The Empirical Modeling of an Ecosystem

The authors have endeavored to create a verified a-posteriori model of a planktonic ecosystem. Verification of an empirically derived set of first-order, quadratic differential equations proved elusive due to the sensitivity of the model system to changes in initial conditions. Efforts to verify a similarly derived set of linear differential equations were more encouraging, yielding reasonable behavior for half of the ten ecosystem compartments modeled. The well-behaved species models gave indications as to the rate-controlling processes in the ecosystem.

Effects of perturbations on estuarine microcosms

Microcosms containing planktonic communities from Chesapeake Bay responded to enrichment with sewage by developing larger standing crops of phytoplankton and zooplankton. Data suggest that increased productivity would be reflected up the food chain but might increase existing problems with dissolved oxygen and might lead to qualitative changes in the composition of the zooplankton. Either phosphorus or nitrogen was removed more rapidly from solution depending on where and when the experimental water was obtained. Increases in standing crop of algae were associated with loss of nitrogen from solution in two experiments and losses of both nitrogen and phosphorus from solution in one experiment.

Expedición naútica científica Fray Francisco Morillo, río Bermejo, Argentina, 29/09-10/10/1984

El próximo septiembre se cumplen treinta años de la llamada Expedición Naútica-Cientifíca “R. P. Francisco Morillo” realizada en botes neumáticos por un grupo de personas de diferentes orígenes y entre los que se encontraban naturalistas y profesionales de las Ciencias Naturales. A nivel profesional fue una gran experiencia, ya que me permitió transitar por un ámbito geográfico de difícil acceso, con flora y fauna cuya referencia la tenía solo a través de textos. Por otra parte y mirado a la distancia, fue muy interesante el comportamiento humano del grupo. Entiendo que un sociólogo podría dar alguna interpretación, pero he visto de todo, actos de solidaridad, de mezquindad, egoísmo y de cierta locura, como por ejemplo, querer matar un yacaré por el simple hecho de que estaba en la playa tomando sol. En este caso, la suerte estuvo del lado de la noble bestia, ya que los involucrados en las Ciencias Naturales pudimos detener semejante barbaridad y hacer comprender a los de “gatillo fácil” que no había ningún sentido en lo que querían hacer. Irónicamente, entre otras cosas, este viaje tenía dentro de sus objetivos participar en un Congreso de Conservación… Los objetivos del viaje para los naturalistas, sólo se cumplieron en parte, ya que al principio de esta travesía comenzaron a suscitarse problemas, principalmente por las características del río, lo que dificultó, por falta de tiempo, la toma de muestras y las consiguientes observaciones. A nivel personal me queda la riqueza que me dio esta experiencia y el haber conocido a dos personas que me llamaron profundamente la atención. A nuestro baqueano José “Pipo” Marty, un hombre generoso y de una gran sabiduría. El otro fue Exequiel Martínez, al que conocí en el congreso que se realizaba en Resistencia y con quién, a partir de ese momento, me une un lazo afectivo que nace de un profundo respeto y admiración.