8 resultados para Mapuche weaves
em Universidad Politécnica de Madrid
Resumo:
Hablar de “los mapuche” como sinónimo de grupo homogéneo y de una cultura tradicional puede inducir a inexactitudes. Habría que decir que hablar de “los mapuche” es referirse a una serie de poblaciones que si bien forman parte de un proceso histórico compartido, difieren en grado relevante entre sí. Bajo la denominación mapuche se agrupan colectivos que provienen de diferentes territorios. Wixan mapu, los mapus o territorios originales, habrían sido los espacios donde históricamente se han desarrollado los diferentes segmentos de la sociedad mapuche. Desde estos espacios es posible trazar tradiciones localizadas dentro del amplio espacio de la Wallmapu, o país mapuche. Nos referimos a agrupaciones más o menos diferenciadas que han desarrollado variaciones lingüísticas, religiosas-rituales y económicas. Sociedades mapuche que han administrado históricamente de diversas formas las relaciones con aliados o adversarios, hayan sido la corona española, el estado chileno, colonos, latifundistas y misioneros entre otros. También son sociedades que han administrado de forma diferenciada el uso y apropiación de elementos culturales occidentales.
Resumo:
La presente ponencia hace ver la relación entre habitante, arquitectura y ciencias humanas, entendiendo que la dimensión cultural del habitante es esencial en el diseño arquitectónico, por lo que amerita conocer las teorías y métodos etnográficos para identificar su cultura. A partir de estas reflexiones, se expone el caso Mapuche como estudio de caso para desarrollar, como ejemplo la selección de tres símbolos de la cultura residencial Mapuche.
Resumo:
La vida del pueblo Mapuche ha trascendido los procesos colonizadores incásicos, españoles y chilenos, a los cuales se ha tenido que enfrentar. Los mapuche habitan los territorios de la IX Región de la Araucanía desde tiempos inmemoriales. Sin embargo, han sido desarticulados como sociedad como consecuencia del llamado proceso de ¿Pacificación de la Araucanía¿, practicado por el Estado desde 1880 y considerado ¿colonización¿ por los Mapuche, que desde entonces han ocupado el segmento más bajo y precario de la sociedad chilena. Esta tesis doctoral propone actuar en este ámbito, aportando desde la disciplina arquitectónica, aquellos procedimientos y herramientas encaminadas a identificar y analizar las características del hábitat residencial Mapuche en el momento actual. Este propósito requiere acudir a los avances teóricos y metodológicos practicados por las ciencias humanas, en especial por la antropología, pues la arquitectura necesita progresar en este terreno para superar prácticas y procedimientos intuitivos y, en ocasiones, todavía poco sistemáticos. Para ello se han establecido hipótesis, objetivos y métodos tendentes a identificar el hábitat residencial que corresponde al Mapuche a través de una muestra de unas pocas familias ubicadas en un sector llamado Chomío, de la Comuna de Padre Las Casas, a 10 km de distancia al sureste de la ciudad de Temuco. Para el desarrollo de la tesis doctoral, que comprende un importante trabajo de campo, se han estudiado las teorías y métodos etnológicos y se ha incorporado la interpretación de los significados y formas de comunicación simbólica que practica el ser humano para identificar la cultura, lo que representa una visión novedosa y un avance sorprendentemente positivo para la práctica del diseño en el campo de la arquitectura doméstica.
Resumo:
Ponencia en el congreso internacional de rehabilitación organizado por CICOP en Chile.
Resumo:
En el artículo se propone un enfoque metodológico para identificar el hábitat residencial del habitante según su cultura, en este caso, del mapuche. Para esto fue seleccionada una muestra de pocas familias asentadas en el sector de Chomío, perteneciente a la Comuna de Padre Las Casas, ubicado a 10 km al sur oriente de Temuco. La investigación utilizó conceptos actuales de las ciencias humanas sobre cultura, después de haber comprobado que la arquitectura emplea conceptos obsoletos. En la investigación fue posible distinguir las siguientes realidades sobre el pueblo mapuche que se relatan en el desarrollo del presente artículo: Gran cohesión afectiva entre los integrantes de las familias mapuches. Existencia de una acentuada rigidez huinca sobre la cosmovisión mapuche. Reconocimiento español al pueblo mapuche como “Nación Independiente” mediante la Real Cédula dictada por el Rey Felipe lV en el año 1643. Sin embargo 249 años después, Chile con sólo 62 años de vida independiente, destruye la organización socio-cultural de la Nación Mapuche y la historia no ha sincerado a la posteridad la autenticidad de los principios y realización del plan que impulsó esa acción denominada hasta el presente, “Pacificación de la Araucanía”.
Resumo:
Análisis de las políticas aplicadas por el Estado chileno y sus efectos en el uso del territorio por parte de las comunidades indígenas de la zona del Alto Bíobio. Se observa que históricamente las comunidades han ido perdiendo el control de sus tierras
Resumo:
Desde hace ya varias décadas la praxis de la ecología ha venido reconociendo la necesidad de estudiar los múltiples sistemas de interacción del ser humano, como especie viva, y su entorno. Entidades espaciales como el paisaje geográfico son empleadas para delimitar sistemas territoriales operados por la sociedad, precisando campos concretos de su acción física, biológica y cultural. La ecología aborda así el conocimiento científico del territorio como asentamiento humano, rastrea sus patrones espaciales y analiza su compleja estructura funcional. En ese contexto, la transferencia de herramientas e instrumentos desde la ecología al ámbito proyectivo posee ya un bagaje de más de cinco décadas. Cada vez con más frecuencia el proyecto emplea parámetros, inventarios, fórmulas, indicadores y tecnologías que tratan de dar una respuesta ambientalmente adecuada a los condicionantes de contorno, por ejemplo aprovechando las condiciones climáticas en la optimización energética o proponiendo programas de usos del suelo que eviten perturbaciones en ecosistemas de interés. Con todo, en el momento presente surgen voces que, ante el dominio indiscutible de los enfoques netamente deterministas, tratan de recordar que los principios del pensamiento ecológico van más allá del mero control cuantitativo de los procesos biofísicos. Recuerdan que la etología demostró a principios del XX que el ser humano, como ser consciente, inviste una relación de intimidad con su entorno que supera tales perspectivas: a través de la correspondencia entre percepción y significación, entre lo físico y lo psíquico, entre interioridad y exterioridad, las personas abrazan la plenitud de aquello que les rodea en un acto de profunda conciliación afectiva. De tal ligadura de intimidad depende, sí o sí, y en toda su profundidad, la aceptación humana del entorno construido. A través de la noción de ambiente [Umwelt] se demuestra que la relación del hombre con su entorno es inseparable, bidireccional y coordinada y, por lo tanto, desde una posición coherente, la experiencia del espacio puede ser examinada a partir de la reciprocidad que constituyen, en continuidad, la persona y el lugar. De esta forma, la tesis dirige su objetivo principal a explorar y considerar, desde el proyecto, el significado y la influencia de la experiencia ambiental del espacio construido en la vida humana. Es más que probable que buena parte de los problemas de desafección del hombre con los paisajes transformados de su contemporaneidad tenga que ver con que tanto las intensidades de la experiencia y percepción humana, como la potestad interpretativa de sus productos culturales, incluyendo la arquitectura, han sido fuertemente reducidas. Ante este problema, la investigación toma como hipótesis la oportunidad que ofrece el pensamiento ecológico de reformular la experiencia estética como un acto de conocimiento, como un evento donde se da el encuentro físico y se construyen significados, donde se sancionan valores sociales y se mira hacia el futuro. Se ha de señalar que la presente tesis doctoral arranca en el Laboratorio de Paisaje del Grupo de Investigación Paisaje Cultural de la Universidad Politécnica de Madrid dirigido por Concha Lapayese y Darío Gazapo, y por tanto hace suyos para el estado del arte los principales conceptos e ideas bajo los que el trabajo teórico y práctico del grupo se viene orientando desde hace años: la consideración del paisaje como acontecimiento; la oscilación de la interpretación entre un paisaje específico y un paisaje genérico en un mundo globalizado; el reconocimiento de la experiencia estética del paisaje como una toma de conciencia social; y en definitiva, la reivindicación de la interioridad en el proyecto contemporáneo. La investigación profundiza en una línea de oportunidad que se abre al promover lo que se ha llamado un conocimiento por lo sentido como estrategia ambiental que permite contrarrestar mitos profundamente arraigados en las estructuras sociales. El primer paso en ese recorrido sería explorar ecológicamente el aporte de la experiencia estética; esto es, su consideración como forma de conocimiento específico. Resultaría pertinente impulsar la idea de la inmersión en el paisaje como fenómeno experiencial, sensual y corporal, y enfrentar, desde ahí, el problema de la aceptación social de lo nuevo y lo trasformado de acuerdo con el momento actual. La exploración sobre la afectividad en el ambiente no es, en cualquier caso, un asunto nuevo. Sin pretensiones de historiografía, dos momentos del siglo XX concentran el interés de la investigación. La primera se corresponde fundamentalmente con la segunda década del siglo, en relación a una serie de influencias que desde los avances científicos determinaron singulares aventuras del arte más experimental. La segunda se posiciona en el entorno de 1970, época en la que es conocido el interés que despertaron las cuestiones ambientales. En ambos casos se han estudiado aportaciones que desvelan conceptos determinantes en la definición de la experiencia estética como un evento de adquisición de conocimiento por lo sentido. Es conveniente adelantar el rol de centralidad que para la investigación tiene el concepto de energía, tal como el propio título subraya. La energía como realidad material y sensible es el sustrato que permite navegar por el principio de unidad epistemológica que subyace al pensamiento ecológico. Sus continuas referencias simbólicas, físicas y metafóricas entre los artistas estudiados no son un mero recurso iconográfico: mantienen inherente el principio de continuidad ambiental en el cual el ser humano y la inmensidad del cosmos navegan indisociables. Un discurso unificado y consistente sobre los aportes de la experiencia estética enfocada como forma de conocimiento por lo sentido hila la lectura histórica, conceptual y práctica de toda la investigación. Con ello se alcanza a hilvanar un diagrama conceptual, modelo de análisis proyectivo, que recoge ideas científicas, filosóficas y proyectivas. De alguna manera, el diagrama trata de dibujar, desde los principios del pensamiento ecológico, la correlación de continuidad que, vacilante, tensa, sutil y frágil se desplaza incesante e irresuelta entre interioridad y exterioridad. ABSTRACT Over the last few decades ecological practice has come to acknowledge a need for studying the multiple systems of interaction between the human being - inasmuch as it is a living species - and its environment. Spatial entities such as the geographic notion of landscape have been used to delimitate the territorial systems operated by society and to describe in detail specific fields of its physical, biological and cultural action. Ecology has thus managed to address the scientific knowledge of the territory as a human settlement, tracking its spatial patterns and analysing its complex functional structure. In this context, the transfer of tools and instruments from the field of ecology to that of design has a tradition already going back more than fifty years. Increasingly more often, design makes use of parameters, inventories, formulas, indicators and technologies to give an environmentally sound response to contour conditions: for instance, taking advantage of the local climate for the optimisation of energy consumption or proposing land uses that avoid disturbing valuable ecosystems. Yet in the present day some voices have arisen that, against the uncontested domination of purely positivistic approaches, are trying to draw attention to the fact that the principles of ecological thought go beyond mere quantitative control of biophysical processes. They point out that, in the early 20th century, ethology proved that the human being, as a conscious entity, invests itself into a relationship of intimacy with its environment that surpasses such perspectives: through the correspondences between perception and signification, between physical and psychological or between inside and outside, people embrace the entirety of their surroundings in an action of deep affective conciliation. It is on this link of intimacy that - fully and unquestionably - human acceptance of the built environment depends. Through the notion of environment [Umwelt] it can be proven that the relationship between the human being and its environment is inseparable, bidirectional and coordinated; and that, therefore, from a coherent position the experience of space can be examined through the reciprocity constituted continuously by person and place. Thus, the main goal in this thesis is to explore and acknowledge, from the standpoint of design, the meaning and influence of the environmental experience in human life. It is extremely likely that many of the issues with mankind’s alienation from the transformed landscapes of the present day arise from the fact that both the intensity of human perception and experience and the interpretive capacity of its cultural products –including architecture - have been greatly reduced. Facing this issue, research has taken as hypothesis the opportunity offered by ecological thought of reformulating aesthetic experience as an act of knowledge – as an event where physical encounter takes place and meanings are constructed; where social values are sanctioned and the path towards the future is drawn. This notwithstanding, the present thesis began in the Landscape Laboratory of the Technical University of Madrid Cultural Landscape Research Group (GIPC-UPM), led by Concha Lapayese and Darío Gazapo; and has therefore appropriated for its state of the art the main concepts and ideas that have been orienting the practical and theoretical work of the latter: the understanding of landscape as an event, the oscillation of interpretation between a specific and a generic landscape within a globalised world; the acknowledgement of the aesthetic experience of landscape as a way of acquiring social awareness; and, all in all, a vindication of interiority in contemporary design. An exploration has been made of the line of opportunity that is opened when promoting what has been termed knowledge through the senses as an environmental strategy allowing to counter myths deeply rooted in social structures. The first step in this path would be an ecological exploration of the contribution of the aesthetic experience; that is, its consideration as a type of specific knowledge. It would be pertinent to further the idea of immersion into the landscape as an experiential, sensual and corporeal phenomenon and, from that point, to face the issue of social acceptance of what is new and transformed according to the values of the present day. The exploration of affectivity in the environment is not, at any rate, a new topic. Without aspiring to make a history of it, we can mark two points in the 20th century that have concentrated the interest of this research. The first coincides with the second decade of the century and relates to a number of influences that, arising from scientific progress, determined the singular adventures of the more experimental tendencies in art. The second is centred around 1970: a period in which the interest drawn by environmental matters is well known. In both cases, contributions have been studied that reveal crucial concepts in defining the aesthetic experience as an event for the acquisition of knowledge through the senses. It is necessary to highlight the role of centrality that the concept of energy has throughout this research, as is evident even in its title. Energy as a material, sensitive reality is the substrate making it possible to navigate through the principle of epistemological unity underlying ecological thought. The continuous symbolic, physical and metaphorical references to it among the artists studied here are not a mere iconographic source: they remind of the inherency of the principle of environmental continuity within which the human being and the immensity of cosmos travel indissociably. A unified, consistent discourse on the contributions of the aesthetic experience addressed as knowledge through the senses weaves together the historic, conceptual and practical reading of the whole research. With it, a conceptual diagram is constructed – a model of design analysis – gathering together scientific, philosophical and design ideas. Somehow, the diagram tries to draw from the principles of ecological thought the correlation of continuity that, vacillating, tense, subtle and fragile, shifts incessantly and unresolved between interiority and exteriority.
Resumo:
Entre los años 1965 y 1985, arquitectos españoles irrumpieron con una serie de aportaciones singulares que abrieron nuevas líneas de exploración más allá de los límites que marcaba la tradición. Se trata de un conjunto de prácticas arquitectónicas que podríamos calificar de “experimentales”3. El carácter aislado y disperso de estas manifestaciones4, ha contribuido a su desconocimiento y falta de difusión tanto dentro como fuera de nuestras fronteras. Hasta la fecha no se ha realizado una revisión del tema en su conjunto. Con este estudio se pretende analizar la producción arquitectónica experimental de este periodo en su globalidad, generar una estructura que permita incluir las distintas vías experimentales, de idear y proyectar arquitectura, que podemos encontrar dentro de nuestro territorio, inscribiéndolas en un contexto más amplio. Se han identificado cuatro nichos de experimentación en torno a los cuales se estructura la producción experimental española en el arco temporal definido: “sistemas de organización espacial”, “interacción con el medio ambiente”, “lógica constructiva e imaginación material” y “el campo expandido del lenguaje y el proceso proyectual”. La comprensión de estas manifestaciones, con una mirada global, es la que mejor puede contribuir a la construcción de un corpus propio, que sea reconocible por sus diferencias y especificidades. Se trata igualmente de un estudio comparado, que busca facilitar la inscripción de las prácticas experimentales españolas en el marco de la cultura internacional, no como una excepción encerrada en su particularismo, ni como una derivación inmediata de tendencias externas, sino como una realidad donde apoyar una historia que entrelaza lo local y lo internacional. En definitiva, con esta investigación se pretende recuperar un fragmento reciente de la arquitectura en España, en un periodo clave, en el que comienza a abrirse al intercambio de teorías y prácticas, con el resto de Europa y América. Incluyendo voces paralelas al discurso central, que habían sido desplazadas durante el proceso de construcción del mismo, se quiere participar en la transmisión de un legado completo de nuestra cultura y práctica arquitectónica. ABSTRACT Between the years 1965 and 1985, Spanish architects burst in with unique contributions that could be described as "experimental"1. The isolated and dispersed nature of these occurrences2 has contributed to the oversight and lack of dissemination of the Spanish experimental architecture both within and beyond our borders. To date, there has been no review of the topic in its entirety. This study tries to examine the experimental architectural production of this period as a whole, generating a structure that allows for the inclusion of different experimental ways of envisioning and projecting architecture within our territory, registering them in a wider context. Four niches of experimentation have been identified around which the Spanish experimental production in the time span defined: "spatial organisation systems," "interaction with the environment", "constructive logic and equipment imagination" and” expanded field of language and the design process. " Understanding these manifestations, with a global perspective, can best contribute to the construction of our own corpus, which is recognisable by their differences and specificities. At the same time, it is a comparative study that seeks to facilitate the registration of the Spanish experimental practices within the framework of international culture, not as an exception enclosed in its particularity, not as an immediate derivation of external trends, but as a reality to support a story that weaves together the local and the international. In short, it deals with recovering a recent fragment of architecture, in a key period in which Spain begins to open to the exchange of cultural and architectural theories and practices with the rest of Europe and America. Including parallel voices to the central discourse, which until recently had been displaced during the construction processes of that same discourse, this research wants to participate in the transmission of a complete legacy of the history of our culture and architectural practice.