7 resultados para Europa - Integração econômica
em Universidade Complutense de Madrid
Resumo:
Hace más de un siglo que el filósofo español Ortega y Gasset se aventuró, por un lado, a ver en el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) el responsable de la europeización de España y, por otro, a señalar que en Europa estaría la clave de la modernización del país. En 1986, cuando España firmó la adhesión a la Comunidad Económica Europea, efectivamente, lo hizo con un ejecutivo socialista y desarrollando unas políticas modernizadoras que lograron no sólo insertar al país en organismos internacionales del más alto nivel sino, también, tener un papel relevante en el concierto de las democracias occidentales; algo que se le había negado durante demasiado tiempo. Independientemente de las habilidades predictivas del gran filósofo español, cabe hacerse varias preguntas; por ejemplo, por un lado, tratándose de un partido centenario, si los socialistas de los años ochenta utilizaron una tradición europeísta propia o crearon una nueva y, por otro, ya que son los hombres los que hacen la historia, qué influencias rodearon al líder de los ochenta a lanzar su acción política hacia Europa...
Resumo:
La vida después de Lisboa ha sido decepcionante para Europa. El objetivo de convertir a Europa en la economía basada en el conocimiento más competitiva del mundo ha quedado indefinido, con resultados lejos de lo esperado. Igualmente pobres han sido los resultados del esfuerzo hecho en 2005 por la Unión Europea para dar a Lisboa un nuevo impulso, intentando combinar crecimiento sostenible con empleo, competitividad con solidaridad. Un indicador clave para evaluar los resultados obtenidos hasta ahora es la productividad laboral, ya que un crecimiento en el PIB por persona ocupada puede ser considerado un indicador aproximado del éxito económico y una condición para aumentar la calidad de vida (si bien ésta no es alcanzable descuidando la sostenibilidad humana y medioambiental). Los resultados han sido pobres y volátiles. Se identifican cuatro áreas de política económica en la nueva estrategia de Lisboa: invertir en la gente y modernizar el mercado de trabajo; desbloquear el potencial de negocio, especialmente de las PYMES; invertir en conocimiento e innovación; abordar los retos del cambio climático y del aumento del precio de la energía.
Resumo:
En esta investigación se pretende conocer los efectos de la crisis económica, iniciada en el 2008, en la salud en España. Se parte de la hipótesis de que esta crisis ha tenido efectos negativos en la salud. Para ello se realizan varios análisis estadísticos que vinculan indicadores económicos y de salud, y que nos permiten describir su relación así como su evolución en el transcurso de la crisis. Usamos diversos indicadores económicos, centrándonos sobre todo en las variables más clásicas para estudiar los ciclos: el Producto Interior Bruto y la Tasa de Desempleo. Para investigar el estado de salud usamos, entre otros índices, la esperanza de vida, las tasas de mortalidad, las tasas de morbilidad y diversos problemas de salud. Así mismo, se incluye la valoración del estado de salud y del sistema sanitario por parte de la ciudadanía, que actúa en calidad de pacientes. El análisis relacional de estas variables estará guiado, principalmente, por el análisis de correlaciones, series temporales y regresiones no lineales. Utilizamos diversas fuentes de datos: Instituto Nacional de Estadística (INE), Oficina regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) y Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSSI). De nuestro análisis se deduce que en general la crisis económica del 2008 no ha tenido efectos relevantes en la salud, y la mayoría de indicadores no muestran un comportamiento diferenciado en los años de crisis respecto de los años anteriores de auge económico. No obstante, cabe resaltar una evolución diferenciada desde el 2008 en algunos indicadores específicos, como la tasa de suicidio. Con esto no pretendemos negar que exista relación entre las crisis económicas y la salud, sino que es necesario tomar en consideración otros aspectos. Así una hipótesis para explicar lo observado puede estar basada en la existencia misma de un servicio sanitario público y gratuito, que permite que los ciudadanos vean atendidas sus necesidades sanitarias con independencia de su situación económica personal.
Resumo:
A fin de luchar contra la exclusión social y la pobreza, La Unión Europea reconoce la legitimidad de las ayudas destinadas a facilitar el acceso a un alojamiento digno. Por diversas razones, las características de la producción y gestión del parque de viviendas han estado marcadas en los diferentes países de la Unión Europea por sus características nacionales, y de modo particular la denominada vivienda social. No existe una definición única de vivienda social en Europa. El presente trabajo prentende realizar una aproximación a dicho concepto, así como a las características de las cooperativas de vivienda en la Unión Europea, y sus relaciones con la producción de vivienda social, así como la comparación con el resto de promotores sociales. Se va a tratar de analizar por qué las cooperativas de vivienda, independientemente de su forma jurídica, son alineadas frecuentemente con otros promotores de vivienda social en cuanto a actividad y productos, y en cuanto dirigidas a los más débiles económicamente.
Resumo:
La Peste Porcina Africana (PPA) es una enfermedad porcina de etiología vírica muy compleja, de carácter infecto-contagioso, para la que actualmente no existe vacuna. Por su gran importancia económica y sanitaria aparece incluida dentro del grupo de enfermedades de declaración obligatoria de la lista de la OIE y de la Unión Europea y su presencia conduce a restricciones inmediatas sobre el comercio de cerdo y productos derivados. Está causada por el virus de la Peste porcina africana (vPPA), un virus ADN de gran tamaño y estructura compleja, que presenta una envuelta lipoprotéica y una elevada variabilidad genética y antigénica, con 22 genotipos diferentes descritos hasta la fecha. Pertenece a la familia Asfarviridae, genero Asfivirus, de la que es el único integrante. Actualmente está presente en 22 países del África subsahariana, en la isla de Cerdeña, Italia, y desde su introducción en Georgia en 2007, tanto en la región transcaucásica como en el centro y sur de la zona occidental de la Federación Rusa (FR). La compleja situación epidemiológica de la PPA en el este de Europa, con focos continuados en la FR y afectando también a otros países vecinos de la UE como Bielorrusia y Ucrania, originó finalmente la entrada de la enfermedad en varios países de la UE en 2014, Lituania, Polonia, Letonia y Estonia en los que, hasta agosto de 2015, se realizaron más de 1000 notificaciones principalmente en jabalí, y en mucha menor medida en cerdo doméstico. Únicamente las especies de la familia Suidae y a las garrapatas blandas del género Ornithodoros son infectadas de forma natural por el vPPA. En cerdos domésticos y jabalíes europeos las manifestaciones clínicas de la enfermedad son variables. Por el contrario, los suidos silvestres africanos son resistentes a la infección, habitualmente con cursos clínicos de tipo inaparente...
Resumo:
Las políticas activas de empleo constituyen un campo complejo de estudio. Durante estos años de crisis económica se ha cuestionado su eficacia, abriéndose un debate académico, político y social acerca de cómo tratar mejor los problemas del mercado laboral en periodos de crisis económica. Tres dimensiones políticas son relevantes en términos de mantener un buen funcionamiento de los mercados de trabajo: la legislación de protección laboral, las políticas activas del mercado de trabajo y las medidas de apoyo a través de prestaciones por desempleo que dan una protección en forma de renta a los desempleados (políticas pasivas). Esta investigación tiene por objeto analizar la importancia y el diseño de las políticas activas de empleo que se han venido desarrollando en el difícil contexto económico actual de la Unión Europea. El funcionamiento adecuado de estas políticas, en sus vertientes de promoción y creación de empleo; intermediación y activación; educación y formación, se erigen como instrumentos claves para la dinamización de los mercados laborales en Europa. Para realizar este estudio se han identificado y agrupado las medidas fundamentales de las políticas activas de empleo de la UE durante estos años de crisis en 10 clústeres que han permitido llevar a cabo un análisis comparativo de las medidas implementadas. A su vez, se ha elaborado un mapa de las 579 medidas en políticas activas recogidas en los clústeres y se han clasificado sobre la base de tres criterios comunes (país de procedencia, objetivo y colectivo destinatario). Este mapa es el que nos ha servido para hacer las comparaciones entre las medidas de políticas activas sobre la base de un común denominador. A través del análisis comparativo, se han identificado aquellas medidas consideradas como “buenas prácticas” por la Unión Europea y que sirven como aprendizaje mutuo para la transferencia de información entre los Estados miembros. Estas buenas prácticas se han centrado en los desafíos comunes que ha planteado la crisis económica en los mercados laborales europeos: desempleo juvenil, desempleo de larga duración y segmentación laboral. Los principales resultados a los que se llega, ponen de manifiesto que existe una gran divergencia entre las medidas de políticas activas aplicadas por los países europeos durante estos años de crisis. La política comunitaria de empleo ha ido gestándose sin una verdadera coordinación de los Estados miembros respondiendo a la evolución económica y del desempleo lo que dificulta lograr una política de empleo común en la UE.