3 resultados para M1 and M2 macrophages
em Universidade Complutense de Madrid
Resumo:
The effectiveness of macrophages in the response to systemic candidiasis is crucial to an effective clearance of the pathogen. The secretion of proteins, mRNAs, non-coding RNAs and lipids through extracellular vesicles (EVs) is one of the mechanisms of communication between immune cells. EVs change their cargo to mediate different responses, and may play a role in the response against infections. Thus, we have undertaken the first quantitative proteomic analysis on the protein composition of THP1 macrophages-derived EVs during the interaction with Candida albicans. This study revealed changes in EVs sizes and in protein composition, and allowed the identification and quantification of 717 proteins. Of them, 133 proteins changed their abundance due to the interaction. The differentially abundant proteins were involved in functions relating to immune response, signaling, or cytoskeletal reorganization. THP1-derived EVs, both from control and from Candida-infected macrophages, had similar effector functions on other THP1-differenciated macrophages, activating ERK and p38 kinases, and increasing both the secretion of proinflammatory cytokines and the candidacidal activity; while in THP1 non-differenciated monocytes, only EVs from infected macrophages increased significantly the TNF-α secretion. Our findings provide new information on the role of macrophage-derived EVs in response to C. albicans infection and in macrophages communication.
Resumo:
La adolescencia se caracteriza por importantes cambios biológicos y psicosociales, entre ellos, una creciente tendencia hacia la vespertinidad. Una mayor vespertinidad se ha asociado tanto al aumento del desarrollo puberal como al aumento del contacto con los pares, la autonomía y los hábitos cotidianos y de sueño. El primer objetivo de esta tesis fue conocer las diferencias según edad y sexo en M-V, en desarrollo puberal y en los factores psicosociales. El segundo objetivo fue conocer los cambios en M-V, en el desarrollo puberal y en los factores psicosociales de la primera a la segunda medida. Por último, el tercer objetivo fue conocer cómo el cronotipo, los factores biológicos y los factores psicosociales modulaban el cambio en la matutinidad-vespertinidad (M-V) mediante un diseño longitudinal-descriptivo. Cuatrocientos setenta y un adolescentes (249 chicas) entre 12 y 16 años participaron en los dos momentos de evaluación (M1 y M2, respectivamente), con un intervalo entre medidas de aproximadamente un año. Se utilizó la Escala de Matutinidad-Vespertinidad para Niños, la Escala de Desarrollo Puberal, la School Sleep Habits Survey y una escala creada para recoger la autonomía y el tiempo dedicado a los hábitos cotidianos. Los resultados indicaron que los adolescentes de 15 años en M1 y los de 16 en M2 tuvieron una mayor vespertinidad que los de 12 y 13 respectivamente. Los de 15-17 años tenían una mayor autonomía sobre sus hábitos cotidianos y de sueño y dedicaban menos tiempo a estar con la familia y más a estar con el ordenador que los más jóvenes (12-13 años). Además, sus hábitos de sueño eran más tardíos y consumían cafeína con más frecuencia. Las chicas tuvieron un mayor desarrollo puberal, mayor autonomía sobre hacer deberes y estudiar y menor sobre estar con los amigos...
Resumo:
Las alteraciones en el sistema inmune innato y en la respuesta inflamatoria, ya sean causadas por factores endógenos o exógenos, han sido implicadas como un componente fundamental en la fisiopatología de las enfermedades psiquiátricas. Esto es de gran relevancia en la esquizofrenia, una enfermedad incurable de gran impacto socioeconómico que afecta al 1% de la población mundial, caracterizada por alteraciones en la neurotransmisión, cuyos tratamientos antipsicóticos sólo engloban parte de la sintomatología de la enfermedad, tienen importantes efectos adversos, y una gran proporción de los pacientes muestran resistencia al tratamiento y baja adherencia. Uno de los principales factores de riesgo ambiental de esta enfermedad es la exposición al estrés. El estrés es capaz de activar indirectamente, mediante el daño celular o la permisividad ante patógenos, uno de las principales agentes de la inmunidad innata, los receptores tipo Toll (TLR). TLR3 actúa principalmente como centinela frente a infecciones virales al reconocer las dobles hebras de RNA viral, en cambio, TLR4 detecta principalmente el LPS, un componente estructural de las paredes de bacterias Gram negativas. Además, ambos TLRs son capaces de detectar patrones moleculares asociados a daño (DAMPs). Los principales coordinadores de la respuesta celular inmune son las citoquinas, las cuales inducen una respuesta Th1, Th2 o Th reguladora, también son las encargadas de activar la microglía en reposo, y una vez más son las que orquestan la polarización M1 o M2 según las citoquinas presentes en el ambiente. Por otro lado, el daño celular y la acumulación de mediadores proinflamatorios oxidativo/nitrosativos activan vías antioxidantes como la del factor NRF2, que a su vez también incide en la regulación de la activación microglial. Otro factor que interviene en el proceso, y que se relaciona directamente con la enfermedad es el sistema endocannabinoide...