Transición política : práctica educativa y formación del profesorado.
Data(s) |
17/05/2013
17/05/2013
1987
06/08/2007
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Resumo |
El nombre de la autora no coincide con el del artículo porque cambió el apellido de Finkel por pitcovsky Si el principio articulado de las prácticas sociales es lo político, el análisis de lo que ocurre en la escuela sólo resulta inteligible si somos capaces de detectar qué es lo que la escuela reproduce y qué no, qué sobrevive del pasado y qué emerge como anuncio del futuro. Un cambio democrático en la escuela no se impone por decreto, ni es el resultado inmediato de una legislación progresista. La legislación puede crear condiciones para un cambio democrático, pero no lo produce mágicamente. Además, el gobierno no es el Estado, ni tiene capacidad de controlar totalmente las actividades de cada uno de los aparatos del Estado. En el sistema educativo se materializan tradiciones, prácticas de eficacia, inercia, etcétera, que adquieren una relativa autonomía con respecto a la política gubernamental. A menos de que se trate de una situación revolucionaria, con un control de las bases, los aparatos no son manipulables a voluntad. Esto es más claro en momentos de transición democrática al ser necesario redefinir el papel de las burocracias estatales. Con el aparato educativo la burocracia prevalece sobre lo académico. El campo del saber debe ser recortado en asignaturas, por ser la ciencia cada vez más interdisciplinar. Pero la burocracia y la dominación tecnocrática tienen eslabones débiles. Al no poder participar los sujetos colectivos (padres, docentes, alumnos) las decisiones son siempre verticalmente impuestas y poco representativas y no es esperable que los alumnos y maestros comulguen con el universo burocrático. La rigidez democrática impide la renovación para incorporar los cambios necesarios. Por último, una escuela que no incorpora los componentes culturales que surgen (crisis de la familia, el sexo, desempleo sus causas y paro juvenil) termina desconectada de la realidad. Un proyecto político eficaz es el resultado de un largo aprendizaje de grandes colectivos. Y la formación del profesorado para la democracia, no es cuestión de asignaturas concretas, ni de cursillos de perfeccionamiento. Deberá aprender y equivocarse con las masas, en la escuela y fuera de ella. |
Identificador |
0034-8082 http://hdl.handle.net/11162/71448 M-57-1958 EC R-638 |
Idioma(s) |
spa |
Relação |
Revista de educación. Madrid, 1987, n. 284 ; p. 77-88 |
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Palavras-Chave | #historia de la educación #ideología #formación de profesores #política #democracia #política de la educación |
Tipo |
Artículo de revista |