprescindible que el clínico se encuentre familiarizado con las variaciones de la anatomía dental antes de poder realizar satisfactoriamente un tratamiento. El conducto en forma de “C” es una variación anatómica del sistema de conductos radiculares encontrado con más frecuencia en los segundos molares inferiores, representa un desafío al odontólogo en relación a su limpieza y obturación, especialmente si su anatomía se modifica a lo largo del conducto. El Objetivo de la presente investigación es: Analizar la prevalencia de los conductos en forma de “C” de los segundos molares inferiores, mediante Cone Beam Computed Tomography en los pacientes de la Facultad de Odontología de la Universidad Autónoma De Nuevo León, examinar su frecuencia bilateral y unilateral en pacientes masculinos y femeninos así como comparar los resultados entre sí. Materiales y Métodos: Se analizaron trescientas diez imágenes de Cone Beam Computed Tomography de pacientes que acudieron a la facultad de Odontología de la Universidad Autónoma De Nuevo León en el año 2012 para observar la presencia del conducto en forma de “C” en las segundas molares inferiores. Dichos datos se recopilaron en una hoja de captura para posteriormente ser contabilizados. Para obtener los datos de unilateralidad y bilateralidad, solamente se tomaran en cuenta los casos en los que se presentaron las segundas molares inferiores en ambos. Resultados: De las 310 imágenes, 52 fueron excluidas, siendo un total de 258 imágenes analizadas (90 hombres y 168 mujeres). El conducto en forma de “C” se observó en 60 pacientes (19 hombres y 41 mujeres) presentándose bilateralmente en 71.42% de los casos. Conclusiones El presente estudio demuestra que aunque el conducto en forma de “C” en el estado de Nuevo León se presenta con menor frecuencia que en otras regiones del mundo, el Odontólogo debe estar capacitado para identificarlo y realizar un adecuado tratamiento, debido a que es comúnmente encontrado. Los presentes resultados concuerdan que si el conducto en forma de “C” se encuentra en una segunda molar inferior, muy frecuentemente se encontrará también en la segunda molar del lado opuesto.