112 resultados para La casa de Bernarda Alba
em Universidad Politécnica de Madrid
Resumo:
La casa de la cascada de Frank Lloyd Wright siempre ha sido sugerente de reflexiones en torno a la poética de habitar. Para el autor la naturaleza constituye una auténtica tautología con el conocimiento. La observación de la naturaleza es la apertura a todas las instancias del onocimiento; la experiencia directa y la búsqueda del origen de las cosas; «el quehacer arquitectónico para Wright ha de tener un sentido básico de equilibrio con las fuerzas de la naturaleza».
Resumo:
La casa habitada
Resumo:
Se analiza el sistema constructivo, estructura y acabados, del aljibe de época almohade de la Casa de las Veletas de Cáceres, cuya datación está en torno a los siglos X a XII. Cconstruido en base a once columnas y un pilar, son de ladrillo los dieciséis arcos de herradura levantados en dirección NE-SO, y las cinco bóvedas de cañón, que descansan sobre los mismos. Los muros son de tapia tipo tabiya, los enlucidos de cal, y el hallazgo de una moldura plantea la hipótesis de la existencia de decoraciones, por lo que originariamente pudo haber tenido otro uso. Los estudios se apoyan en la documentación histórica, lectura muraria y caracterización de morteros por FTIR.
Resumo:
La Tesis Doctoral nace con una intensa vocación pedagógica. La hipótesis de trabajo se establece en torno a una cuestión de interés personal, un tema sobre el que se vertebran, desde el comienzo del doctorado, los diferentes cursos y trabajos de investigación: LA CASA DOMÍNGUEZ como paradigma de la dialéctica en la obra de Alejandro de la Sota. La clasificación de la realidad en categorías antagónicas determina un orden conceptual polarizado, una red de filiaciones excluyentes sobre las que Sota construye su personal protocolo operativo: la arquitectura intelectual o popular, experimental o tradicional, universal o local, ligera o pesada, elevada o enterrada, etc. Se propone el abordaje de una cuestión latente en el conjunto de la obra ‘sotiana’, desde la disección y el análisis de una de sus obras más pequeñas: la casa Domínguez. Se trata de una organización sin precedentes, que eleva la estrategia dialéctica al paroxismo: la vivienda se separa en dos estratos independientes, la zona de día, elevada, y la zona de noche, enterrada; cada uno de los estratos establece su propio orden geométrico y constructivo, su propio lenguaje y carácter, su propia identidad e incluso su propio presupuesto. Las relaciones entre interior y exterior se especializan en función de la actividad o el reposo, estableciéndose una compleja red de relaciones, algunas evidentes y otras celosamente veladas, entre los diferentes niveles. La estancia destinada a las tareas activas se proyecta como un objeto de armazón ligero y piel fría; la precisa geometría del cubo delimita la estancia vigilante sobre el paisaje conquistado. La ladera habitada se destina al reposo y se configura como una topografía verde bajo la que se desarrollan los dormitorios en torno a patios, grietas y lucernarios, generando un paisaje propio: la construcción del objeto frente a la construcción del lugar La casa Domínguez constituye uno de los proyectos menos estudiados, y por lo tanto menos celebrados, de la obra de Don Alejandro. Las publicaciones sucesivas reproducen la documentación gráfica junto a la memoria (epopeya) que el propio Sota compone para la publicación del proyecto. Apenas un par de breves textos críticos de Miguel Ángel Baldellou y, recientemente de Moisés Puente, abordan la vivienda como tema monográfico. Sin embargo, la producción de proyecto y obra ocupó a De la Sota un periodo no inferior a diez años, con casi cien planos dibujados para dos versiones de proyecto, la primera de ellas, inédita. El empeño por determinar hasta el último detalle de la ‘pequeña’ obra, conduce a Sota a controlar incluso el mobiliario interior, como hiciera en otras obras ‘importantes’ como el Gobierno Civil de Tarragona, el colegio mayor César Carlos o el edificio de Correos y Telecomunicaciones de León. La complicidad del cliente, mantenida durante casi cuarenta años, habilita el despliegue de una importante colección de recursos y herramientas de proyecto. La elección de la casa Domínguez como tema central de la tesis persigue por lo tanto un triple objetivo: en primer lugar, el abordaje del proyecto como paradigma de la dialéctica ‘sotiana’, analizando la coherencia entre el discurso de carácter heroico y la obra finalmente construida; en segundo lugar, la investigación rigurosa, de corte científico, desde la disección y progresivo desmontaje del objeto arquitectónico; y por último, la reflexión sobre los temas y dispositivos de proyecto que codifican la identificación entre la acción de construir y el hecho de habitar, registrando los aciertos y valorando con actitud crítica aquellos elementos poco coherentes con el orden interno de la propuesta. This doctoral thesis is the fruit of a profound pedagogical vocation. The central hypothesis was inspired by a question of great personal interest, and this interest has, since the very beginning of the doctorate, been the driving force behind all subsequent lines of research and investigation. The “Casa Domínguez” represents a paradigm of the dialectics found in the work of Alejandro de la Sota. The perception of reality as antagonistic categories determines a polarized conceptual order, a network of mutually excluding associations upon which Sota builds his own personal operative protocol: intellectual or popular architecture, experimental or traditional, universal or local, heavy or light, above or below ground, etc. Through the analysis and dissection of the “Casa Domínguez”, one of Sota’s smallest projects, an attempt is made to approach the underlying question posed in “Sotian” work as a whole. This is about organization without precedent, raising the strategic dialectics to levels of paroxysm. The house is divided into two separate levels, the day-time level above ground, and the lower night-time level beneath the surface of the ground. Each level has its own geometrical and stuctural order, its own language and character, its own identity and even has its own construction budget. The interaction between the two areas is centered on the two functions of rest and activity, and this in turn establishes a complex relationship network between both, which is sometimes self-evident, but at other times jealously guarded. The living area designed for daily activity is presented as an object of light structure and delicate skin; the precise geometry of the cube delimiting the ever watchful living area’s domain over the land it has conquered. A green topography is created on the slope below which lies an area adapted for rest and relaxation. Two bedrooms, built around patios, skylights and light crevices, generate an entirely independent environment: the construction of an object as opposed to the creation of a landscape. The “Casa Domínguez” project has been subject to much less scrutiny and examination than Don Alejandro’s other works, and is consequently less well-known. A succession of journals have printed the blueprint document together with a poetic description (epopee), composed by Sota himself, to mark the project’s publication. There has, however, scarcely been more than two brief critical appraisals, those by Miguel Ángel Baldellou and more recently by Moisés Puente, that have regarded the project as a monographic work. The project and works nevertheless occupied no less than ten years of De La Sota’s life, with over a hundred draft drawings for two separate versions of the project, the first of which remains unpublished. The sheer determination to design this “small” work in the most meticulous detail, drove Sota to manage and select its interior furniture, as indeed he had previously done with more “important” works like the Tarragona Civil Government, César Carlos College, or the Post Office telecommunications building in León. Client collaboration, maintained over a period of almost forty years, has facilitated an impressive array of the project’s tools and resources. The choice of “Casa Domínguez” as the central subject matter of this thesis, was made in pursuance of a triple objective: firstly, to approach the project as a paradigm of the “Sotian” dialectic, the analysis of the discourse between the heroic character and the finished building; secondly, a rigorous scientific investigation, and progressive disassembling and dissecting of the architectonic object; and finally, a reflection on aspects of the project and its technology which codify the identification between the action of construction and the reality of living, thus marking its achievements, whilst at the same time subjecting incoherent elements of the proposal’s established order to a critical evaluation.
Resumo:
La actuación de personajes ajenos -a la disciplina de la arquitectura- sobre la misma subyace en la misma base de los condicionantes históricos desde los que se conforma el proyecto de arquitectura. El carácter áulico de las grandes obras, o la permanencia en un tiempo más amplio que el de la vida humana han atraído al ser humano desde tiempos sin registro. No supondría mayor novedad el que un filósofo, en la convulsa Viena de entreguerras, se interesara en una vivienda que su hermana deseaba construirse en los extramuros de una ciudad en plena transformación postindustrial. Despierta nuestro interés los personajes concretos, siendo el filósofo Ludwig Wittgenstein, el filósofo de la lógica regulada del Tractatus, amigo íntimo de Adolf Loos; y su hermana, Margaret Stonborough-Wittgenstein, una de las mecenas más solicitadas de la cultura vienesa de la época. Y aquella casa, no es sino el palais Wittgenstein, llevado a la realidad entre 1925 y 1929, en el tiempo germinal del Movimiento Moderno. Esta casa toma el nombre de Wittgenstein, que, lejos de la coincidencia con el de su propietaria, sintetiza la atribución que la crítica y la historiografía ?tanto arquitectónica como filosófica- ha hecho de ella. Esta casa es, en apariencia, el fruto de un filósofo obsesionado con el concepto de la verdad; que ha erigido un palacete suburbano con os rígidos principios de un discurso estructuralista. La casa ha sido y es leída como ?lógica encarnada en casa? -según las propias palabras de su propietaria-. Un intento de dotar de orden metalingüístico al elenco material y técnico que es un proyecto de arquitectura. Con ese carácter mitificado, algunos estudios sobre la misma son publicados desde los inicios de la década de los 80. Remueve conciencias postmodernas, al poder ser presentada como un arranque atípico del Movimiento Moderno, y por la búsqueda de esa excepción su estatus permanece invariablemente fijado en los márgenes de aquel. Sin embargo, cuando la casa es estudiada documentalmente, se descubren contradicciones iniciadas en el ambiguo papel de Paul Engelmann -el arquitecto que comenzaba el proyecto- y que llegan hasta las deficiencias en la res aedificatoria básica de una vivienda. Cuando la casa es habitada, se descubre una complejidad espacial que dista mucho de los acotados espacios que conforman la planta, una extraña posición respecto al entorno, una construcción realizada con elementos radicalmente reducidos. Una casa que al ser descubierta contrasta con lo que la crítica dice mayoritariamente de ella, una casa que al ser estudiada desvela un proceso de proyecto que, por complejo, es terriblemente actual; una casa cuya realización no es fruto del pragmatismo moderno aunque finja serlo. Y al estudiarla, se presenta una casa que no es sólo un proyecto de arquitectura, sino un instrumento de investigación que enriquece la percepción que de la realidad tenía Wittgenstein, y con este desplazamiento en su pensamiento nos facilita, aún hoy, el incremento de la riqueza de nuestro mirar.
Resumo:
El espacio íntimo no está únicamente asociado al espacio privado y doméstico, sin embargo las nociones de privacidad e intimidad están emparentadas a la idea de casa. Mientras el lugar íntimo no se resuma al espacio de proyección individual, la necesidad revelada por el individuo a lo largo de la historia de poseer un espacio propio configura una categoría de planteamiento íntimo ante el espacio. Aunque pertenezca a un ámbito inmaterial, la intimidad se busca, en las páginas siguientes, en lo arquitectónico a través de la observación de algunos espacios individuales. Se identifican imágenes del habitar individual y espacios de reclusión individual. Se observa en los momentos inicial y final de la vida el exponente máximo de aislamiento y de unidad, la imagen del espacio intrauterino y una idea de lo fúnebre planean sobre el cotidiano, infundiéndolo también de la necesidad de aislamiento. La reclusión se podrá procesar a partir de distintas motivaciones. En este sentido se ha identificado el espacio del ermitaño, el espacio de retiro y el espacio de la exclusión. Cercado el ámbito del espacio individual surge como necesaria la tarea de oponer el individuo al mundo, pues no existe dentro sin fuera, como no hay día sin noche, ni el ser individual existe sin que pueda plantearse ante otros que confirmen su existencia. En este sentido se plantea el habitante individual ante la inmensidad, ante la exposición y ante la extrañeza. Para que un viaje sea completo hay que regresar al punto de partida lo que en este contexto significó un regreso del individuo a sí mismo, pero en este punto mediado por el artificio, es decir, se planteó el individuo ante el espejo: ante la naturaleza, ante el arte y ante la tecnología. El último capítulo surge como la configuración de un conjunto de espectros que se habían vislumbrado a lo largo del trabajo y que tienen en la última parte la posibilidad de cruzarse y generar nuevas lecturas. La motivación en percibir de que formas el concepto de intimidad se cruza con las problemáticas implícitas en el concebir y experimentar el espacio se va destilando a lo largo del trabajo: se identifican afinidades entre lo que podrá parecer ajeno, se admiten escisiones entre lo que se enseña uno, y se observan temas que por tan vinculados a las experiencias más banales del habitar se encuentran a menudo en el olvido. Este trabajo no es más que un acercamiento a las cuestiones más elementales del proyecto de arquitectura de alguien que más allá de experimentar el espacio como habitante se dispone también a pensarlo.
Resumo:
El tema objeto de investigación “El recinto ferial de la Casa de Campo de Madrid (1950-75)” se trata desde una perspectiva que alterna la visión general y la visión pormenorizada. Profundizamos en la comprensión de las relaciones del recinto con el resto de la ciudad, desde la originalidad y singularidad de su trazado,la descripción y el análisis con distinto grado de detalle de sus arquitecturas, a partir, de la investigación documental, bibliográfica y la restitución gráfica realizada. Procuramos situar los pabellones en el contexto de las arquitecturas del periodo estudiado, indicando, en el caso del recinto original y los pabellones proyectados por el arquitecto Francisco Cabrero, posibles referencias a la tradición vernácula y clásica, los invariantes de la arquitectura española, sus maestros, la visión contemporánea de la arquitectura moderna e interpretación personal, recogida en sus cuatro libros de arquitectura. Otro campo de estudio, el resto de los pabellones construidos en virtud de las necesidades de los organismos que concurrían a la feria, constituyeron, dependiendo de sus distintos autores, un conjunto heterogéneo y diverso de planteamientos estilísticos, concepciones funcionales, espaciales y de calidad arquitectónica. De la comparación se extraen las oportunas reflexiones. La feria supone una alteración de las preexistencias del lugar, influyendo decisivamente en la configuración y evolución del ámbito urbano, condicionándolo, también hoy en día. Examinaremos la repercusión del trazado, la topografía, la vegetación y las construcciones. El carácter actual de cuña dotacional en el entorno del río Manzanares y la repercusión en la estructura del recinto de su división en dos piezas de arquitecturas tan distintas, como la parte antigua y la parte nueva. Partiremos de una restitución gráfica y cronológica, con distinto grado de detalle, del conjunto y los pabellones seleccionados. Otras reflexiones se centraran en el papel del comisario y los arquitectos directores. Desde los condicionantes del encargo inicial, la ampliación del recinto y la gestión de la evolución de la feria en base a los requerimientos agrícolas,folklóricos, comerciales, industriales y turísticos. Una arquitectura que nace de capacidad de improvisar, la flexibilidad, la habilidad y el provecho de cada situación particular. La concreción en unos 40 pabellones y stands (una tercera parte de los que se construyeron), supone una elección en base a criterios de calidad y oportunidad. Son hitos o ejemplos de las distintas corrientes que clasificamos en populares y modernos, casi, como una conclusión preestablecida. El trabajo se orienta hacia las edificaciones modernas ya sea por su logro en la asimilación del ideal, su grado de experimentación e innovación técnica o su interés en la configuración de sus espacios expositivos. Se conservan más y mejor los pabellones populares, lo que nos obliga a la puesta en valor de los modernos, sin menospreciar el interés de los populares, que deberán estudiarse con mayor detalle en trabajos posteriores, a partir, del abundante material recopilado. El objetivo fundamental del trabajo ha sido conocer en profundidad la arquitectura de los pabellones representativos de cada periodo, intentando comprender y restituir el proceso proyectual desde una visión múltiple que comprenda las disciplinas que confluyen en el proyecto arquitectónico. La tesis ofrece la restitución escrita y dibujada del recinto y sus arquitecturas, además,de la interpretación y valoración del autor. La visión contemporánea de Alejandro de la Sota con su crítica arquitectónica de la primera feria, los invariantes expuestos por Fernando Chueca o las sesiones de crítica celebradas en la Revista Nacional, indican el camino que siguieron los autores de los pabellones de la feria y permiten profundizar en el diagnóstico de las ideas del momento, también, a partir de algunas entrevistas realizadas. Se estudian además las relaciones entre el estrecho círculo de autores, las nuevas tendencias y la influencia otros artistas plásticos. Finalmente, la documentación y análisis del material audiovisual, los noticieros, revistas y boletines de la Feria del Campo, permiten extraer conclusiones sobre la originalidad del trazado del recinto y los pabellones, su utilización, así como, el funcionamiento y aceptación social de la feria, desde la perspectiva de la apertura y evolución política y cultural de la transición hacia la democracia. La abundante documentación administrativa localizada admite concluir sobre la veracidad de las circunstancias que influyeron en la concepción y desarrollo del recinto y sus edificios, contrastando el testimonio de sus protagonistas a partir de la recreación propuesta.
Resumo:
El proyecto consiste en una repoblación con Quercus suber L. en 30 hectáreas dividida en dos parcelas (5,87% de la superficie actual de la finca); la dedicación actual de esa parcelas es erial a pastos. Se ha estudiado las condiciones del medio natural y se han estudiados varias alternativas eligiéndose la repoblación con especie autóctona con alcornoques procedente de viveros cercanos. El proyecto supone la plantación de 11.850 árboles para continuar con la reconversión de la finca a terreno forestal completando las repoblaciones realizadas en 1994, 1995, 1996 y 2003. La inversión de ejecución material sin IVA asciende a 172.727,37 euros, la inversión se podrá recuperar a los seis años si se reciben las ayudas a la reforestación, se estima que el primer descorche podrá alcanzarse a los 20 años.
Resumo:
A profunda crisis de la ‘nave espacial Tierra’ que cohabitamos, como llamaba Buckminster Fuller a nuestro planeta, y los imparables cambios en los modos de vida occidentales demandan un urgente cambio en el modelo de vivienda que las sociedades‘desarrolladas’ proporcionan a sus ciudadanos. Los nuevos modos de vida son variables e imprevisibles, incapaces de ser predeterminados en un proyecto arquitectónico ‘cerrado’. Los avances tecnológicos conducen a la movilidad, la desaparición del hogar tradicional, la interrelación de los espacios de vivienda y trabajo y anticipan la llegada de tipos de vida más dinámicos y menos ligados a un sitio específico. En cuanto a las formas de relación, disminuye la duración de los compromisos afectivos y crece el número de personas con una vida al margen de la familia tradicional o producto de la disgregación de proyectos familiares. Y, en el campo arquitectónico, no dejan de surgir nuevas herramientas mecánicas y tecnológicas capaces de transformar, de forma sencilla, una vivienda. Todas estas circunstancias no encuentran acomodo en las viviendas concebidas para los modos de vida de las pasadas generaciones. Desde hace décadas, al menos en nuestro país, los arquitectos han dejado de diseñar las viviendas de promoción privada que firman, ya que el propio ‘mercado’ se encarga de hacerlo. Las viviendas que el ‘mercado’ diseña no persiguen entregar a sus habitantes un lugar donde puedan desarrollar sus potencialidades. El único objetivo de estas promociones es el beneficio económico. Las casas que el ‘mercado’ promueve son indiferentes a las minorías y a los nuevos modos de vida. Son viviendas mínimas y uniformes para, de esta forma, maximizar el beneficio y simplificar el proceso económico. Estas viviendas promueven los mismos valores que guían nuestra ‘nave’: son individualistas, buscando minimizar el contacto vecinal, persiguen la uniformidad, en personas y pensamientos, y perpetúan valores, ya que insisten en repetir los mismos modelos habitacionales creados para los modos de vida de las generaciones anteriores. Son casas cerradas que tratan de imponer a sus habitantes el modo de habitarlas. Son casas estáticas que no están pensadas para facilitar su adaptación al particular modo de vida de sus ocupantes. Siguiendo en nuestro país, las viviendas de promoción pública obedecen, también desde hace décadas, a una normativa desfasada ajena a los nuevos modelos familiares, los nuevos modelos de convivencia al margen de la familia, el trabajo en casa, las nuevas tecnologías y los esquemas habitacionales con espacios compartidos. Las viviendas que esta normativa obliga a construir no solo obedecen al modo de vida de dos generaciones atrás, momento en que estas normas se redactaron; tampoco permiten la alteración de sus adjudicatarios para acomodar las viviendas a sus particulares circunstancias. La inflexibilidad de estas normativas obsoletas provoca que el Estado no esté en realidad subvencionando un espacio donde sus habitantes puedan desarrollar la vida que deseen. Lo que el Estado, por medio de estas viviendas, subvenciona es una determinada forma de vida. Esta tesis propone un modelo de vivienda que denomina ‘casa abierta’ porque está abierta a ser vivida tal y como sus ocupantes deseen y necesiten. La casa abierta es un espacio indeterminado que sus usuarios han de completar conceptualmente, y que pueden transformar con facilidad, cuantas veces deseen, según su propio criterio. Es un espacio lleno de potencialidades, un soporte definido solo a medias, a la espera que el usuario lo adapte a sus necesidades. El primer objetivo de la casa abierta es responder a los nuevos modos de vida. Es, pues, destino de algo que está pasando. Pero la casa abierta tiene también un segundo objetivo, tan importante como el primero: ayudar a desarrollar nuevos valores, ser origen de algo, desconocido aún, que ayude a enderezar el rumbo de nuestra ‘nave’. Esta tesis cree que cada nueva generación trae consigo nuevas capacidades que podrían ayudar a las anteriores a solventar sus problemas. Por ello defiende una educación que promueva la diversidad y la creatividad, evitando imponer valores caducos e incitando a los jóvenes a encontrar sus propias capacidades y desarrollarlas, no ya por su propio interés personal sino por la satisfacción de aportarlas al mundo. La casa abierta persigue objetivos similares. Su anhelo es proporcionar buenas herramientas y nuevos valores a sus ocupantes, y dejarles hacer. La casa abierta busca incitar a sus habitantes a desarrollar su creatividad sobre su propio hábitat, convirtiéndolos en co-creadores y, en consecuencia, responsables del mismo. La casa abierta es un espacio de libertad, donde sus ocupantes pueden desarrollar su diferencia, singularidad y diversidad, pudiendo crear un entorno que responda a sus criterios y su sensibilidad. La casa abierta es un lugar de experimentación donde replantear las convenciones sobre la casa, probando nuevas formas de convivencia y hábitat acordes con los nuevos modos de vida. La casa abierta busca también estimular el sentido comunitario de sus ocupantes, favoreciendo el contacto y la agrupación entre vecinos. Pero también desea contribuir a crear un modelo de desarrollo sostenible, respetuoso con el medio ambiente, los recursos del planeta y el futuro de las generaciones venideras. Para crear una casa abierta proponemos diez atributos: versatilidad, permeabilidad elasticidad, adaptabilidad, perfectibilidad, movilidad, sociabilidad, indeterminación, disgregación y sostenibilidad. Con ellos tratamos de establecer diversas cualidades a incorporar en los futuros proyectos de viviendas. A partir de estos diez atributos la tesis analiza cerca de 200 proyectos de vivienda de los últimos 90 años, donde el habitante es parte activa en su concepción o donde los ocupantes pueden transformar su vivienda, con facilidad, acomodándola a su modo de vida o a su estado de ánimo. Dentro de la historia de la arquitectura moderna existen grandes ejemplos de viviendas o proyectos que cumplen con algunos de los atributos propuestos. Muchos de los planteamientos de la ‘casa abierta’ tienen su origen en los años 20 del siglo pasado. Fueron desarrollados por los arquitectos de la primera generación del movimiento moderno, sobre todo Adolf Loos, Le Corbusier, Mies van der Rohe, Gerrit Rietveld, y Buckminster Fuller. El periodo más cercano a las ideas de la casa abierta es el comprendido entre 1955 y 1980, con el trabajo de la tercera generación de arquitectos del movimiento moderno. En estos años surgen grandes ejemplos de casas abiertas, se publican libros sobre la implicación de los habitantes en el diseño de sus casas y se convocan coloquios sobre la adaptabilidad de las viviendas. Entre los ejemplos construidos destacan las viviendas Il Rigo Quarter de Renzo Piano, el complejo residencial Genter Strasse en Munich de Otto Steidle, Doris y Ralph Thut, los apartamentos universitarios en Lovaina de Lucien Kroll y el inicio de las comunidades de cohousing en Dinamarca. La década de 1990 es también propensa a la casa abierta. Entre los ejemplos construidos podemos destacar las casas Latapie y Coutras de Lacaton y Vassal, la Residencia Yakult de Toshio Akimoto, las casas Naked y la Nine square grid de Shigeru Ban y los apartamentos Fukuoka de Steven Holl. En esta década, surgen las cooperativas de viviendas autopromocionadas en Centroeuropa, como la Sargfabrik de BKK-2 en Viena, y se produce el desembarco del cohousing danés en EEUU. Ya en el siglo XXI podemos destacar las viviendas sociales Quinta Monroy y la Colonia Lo Barnechea de Alejandro Aravena-Elemental, las 14 viviendas en Mulhouse de Lacaton y Vassal, las casas Glass Shutter y Metal Shutter de Shigeru Ban, la casa Moriyama de SANAA, el d21system de José Miguel Reyes González y la ETSAM, la propuesta Parasite para Amsterdam, de Maccreanor y Lavington, la Shinonome Canal Court de Tokio y muchos ejemplos de viviendas prefabricadas y móviles como la Micro Compact Home o la LoftCube.