5 resultados para Moduladores Espaciales de Luz
em Universidad Politécnica de Madrid
Resumo:
La revista El Genio Maligno (de René Descartes), es una revista de humanidades y ciencias sociales que se publica semestralmente y está indexada en DICE, Latindex y Dialnet. El texto que aquí se presenta estudia el uso de la luz como herramienta para conseguir una ESTRUCTURA ILUSORIA, centrándose en la Cúpula de l aCapilla del Bosque de Erik Gunnar Asplund, una cúpula de percepción difusa, suspendida en el aire por la luz.
Resumo:
En un tiempo como el actual, en el que en arquitectura ya casi nada es lo que aparenta ser ni las disciplinas tradicionales parecen proporcionar ya suficientes asideros para conocer el trazo de los caminos, el proyecto arquitectónico se enfrenta a una visible incertidumbre a lo largo del limbo que parece definir el momento presente. Las infinitas soluciones que aparentemente marcan nuevas opciones de trabajo definen también un panorama de escasa claridad con una consiguiente pérdida de referencias de rigor que faciliten la certidumbre y un obligado compromiso en esta ciencia poética que se desvirtúa a veces como un mal arte menor. Para ahondar en este camino borroso se propone un ejercicio de búsqueda de invariantes que sirvan como base de método de trabajo. El planteamiento que sigue a continuación aspira a explorar una serie de herramientas básicas que siguen constituyendo el armazón de la arquitectura justa: la materia, la luz, la estructura, la emoción. No se trata pues de valerse de artilugios pasajeros o de argumentos pobremente arraigados, sino que el objeto de estudio que aquí se presenta tenga como base aquellas cuestiones que son esenciales a la arquitectura como ciencia poética y como técnica. En el discurso de la arquitectura pura nada es accesorio. Como escribe Rem Koolhaas, «donde la arquitectura acontece, nada más sucede». Además de explorar dichas herramientas, la investigación propone la recuperación explícita de unas estrategias que son tanto atemporales como históricas. Los filtros de mirada y luz pueden encontrarse en muchas culturas y bajo muchos signos, destinados a toda una variedad de funciones resueltas a medida según la medida de cada región y de cada hombre. La recuperación de estos elementos en la presente investigación presupone no solo una experiencia de la emoción espacial determinada por los mismos, sino la constatación y el abanderamiento de lo vernáculo como conocimiento del proyecto, como mecanismo de creación carente de frivolidad que, acumulado entre siglos y culturas, se destila para ofrecer lo más sensato y poético al hombre que lo precisa. Por último, el filtro es construcción y estructura, es materia y luz, no es mera imagen sino un neto configurador de espacios físicos y de emoción arquitectónica. Trabajar con estos invariantes debería garantizar una investigación desde el rigor y la responsabilidad. Su validez arquitectónica pues ésta va siempre más allá de su valor geográfico o histórico. Los filtros recorren un camino que arranca con la salida del hombre de la cueva platónica y alcanza la estructura molecular más compleja del cerramiento estructural más contemporáneo. La constante pulsión de un invariante tan consolidado viene a confirmarse de nuevo hoy en el auge de la arquitectura actual. La arquitectura siempre ha necesitado de filtros. Éstos, desde sus múltiples configuraciones, han permitido dar solución a cuestiones funcionales básicas a la vez que integraban sistemas desde los que proporcionar una imagen exterior y una emoción interior. Su verdadero sentido se comprende en su relación en el medio continuo, donde se ponen de manifiesto las interacciones que fomenta y que van más allá de su propia naturaleza y de sus propiedades intrínsecas como objeto para establecer nuevos significados. Contribuyen, como señala Jean-Pierre Cometti, a que «aparezca algo que no estaba implícito en las observaciones desarrolladas desde el principio»2. Los filtros son, por tanto, más que la suma de construcción, estructura, espacio y ornamento. Esta múltiple condición es la que proporciona un carácter único al filtro en sus consecuencias espaciales. Tan sólidos han sido sus apoyos que su presencia se ha mantenido indemne al tiempo y ha permanecido en el cruce de la historia, capaz de dar tantos y tan buenos resultados en el proyecto de arquitectura. Nuestra propuesta es redescubrir esos filtros.
Resumo:
Los pseudo-despolarizadores espaciales, entre los que se encuentran los denominados prismas despolarizadores, son dispositivos ópticos capaces de modificar el estado de polarización en cada punto del plano transversal de los haces de luz, obteniendo un continuo de estados de polarización y por tanto un grado de polarización estándar próximo a cero. En la literatura, en reiteradas ocasiones se utilizan estos prismas asumiendo la aproximación de que en su cara oblicua no existe doble reflexión. En el presente trabajo se investigan en detalle las características de polarización locales y globales de haces monocromáticos planos a la salida de un prisma despolarizador teniendo en cuenta la doble reflexión y se comparan los resultados con el caso de despreciar esta doble reflexión. Como consecuencia se obtienen las condiciones bajo las cuales el efecto de la doble reflexión puede ser despreciable. ABSTRACT: Spatial pseudo-depolarizers are optical devices that modify the polarization state along the transverse plane of a light beam in such a way that a continuum of polarization states are obtained. Consequently, a standard degree of polarization near to zero is reached when average over the whole beam section is taken. Depolarizing prism is an example of spatial pseudo-depolarizer. Double reflection effects are usually not considered in literature for such devices. In the present work, the polarization properties at the exit of a depolarizing prism are studied taking into account the effect of double reflection and the results are compared to those obtained when double reflection is neglected. Conditions under which the double reflection effect may be negligible on depolarizing action of this class of prisms are obtained.
Resumo:
Esta comunicación recibió la condición especial de ser destacada por el Comité Científico. A comienzos del siglo XX se empieza a implantar un novedoso medio de transporte en las grandes ciudades españolas: el metro. Aunque ya se había probado con éxito en otras ciudades europeas (Londres, Viena, París?), la expectación surgida en la capital era desmedida. En aquellos años Madrid se encontraba inmersa en un importante proceso de transformación que la convertiría décadas más tarde en una gran metrópoli. No obstante, en estos años de definición de su propia trama urbana la ciudad estaba colapsada por los tranvías y el creciente tráfico de automóviles. La Compañía Metropolitano Alfonso XIII, fundada por los ingenieros Miguel Otamendi, Antonio G. Echarte y Carlos Mendoza, consiguió materializar en un eficaz proyecto la idea de un nuevo tipo de transporte que discurría por debajo del nivel de calle. Este tipo de ferrocarril subterráneo planteó la aparición de unos nuevos parámetros espaciales que modificaron la percepción que los viajeros urbanos tenían de la metrópoli. Las bocas de metro se convirtieron enseguida en hitos en torno a los cuales se podían tomar referencias y orientarse en la trama urbana. La descontextualización del viaje respecto al entorno físico en el cual se produce ese desplazamiento direccional convirtió la experiencia de viajar a través del subsuelo en algo futurista para la época. Y con ello cambió la concepción de la ciudad, dejamos de percibirla en su totalidad para experimentarla de manera fragmentada por esos lapsos de tiempo que transcurren entre la entrada y la salida del metro. A través de los dibujos que Antonio Palacios Ramilo (Porriño 1874 ? Madrid 1945), arquitecto oficial de la Compañía, realizó para el diseño de las estaciones, vestíbulos y bocas de acceso podemos sentir la búsqueda constante de calidez y luminosidad como contraste frente a la imagen estereotipada fría y oscura de una caverna excavada bajo tierra. La introducción de la luz cenital en los vestíbulos, el recubrimiento de todas las superficies de tránsito con azulejos blancos que reflejan y multiplican la luz y el exquisito diseño de todos los detalles demuestran el interés del arquitecto por dignificar en todo momento estos nuevos espacios subterráneos, caracterizando con una identidad propia esta nueva tipología arquitectónica, y convirtiendo el viaje en metro en una experiencia sensorial innovadora. Abstract: n the early twentieth century Madrid was undergoing a major transformation that would make decades later in a large metropolis. However, in these years of defining its own urban grid the city was jammed with trams and the increasing car traffic. In 1919, the Com- pany Metropolitan Alfonso XIII, got into an effective project materialize the idea of a new type of transport that ran below the calle. Analizaremos experience as a paradigm shift in the trip meter without spatial reference. We will study the elements of this under- ground network and the relationships between them are generated: nodes , flows, transit spaces, waiting areas and up... And finally , will point to what extent the construction of this transport has influenced and modified the urban scene on the slope where the meter has become an element of our everyday life.
Luz industrial e imagen tecnificada: de Moholy Nagy al C.A.V.S. (Center for Advanced Visual Studies)
Resumo:
El desarrollo de la tecnología de la luz implicará la transformación de la vida social, cultural y económica. Tanto las consideraciones espaciales del Movimiento Moderno, como los efectos producidos por la segunda Guerra Mundial, tendrán efectos visibles en las nuevas configuraciones espaciales y en la relación simbiótica y recíproca que se dará entre ideología y tecnología. La transformación en la comprensión de la articulación espacial, asociada al desarrollo tecnológico, afectará al modo en que este espacio es experimentado y percibido. El espacio expositivo y el espacio escénico se convertirán en laboratorio práctico donde desarrollar y hacer comprensible todo el potencial ilusorio de la luz, la proyección y la imagen, como parámetros modificadores y dinamizadores del espacio arquitectónico. Esta experimentación espacial estará precedida por la investigación y creación conceptual en el mundo plástico, donde los nuevos medios mecánicos serán responsables de la construcción de una nueva mirada moderna mediatizada por los elementos técnicos. La experimentación óptica, a través de la fotografía, el cine, o el movimiento de la luz y su percepción, vinculada a nuevos modos de representación y comunicación, se convertirá en elemento fundamental en la configuración espacial. Este ámbito de experimentación se hará patente en la Escuela de la Bauhaus, de la mano de Gropius, Schlemmer o Moholy Nagy entre otros; tanto en reflexiones teóricas como en el desarrollo de proyectos expositivos, arquitectónicos o teatrales, que evolucionarán en base a la tecnología y la modificación de la relación con el espectador. El espacio expositivo y el espacio escénico se tomarán como oportunidad de investigación espacial y de análisis de los modos de percepción, convirtiéndose en lugares de experimentación básicos para el aprendizaje. El teatro se postula como punto de encuentro entre el arte y la técnica, cobrando especial importancia la intersección con otras disciplinas en la definición espacial. Las múltiples innovaciones técnicas ligadas a los nuevos fundamentos teatrales en la modificación de la relación con la escena, que se producen a principios del siglo XX, tendrán como consecuencia la transformación del espacio en un espacio dinámico, tanto física como perceptivamente, que dará lugar a nuevas concepciones espaciales, muchas de ellas utópicas. La luz, la proyección y la creación de ilusión en base a estímulos visuales y sonoros, aparecen como elementos proyectuales efímeros e inmateriales, que tendrán una gran incidencia en el espacio y su modo de ser experimentado. La implicación de la tecnología en el arte conllevará modificaciones en la visualización, así como en la configuración espacial de los espacios destinados a esta. Destacaremos como propuesta el Teatro Total de Walter Gropius, en cuyo desarrollo se recogen de algún modo las experiencias espaciales y las investigaciones desarrolladas sobre la estructura formal de la percepción realizadas por Moholy Nagy, además de los conceptos acerca del espacio escénico desarrollados en el taller de Teatro de la Bauhaus por Oskar Schlemmer. En el Teatro Total, Gropius incorporará su propia visión de cuestiones que pertenecen a la tradición de la arquitectura teatral y las innovaciones conceptuales que estaban teniendo lugar desde finales del s.XIX, tales como la participación activa del público o la superación entre escena y auditorio, estableciendo en el proyecto una nueva relación perceptual entre sala, espectáculo y espectador; aumentando la sensación de inmersión, a través del uso de la física, la óptica, y la acústica, creando una energía concéntrica capaz de extenderse en todas direcciones. El Teatro Total será uno de los primeros ejemplos en los que desde el punto de partida del proyecto, se conjuga la imagen como elemento comunicativo con la configuración espacial. Las nuevas configuraciones escénicas tendrán como premisa de desarrollo la capacidad de transformación tanto perceptiva, como física. En la segunda mitad del s.XX, la creación de centros de investigación como el CAVS (The Center for Advanced Visual Studies,1967), o el EAT (Experiments in Art and Technology, 1966), favorecerán la colaboración interdisciplinar entre arte y ciencia, implicando a empresas de carácter tecnológico, como Siemens, HP, IBM o Philips, facilitando soporte técnico y económico para el desarrollo de nuevos sistemas. Esta colaboración interdisciplinar dará lugar a una serie de intervenciones espaciales que tendrán su mayor visibilidad en algunas Exposiciones Universales. El resultado será, en la mayoría de los casos, la creación de espacios de carácter inmersivo, donde se establecerá una relación simbiótica entre espacio, imagen, sonido, y espectador. La colocación del espectador en el centro de la escena y la disposición dinámica de imagen y sonido, crearán una particular narrativa espacial no lineal, concebida para la experiencia. Desde las primeras proyecciones de cine a la pantalla múltiple de los Eames, las técnicas espaciales de difusión del sonido en Stockhausen, o los experimentos con el movimiento físico interactivo, la imagen, la luz en movimiento y el sonido, quedan inevitablemente convertidos en material arquitectónico. ABSTRACT. Light technology development would lead to a social, cultural and economic transformation. Both spatial consideration of “Modern Movement” and Second World War effects on technology, would have a visible aftereffect on spatial configuration and on the symbiotic and mutual relationship between ideology & technology. Comprehension adjustment on the articulation of space together with technology development, would impact on how space is perceived and felt. Exhibition space and scenic space would turn into a laboratory where developing and making comprehensive all illusory potential of light, projection and image. These new parameters would modify and revitalize the architectonic space. as modifying and revitalizing parameters of architectonic space. Spatial experimentation would be preceded by conceptual creation and investigation on the sculptural field, where new mechanic media would be responsible for a fresh and modern look influenced by technical elements. Optical experimentation, through photography, cinema or light movement and its perception, would turn into essential components for spatial arrangement linked to new ways of performance and communication. This experimentation sphere would be clear at The Bauhaus School, by the hand of Gropius, Schlemmer or Moholy Nag among others; in theoretical, theatrical or architectural performance’s projects, that would evolve based on technology and also based on the transformation of the relationship with the observer. Exhibition and perfor-mance areas would be taken as opportunities of spatial investigation and for the analysis of the different ways of perception, thus becoming key places for learning. Theater is postulated as a meeting point between art and technique, taking on a new significance at its intersection with other disciplines working with spatial definition too. The multiple innovation techniques linked to the new foundations for the theater regarding stage relation, would have as a consequence the regeneration of the space. Space would turn dynamic, both physically and perceptibly, bringing innovative spatial conceptions, many of them unrealistic. Light, projection and illusory creation based on sound and visual stimulus would appear as intangible and momentary design components, which would have a great impact on the space and on the way it is experienced. Implication of technology in art would bring changes on the observer as well as on the spatial configuration of the art spaces2. It would stand out as a proposal Walter Groupis Total Theater, whose development would include somehow the spatial experiments and studies about formal structure of perception accomplished by Moholy Nagy besides the concepts regarding stage space enhanced at the Bauhaus Theater Studio by Oskar Schlemmer. Within Total Theater, Groupis would incorporate his own view about traditional theatric architecture and conceptual innovations that were taking place since the end of the nineteenth century, such as active audience participation or the diffusing limits between scene and audience, establishing a new perception relationship between auditorium, performance and audience, improving the feeling of immersion through the use of physics, optics and acoustics, creating a concentric energy capable of spreading in all directions. Total Theater would be one of the first example in which, from the beginning of the Project, image is combined as a communicating element with the spatial configuration. As a premise of development, new stage arrangement would have the capacity of transformation, both perceptive and physically. During the second half or the twentieth century, the creation of investigation centers such as CAVS (Center for Advanced Visual Studies, 1967) or EAT (Experiments in Art and Technology, 1966), would help to the interdisciplinary collaboration between art and science, involving technology companies like Siemens, HP, IBM or Philips, providing technical and economic support to the development of new systems. This interdisciplinary collaboration would give room to a series of spatial interventions which would have visibility in some Universal Exhibitions. The result would be, in most cases, the creation of immersive character spaces, where a symbiotic relationship would be stablished between space, image, sound and audience. The new location of the audience in the middle of the display, together with the dynamic arrangement of sound and image would create a particular, no lineal narrative conceived to be experienced. Since the first cinema projections, the multiple screen of Eames, the spatial techniques for sound dissemination at Stockhausen or the interactive physical movement experimentation, image, motion light and sound would turn inevitably into architectural material.