2 resultados para ABORIGENES ARGENTINOS
em Universidade Complutense de Madrid
Resumo:
El punto de partida es un dato: la obra de Andrés Rivera comenzó a divulgarse raudamente en la década de los 90, cuando hacía más de treinta años que su primera novela se había publicado y había conseguido el reconocimiento de Ricardo Piglia, Juan José Saer, Beatriz Sarlo, María Teresa Gramuglio, entre otros escritores y críticos destacados.1 A sus 86 años, este narrador, que además cuenta con una prolífica producción, es considerado uno de los mejores escritores argentinos contemporáneos. Esta investigación es también un homenaje. No es necesario seguir el camino deductivo que nos impone el dato, pero puede resumirse la conclusión en el hecho de que el nombre de Andrés Rivera no haya ocupado, en su debido momento, el lugar preponderante que se merece en las historias literarias. Tal vez la actitud indiferente, casi siempre inflexible, y la sincera modestia que Rivera manifiesta frente a todo acto que celebre la obra literaria como un objeto trascendental, contribuya a esta situación. Sus apreciaciones sobre la literatura, sobre la función de toda obra literaria remiten siempre a la idea de que ninguna obra puede cambiar el rumbo de la historia, como tampoco a nadie puede cambiarle la vida después de haber leído un libro de ficción. Nos parece, sin embargo, y nos decantaríamos por ello, que se debe en mayor medida a la conducta íntegra que este escritor mantiene y la honradez perseverante que expresa en sus declaraciones, sin importarle a quién o a qué voces literarias autorizadas puedan incomodar sus tajantes palabras. Esta actitud del escritor puede comprobarse en cada una de las entrevistas que se le han realizado hasta el momento: su ideología es siempre la misma...
Resumo:
Ante la ausencia de músicas de vanguardia en los programas de estudio de conservatorios superiores de diferentes partes del mundo, esta tesis toma el Conservatorio Superior de Música de la Ciudad de Buenos Aires Ástor Piazzolla como estudio de caso instrumental. A partir de un programa implementado en el año 2011 en los cursos de Piano Superior dictados en ese conservatorio propugnando la inclusión de músicas contemporáneas en los recitales públicos de egreso, se indaga en la tensión Tradición–Vanguardia en las aulas de esa institución y los modelos de gestión resultantes. Si bien se trata de una investigación en apariencia local, enmarcada en contextos culturales específicos, la bibliografía y la evidencia que se presentan permiten una indagación global del conservatorio, este concebido como entidad (Chasins, 1974; Kingsbury, 1988; Nettl, 1995; Kramer, 1996; Musumeci, 1998, 2001, 2002, 2003, 2004, 2007, 2008). Se trata de un estudio que apela a la metodología de indagación cualitativa (Denzin y Lincoln, 2005), a la indagación etnográfica y autoetnográfica presentada narrativamente (Alexander, 2005; Clandinin y Connelly, 2000; Clandinin, 2007; Wolcott, 2001), y a la indagación basada en las artes e informada mediante las artes (Mello, 2007). Por pertenecer el investigador a la institución indagada, se han considerado también enfoques de investigación-acción (Stenhouse, 1998) con posicionamiento de experiencia próxima/experiencia lejana (Geertz, 1983). Los componentes del diseño de la investigación se encuentran diagramados en un todo interactuante (Maxwell, 1996). Los resultados de esta indagación permiten afirmar que, más allá de que el conservatorio se ofrece a la sociedad como un espacio dedicado a las músicas de vanguardia, tal propuesta no tiene correlato con su verdadera identidad y gestión cultural, que excluyen la vanguardia para optar por una gestión y repertorios tradicionales. Se concluye que los motivos de este oxímoron se remontan al modelo del conservatorio francés de fines del siglo XIX y comienzos del XX, fuente en la que se basaron los primeros conservatorios argentinos y en la sigue reflejando la formación del pianista clásico profesional en el seno de la institución.