2 resultados para Ferias-Alberic
em Universidade Complutense de Madrid
Resumo:
La investigación se centra en el proceso de construcción de la identidad española en las grandes exposiciones universales del siglo XIX (Londres, 1851, 1862), París (1855, 1867, 1878, 1889, 1900), Viena (1873), Filadelfia (1876) y Chicago (1893) analizando el modo en que estos concursos internacionales contribuyeron tanto a la percepción de un orden mundial jerarquizado según criterios políticos, económicos, sociales, religiosos y culturales; como a la proyección de la imagen exterior de España. En este sentido, la investigación no ha subestimado –si bien a menor escala– el impacto de la Exposición Universal de Barcelona de 1888, al ofrecer el contrapunto de una imagen nacional de prestigio industrial frente a la generalizada idea romántica del país que habitualmente se forjó en el resto de exposiciones. Estas ferias internacionales promovieron importantes hábitos sociales que contribuyeron a conformar las representaciones cognitivas de todos los colectivos y naciones del planeta. Uno de los más destacados fue el incipiente desarrollo de los medios de comunicación, las artes gráficas y la escenografía, sin olvidar el de las tradicionales muestras de Bellas Artes y la mercadotecnia turística. Sea como fuere, desde 1851, las exposiciones universales se presentan como prolíficos generadores de imágenes listas para un consumo visual no exento de connotación ideológica. Consecuentemente, la cultura visual en la tradición expositiva demuestra ser un interesante campo de investigación, en el que se hace necesario profundizar para poder esclarecer los vínculos recíprocos que se establecen entre la codificación de imaginarios y la construcción de identidades. Tomando en consideración lo expuesto, la investigación ha atendido a la relación establecida entre la cultura visual española y la formación de una identidad nacional que se emplaza en la encrucijada entre Oriente y Occidente, analizando su componente exótico, las implicaciones de la oposición dialéctica entre centro y periferia, así como la pretensión legitimadora de convertir a España en nexo de unión entre Europa y América. Con respecto a la metodología, esta tesis doctoral se apoya fundamentalmente en el análisis de la documentación de época conservada en archivos de prestigio internacional, reuniendo textos e imágenes originales a los que se suma tanto el estudio de la literatura coetánea como de la teoría crítica actual desarrollada durante los casi cuarenta últimos años. Los resultados confirman que la delegación española expuso esencialmente productos naturales, careciendo de una destacada representación manufacturera. El retraso económico, pero también la falta de una cultura empresarial expositiva, fueron causa de este pobre resultado que, asociado a la imagen exótica que los viajeros occidentales habían configurado desde tiempo atrás, proyectó la imagen de un pueblo anclado en un mundo pretérito. Esta fue precisamente la visión que los artistas extranjeros recrearon en sus obras, confirmando que imaginario visual y condicionamiento cultural influyen en la cristalización plástica y constante reinvención de los estereotipos culturales. Sin embargo, muchos españoles también fijaron esta imagen romántica: la de una nación sometida alternativamente a la idea dicotómica de un país luminoso, radiante y alegre y la de un territorio sombrío, absolutista y fanático; en definitiva, la de un pueblo apasionado varado en un pasado poético donde ninguna evidencia de modernidad tecnológica o contaminación cultural podían darse. Incluso, los espectáculos y actuaciones que especuladores foráneos y locales promovieron, se sirvieron de esta imagen exótica en pro del rédito económico. Así, la cultura visual viene a confirmar la constante interpretación reduccionista y simplista de la realidad heterogénea y plural del estado español...
Resumo:
La obra fotográfica ocupa el quinto puesto en el mercado global del arte, después de la pintura, el dibujo y la acuarela, la escultura y los grabados. Aunque el porcentaje de transacciones comerciales sigue siendo muy inferior en comparación con la pintura, es una de las disciplinas que más se ha revalorizado desde 1990. La infraestructura sobre la que se articula este sector del mercado se ha ido modificando poco a poco para responder al incremento de las ventas, sumándose las galerías de arte contemporáneo a las especializadas en obra fotográfica, y lo mismo ha ocurrido en cuanto a las subastas y las ferias. El incremento de los fondos fotográficos en las colecciones de los museos ha generado diversos campos de estudio y formación, influyendo positivamente en la comercialización de la fotografía artística. Se diferencia entre fotografía antigua, fotografía moderna y fotografía contemporánea, siendo esta última la que mayores cifras alcanza, pero no en el mercado especializado, sino en el del arte contemporáneo, llegando a cotizaciones superiores al millón de dólares. Si bien la faceta más especulativa de la fotografía es la relacionada con el mercado del arte contemporáneo, también es la más afectada por las crisis económicas, frente al mercado especializado (fotografía antigua, moderna y contemporánea), que es menos volátil, se mueve en precios más asequibles (inferiores a otras disciplinas como la pintura y el dibujo), es capaz de captar diversos perfiles de coleccionista y mantiene una evolución al alza menos expuesta a las fluctuaciones financieras...