2 resultados para SISTEMA MUSCULOESQUELÉTICO - PATOLOGÍA
em Universidade Complutense de Madrid
Resumo:
Los portales utilizados en la artroscopia de muñeca inicialmente son portales dorsales. Con el desarrollo de los portales volares, ha sido posible el abordaje artroscópico de la muñeca desde cualquier ángulo. PORTALES DORSALES. Los portales dorsales de la articulación radiocarpiana se nombran según su relación con los tendones de los compartimentos extensores del dorso del radio 1-/2, 3-/4, 4-/5, 6R y 6U. Los portales dorsales mediocarpianos radial y ulnar se encuentran 1 cm distal a los portales 3-/4 y 4-/5 respectivamente. Son los portales más utilizados y obtienen una adecuada visión de la articulación radiocarpiana y de la cápsula volar, pero no permiten una adecuada visión del ligamento radiopiramidal dorsal ni de la región palmar de los ligamentos lunopiramidal y escafolunar. PORTALES VOLARES. Aunque algunos autores han descrito portales volares para la articulación radiocarpiana, los más utilizados en la actualidad son los propuestos por Slutsky: portal volar radial y portal volar ulnar. También describe un portal volar para la articulación mediocarpiana a través de la misma incisión que para el portal volar radial y a 11cm distal a la misma. Los portales volares obtienen una adecuada visión de la región dorsal de la muñeca, y de la porción palmar de los ligamentos lunopiramidal y escafolunar…
Resumo:
A lo largo de la historia médica, los problemas en la articulación de la cadera se fueron solventando mediante intervenciones o dispositivos, que en sus inicios intentaban devolver la movilidad a la pierna sin causar rechazo. Conforme dichos dispositivos fueron tomando complejidad y permitían la carga, se implantaban no sólo en el fémur, sino también en el cotilo,por lo que fueron surgiendo nuevos problemas como el desgaste, la fatiga de material, aflojamiento del hueso o la formación de partículas en la cavidad que se creaba. En el contexto de estudio de los problemas generados por los implantes femorales, el Dr. Muñoz Moreno diseñó en la década de los 80, un vástago femoral al que llamó “Cobra”. Con un octavo de su longitud de superficie rugosa en la zona de carga proximal, con la idea de dar un anclaje metafisario puro, dotándole de un vástago largo, dejando la punta en el tercio distal del fémur evitando la variación y el efecto punta y facilitando su colocación mediante su curvatura anatómica...